El misterio de las centellas (762)

Fue en el año 2003, yo estaba a punto de tener mi último examen del año pasado, y mi mamá me metió a la cama más temprano. Hubo un fuerte aguacero con rayos. Mi hermana y yo encendimos el aire acondicionado y nos acostamos en la cama. De pronto, una bola de luz de color rojo y azul, que no podíamos ver claramente, hizo una especie de explosión delante de nosotros. Nos quedamos muy conmocionados y miramos esa cosa por un tiempo. 20 a 30 segundos más tarde nos recuperamos y lanzamos un grito. Mi madre vino corriendo y dijo que sólo era nuestra imaginación. Asentimos con la cabeza, pero dentro de nosotros pensamos que era un fantasma. Ahora, en el año 2004, yo estaba estudiando centellas para mi asignación ciencia, entonces me di cuenta de todo lo que vi esa noche parece ser una centella. Pero si se trata de una centella… ¿por qué mi hermana y yo no fuimos lastimados? Hasta ahora, sigue siendo un misterio, y espero que alguien pueda explicarnos

Chan Li Yi

Woodlands, – Singapore

Tratamiento de un «culto» para rehabilitación costo la pierna a un hombre, según la policía

Los familiares culpan a la iglesia por poner cinta adhesiva a su hermano adicto a las drogas en Queens

Por Henrick Karoliszyn y Erica Pearson / New York Daily News

Martes, Octubre 16, 2012

Jeff Bachner para Daily News

Sarah Youn, hermana de Sung-Peel Youn, fuera del Recinto comisaría109, el martes. Sung-Peel Youn fue acusado de asalto junto con su novia, Myung Chung.

Una mujer de Queens y su prometido ataron a su hermano con tanta fuerza con cinta adhesiva para «ayudar a que se recuperara» de la adicción a las drogas y la enfermedad mental, que los médicos tuvieron que amputarle la pierna, dijeron los policías.

Pero los familiares creen que Myung Chung, de 27 años, y su prometido, Sung-Peel Youn, de 39 años, sólo seguían órdenes de lo que los miembros de la familia llaman un culto cristiano coreano-americano cuando ataron a Seungick Chung en el baño de su iglesia.

«La pareja creen en el pastor, quien es una mujer», dijo la hermana de Sung-Peel Youn, Sarah Youn, de 42 años. «Dicen que es Dios».

El martes nadie abrió la puerta de la iglesia Pastor Ok-Joo Shin en el Blvd. Parsons.

Chung Myung, de 27 años, confesó a los policías que en la noche del 4 de octubre, ella y su novio metieron un calcetín en la boca de su hermano y se aseguraron de que se quedaría allí con cinta adhesiva.

También utilizaron la cinta para atar sus muñecas, los tobillos y las rodillas, de acuerdo con documentos judiciales.

«Lo hicieron muy fuerte – y todo el tiempo estuvieron orando y cantando. Ellos pensaban que Dios lo haría una persona normal», dijo Sarah Youn.

Dos días más tarde, Myung Chung notó que el pie de su hermano estaba hinchado. El 12 de octubre, ella lo llevó a un dermatólogo, quien los envió a una sala de emergencia, según documentos judiciales.

Cuando el Dr. Angali Bharati en el New York Hospital Queens vio a Seungick Chung, su pierna derecha estaba morada, negra y azul, le dijo a los policías. Los médicos tuvieron que amputarle la pierna por encima de la rodilla.

La policía arrestó a los dos el viernes y los acusó de asalto, imprudencia temeraria y encarcelamiento ilegal en el caso, el cual fue reportado por primera vez en The Korea Times.

Cada uno de ellos tendrá que pagar 150,000 dólares de fianza.

http://www.nydailynews.com/news/crime/cult-rehab-prescription-cost-man-leg-police-article-1.1185179

El misterio de las centellas (761)

Esto tuvo lugar en Beacon Hill, Boston, en el verano de 1992. Yo estaba con dos amigos caminando alrededor de las 7:30-8:00 de la noche. Parecía como que iba a haber una tormenta muy pronto. Estábamos caminando directamente hacia el centro de una calle estrecha, con apartamentos de piedra rojiza de tres o cuatro pisos a cada lado.

Oí un sonido que se parecía al chisporrotear del tocino en una sartén y levanté la vista para ver una luz que provenía de la parte superior de los apartamentos en el lado derecho de la calle. Al mirar una bola de unos 2 pies de diámetro entró por el techo a la derecha y pasó por la calle a un ritmo alarmantemente lento y constante. La pelota era de color verde y azul y blanco y rojo tal vez (difícil de recordar). Los colores se arremolinaban alrededor de la pelota como si fuera líquido. El sonido era monótono y la propia pelota paso sin prisa y en una línea recta, por arriba. Fue increíble.

Daniel Paquette

Boston, MA USA