Una solución al problema de la fauna callejera

IMPACTO AMBIENTAL

Una solución al problema de la fauna callejera[1]

Juan José Morales

Como era de esperar, he recibido varios mensajes a propósito de nuestros comentarios del viernes pasado sobre los perros callejeros. Casi todos insisten en la adopción y la esterilización como soluciones al problema y algunos mencionan experiencias que consideran exitosas, pero limitadas. Sólo en uno se propone una manera efectiva de esterilizar a los millones de tales animales que vagabundean por las calles de las ciudades mexicanas.

clip_image001El mensaje lo envía la Lic. Laura Uribe, quien «”aclara»” no pertenece a ninguna organización protectora de animales ni es proveedora de algún producto para esterilización, pero sí ha estado investigando durante siete años, primero en Cancún y luego en Querétaro, la problemática de la fauna callejera junto con veterinarios y expertos en el tema.

Las campañas tradicionales de esterilización quirúrgica de perros y gatos son demasiado limitadas para resultar efectivas, debido a la complejidad y alto costo del procedimiento. De hecho, sólo se esterilizan animales domésticos, no callejeros. Para reducir la fauna callejera se requiere un método más sencillo y económico que pueda aplicarse en masa.

Producto de ese trabajo es un proyecto de ley sobre Registro Oficial de Caninos y Felinos, que se promueve a nivel estatal en Querétaro y también se entregó al Congreso de la Unión con el propósito de que se implante a nivel nacional.

La Lic. Uribe señala que, si bien en la actualidad existen campañas de esterilización de caninos y felinos, sólo acuden a ellas los propietarios de mascotas, pero no se esteriliza a los caninos ni felinos callejeros, y hacerlo resulta en extremo complicado y costoso. Hay que atrapar a los animales, transportarlos al lugar donde serán esterilizados, y extirparles los testículos, lo cual implica una intervención quirúrgica costosa, dolorosa y que requiere cuidados postoperatorios. Para las autoridades, todo ello resulta muy oneroso y no cuentan con recursos económicos suficientes. De hecho, podríamos añadir que en casi todas partes los presupuestos destinados al control de animales callejeros son tan reducidos que sólo permiten realizar acciones casi simbólicas que no modifican mayor cosa la situación.

Pero, dice la Lic. Uribe, en lugar de someter a un perro a la castración quirúrgica, se le puede esterilizar químicamente, inyectándole en cada testículo cierto producto denominado Esterilsol, que ya se usa en otros países y en México ha sido aprobado por la Sagarpa para su empleo en perros. Esta sustancia no provoca cambios secundarios indeseables en la conducta del animal, se puede aplicar a partir de los tres meses de edad, sus efectos son permanentes y confiables y sobre todo las inyecciones son prácticamente indoloras.

Otra gran ventaja de este procedimiento es que resulta muy fácil de aplicar. Una vez atrapado el perro o el gato callejero, se le puede esterilizar ahí mismo y liberarlo, sin que sea necesario llevarlo a una perrera, someterlo al laborioso procedimiento de castración, y atenderlo durante varios días mientras se repone de la intervención quirúrgica.

Estima que con este nuevo método, en cinco años podría terminarse con la fauna callejera. Y ciertamente, es cada vez más necesario hacerlo. «Nuestro país «”escribe»” ocupa el primer lugar de América Latina con mayor población de caninos, 23 millones aproximadamente. Sólo el 30% está en un hogar, el resto son callejeros.»

Esos 16 millones de perros que deambulan por las calles sin ningún control, constituyen, como señalábamos el pasado viernes, un serio problema de salud pública por la contaminación que causan con sus excrementos, y también un peligro directo para la población. «En México «”añade la Lic. Uribe»” se han registrado durante los últimos ocho años un total de 122 mil agresiones de perros contra personas, en su mayoría niños. Los costos generados por los ataques absorben un porcentaje apreciable de los recursos dedicados a la red sanitaria. El gobierno cifra en ocho mil pesos el gasto médico por una mordedura, sólo en asistencia médica, luego están los efectos psicológicos y los días laborales perdidos, entre otros muchos».

Lo que propone la Lic. Uribe parece bastante realista y factible. Y si en esa forma se logra efectivamente acabar con los perros callejeros, quedaría despejado el camino para reglamentar la posesión de perros domésticos, cosa que en las actuales condiciones resulta una utopía.

Nota.- Después de publicado lo anterior, la Dra. Julieta Ensástigue Fuentes, de la empresa Ark Sciences México, distribuidora del Esterilsol, nos pidió precisar que dicho producto por el momento solo se utiliza en perros, pero no en gatos, y que aunque no requiere anestesia, el animal debe ser sedado para aplicárselo y durante cuatro o cinco días debe recibir analgésicos para controlar el dolor y la inflamación de los testículos, y ser atendido, principalmente para evitar que se lama la herida. Como se ve, la esterilización masiva de perros callejeros sigue siendo difícil.

Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx


[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Lunes 15 de abril de 2013.

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