La naturaleza oculta de los ovnis

Primera parte: No son simples naves espaciales

9 de abril de 2025

Promethean Flame

Fotografía de un objeto volador no identificado tomada por Paul Trent en su granja en McMinnville, Oregón, EE. UU., 1950

Oculto (adjetivo): No revelado, secreto, No es fácil de comprender, abstruso, misterioso, Oculto a la vista, oculto

(Merriam-Webster)

Los ovnis no son lo que parecen

Han habido numerosos relatos de todo el mundo sobre extraños vehículos aéreos que han aterrizado en la Tierra.

En muchos encuentros, estos vehículos se confundieron inicialmente con aeronaves humanas experimentales; sin embargo, la mayoría de los testigos pronto se dieron cuenta de que estaban viendo algo que no había sido creado por manos humanas. Muchos relatos describen a los ocupantes de estos vehículos, algunos con apariencia humana y otros completamente sobrenaturales.

Examinemos algunas de las cualidades de estos «vehículos», según se describe en numerosos relatos. El siguiente es un extracto del libro «Operación Caballo de Troya» de John Keel.

Si son producto de una inteligencia superior con tecnología avanzada, parecen adolecer de defectos de fabricación. Desde 1896, ha habido cientos de informes de testigos solitarios que se han topado con objetos duros en tierra que estaban siendo reparados por sus pilotos. En vuelo, tienen la asombrosa costumbre de perder piezas de metal. Parecen estar mal hechos, siempre se deshacen y explotan con frecuencia en el aire. Hay tantos incidentes de este tipo que debemos preguntarnos si no son realmente deliberados. Quizás buscan fomentar la creencia de que los objetos son reales y mecánicos.

Anuncio de una película de “Flash Gordon”; observe el interior de la nave espacial

Una cortina de humo de ciencia ficción

Ha habido numerosos informes de testigos que han visto ovnis aterrizados o estrellados, incluyendo detalles sobre el interior de la nave. A continuación, un extracto de uno de estos informes de 1956:

Su silla tenía una forma bastante adecuada para su cuerpo y era de color rojo bermellón. Un poste central la sostenía. La caja negra frente al piloto parecía un tablero de instrumentos, y medía aproximadamente un metro de alto y ochenta centímetros de ancho; en ella se veían «ojos de gato» del tipo «ojo mágico», como los que se ven en ciertos tipos de radios. Debajo de este panel, y ligeramente por encima de los pies, se veía una ancha banda horizontal con una aguja vertical y ciertos signos extraños que sin duda representaban números. A la derecha del piloto, un poco por delante del panel, había un disco semiopaco, como una pantalla de televisión apagada.

(Leonard Stringfield y José Escobar Faria)

Hay muchos informes que presentan detalles extremadamente similares. En resumen, nos encontramos con escenas que parecen sacadas de la ciencia ficción, como una película o tira cómica de «Buck Rogers» o «Flash Gordon». Se han observado palancas, perillas, diales de radio, pantallas similares a las de un televisor, osciloscopios y todo tipo de tecnología similar a la humana de mediados de siglo a bordo de estas «naves».

Por más absurdas que parezcan las naves físicas, también se ha informado que sus ocupantes se comportan de maneras aparentemente absurdas para una civilización avanzada en una misión importante de algún tipo que probablemente implicaría una gran cantidad de planificación, gastos y seriedad.

Con frecuencia se ha informado de seres realizando actividades como recoger flores y otras plantas, sacar agua de lagos y ríos, mirar fijamente el suelo y diversos objetos e incluso jugar a juegos como lanzarse piedras de un lado a otro.

También se ha informado que comunican ideas absurdas y erróneas a contactados y abducidos. Existen relatos de estos seres que han identificado sus respectivos puntos de origen como planetas que ahora sabemos que no albergan vida. En muchos casos, han predicho eventos futuros que nunca ocurrieron.

Lo que sigue es un relato de un encuentro ovni de 1947 que ocurrió en Brasil:

Al oír un silbido, José C. Higgins, topógrafo, vio descender un objeto con forma de lente, rodeado de un reborde. Aterrizó a 45 metros de distancia. Era de metal blanco grisáceo, de unos 45 metros de diámetro, con un borde de 90 centímetros y 4.5 metros de altura, atravesado por tubos en varias direcciones, de los cuales provenía el silbido. Unas patas metálicas, ligeramente dobladas, sostenían la nave. Al acercarse, vio a través de una ventana de cristal negro a dos personas que lo observaban; una puerta se abrió bajo el borde y emergieron tres personas envueltas en trajes transparentes inflados, con cajas metálicas a la espalda.

Representación artística de seres vistos por José C. Higgins en 1947

Llevaban camisetas y pantalones cortos, que parecían hechos de papel en lugar de tela. Tenían la cabeza casi sin pelo, los ojos redondos y grandes, y las piernas relativamente largas; medían casi 2 metros. Los tres parecían idénticos. Hablaban en un idioma desconocido, y notó que se mantenían a la sombra salvo por breves periodos. Uno, apuntándolo con un tubo metálico, le indicó a Higgins que entrara por la puerta, a través de la cual pudo ver una puerta interior y el extremo de una «tubería». Con gestos, Higgins preguntó de dónde venían.

Uno dibujó en el suelo un punto (el sol, «Álamo» en su idioma) rodeado de siete círculos, y señaló alternativamente el séptimo círculo (llamado «Orque» Urano) y su nave. Como no quería ir allí, Higgins les mostró una foto de su esposa, indicando que no quería separarse de ella, y lo dejaron ir. Desde el bosque, miró hacia atrás y los vio jugando como niños, saltando y lanzando piedras enormes. Después de media hora, tras examinar cuidadosamente su entorno, volvieron a entrar y la nave despegó.

¿Piezas cósmicas del set?

Lo siguiente es un extracto del libro Inside the US Government Covert UFO Program: Initial Revelations de James T. Lacatski, Colm A. Kelleher y George Knapp:

Al concluir una reunión en el Capitolio en 2011 con un senador estadounidense y un subsecretario de la agencia, Lacatski, el único autor presente de este libro, planteó una pregunta. Afirmó que Estados Unidos poseía una nave de origen desconocido y había accedido a su interior. Esta nave tenía una configuración aerodinámica, adecuada para el vuelo, pero carecía de tomas de aire, escapes, alas o superficies de control. De hecho, parecía no tener motor, tanques de combustible ni combustible. Lacatski preguntó: ¿Cuál era el propósito de esta nave? ¿Era una nave de soporte vital, útil solo para la reentrada atmosférica o qué? Si era una nave espacial, ¿cómo funcionaba?

¿Qué se puede inferir de los distintos informes que detallan las cualidades de estos objetos?

No parecen naves espaciales ni siquiera vehículos. ¿Podrían ser como escenarios cósmicos, diseñados para parecerse a lo que los humanos podrían conceptualizar como naves espaciales futuristas en diferentes períodos de nuestra evolución tecnológica? Creo que los datos lo sugieren firmemente. Entonces, es como si la inteligencia detrás de este fenómeno estuviera jugando con la humanidad y tratando de engañarnos a propósito. La verdadera pregunta es por qué.

Avatares y trabajadores capacitados

Muchos informes posteriores a la Segunda Guerra Mundial detallan ovnis que se estrellaron en la Tierra y fueron recogidos por diversos grupos humanos para su estudio. Los detalles de todos estos relatos no son necesariamente relevantes. Lo que me resulta más intrigante son las implicaciones de los ovnis estrellados y el destino de sus «pilotos».

Si los ovnis son construcciones falsas diseñadas para engañar a la humanidad, entonces ¿qué se puede especular sobre la naturaleza de los ocupantes de estos objetos?

Numerosos relatos de encuentros e incluso de abducciones han descrito a estos ocupantes de ovnis tomando material genético de los testigos ya sea mediante procedimientos médicos o incluso encuentros sexuales forzados.

Ha habido casos en que incluso se han contado y mostrado a los testigos detalles de programas para criar seres “híbridos” utilizando material genético humano.

Teniendo en cuenta estos detalles, podrían existir varias posibilidades. Quizás se esté creando una raza de trabajadores con genes humanos. Esa raza podría ser criada y entrenada para llevar a cabo estas «misiones» ovni.

¿O es más probable que una inteligencia no humana etérea y/o extradimensional esté utilizando material genético humano para crear avatares que puedan habitar por un tiempo para llevar a cabo sus operaciones de una manera más física?

Lo que sí sabemos por los informes es que se ha observado a estos ocupantes de ovnis atravesando objetos sólidos como paredes. Incluso parecen tener la capacidad de permitir que los humanos viajen a través de objetos sólidos. Es como si pudieran ser físicos y etéreos a la vez. Quizás estos ovnis y sus ocupantes se asemejen más al concepto de tulpas que a seres y objetos tecnológicamente avanzados.

