El Yeti en Disney World

Disney World exhibe una fotografía de un hombre de la localidad que se supone es la mano del yeti

Por Tavia Green

The Eagle-Gazette

LANCASTER «“ El criptozoólogo Marc E.W. Miller y cuatro de sus colegas salieron de Ohio rumbo a Nepal y la frontera del Tíbet en febrero de 1986 para buscar evidencia del yeti -comúnmente conocido como el abominable hombre de las nieves o el Bigfoot.

Cuando Miller, nativo de Lancaster, partió a su gran aventura hace 22 años, nunca se imaginó que tendría en sus manos lo que se cree es el cuero cabelludo de un yeti, recibió probables muestras del pelo de un yeti y tomó una foto de lo qué se cree es una mano del yeti.

«Encontrar algo es inexplicable», dijo Miller. «Es como se siente cuando ganas. «¦ Es esa aventura y excitación».

Un criptozoólogo es un investigador que estudia las criaturas que no se han demostrado que existan.

La foto de Miller que maneja el caso de la mano del yeti se exhibe ahora para la gente de todo el mundo para que la vean mientras gozan de las emociones de la «Expedición Everest» en el Walt Disney World’s Animal Kingdom.

La montaña rusa de la Everest Expedtion para en el museo brevemente durante el paseo.

El paseo se abrió hace dos meses en Buena Vista, Fla., el parque temático de Disney ofrece una descripción real y emocionante de cómo son las montañas del Himalaya -incluyendo un encuentro realista con el yeti.

Pero encontrar la posible evidencia del yeti es sólo el resultado de una de las expediciones de Miller.

Miller, quien ha practicado como neuropsicólogo en Lancaster por más de 20 años, ha viajado por todo el mundo. Él ha explorado las sociedades primitivas en África, buscado animales raros en China y Egipto, soportado varios tipos de climas y de situaciones peligrosas y escribió dos libros acerca de sus aventuras.

Uno de sus hallazgos más estimados es una especie rara de elefante asiático en China.

«Estaba paralizado cuando lo vi», dijo.

Las fotos y los trofeos de todas sus aventuras cuelgan en las paredes de su oficina de neuropsicología.

Tener un artefacto de una de sus expediciones exhibido en público es algo absolutamente único, piensa Miller. Él planea ir un día a la Florida a ver la atracción del Yeti.

«Soy feliz que he vivido y que visto sociedades más primitiva», dijo Miller. «He tenido bastantes aventuras».

http://www.lancastereaglegazette.com/apps/pbcs.dll/article?AID=/20060625/NEWS01/606250302

Esta columna es de otro mundo

Por Len LaCara

Si me hubiera pedido que la semana pasada sugiriera un tema para la columna, los platillos voladores no hubieran estado en la lista.

Con todo aquí estoy, intentando determinar si estamos viviendo al Este de Roswell en lugar de Zanesville.

(Roswell, por supuesto, es la ciudad de New México en donde supuestamente los extraterrestres se estrellaron hace medio siglo).

El Internet es el hogar de toda clase de historias locas, incluyendo alguna sobre nuestra área.

Un grupo que investiga avistamientos de ovnis tiene una descripción de algo que supuestamente sucedió en la presa Dillon en mayo de 1999.

Según la narrativa, que apareció en Internet la semana pasada, dos hermanos y su padre pescaban en la presa cerca de las 10 P.M.

«Repentinamente, justo enfrente de nosotros, sonó como si algo «˜enorme»™ saliera del agua», escribió uno de los testigos presenciales. «Más tarde cuando hablábamos de ello, mi hermano mencionó algo tan grande como una casa, pero más grande ya que era la cosa más grande que él podía pensar. Sonaba como si un portaaviones emergiera del agua. Podías detectarla como se levantaba del agua, pero no podíamos verla. También podías oír el agua caer detrás del objeto, de regreso al lago».

¿Es esto del conocimiento popular, o soy el último de la fiesta en enterarme? ¿O se está realizando un proyecto de investigación muy importante?