De Wikipedia:

En el budismo tibetano y en tradiciones posteriores de misticismo y lo paranormal, un tulpa es un ser materializado o una forma de pensamiento, generalmente con forma humana, que se crea mediante la práctica espiritual y una intensa concentración.

¿Podrían estos seres ser formas mentales materializadas que pueden surgir y desaparecer instantáneamente, quizás por medios psíquicos? De ser así, tal vez podrían ser objetos físicos tridimensionales en un instante y «apariciones» etéreas al siguiente.

Representación del interior de un platillo volante estrellado, por Wes Crum

Ovnis estrellados, cuerpos extraterrestres y supuesto secretismo humano

Estos temas son una pista falsa en mi opinión.

Estos ovnis y los seres que a veces los ocupan claramente no son lo que parecen a simple vista. Los objetos parecen ser escenarios cósmicos diseñados para parecerse a naves espaciales y similares. Los objetos y los seres pueden ser tanto físicos como etéreos.

Se ha informado que los orbes y luces que revolotean por el cielo e incluso se estrellan contra las casas también dejan rastros físicos en quienes los presencian, como conjuntivitis y lo que parecen ser quemaduras solares. Incluso se ha informado que estos orbes y luces desaparecen instantáneamente sin dejar rastro.

Entonces, ¿es tecnología avanzada? Quizás se trate de una tecnología tan avanzada que la humanidad, en su estado actual de desarrollo, ni siquiera puede conceptualizar su naturaleza. Este fenómeno parece estar más en el ámbito de lo que clasificaríamos como paranormal.

Si estos objetos se hubieran estudiado a puertas cerradas, solo puedo imaginar que muchas personas se habrían quedado boquiabiertas al darse cuenta de lo que estaban viendo.

Los objetos diseñados por inteligencia no humana para que parezcan vehículos avanzados no tienen ninguna funcionalidad que pueda determinarse. Esto es una gran trampa perpetrada contra la humanidad.

Quizás la razón del supuesto secretismo humano se reduce a “no lo sabemos”.

Divulgación y un mundo post pseudo-divulgación

Si los gobiernos mundiales hubieran analizado todos los datos sobre ovnis, estudiado estos objetos estrellados y los cuerpos de los seres asociados a ellos, y decidieran contarle a la población todo lo que se sabe, ¿qué dirían? Imagino que sería algo así como…

Los ovnis son reales, son el diseño de una inteligencia no humana, pero desconocemos su verdadera naturaleza. Desconocemos su origen y su funcionamiento. Se mueven por el espacio, pero no parecen tener la capacidad para hacerlo. Los cuerpos de los seres asociados con los objetos parecen contener genes humanos, pero no son del todo humanos. El dilema fundamental es que no podemos detenerlos ni interferir con sus acciones. Somos esencialmente impotentes.

Tal vez los gobiernos estén esperando a que los científicos logren resolver algunas de estas incógnitas.

Si logramos la divulgación humana, la trayectoria de la raza humana cambiará, tal vez no inmediatamente, pero creo que nos veremos obligados a desmantelar y reconstruir nuestro marco colectivo e individual de cómo vemos la realidad y la experiencia humana.

Sin embargo, si alguna vez obtenemos una revelación humana (si es que tal concepto tiene alguna base real), será solo una pseudo-revelación. La verdadera revelación, al menos por el momento, parece estar únicamente en manos de la inteligencia no humana detrás de estos ovnis.

https://medium.com/@Promethean_Flame/the-occult-nature-of-ufos-f200e02a3b61

La naturaleza oculta de los ovnis

Segunda parte: El simbolismo de un fenómeno

1 de febrero de 2025

Promethean Flame

Grabado de Matthäus Merian el Viejo titulado Der Fall Babylons “La caída de Babilonia”

Hackeando la psique humana

A lo largo de la historia de la humanidad, se han reportado objetos extraños en el cielo e incluso en la tierra. La apariencia y las dimensiones de estos objetos son diversas; sin embargo, ciertas formas han sido reportadas con frecuencia por los observadores. El omnipresente disco volador, que se ha arraigado profundamente en la psique humana moderna, es un curioso ejemplo del enorme papel que desempeña el simbolismo en la comunicación y la comprensión humanas.

El símbolo del disco (o rueda) se encuentra ampliamente presente en diversas tradiciones humanas que se remontan a la antigüedad. En las tradiciones hindúes existe el Sudarshana Chakra, un objeto con forma de disco asociado con la deidad Visnú. Este disco se utilizaba simbólicamente para representar la rueda del tiempo. Curiosamente, se ha descrito al disco de Visnú como capaz de viajar a cualquier lugar, superando cualquier obstáculo, en un instante. De forma más general, e incluso en diferentes culturas, el disco (en particular, un disco en movimiento, o una rueda) ha representado los conceptos de unidad, totalidad y completitud.

Representaciones artísticas de la deidad hindú Vishnu con el Sudarshana Chakra

El psicólogo Carl Jung reconoció un simbolismo similar contenido en el mandala budista.

En 1938, en el monasterio de Bhutia Busty, cerca de Darjeeling, tuve la oportunidad de conversar con un rimpoche lamaico, llamado Lingdam Gomchen, sobre el khilkor o mandala. Lo explicó como un dmigs-pa (pronunciado «migpa»), una imagen mental que solo un lama plenamente instruido puede construir mediante el poder de la imaginación. Dijo que ningún mandala es igual a otro; todos son individualmente diferentes. Además, añadió que los mandalas que se encuentran en monasterios y templos carecen de importancia particular, ya que son meras representaciones externas. El verdadero mandala es siempre una imagen interior, que se construye gradualmente mediante la imaginación (activa), en momentos en que el equilibrio psíquico se altera o cuando no se puede encontrar un pensamiento y hay que buscarlo, porque no está contenido en la doctrina sagrada.

(Psicología y Alquimia, volumen doce de Las Obras Completas de CG Jung)

Un mandala budista

El símbolo de un disco también se ha utilizado para representar al sol, que a su vez se utilizaba para simbolizar conceptos de divinidad y poder, como se puede ver en las representaciones religiosas y cosmológicas de varias culturas del antiguo Oriente Próximo, por ejemplo, el disco solar alado de los antiguos egipcios y asirios, el Atón de la secta religiosa establecida por el antiguo faraón egipcio Akenatón o Amenhotep IV, el Faravahar utilizado por los seguidores del zoroastrismo en la antigua Persia, el disco solar alado asociado con el antiguo reino de Judá, y en Occidente, en la parte superior del Caduceo, o bastón de la antigua figura griega de Hermes que presenta un disco flanqueado por dos alas extendidas, así como en varias iconografías cristianas primitivas, como el halo en forma de disco alrededor de la cabeza de Cristo, que simboliza la divinidad.

Disco solar alado en el techo de la entrada al templo de Ramsés III

Placa de mueble tallada en relieve con una figura masculina agarrando un árbol; disco solar alado encima, asirio

El Faravahar del zoroastrismo persa

El caduceo, bastón de la antigua deidad griega Hermes

Una representación de Jesucristo en estilo bizantino

Si observamos otra forma frecuentemente avistada, podemos examinar con más detalle la posible correlación entre los ovnis y un simbolismo humano profundamente arraigado. Los objetos triangulares y con forma de punta de flecha que se han reportado pueden corresponder fácilmente a signos y símbolos de las escuelas de pensamiento matemáticas, científicas, religiosas y místicas. Por ejemplo, los símbolos alquímicos del fuego y el agua (que también corresponden a lo masculino y lo femenino), las grandes pirámides de Giza, la escuadra y el compás de la masonería, etc.

Si una inteligencia no humana avanzada intentara comunicarse con la humanidad, la comunicación mediante símbolos sería una iniciativa razonable. Sin embargo, tal vez dicha inteligencia esté utilizando nuestros propios sistemas de simbolismo para confundirnos, revelando más preguntas que respuestas. Esto parece probable, basándose en los datos acumulados sobre avistamientos y encuentros, y en la propia naturaleza del tema ovni.

¿Prometeo o Embaucador?

En la mitología griega, el titán Prometeo robó el fuego del monte Olimpo y se lo regaló a la humanidad; este fuego simbolizaba el conocimiento divino y oculto.