Los que son bastante viejos pueden recordar una famosa investigación de ovnis. El 13 Nov de 1966, el peluquero y astrónomo aficionado Ralph Ditter de Zanesville tomó dos fotografías que muestran claramente un ovni volando en el cielo. La gente se sorprendió y maravilló; la Rand Corp. no. Los investigadores de la Rand probaron que las fotos eran falsas.

Inicialmente el Sr. Ditter no intentaba engañar a ninguna persona; él sólo intentaba cumplir una promesa a su hija de tomar una foto de una nave espacial extraterrestre.

Coshocton tiene sus propios cuentos de ovnis. Según un blog llamado «Coshocton Then, Coshocton Now», los residentes juran que vieron un plato volador sobre la ciudad durante varias horas en junio de 1954.

En octubre de 1973, la United Press International dijo que pobladores y oficiales de policía reportaron docenas de ovnis de color naranja en Ohio central, «incluyendo una mujer que dijo que tres ovnis la obligaron a sacar su coche fuera del camino».

Personalmente, nunca he visto un ovni. Creo que no estamos solos en el universo, aunque, siempre me he preguntado cómo reaccionaría a un encuentro extraterrestre auténtico. ¿Serían lógicos, como el Vulcano de «Star Trek», todo poderosos como Superman o asesinos como los extraterrestres del «Día de la independencia»?

¿O ya hay extraterrestres en nuestro medio? Supongo que están fuera de la sección de tabloides del supermercado.

http://www.zanesvilletimesrecorder.com/apps/pbcs.dll/article?AID=/20060625/OPINION02/606250346

Los ovnis boludos (final)

CONCLUSIONES

Ya en nuestro artículo original de 1996 apuntábamos a que se trataba de restos de naves espaciales fabricadas en la tierra por la Unión Soviética y por los Estados Unidos. Varios de los nuevos casos que hemos reseñado apuntan a esa solución. Incluso recientemente se ha desclasificado un estudio que demuestra esta hipótesis. En mayo de 1972 la Oficina de Impresión del Gobierno de los Estados Unidos, publicó una lista de reentradas de objetos que habían sido estudiados por el Senate Committee on Aeronautical and Space Sciences. Llevaba por título «Convention on International Liability for Damage Caused by Space Objects: Analysis and Background Data».

Esta lista ha sido actualizada y se encuentra como Summary of Recovered Reentry Debris. El lector la puede encontrar en el Apéndice 1.

Este resumen comprende 54 casos que incluyen tanto esferas como otros restos de satélites y cohetes que han caído a la Tierra. Nosotros apuntábamos en 1996, 27 casos, hoy hemos subido la lista a 154.

En el resumen se puede observar que varios de los casos que reseñamos ya tienen una explicación:

Los autores del resumen advierten que únicamente proporcionan los casos por ellos conocidos. A su lista tendrían que sumar, por lo menos, otros 79 casos que menciono en este artículo. ¡Seguro que existen muchos más!

En julio del 2000 se publicó el número 97 de la revista Contacto OVNI en el que varios ufólogos (entre los que se encontraban Antonio Díaz Altamirano, Rafael Lara Palmeros, Luis Ramírez Reyes y Mario Torres Lujan), retomaba la hipótesis de este autor, misma que había sido objeto de burla cuando se expuso por primera vez en 1996. La razón es que algunos de ellos habían viajado al Centro Espacial Johnson, en Texas, a hacer un reportaje y, mientras tomaban fotografías de las naves espaciales, pudieron observar que muchas de ellas contenían las famosas esferas. ¡Después de todo tenía razón el maldito escéptico de Noguez!

Se calcula que hay de 100 a 200 reentradas de grandes objetos por año. En casi 40 años han caído a la Tierra unas 14,000 toneladas métricas de desechos, esto es entre el 20 y el 30% de la masa de todos los satélites y cohetes que han sido lanzados al espacio. El mayor de ellos fue la estación MIR, de 120 toneladas.

La probabilidad de ser herido por chatarra espacial es de menos de 1 en un billón. La probabilidad de ser alcanzado por un rayo es de 1 en 1.4 millones. La de ser alcanzado por una esfera debe ser todavía menor a 1 en un billón. Sólo se conoce un caso de una vaca, en Cuba, que fue impactada por chatarra espacial en 1960.

En el Apéndice 2 se incluyen varias tablas que resumen los casos aquí presentados. Analizar esos datos puede dar información adicional. Pero hay que aclarar que no se pueden sacar conclusiones, a menos que se esté consciente de que estarán sesgadas. El sesgo proviene de múltiples fuentes. La primera, obvia, es que este autor escogió únicamente los casos de «chatarra espacial» en los que estaban involucradas las esferas y los cilindros. Sólo consideró los restos que no presentaban una forma bien definida, sí estaban relacionados a las caídas de esferas o cilindros.

Una segunda fuente de sesgo es que el autor no lee lenguas como el ruso, suahili, cantonés, etcétera. Quiero decir con lo anterior que sólo la literatura en español e inglés que estuvo a mi disposición, es la fuente de este trabajo. Seguramente deben existir muchísimos otros informes en otras lenguas. Por ejemplo, resulta más que curioso que Rusia (la antigua Unión Soviética), siendo una de las principales fuentes de «chatarra espacial», y teniendo la mayor extensión territorial, no presente ningún caso en esta lista. Los Estados Unidos aportan 27 casos (el 17.53%). También este dato me sorprende. Supongo que el porcentaje debería ser mayor, por razones similares a las de Rusia. Avanzo dos hipótesis explicativas:

– Los americanos saben de antemano en dónde van a caer estos objetos y tienen algún programa de pronta recuperación, como el que se puso en acción durante el desastre del Columbia, (lo que explicaría varias de las leyendas de OVNIs estrellados en los que se menciona a gente de la NASA o del Ejército).

– Los americanos hacen lo posible por controlar que estos objetos no caigan sobre su territorio. Si lo hace en otros países, es lo de menos.

En cuanto a las fechas de caída tenemos que el 2.04% lo hizo en la década del 50; el 47.62% en los 60; 22.45% en los 70; 4.08% en los 80; 13.61% en los 90; y 10.20% en lo que va de este siglo.

El único dato que me sorprende es el de la década de los ochenta. Es lógico que la cantidad reportada en los 50 sea baja: comenzaba la carrera espacial en 1957. Luego, la inexperiencia hizo que en los 60 se dispararan los fallos. Un refinamiento en la tecnología disminuyó los casos en los 70. Los 90 presentan una cantidad razonable; lo mismo que el despunte de este siglo. Los 80 tienen un valor bajo.

Una posible explicación viene del lado de la ufología. Recordemos que la principal fuente de estos casos es la literatura ufológica. Se relaciona con OVNIs la caída de estas esferas. La década de los 80 fue llamada «la década perdida», por el escaso interés en los OVNIs. ¿Será esta la razón del bajón en los 80?

En cuanto a la predilección por un lugar de caída, las palmas se lo lleva Argentina con 30 casos (19.48%) y los Estados Unidos con 27 casos (17.53%). Le sigue México con 19 casos (poco más del 12%), lo que no es raro ya que el autor puede verificar la casuística nacional por la cercanía. En seguida está Brasil con 12. Nueva Zelanda y Australia tienen 8 y 7 casos, respectivamente. España aporta 6 o el 4.08%. Suecia tiene 5 casos. Colombia, Sudáfrica y Nepal cuentan 4 cada uno. Chile, Guatemala y Bolivia, 3. Arabia Saudita, Perú, Venezuela y Canadá van con 2. Finalmente, con 1 caso cada uno: Chad, Irlanda, Italia, Sudan, Uganda, Martinica, Yugoslavia, Francia, Filipinas y Angola. Por cierto, serían los mares y océanos los que tendrían la mayor colección de restos de OVNIs. Obviamente su destino serían las profundidades. Esta es la razón por la que sólo se menciona 1 objeto caído en el Atlántico y otro en el Pacífico, ambos sobre embarcaciones (alemana y japonesa).

Un último dato sin sitio de caída conocido, completa el total de 154 casos.