Los relatos de objetos estrellados de origen no humano permean el tema ovni. Algunos han teorizado que estos «choques» podrían ser una especie de obsequio perpetrado por la(s) inteligencia(s) detrás del fenómeno. Sin embargo, ¿qué pasaría si el «fuego» de Prometeo no fuera realmente «fuego»? Como exploramos en la primera parte, los datos sugieren que estos objetos no son lo que parecen a simple vista y no deben tomarse al pie de la letra. La inteligencia detrás del fenómeno parece representar el arquetipo del Embaucador más que cualquier cosa similar a Prometeo. ¿Cuáles son las implicaciones de esto?

Jung definió al embaucador como “una figura colectiva en la sombra, una suma de todos los rasgos inferiores del carácter individual”, pero también “un ser primitivo ‘cósmico’ de naturaleza divino-animal… con perspectivas de un desarrollo de conciencia mucho mayor basado en un considerable afán de aprendizaje…”. En otras palabras, el embaucador no es del todo malo. Abarca ambos polos: negativo y positivo. En su faceta negativa, se enfrenta a las vacas sagradas de la civilización y no duda en aprovecharse de quien puede. En el extremo positivo de la polaridad, el embaucador posee “cualidades sobrehumanas” que pueden fomentar el crecimiento, el aprendizaje, la sanación y la creatividad.

(Extracto de un ensayo de Sue Mehrtens, https://jungiancenter.org/jung-on-the-trickster-archetype-and-its-manifestations/)

Aquí podemos volver al antiguo dios griego Hermes con su bastón coronado con el disco alado.

El dios del engaño es universal. Conocido por los pueblos nativos americanos como Ictinike, Coyote, Conejo y otros, es Mauito para los isleños polinesios, Loki para las antiguas tribus germánicas de Europa y Krishna en la mitología sagrada de la India. El más conocido por la mayoría de nosotros en Occidente es el dios que representa la manifestación más completa y sofisticada del engaño: el dios griego Hermes. Homero lo llama el «Portador de la Suerte». También se le conoce, en una de las muchas paradojas que caracterizan a Hermes y a otros dioses del engaño, como el patrón tanto de los viajeros como de los ladrones. Es el Guía de las Almas al inframundo y mensajero de los dioses. Como todos estos roles sugieren, es el maestro por excelencia de los límites y las transiciones.

El morador de los límites

Como maestro de lo inesperado, Hermes realiza su magia en virtud de su dominio de los límites y su capacidad para cruzarlos sin esfuerzo. Donde una situación se define por los límites o el cruce de límites, la presencia de Hermes es natural. Él es el dios de los umbrales y las transiciones. En la Ilíada se aparece al anciano rey Príamo cuando este se acerca al límite del campamento griego en un esfuerzo por recuperar el cuerpo de su hijo muerto, Héctor. Hermes se le presenta como un joven, un guía, que lo conduce sano y salvo al campamento enemigo, y luego lo vuelve a sacar. En la Odisea, Hermes se presenta ante Odiseo cuando, en la isla de Circe, se acerca a la morada de la bruja en busca de los miembros de la tripulación perdidos que ella había convertido en cerdos. El dios en forma de joven muestra al héroe una planta mágica para protegerlo de los encantos de la hechicera.

En ambos casos, el embaucador otorga buena fortuna. Hermes es, sin duda, «el más amable de los dioses con el hombre». Sin embargo, estos dos episodios revelan un aspecto más fundamental del dios: su aparición en situaciones límite o umbral. De hecho, Hermes es el dios no solo de los umbrales, no solo de los umbrales físicos, sino, aún más importante, de los umbrales entre los estados de la experiencia humana: entre el día y la noche, el sueño y la vigilia, entre la consciencia y la inconsciencia, entre la vida y la muerte.

Karl Kerenyi, el erudito clásico que más ha contribuido a enriquecer nuestra comprensión de Hermes, explica en Hermes: Guía de las Almas su efecto en los límites psicológicos en términos del viaje hermético. Mientras que el viaje ordinario simplemente implica el movimiento físico de un lugar a otro, el viajero hermético entra en una zona fronteriza, un espacio liminal entre estados ordinarios de experiencia. «En realidad, él [el viajero] se desvanece (se volatiliza) para todos, también para sí mismo». Este es el significado más profundo de la presencia de un herma, las representaciones de Hermes en bloques de piedra, en las entradas de las casas y a lo largo de los caminos antiguos. Su presencia en entradas y portones, en particular, sugiere la condición de liminalidad, al igual que varias inscripciones escritas en portales y dedicadas a él.

Dado que se encuentra en el punto de inflexión entre las transformaciones de la vida a la muerte y viceversa, Hermes se encuentra precisamente en ese nexo psicológico donde ocurre la transformación; donde, por ejemplo, nuevas experiencias nos transforman y nos transformamos en personas diferentes y nuevas. Dondequiera que la experiencia humana traspase fronteras hacia lo inesperado o experimente transiciones, allí podemos encontrar el arquetipo de Hermes.

(Extracto de un ensayo del neuropsicólogo Allan Combs PhD, https://paricenter.com/library-new/pari-perspectives/synchronicity-and-hermes-the-trickster/ )

El Titán Prometeo, trayendo el fuego de los dioses a la humanidad.

Cruce de límites, físico y psicológico

La inteligencia detrás del fenómeno ovni se ha presentado constantemente envuelta en capas de falsedades. A quienes lo experimentan se les dicen cosas sin sentido, y los «vehículos» en los que viajan los ufonautas se descomponen con frecuencia como un destartalado a un lado de la carretera; esto se desprende de los numerosos informes de encuentros. Sin embargo, ¿qué se puede decir sobre las características rompedoras del fenómeno ovni en relación con el arquetipo del Embaucador?

Según numerosos informes de actividad ovni en lugares supuestamente seguros, parece que no existe límite establecido por la humanidad, ni físico, ni teórico, ni ético, que el fenómeno no pueda cruzar. Han aparecido ovnis cerca de instalaciones militares sensibles en todo el mundo, al igual que sus ocupantes han aparecido en la seguridad y privacidad de la habitación de alguien. Diversos informes de encuentros indican que ni siquiera la privacidad de los pensamientos humanos está a salvo de intrusiones.

Más allá de la posible negatividad al cruzar fronteras, podemos considerar el fenómeno ovni como algo similar a los obeliscos de 2001: Odisea del Espacio, lo que nos remite a la figura de Prometeo. Así como Prometeo impulsó a la humanidad con el don del conocimiento, al igual que los obeliscos de 2001, los encuentros con el fenómeno ovni parecen impulsar a la humanidad en ciertas direcciones. En una dirección, despierta la curiosidad, quizás incluso la invención, para crear, por ejemplo, nuestro propio mandala, con el que podemos intentar comprender mejor la naturaleza de la inteligencia tras los ovnis, de nosotros mismos y de nuestra realidad colectiva. Quizás esto ya haya ocurrido y exista algún tipo de mandala colectivo en la psique humana. De ser así, se podría razonar que los ovnis tienen más que ver con el espacio interior que con el exterior.

https://medium.com/@Promethean_Flame/the-occult-nature-of-ufos-7fc6f0e1d0a4

La naturaleza oculta de los ovnis

Parte tres: Médiums y contactos con platillos voladores

1 de febrero de 2025

Promethean Flame

Representación artística del supuesto contactado ovni George Adamski siendo recibido por su contacto en el platillo volante “Orthon”

¿Mensajes extraños de otros mundos?

En 1947, durante una ola de avistamientos de objetos extraños en el cielo, Meade Layne, director de «Borderland Sciences Research Associates» (una organización interesada en estudiar la región «fronteriza» entre la fantasía y la realidad, los campos de la parapsicología, lo oculto, la investigación psíquica, la hipnosis, la radiestesia, la radiónica, la telepatía y otros fenómenos), escribió un documento sobre la reciente ola de avistamientos de «platillos voladores».

ESTE MEMORÁNDUM se dirige respetuosamente a ciertos científicos distinguidos, a importantes autoridades aeronáuticas y militares, a cierto número de funcionarios públicos y a algunas publicaciones.

El autor no espera que este gesto logre algo importante. El mero hecho de que los datos aquí contenidos se obtuvieran por medios supuestamente supernormales probablemente baste para asegurar su desconsideración por parte de casi todas las personas a las que se dirige; sin embargo, parece un deber público ponerlos a disposición. (El autor posee varios títulos universitarios y anteriormente fue director de departamento universitario).

Una situación muy grave podría surgir en cualquier momento con respecto a los «platillos voladores». Si uno de ellos fuera atacado, el avión atacante sería casi con toda seguridad destruido. En la opinión pública, esto podría generar pánico y sospecha internacional. Los datos principales sobre estas naves ya están disponibles y deben ser presentados, por fantásticos e ininteligibles que puedan parecer a quienes no estén familiarizados con este tipo de pensamiento.

Una parte de los discos transportan tripulaciones, otros están bajo control remoto.

Su misión es pacífica. Los visitantes contemplan establecerse en este plano.

Estos visitantes son similares a los humanos pero de tamaño mucho más grande.

No son personas terrestres exencarnadas, sino que provienen de su propio mundo.

No provienen de ningún “planeta” como usamos la palabra, sino de un planeta etérico que se interpenetra con el nuestro y no es perceptible para nosotros.

Los cuerpos de los visitantes, y también la nave, se «materializan» automáticamente al entrar en la frecuencia vibratoria de nuestra materia densa. (Cp. «aporta»).

Los discos poseen un tipo de energía radiante, o un rayo, que desintegra fácilmente cualquier nave atacante. Regresan al etérico a voluntad, desapareciendo así de nuestra vista sin dejar rastro.

La región de la que provienen NO es el plano astral, sino que corresponde a los Lokas o Talas. Los estudiantes de esoterismo comprenderán estos términos.

(Meade Layne, 1947)

Lokas y Talas

Los lokas en el hinduismo son un universo, plano o reino de existencia.

En la teosofía el concepto se amplió y los Lokas se convirtieron en los reinos superiores de existencia, mientras que los Talas en los inferiores.

¿De dónde salió esta información sobre los platillos?

El 14 de octubre de 1946, Los Angeles Daily News informó que varias personas en San Diego creían que una nave espacial de otro planeta había intentado contactar con la Tierra durante la lluvia de meteoritos de la semana anterior, un evento causado por el paso del cometa Giacobini-Zinner. Aunque las autoridades locales no recibieron informes de nada fuera de lo común, al menos una docena de personas declararon al periódico que el 9 de octubre habían presenciado un objeto grande y extraño en el cielo sobre la ciudad. Un testigo declaró: «Tenía forma de bala y dejaba una estela de vapor». Otro observó que tenía algo parecido a alas. El artículo, curiosamente, continuaba diciendo que el editor ocultista local Meade Layne estaba «informando a un médium sobre el supuesto avistamiento». Ese médium era Mark Probert.

(Stephen Canner)

Mark Probert fue un médium que supuestamente canalizó entidades conocidas como «El Círculo Interno». Su socio, Meade Layne, declaró a las fuentes periodísticas que los «platillos voladores» eran «naves etéreas» y provenían de un lugar llamado, apropiadamente, «etheria». Esta información se originó a partir de la canalización realizada por Probert. Probert afirmó que entre los espíritus que canalizó se encontraban un astrónomo del siglo XVII, un clérigo del siglo XIX y un sacerdote de una civilización perdida de la región del Himalaya. A través de Probert, estos espíritus hicieron afirmaciones sobre la naturaleza de los platillos voladores y el universo mismo, por ejemplo, que la realidad está impulsada por la consciencia.

Fotografía del médium Mark Probert; observe la imagen en la pared que representa a uno de sus «contactos» canalizados.

Las Socialites y Los Nueve

En 1952, Andrija Puharich, médico y parapsicólogo con vínculos con el Ejército y las agencias de inteligencia estadounidenses, invitó al místico hindú Dhundiraj G. Vinod a su instituto de investigación en Maine, «La Fundación Mesa Redonda de Electrobiología». En la víspera de Año Nuevo de 1952, Vinod dirigió una sesión espiritista en la que canalizó mensajes de una entidad autodenominada «Los Nueve». Al año siguiente, Puharich, Vinod y varios observadores se reunieron para otra sesión en la que Vinod volvió a contactar con esta entidad. Entre los observadores de este espectáculo se encontraban miembros de las familias Du Pont, Astor y Forbes.

La entidad, o mejor dicho, las entidades, comunicaron que eran nueve principios del universo, pero uno solo: habían estado en la Tierra hace 34,000 años y eran «La Enéada», un grupo de nueve deidades del antiguo Egipto. Finalmente, revelaron que también eran extraterrestres que orbitaban la Tierra en una nave espacial invisible. La validez de esta información se vio reforzada posteriormente para Puharich cuando descubrió que Dorothy Martin, una médium asociada con la secta de contacto ovni «The Seekers», afirmó haber canalizado mensajes de un grupo de entidades que se autodenominaban «los nueve principios», quienes supuestamente hicieron referencia a detalles de su comunicación anterior con Vinod.

La Enéada, representada en la parte superior de este papiro.

Se establecerían más contactos con «Los Nueve» en la Mesa Redonda, con muchas otras personalidades como invitados. En al menos una ocasión, Gene Roddenberry, famoso por Star Trek, estuvo presente. Sobre la validez de estas sesiones, Puharich escribió:

Tomamos todas las precauciones posibles contra el fraude, y tanto el personal como yo quedamos completamente convencidos de que estábamos tratando con algún tipo de inteligencia extraterrestre extraordinaria.

Dr. Andrija Puharich, investigador de la percepción extrasensorial y otros fenómenos anómalos

¿Qué podemos hacer con estas entidades canalizadas, asumiendo que los relatos no son cuentos de hadas?

En diversas tradiciones ocultistas, existe el concepto de «maestros ascendidos» o «jefes secretos», seres que han alcanzado un nivel de iluminación que les ha otorgado el conocimiento y la capacidad de existir fuera de una forma física. Algunos de estos seres trabajan para guiar e influir a la humanidad, y a todos los seres sintientes, en el camino de la iluminación. Esto se asemeja al concepto budista de los bodhisattvas.

¿Podría la inteligencia detrás de los ovnis estar conectada de alguna manera con estos conceptos místicos? Cabe señalar que, en casos de contacto con ovnis, las entidades con las que se comunican suelen proporcionar información absurda, vaga y errónea a los contactados. Por ejemplo, se ha reportado que predicen eventos que nunca ocurren.

Albert K. Bender y el misterio de los Hombres de Negro

En 1953, uno de los primeros informes de amplia difusión sobre lo que se conocería como el fenómeno de los «hombres de negro» tuvo lugar en Bridgeport, Connecticut, EE. UU. Los extraños encuentros fueron reportados por el investigador de ovnis y fundador de la «Oficina Internacional de Platillos Voladores», Albert K. Bender. El caso se difundiría posteriormente en el libro de su colega ufólogo Gray Barker, «Ellos sabían demasiado sobre platillos voladores», de 1956, y en la publicación del propio Bender, «Platillos voladores y los tres hombres», de 1963.

Albert K. Bender con su representación de uno de los hombres de negro que lo visitaron

Los siguientes extractos son de «Platillos voladores y los tres hombres» de Albert K. Bender.

La discordia surgió por primera vez en la sede de la IFSB [Oficina Internacional de Platillos Voladores] en una reunión celebrada a principios de marzo de 1953. Votamos a favor de celebrar lo que llamaríamos un «Día Mundial del Contacto», en el que instaríamos a todos los miembros de la IFSB a intentar enviar un mensaje telepático a los visitantes del espacio.

El 15 de marzo de 1953, en mi estudio de Bridgeport, exactamente a las 6:00 p. m., procedí a participar en el experimento según lo planeado.

Fue después del tercer intento que sentí un escalofrío terrible que me recorrió todo el cuerpo. Entonces me empezó a doler la cabeza, como si varias jaquecas hubieran acumulado su angustia y la hubieran acumulado sobre mí a la vez. Un olor extraño llegó a mi nariz, como a azufre quemado o a huevos en descomposición. Entonces perdí parcialmente el conocimiento mientras la habitación a mi alrededor comenzaba a desvanecerse.

De repente, oí una voz que me invadió, pero que, por alguna razón, no parecía audible. Parecía provenir de la habitación frente a mí, que permanecía completamente a oscuras.

Hemos estado observándote a ti y a tus actividades. Por favor, ten en cuenta que debes dejar de ahondar en los misterios del universo. Haremos acto de presencia si desobedeces.

«Tenemos una misión especial»,

«…y no debes ser molestado por tu gente.»

«Estamos entre ustedes y conocemos cada uno de sus movimientos, así que les informamos que estamos aquí en su Tierra».

Poco después tendría la sorpresa más grande en la cadena de eventos aterradores.

La habitación pareció oscurecerse, pero aún podía ver. Noté tres figuras sombrías en la habitación. Flotaban a unos 30 centímetros del suelo.

Todos vestían ropas negras. Parecían clérigos, pero llevaban sombreros similares al estilo Homburg. No se distinguían bien los rostros, pues los sombreros los ocultaban y les daban sombra parcialmente.

Los ojos de las tres figuras se iluminaron de repente como bombillas de linternas y todos se centraron en mí.