Hay 93 esferas de diversos tamaños y pesos. Ocho de ellas vienen en una presentación con antenas (58.5% y 5.44% respectivamente). En 23 casos no se describe la forma del objeto, probablemente sean placas sin forma definida. Los casos que se indican como placas son 4. Si reunimos esos 19 con estos 4 tenemos un 15.65%. Los cilindros comprenden 21 casos. Las formas ovales son 4, pero supongo que en realidad se refieren a esferas. Hay 2 discos (nuevamente tal vez se trate de placas). Finalmente hay 1 casos de cada uno de los siguientes tipos: tetraedro, bolitas, clavos, cono, conector, cubo, válvula y varillas.

Los tamaños de las esferas van de 4 a 48 pulgadas (para las de origen americano), y de 9 centímetros a 140 (para las de origen soviético). Esta es una de las principales razones para apuntar un origen terrestre: las esferas están fabricadas usando el sistema métrico decimal o el sistema inglés.

Entre esferas y cilindros hay 30 con medidas desconocidas. Tenemos 13 esferas de 15 pulgadas, la medida más común (15.12%). Hay 9 de 24; 7 de 16; 5 de 32 y 36 pulgadas, cada una. Las esferas de 6, 20, 22 y 48 pulgadas son 3 (cada una). Se cuentan 2 de 4, 8 y 18 pulgadas, cada una. Y por último, con un solo ejemplar: 14, 23, 28, 33, 39 y 40 pulgadas.

En medidas decentes tenemos: la medida más común es de 40 centímetros (5 casos). Dos casos de 38 centímetros. Un por cabeza: 9, 15, 36, 37 y 140 centímetros, siendo este el mayor tamaño.

En las esferas los pesos se reparten de la siguiente forma:

hasta 25 Kg

2

2.33%

hasta 35 Kg

2

2.33%

hasta 3 Kg

3

3.49%

hasta 30 Kg

3

3.49%

hasta 5 Kg

4

4.65%

hasta 20 Kg

4

4.65%

más de 100 Kg

4

4.65%

hasta 10 Kg

7

8.14%

hasta 15 Kg

16

18.60%

sin datos

41

47.67%

Los cilindros muestran esta distribución:

hasta 50 Kg

1

4.76%

hasta 100 Kg

1

4.76%

hasta 5 Kg

2

9.52%

hasta 10 Kg

2

9.52%

más de 100 Kg

4

19.05%

desconocido

11

52.38%

Pero los datos no son significativos y no nos dan mayor información puesto que no sabemos cuanto de su materia se perdió al reingresar a la atmósfera.

La composición es más interesante. Eliminando el caso extraterrestre del Remio, hay 25 casos de restos construidos con aleaciones de titanio (17%); 4 con aleaciones de aluminio, 2 con plomo, y 1 caso con Acero y otro con una aleación de Cobre Estaño. Pero en la gran mayoría, 72 casos, se desconoce de qué están hechas.

En general los componentes hechos de aluminio o materiales con puntos de fusión similares no sobreviven las reentradas, mientras que las piezas hechas con materiales con altos puntos de fusión, como el acero inoxidable, titanio y vidrio, sí lo hacen.

Algunas de las esferas fabricadas con aluminio están relacionadas con cierto tipo de refrigeradores. Parte de la carcasa de los cohetes también se fabrica con este tipo de aleaciones, debido a su bajo peso.

Varias de las esferas y restos espaciales tienen grabados marcas, letras y números que denotan, indudablemente, un origen terrestre. Son total 20 este tipo de casos. Probablemente todas tengan, originalmente, este tipo de identificación, el cual se pudo haber perdido gracias a los efectos de la reentrada en la atmósfera.

Se han identificado sin lugar a dudas 98 casos (62 americanos y 36 soviéticos). El resto seguramente se identificará en el futuro.