Fue entonces cuando sentí que me enviaban un mensaje telepático. Su mensaje decía algo así:

Se ha dedicado a resolver el extraño problema de los objetos no identificados en su atmósfera. Su interés es profundo y sincero, y le ha dedicado muchas horas. Sabemos también que tal interés y determinación podrían llevarle a algo perjudicial. Creemos que es un excelente contacto para nosotros en su planeta Tierra. Es una persona común y corriente, y sabemos que lo que le digamos y le mostremos no será creído por nadie a quien se lo cuente.

Te dejaremos un pequeño trozo de metal similar a tus monedas. Debes guardarlo en un lugar secreto.

Debía conservar el trozo de metal y cuando quisiera hacer contacto con ellos debía sujetarlo firmemente en la palma de mi mano y cerrar los ojos, repitiendo al mismo tiempo «Kazik» y encender la radio.

Poco después de estos encuentros, se publicó el último número de la revista trimestral de Bender, «Space Review». Contenía el siguiente mensaje:

El misterio de los platillos voladores ya no es un misterio. La fuente ya se conoce, pero cualquier información al respecto se mantiene en secreto por órdenes de una fuente superior. Nos gustaría publicar la historia completa en Space Review, pero debido a la naturaleza de la información, se nos ha desaconsejado. Recomendamos a quienes trabajan con platillos voladores que sean muy cautelosos.

Encuentros similares con extraños «hombres» vestidos de negro se reportarían posteriormente durante las décadas siguientes en relación con avistamientos y encuentros con ovnis, convirtiéndose en un elemento recurrente del tema ovni y de la cultura popular en general. Curiosamente, el mensaje transmitido por estos extraños personajes seguía siendo esencialmente el mismo: «Dejen de investigar ovnis».

¿Podría ser esto un reflejo del supuesto secretismo y las artimañas humanas en torno al tema ovni? ¿O acaso entidades cuya naturaleza se desconoce actualmente desean permanecer ocultas y encubiertas en sus operaciones? Basándome en lo revelado hasta ahora, creo que es bastante seguro suponer que siempre que se intenta o se recibe comunicación con inteligencias supuestamente vinculadas al fenómeno ovni, es probable que nuestro viejo amigo el «Embaucador» esté al acecho, esperando aparecer.

https://medium.com/@Promethean_Flame/the-occult-nature-of-ufos-88f8b6d77c08

La naturaleza oculta de los ovnis

Cuarta parte: Los magos de los ultraterrestres

3 de marzo de 2025

Promethean Flame

Fotografías de un ovni tomadas por el fotógrafo aficionado William Rhodes en Phoenix, Arizona, durante la ola de avistamientos de ovnis de 1947.

Magos (sustantivo) Forma plural de Mago: miembro de una clase sacerdotal hereditaria entre los antiguos medos y persas: mago, hechicero

(Merriam-Webster)

Sexo y platillos

En 1945, Jack Parsons, pionero de la cohetería estadounidense y cofundador del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL), inició una serie de rituales ocultistas diseñados para evocar a la deidad thelémica «Babalon». Parsons, seguidor de «Thelema», la tradición fundada por el famoso ocultista británico Aleister Crowley, había establecido una especie de comunidad mágica en su casa de Pasadena, California, donde numerosas personas con ideas afines convivían y realizaban diversos rituales, incluyendo formas de magia sexual.

Una de estas personas afines que finalmente se presentó en la puerta de Jack fue el autor de ciencia ficción y futuro fundador de la Cienciología, L. Ronald Hubbard. Sobre Hubbard, Parsons escribió:

Posee una extraordinaria experiencia y conocimiento en este campo (magia ritual). Por algunas de sus experiencias, deduzco que está en contacto directo con una inteligencia superior, posiblemente su ángel de la guarda.

Ambos se hicieron amigos rápidamente y compañeros mágicos en los rituales de evocación de la diosa Babalon. El propósito de esta evocación fue diseñado por Parsons para traer el espíritu de esta deidad, concretamente el del sexo/amor, al mundo entonces devastado por la guerra.

Jack Parsons, ingeniero de cohetes, ocultista y cofundador del «Jet Propulsion Laboratory», en la foto, segundo desde la izquierda.

Sobre estos rituales, su compañero discípulo de Crowley, Kenneth Grant, escribiría más tarde:

Los trabajos comenzaron en 1945-46, unos meses antes de la muerte de Crowley en 1947, y justo antes de la oleada de fenómenos aéreos inexplicables que ahora se recuerda como el «Gran Flap del Platillo Volador»… Parsons abrió una puerta y algo entró volando.

Por supuesto, se han reportado objetos extraños en el cielo y fenómenos anómalos asociados desde la antigüedad. Por lo tanto, la idea de que Parsons fuera responsable de los ovnis es absurda. Sin embargo, ¿podrían los rituales realizados en el desierto de Mojave haber provocado un aumento de la actividad ovni en la región?

Existe una curiosa conexión con el sexo en los relatos de encuentros con ovnis. Se han registrado numerosos informes de personas que, tras mantener relaciones sexuales, han tenido avistamientos y encuentros anómalos. El autor e investigador de ovnis John Keel escribió extensamente sobre este tipo de eventos, relatados por personas que presenciaron luces, objetos e incluso seres extraños mientras estaban estacionados en sus coches por la noche en zonas de encuentros.

Los contactados y secuestrados también han informado de encuentros que incluyen procedimientos médicos con connotaciones sexuales, e incluso actividad sexual voluntaria y forzada con seres aparentemente no humanos.

El siguiente extracto es del relato de Antonio Vilas Boas, quien fue llevado contra su voluntad a bordo de una extraña embarcación que aterrizó en la granja de su familia en Brasil en 1957:

El súcubo

Boas dice que lo dejaron solo durante aproximadamente una hora y se acomodó en una cama o sofá gris, grande y sin rasgos distintivos, similar a la gomaespuma, en el centro de la habitación, sin patas. De agujeros en la pared, a la altura de su cabeza, salían columnas de humo gris que se disolvieron rápidamente. Al principio, Boas sintió náuseas y como si se estuviera asfixiando. Luego corrió a un rincón de la habitación, vomitó, y después de eso, respiró con más facilidad. Poco después, se abrió una puerta y entró una mujer desnuda.

Boas relata que la mujer se acercó a él «en silencio, mirándome todo el tiempo como si quisiera algo de mí». Al apretarse contra él, comprendió cuál era su propósito. «Empecé a excitarme… Terminé olvidándolo todo y la abracé, correspondiendo a sus favores con mayores favores míos». Al parecer, tuvieron dos encuentros sexuales y realizaron diversos actos juntos durante aproximadamente una hora, tras lo cual la mujer se apartó para marcharse.

«Solo querían un buen semental para mejorar su rebaño», decía Boas. Dijo que disfrutó del encuentro, incluso si la mujer se negaba a besarlo. Bruce Rux comentó que, después de todo, acababa de vomitar. En cambio, la «mujer» prefirió morderle la barbilla, mientras emitía sonidos que, en la mente de Boas, parecían gruñidos de animales. Nunca habló. Cuando terminaron, una de las otras criaturas entró y llamó a la mujer. «Pero antes de irse, se señaló el vientre y, sonriendo (lo mejor que pudo), señaló al cielo, hacia el sur, diría yo. Luego se fue.»

(Extractos de un artículo de Terry Melanson)

Representación artística del encuentro de Antonio Vilas Boas con la mujer «humanoide»

¿Qué otras conexiones aparentemente «mágicas» se pueden encontrar en los informes sobre ovnis y fenómenos relacionados con ovnis?

Profecías de Lanulos

El 2 de noviembre de 1966, un vendedor de una empresa de máquinas de coser llamado Woodrow Derenberger regresaba a casa de un viaje fuera del estado cuando tuvo un encuentro increíblemente extraño.

Mientras conducía por la carretera interestatal 77 cerca de Parkersburg, Virginia Occidental, vio un extraño objeto en el aire que se acercaba rápidamente por detrás de su vehículo. El objeto pasó sobre él y descendió hasta quedar suspendido justo encima de la carretera, donde se detuvo bruscamente, impidiéndole a Derenberger seguir adelante. Describió el objeto como de color gris carbón, similar a una lámpara de queroseno antigua volcada. Mientras estaba sentado en su coche examinando el objeto, lo que parecía ser una puerta se abrió y un hombre salió y se dirigió hacia él. Woodrow describió al extraño como de unos 1.80 metros de altura, tez bronceada y cabello oscuro peinado hacia atrás. Vestía lo que parecía un traje azul marino de aspecto brillante y metálico, debajo de un abrigo oscuro.