Los tanques a presión del Agena D (construido por Lockheed) fueron usados con varios fines: a) para almacenar nitrógeno o freon (CFC) utilizado para orientar y posicionar los satélites, b) para almacenar helio para presurizar los tanques de combustible an su etapa Estas esferas tienen diferentes usos, desde cambiar o mover de orbita los satélites, hasta impulsar o ayudar a bombear el combustible de los cohetes. En su interior hay diversos gases (hidrógeno, helio, tetróxido de nitrógeno, etcétera), pero es el helio el más común. El helio a alta presión impulsa los propelentes hipergólicos desde los tanques hasta el inyector del motor. El proceso esta controlado por válvulas. Se almacena en tanques esféricos de doble pared: un tanque metálico y una chaqueta exterior. Entre estos dos se coloca un aislante aluminizado de mylar, y se genera un vacío para minimizar la transferencia de calor. El helio debe estar en condiciones supercríticas (una densidad de 8 veces la del helio a condiciones ambientales), a temperaturas criogénicas (-269 °C, 4 grados por arriba del cero absoluto), y a una presión de 14.7 psia. El recipiente tiene conductos de llenado y de vaciado, un disco de expulsión, y un intercambiador de calor interno helio/helio. Al cerrar la válvula de llenado e introducir gas helio, en esas condiciones, se alcanza el nivel supercrítico y el helio se vuelve líquido, aumentando su densidad (de vapor a líquido). Al final de la presurización la densidad del helio supercrítico es de aproximadamente 8.7 libras por pie cúbico y la presión final es de aproximadamente 178 psi.

El disco de expulsión evita una sobrepresurización en la esfera. Consiste de dos discos de expulsión en serie, con una válvula entre ambos, que abre a baja presión (150 psia) y se cierra cuando se excede esa presión. Los discos de expulsión son idénticos; se activan a presiones entre 1,881 y 1967 psia.

La forma en que se usaron en el programa Saturno Apolo la describe John Ducan en Internet.

Tenemos pues la solución al «enigma de los mini-OVNIs esféricos». Se trata de objetos manufacturados por el hombre. No obstante, dudo mucho que los ufólogos acepten este veredicto. Para ellos estas esferas seguirán siendo los «OVNIs boludos», porque ellos, los ufólogos, nunca dejarán de ser unos pelotudos.

¿Continuará?

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APÉNDICE 1

Summary of Recovered Reentry Debris

1. An unknown number of pieces of debris from a space object were reported to have fallen in South Africa in September 1960. May have resulted from unsuccessful attempt to launch an Atlas/Able.

2. An unknown number of rocket motor and propellant tank pieces were reported to have fallen in Cuba in November 1960. Believed to be sub-orbital debris from failure of a Thor booster used to launch the Transit-IIIA satellite on 30 November 1960.

3. In March and June 1962 eleven pieces of stainless steel skin (average mass 2.7 kg) and one sustainer rocket engine spherical pressure bottle (0.56 m diameter, mass 21.7 kg) were found in Brazil and South Africa. Identified as pieces from Atlas booster for Mercury MA-6 mission, launched 20 February 1962.

4. In July 1962 a spherical pressure vessel about 0.4 m in diameter was found near Porto Allegre, Brazil. Part of a U.S. Air Force test satellite.

5. In September 1962 a cylindrical metal piece (diameter 0.15 m, mass 9.5 kg) fell on a street intersection in Manitowoc, Wisconsin. Identified as part of Soviet Sputnik IV, launched 15 May 1960.

6. In October 1962 three pieces of stainless steel skin (average size 0.9 x 1.2 m) and one piece of aluminum with steel nut, bolt, and washer attached (about 5 x 5 cm, mass 0.22 kg) were found in the Ivory Coast and Upper Volta. Identified as pieces from Atlas booster for Mercury MA-8 mission, launched 3 October 1962.

7. In April and June 1963 two spherical pressure vessels were found near Broken Hill, New South Wales, Australia. Believed to be from U.S. Agena rocket stage used to launch U.S. Air Force test satellites on 14 December 1962 and 7 January 1963. Both rocket stages reentered from orbit in January 1963.

8. In May 1963 a piece of stainless steel skin (0.42 m², mass 2.7 kg) was found near Concordia, Argentina. Identified as part of the Atlas booster for Mercury MA-9 mission, launched 15 May 1963.