Este extraño hombre se comunicó telepáticamente con Woodrow y dijo llamarse «Cold». Le aseguró que no tenía malas intenciones, le hizo varias preguntas y le pidió que contara a otros sobre su visita. Finalmente, le dijo a Woodrow que volvería a visitarlo en algún momento, antes de volver a entrar en la nave, que despegó rápidamente y desapareció de la vista. Más tarde, Woodrow informó que el extraño sí lo visitó de nuevo y le reveló que su nombre completo era Indrid Cold y que era un visitante extraterrestre de un planeta llamado «Lanulos».

Representación artística del encuentro de Woodrow Derenberger con «Indrid Cold».

Se reportaron encuentros posteriores con un individuo de aspecto similar, llamado Indrid Cold, en toda Virginia Occidental. El investigador de ovnis y autor John Keel documentó muchos de estos relatos, así como informes de extrañas llamadas telefónicas de individuos con voces que parecían robóticas, que hacían referencia a la visita de Derenberger. El propio Keel incluso recibió una llamada de un individuo que se hacía llamar Indrid Cold mientras se encontraba en Point Pleasant, Virginia Occidental, investigando avistamientos de un gran humanoide alado. Cold le advirtió a Keel que no regresara a la zona debido a un desastre inminente. Poco después, el Puente de Plata, que cruzaba el río Ohio y conectaba Point Pleasant con Gallipolis, Ohio, se derrumbó, causando la muerte de 46 personas.

Periódico local detalla el colapso del Puente de Plata

¿El hombre polilla o una maldición de los nativos americanos?

A partir de 1966, residentes de Point Pleasant comenzaron a reportar encuentros aterradores con una criatura humanoide oscura, alada y con brillantes ojos rojos. Con frecuencia, se reportaba que la criatura perseguía automóviles y volaba en línea recta como un helicóptero. Los testigos también describieron una extraña cualidad hipnótica asociada a los encuentros. Estos informes fueron investigados posteriormente por las autoridades locales, y la criatura fue apodada «Hombre Polilla» por la prensa.

Mientras el Hombre Polilla se dedicaba a aterrorizar a los conductores, nuestro amigo Indrid Cold también visitaba a los residentes de Point Pleasant y sus alrededores. John Keel, quien investigó muchos de estos informes de primera mano, creía que podría haber una conexión entre los respectivos visitantes de otro mundo. Como se mencionó anteriormente, esta oleada de actividad paranormal culminó en un terrible desastre. ¿Podría haber algo más de lo que parece sobre el Hombre Polilla y la actividad paranormal que aterrorizó y desconcertó a los residentes de Point Pleasant?

Representación artística del Hombre Polilla, basada en descripciones de testigos presenciales

Tal vez podamos obtener algunas respuestas examinando acontecimientos igualmente tumultuosos del pasado distante de Virginia Occidental.

La tensión era intensa en todo el valle de Kanawha, en Virginia Occidental, durante el otoño de 1774. Se había formado una confederación de tribus nativas americanas para oponerse a la invasión de los colonos. El 10 de octubre de 1774, lucharon contra la milicia de Virginia en la «Batalla de Point Pleasant». Dos líderes notables de esta alianza fueron el jefe shawnee Hokoleskwa, conocido como «Cornstalk» por los colonos, y el jefe delaware Red Hawk. Tras tres largos años de conflicto, en octubre de 1777, los jefes Cornstalk y Red Hawk viajaron a Fort Randolph, en Point Pleasant, para advertir a la milicia sobre posibles ataques futuros a los asentamientos estadounidenses e intentar negociar un tratado con la esperanza de evitar un mayor derramamiento de sangre.

Los dos hombres fueron posteriormente detenidos en el fuerte junto con Ellinipisco, hijo de Cornstalk. El 10 de noviembre, tras el asesinato de un miliciano a manos de nativos, sus furiosos compatriotas irrumpieron en el cuartel donde Cornstalk, Red Hawk y Ellinipisco se encontraban detenidos y los asesinaron a sangre fría. Cuenta la leyenda que, mientras agonizaba, el jefe Cornstalk profirió una maldición no solo contra sus asesinos, sino también contra el propio valle de Kanawha.

Fui amigo del hombre de la frontera. Muchas veces lo he salvado a él y a su gente del peligro. Nunca luché contra ustedes, solo para proteger nuestros tipis y tierras. Me negué a unirme a sus enemigos de rostro pálido con los casacas rojas. Vine al fuerte como amigo suyo y ustedes me asesinaron. Has asesinado a mi lado, mi joven hijo. Por esto, que la maldición del Gran Espíritu caiga sobre esta tierra. Que sea asolada por la naturaleza. Que incluso sea asolada por sus esperanzas. Que la fuerza de sus pueblos sea paralizada por la mancha de nuestra sangre.

El asesinato de los jefes nativos americanos Cornstalk y Red Hawk

Es un hecho inquietante que el área del Valle de Kanawha se ha visto plagada de varios desastres, incluido el colapso del Puente Silver en 1967, hasta el día de hoy.

¿Podrían estos acontecimientos y los encuentros sobrenaturales de 1966-67 estar realmente relacionados con una maldición?

James G. Jones, profesor de Historia en el Glenville State College de Glenville, Virginia Occidental, postuló en su libro «Haunted Valley, And More Folk Tales of Appalachia» (Valle Encantado y Más Cuentos Populares de los Apalaches) que la criatura alada de la que se había informado durante el período previo al desastre del Puente de Plata podría haber estado relacionada de alguna manera con el «espíritu tótem» del asesinado jefe de Delaware, Red Hawk.

Curiosamente, en ciertas tradiciones nativas americanas, el simbolismo que rodea al halcón representa conceptos como mensajero, intuición, poder visionario y protección. ¿Podría el Hombre Polilla haber sido en realidad el espíritu-tótem de Red Hawk? Con sus ojos rojos y alas extendidas, desde 1967 se ha convertido en un presagio de desastre inminente.

Los esfuerzos humanos como obras mágicas

¿Qué podemos concluir de todo esto? John Keel creía que el fenómeno ovni quizás tenía un origen ultraterrestre (una o más inteligencias avanzadas cuyo origen último es la Tierra), y señaló, como muchos otros, que las manifestaciones de los fenómenos se observan en la Tierra, no en el espacio exterior. Quizás la o las inteligencias detrás de los ovnis sean similares a una especie de «Anima Mundi» (un gran espíritu o espíritus de la Tierra). Si esta o estas inteligencias intentan comunicarse, ¿cómo podemos descifrar los mensajes?

Quizás las respuestas nos han acompañado desde tiempos inmemoriales, ocultas en las enseñanzas y tradiciones de la humanidad desde que desarrollamos la capacidad de construir mitos y leyendas para intentar explicar nuestro lugar en el universo. ¿Será que nos involucramos a diario en una forma de magia ritual sin siquiera ser conscientes de ello? No solo la «magia» que implica manifestar nuestras concepciones de la mitología, el arte y las ciencias en el mundo material, la de traducir los sueños de la psique humana en algo que podemos ver y tocar, sino algo más elusivo. ¿Podría esta misma fuerza estar involucrada también en la «magia» inherente a los ovnis?

https://medium.com/@Promethean_Flame/the-occult-nature-of-ufos-part-four-6d47bc38e5bc

La naturaleza oculta de los ovnis

Quinta parte: Extraterrestres, arquetipos y sabiduría ancestral

6 de mayo de 2025

Promethean Flame

La visión del profeta hebreo Ezequiel de los emisarios del cielo

¿Visitas celestiales?

Desde la antigüedad, existen relatos de entidades «sobrenaturales» que interactúan con la humanidad, relatos de dioses, titanes, ángeles, embaucadores y todo tipo de espíritus, buenos, malos e indiferentes. Incluso existen historias de visitantes celestiales que descienden a la Tierra desde el cielo. Estos mitos han moldeado el desarrollo y la trayectoria de la raza humana de manera monumental y han influido en muchas de nuestras tradiciones y pensamientos sobre el universo y nuestro lugar en él durante gran parte de nuestra existencia. Estos relatos también se han utilizado para transmitir información compleja sobre nuestra realidad de forma digerible, transmitiéndose de generación en generación.

En 1976, se publicó un curioso libro titulado «El Misterio de Sirio», escrito por Robert Temple. El libro se centra en el pueblo dogón de Mali, en África Occidental, y su supuesto y arraigado conocimiento astronómico de la estrella Sirio. Posteriormente, el libro ha recibido críticas y elogios de diversos expertos e investigadores. Independientemente de los errores presentes, en mi opinión, algunos de los fascinantes detalles que se tratan en el libro merecen un análisis más profundo.

Los antropólogos franceses Marcel Griaule y Germaine Dieterlen descubrieron que los dogones poseían un conocimiento bastante avanzado de la estrella Sirio, y lo habían transmitido mucho antes de cualquier contacto con la civilización occidental. Entre los hechos conocidos por los dogones se encontraba la existencia de una estrella compañera, ahora conocida como «Sirio b», invisible a simple vista, y que no fue confirmada visualmente por los astrónomos hasta la llegada del telescopio moderno. También conocían información sobre la densidad y los movimientos celestes de Sirio b, así como sobre la existencia de las cuatro lunas principales de Júpiter. ¿Cómo pudo el pueblo dogón poseer tal conocimiento sin utilizar las herramientas modernas de observación astronómica?

Talla dogon de un nommo

Los extraterrestres acuáticos

Los dogones supuestamente contaron a los antropólogos franceses Griaule y Dieterlen que la información astronómica que poseían había sido transmitida a sus ancestros por una raza de seres/espíritus acuáticos y anfibios originarios de un planeta que orbitaba la estrella Sirio. A estos seres los llamaron Nommo. Los Nommo fueron descritos y representados en el arte dogón como seres con apariencia de pez, pero también con rasgos humanoides. Esta imaginería es sorprendentemente similar a otras representaciones religiosas y mitológicas presentes en otras partes del mundo, en diversas culturas y sistemas de creencias.

El Apkallu, con forma de pez, de los antiguos sumerios

En la antigua mitología mesopotámica también existen deidades acuáticas con forma de pez. El Apkallu de los sumerios y Oannes de los babilonios fueron descritos como mitad humano y mitad pez. El sacerdote babilónico Beroso describió a Oannes con forma de pez, pero con cabeza de hombre bajo su cabeza y pies de hombre bajo su cola. Durante el día, Oannes emergía de las profundidades del Golfo Pérsico y desembarcaba, donde instruía a la humanidad en diversas ciencias, disciplinas y artes, y al anochecer descendía de nuevo al abismo.

Talla babilónica que representa a los Oannes

Algunos eruditos han especulado que Oannes puede haber sido un emisario del dios del agua Ea, uno de una clase de deidades llamadas Anunnaki, que eran descendientes del dios del cielo y estaban estrechamente asociados con varios cuerpos celestes.

¿Estos relatos de diversas culturas y sistemas de creencias ilustran verdaderamente el contacto con visitantes no humanos, o se puede determinar más investigando las profundidades del simbolismo oculto en estos y otros mitos?

El bautismo de Cristo en el río Jordán

Las aguas de la vida, la muerte y la resurrección

…Y el que tenga sed, venga. Y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

(Extracto del Apocalipsis de San Juan el Divino, capítulo 22, versículo 17 – RV)

En el canon bíblico cristiano tradicional, tanto el Evangelio de San Juan como el Apocalipsis de San Juan, libros atribuidos a uno de los doce apóstoles de Cristo, presentan simbolismo relacionado con el agua, específicamente el agua que al ser consumida o ingerida otorga la vida eterna.

Como se registra en el Evangelio de San Juan, Jesús le dijo esto a la mujer samaritana junto al pozo de Jacob:

Mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.

(El Evangelio de San Juan, capítulo 4, versículo 14 – RV)

También hay otra figura importante llamada Juan en las escrituras cristianas, quien tiene una conexión particularmente profunda con esta «agua de vida». Se trata de Juan el Bautista, quien realizó el ritual del bautismo en agua de Jesús en el río Jordán.

El nombre griego Ioannes es sinónimo de la traducción al español, Juan, y allí encontramos de nuevo al Oannes de Mesopotamia. El mismo Oannes que se sumergió en el agua y emergió de nuevo con dones de conocimiento y sabiduría.

En el cristianismo tradicional, el ritual del bautismo simboliza la muerte espiritual de un individuo (el descenso al agua) y el posterior renacimiento/resurrección (emerger del agua) como un nuevo ser, poseedor de una nueva iluminación espiritual. Podemos encontrar otra conexión con estos mitos dispares en la historia del profeta hebreo Jonás, quien fue tragado por un enorme pez y escupió a un hombre más sabio.

El profeta hebreo Jonás, regresó a la tierra de los vivos gracias al gran pez.

Estos reflejan los rituales de iniciación realizados en diversas tradiciones mistéricas a lo largo de la historia, en los que los iniciados experimentaban una muerte simbólica y una posterior resurrección. De hecho, el bautismo de Cristo puede considerarse una iniciación que dio inicio a su obra como maestro, sanador y profeta. Algunos de estos rituales incluían un descenso bajo tierra (como el descenso al agua), lo que también refleja la historia de la muerte y resurrección de diversas figuras, desde Osiris hasta Cristo.

Los antiguos misterios griegos hablan del Leteo, el río del olvido que las almas atraviesan en su viaje tras la muerte, antes de la reencarnación. Sin embargo, también existe otro río: el Mnemósine. Quienes beben de él o lo atraviesan lo recuerdan todo y alcanzan la iluminación. A los iniciados se les enseñaba que existe una opción con respecto a lo que se les presenta a las almas de los muertos.

“Dante y el río Leteo” de Gustave Doré (recortado)

Como afirmó el gran ocultista y autor Manly P. Hall, el mensaje principal que transmiten estos rituales y mitos de muerte y resurrección en diversas culturas es que el ser humano es esencialmente inmortal. Se puede profundizar en los misterios de las vidas pasadas y las experiencias cercanas a la muerte, así como en la ciencia de vanguardia sobre la consciencia, para obtener más información sobre estos temas.

Fotografía de un objeto volador no identificado tomada por Rex Heflin cerca de Santa Ana, California, EE. UU. – 1965

Platillos llenos de simbolismo

Como se discutió en la segunda parte de esta serie, existen fascinantes conexiones potenciales entre los platillos voladores y el simbolismo humano. También he postulado que quizás las inteligencias que controlan algunos de estos objetos y apariciones estén usando nuestros propios símbolos para comunicarse con la humanidad.

¿Qué cualidades simbólicas del fenómeno ovni se relacionan potencialmente con los conceptos que hemos analizado hasta ahora? Bastantes, de hecho.

Se han visto con frecuencia ovnis entrando en cavernas terrestres, así como sumergiéndose en las profundidades de cuerpos de agua. Esto simboliza el cruce de fronteras, como la frontera entre la vida y la muerte, al igual que los rituales de iniciación detallados en la sección anterior. También se ha observado una sorprendente asociación entre los ovnis y el agua en general. Numerosos testigos han visto ovnis no solo emergiendo de cuerpos de agua, sino también a sus ocupantes introduciendo agua en sus naves mediante lo que parecían ser mangueras y otros artilugios.

Vesica Piscis con el símbolo de ichthys superpuesto

La figura geométrica conocida como vesica piscis, al colocarla de lado, no solo se asemeja al «ichthys», el símbolo del pez asociado con el cristianismo, sino que también guarda un asombroso parecido con numerosas descripciones de testigos de platillos voladores. Este simbolismo del pez también se asocia con el signo zodiacal Piscis, que, acertadamente, es un signo de agua.

El agua se ha asociado tradicionalmente con lo femenino en muchos sistemas alquímicos y astrológicos, y curiosamente, la vesica piscis, vista en su orientación normal, se asemeja a la vulva femenina humana. La posible asociación con temas reproductivos en los relatos de abducciones resulta particularmente sorprendente.

Dibujo de un ovni en relación con un caso de encuentro cercano que ocurrió en Hopkinsville, Kentucky en 1955 (basado en descripciones de testigos oculares) La forma lenticular clásica se asemeja mucho a la vesica piscis.

Ahora, debemos regresar a la estrella Sirio, que, según sus movimientos celestes, desaparece (a simple vista) por un tiempo y luego reaparece en el firmamento. Aquí podemos ver paralelismos entre los movimientos de Sirio y los rituales que simbolizan la vida y la muerte, como se describió anteriormente. Para los antiguos egipcios, Sirio se asociaba con las deidades Annubis y Osiris, quienes fueron gobernantes del más allá en diversos momentos de la historia egipcia.

Podemos ver claramente entonces el simbolismo de Sirio, al desaparecer del cielo nocturno, cruzando la frontera de la vida y la muerte y entrando en el mundo inferior de los muertos, y posteriormente reapareciendo como si resucitara, reflejando la saga de Osiris así como la tradición cristiana.

Sirio también tiene otras asociaciones míticas, astronómicas, astrológicas y metafísicas de cierta importancia. Los antiguos egipcios usaban los movimientos de esta estrella para predecir la inundación del Nilo, lo cual, a su vez, se correlaciona con la simbología de la vida y la muerte, ya que el Nilo era esencialmente el dador de vida para los egipcios. También existe el simbolismo del agua.

Esta estrella también estaba relacionada con las diosas Sopdet e Isis. Isis era la diosa velada de los antiguos egipcios, esposa de Osiris. El velo de Isis representa todos los secretos físicos, metafísicos y espirituales. Según las diversas enseñanzas mistéricas a lo largo de los siglos, ningún mortal ha podido mirar más allá del velo de Isis. Hacerlo equivaldría a alcanzar un estado supremo de iluminación. Así como las verdades tras el velo de Isis siguen siendo un misterio, también lo son las verdades tras el fenómeno ovni.

Mural que representa a la diosa Isis hallado en la tumba del antiguo faraón egipcio Horemheb, situada en la necrópolis de Saqqara.

Puertas metafísicas

En 1907, el ocultista británico Aleister Crowley fundó una organización mágica llamada «A?A?», a veces conocida como Argenteum Astrum, u Orden de la Estrella Plateada. Como ha comentado James Eshelman, miembro de la A?A? y autor, se suele considerar que la Estrella Plateada es la estrella Sirio. El texto central de la orden, Liber Al vel Legis, o El Libro de la Ley, fue supuestamente dictado a Crowley por un ser sobrenatural llamado Aiwass en 1904.

Posteriormente, Crowley también tendría un encuentro durante su trabajo ritual con un ser llamado Lam, a quien dibujó con cierto detalle. Curiosamente, el ser de la ilustración de Crowley guarda un sorprendente parecido con las descripciones de ocupantes de platillos voladores de la era moderna. ¿Podrían estos encuentros sobrenaturales, y otros similares, ser en sí mismos similares a experiencias iniciáticas? Al igual que los iniciados en los misterios antiguos, quienes experimentan estos fenómenos también son impulsados a un mundo más amplio y, en muchos casos, reciben un grado de comprensión que antes no poseían.

La Gran Pirámide de Giza guarda una interesante relación con los movimientos celestes de Sirio, ya que la estrella habría estado alineada con uno de los conductos que salen de la «Cámara de la Reina» durante su construcción. Diversas tradiciones ocultistas describen las pirámides egipcias como utilizadas expresamente para diversos rituales, incluyendo rituales de iniciación. El conducto mencionado, que sale de la cámara de la reina, está bloqueado por piedras y, por lo tanto, no conduce al exterior de la estructura, lo que lo hace inadecuado para la ventilación. Dado que Sirio se asociaba con la diosa Isis, tal vez este conducto tenía como objetivo transmitir conceptos específicos a los iniciados en los misterios egipcios.

Diagrama que ilustra las alineaciones celestiales con los ejes de la Gran Pirámide en el momento de su construcción.

En lugar de considerar el sistema estelar de Sirio como el origen de una raza no humana de seres inteligentes que transmitieron conocimientos avanzados a la humanidad, quizás sea mejor verlo como una especie de portal metafísico o simbólico a través del cual se puede comunicar información esotérica. Por lo tanto, en lugar de buscar un origen extraterrestre para la «sabiduría de los siglos», es mucho más lógico comenzar la búsqueda de respuestas aquí en la Tierra. Asimismo, ¿no es lógico que los ancestros del pueblo dogón interactuaran con otras civilizaciones, como la egipcia o la babilónica, e intercambiaran información, conceptos e ideas mitológicas?

Diversas tradiciones mistéricas suelen mencionar una fuente de la que se originó toda la sabiduría y el conocimiento humanos. Muchas incluyen relatos y alegorías sobre civilizaciones avanzadas de nuestro pasado lejano. ¿Podrían las tecnologías, físicas y psíquicas, detrás de los ovnis estar conectadas con una antigua civilización perdida?

El astrofísico Adam Frank y el climatólogo Gavin Schmidt teorizaron sobre si una civilización terrestre avanzada prehumana podría detectarse mediante la arqueología y otros medios.

De Wikipedia:

Según Frank y Schmidt, dado que la fosilización es relativamente rara y poca de la superficie expuesta de la Tierra es anterior al período Cuaternario (hace unos 2.5 millones de años), hay pocas probabilidades de encontrar evidencia directa de tal civilización, como artefactos tecnológicos.

Tal vez el concepto de una Atlántida no sea tan descabellado después de todo.

“Una representación idealista del Templo del Misterio Atlante”, por John Augustus Knapp

Descifrando la comunicación simbólica

Anteriormente he planteado la idea de que quizás los fenómenos ovni sean un medio de comunicación que utiliza símbolos humanos arquetípicos. De ser así, ¿qué tipo de mensaje se esconde en ellos? Para responder a esta pregunta, en relación con lo que hemos examinado hasta ahora, creo que debemos volver al arquetipo de la divinidad femenina y al simbolismo esotérico del agua.

Para los antiguos, el mar era considerado la matriz del mundo, ya que la vida en la Tierra se originó a partir de las aguas primordiales. El agua es un elemento femenino en diversos sistemas de alquimia y astrología. La antigua diosa egipcia, Isis, es quizás la clave de los misterios, pues su velo representa todo lo oculto. Isis también era conocida como una gran figura materna, aunque también virgen; este mismo simbolismo se puede apreciar en la madre de Cristo. Como se mencionó anteriormente, está simbólicamente ligada a la estrella Sirio, intrínsecamente vinculada con el río Nilo y, a su vez, con el simbolismo de la vida, la muerte y la resurrección.

En 2007, un hombre de Carolina del Norte, EE. UU., llamado Chris Bledsoe, tuvo un encuentro cercano con fenómenos verdaderamente anómalos. Desde entonces, ha tenido experiencias paranormales y relacionadas con ovnis. De particular interés son los encuentros con lo que él describió como una figura femenina divina, a la que se ha referido como «la dama».

Algunos han relacionado a esta «dama» con la antigua diosa egipcia Hathor, en particular por la imagen del toro presente en uno de sus encuentros. Curiosamente, la diosa Isis también está conectada con el simbolismo bovino del antiguo Egipto. En diversas representaciones, Isis podía verse con una corona de cuernos con el disco solar en el centro, y a menudo iba acompañada de un buey o toro blanco y negro; este es Apis, posteriormente asociado con Osiris y conectado con el toro de la constelación de Tauro.

Apis, el toro sagrado de los antiguos egipcios

Gracias al sincretismo y al simbolismo relacionado, Isis se convirtió en la máxima encarnación del arquetipo femenino divino a finales del antiguo Egipto. También llegó a ser una figura crucial en las tradiciones mistéricas griegas.

Muchas otras personas han reportado diversos tipos de encuentros con entidades que poseen el mismo simbolismo. Las apariciones marianas que se han reportado a lo largo de la historia son un ejemplo de ello. Este simbolismo representa claramente el arquetipo femenino divino; una figura que guarda los misterios y la sabiduría de los siglos tras un velo, y una figura materna asociada con la vida, la muerte y la resurrección.

“La Isis Saítica”, de John Augustus Knapp

Entonces, ¿qué mensajes se están comunicando potencialmente a través de lo simbólico?

Quizás el mensaje tras estos fenómenos sea un llamado a comprender ciertos principios olvidados. Como postuló el renombrado psiquiatra e investigador de abducciones ovni, John Mack, quizás la inteligencia tras estos fenómenos esté diciendo esencialmente que si la humanidad elige continuar por el camino hiperracionalista, obsesionada con sus propios logros tecnológicos, y descuida lo espiritual o metafísico, dicha inteligencia se comunicará a través de lo material y, en la era espacial moderna, obsesionada con la tecnología, ocasionalmente nos ofrecerá platillos voladores y naves espaciales aparentemente metálicas.

Quizás algunos de estos fenómenos se asemejen a una especie de Anima Mundi o Gaia, un espíritu o espíritus de la tierra. En concreto, respecto al arquetipo femenino divino, tan claramente presente, ¿podría ser que se esté produciendo un proceso alquímico en el cuerpo humano, en particular en lo que respecta a la consciencia humana o, mejor dicho, a nivel subconsciente? ¿Incluso un cambio o equilibrio entre los aspectos femeninos y masculinos?

En definitiva, creo que es potencialmente necesario analizar estos fenómenos de forma holística, superando las brechas arbitrarias, y probablemente artificiales, entre los temas ocultistas tradicionales, las diversas manifestaciones paranormales y otros fenómenos anómalos, como los ovnis, para quizás desentrañar por completo los secretos que se esconden bajo la superficie. Para ello, también parece lógico comenzar aquí en la Tierra, examinando las diversas técnicas que la humanidad ha utilizado desde tiempos inmemoriales para interactuar con lo anómalo. Mientras tanto, mirando hacia las estrellas, no solo en busca de respuestas literales, sino también simbólicas.

https://medium.com/@Promethean_Flame/the-occult-nature-of-ufos-c110bef3da5d