9. In May 1963 a piece 0.3 x 0.38 m was found about 200 km north of Pretoria, South Africa. Believed to be part of a Soviet spacecraft.

10. In March 1964 a metal spherical pressure vessel (mass 11 kg) fell near Belem, Brazil. Believed to be part of a DoD Agena rocket stage.

11. In March 1964 an undetermined number of fragments fell in British Columbia, Canada. Believed to be of Soviet origin.

12. In May 1964 a charred piece of electronic equipment (mass 79 kg) was found near La Fria, Venezuela. Identified as part of a DoD satellite launched 27 April 1964, which reentered 26 May 1964.

13. In December 1964 and January 1965 a metal sphere (diameter 0.84 m), an aluminum cylinder (4 x 1.5 m) and four fragments of a rocket nozzle were found in northern Argentina. Identified as pieces from a DoD Titan III booster stage, possibly from a Trans-stage launched 10 December 1964, which reentered 13 December 1964.

14. In January 1965 a piece of woven asbestos sheet was found in Malawi. Identity not confirmed.

15. In early 1965 an object having the appearance of a space fragment was reported washed ashore on Abaco Island in the Bahamas. Possibly from the Atlas-Mariner I booster which was destroyed by the range safety officer shortly after launch on 22 July 1962, and landed in the designated ocean impact area.

16. In June 1965 three pieces believed to be space fragments were found in the Madiya Pradesh and Kota districts of India. Believed to be pieces from a DoD Titan IIIC development test launched 18 June 1965.

17. In September 1965 a titanium sphere (diameter 0.5 m), called the Merkanooka ball, and was found in Australia. Identified as a tank used for drinking water in Gemini V spacecraft launched 21 August 1965, components of which reentered in late August 1965.

18. In December 1965 three metal spheres fell near Seville, Spain. Believed to have been parts from Soviet Luna 8 rocket stage, launched 3 December 1965, parts of which reentered on 5 and 6 December 1965.

19. In March 1966 a piece of plastic shroud (about 1.2 x 1.5 m) was found in Australia. Identified as part from Echo II, launched 25 January 1964, one part of which reentered 23 February 1966.

20. In April 1966 a helium pressure sphere (diameter 1 m, mass 113.3 kg) was found by crew of Brazilian fishing boat at sea off coast of Brazil. Identified as part of S-IVB stage of Saturn booster sub-orbital test that was launched 26 February 1966, and landed in the designated ocean impact area.

21. In May 1966 a piece of lightweight metal (0.5 x 0.3 m), an oval-shaped metal piece (0.4 x 0.2 m), a black beehive-shaped piece (10 x 12 cm), and four pieces of fragile wire were found in the Rio Negro District of Brazil. Identified as parts of S-IVB stage of Saturn development test (SA-5) launched 29 January 1964, which reentered 30 April 1966.

22. In June 1966 a fragment believed to have returned from space was found in Colombia. Identified as part of Atlas booster used to launch Agena target vehicle either for Gemini 8 or Gemini 9A (launched 16 March and 1 June 1966). Probably from Gemini 9A target vehicle booster.

23. In July 1966 a piece of lightweight metal (4.7 x 2.6 m) and a piece of aluminum (3.3 x 5.1 m) were found in Peru and Zambia, respectively. In August and November 1966 a truncated cone metal piece (5.4 kg) and a smaller piece were found in Swaziland. Identified as pieces from S-IVB stage of Apollo-Saturn development test (AS-203) launched 5 July 1966.

24. In October 1966 a titanium spherical pressure vessel (diameter 0.37 m, mass 13.6 kg) was found near Tomahawk, Wisconsin. Identified as Soviet in origin.

25. In January 1967 a metal sphere (diameter 0.58 m, mass 15.8 kg) was found in Peru. Identified as part of Delta booster used to launch Biosatellite-1 on 14 December 1966.

26. In February 1967 two spherical pressure vessels were found in Mexico. One sphere was titanium with a diameter of 0.6 m and a mass of 30 kg; the other sphere had a diameter of 0.36 m. Believed to be Parts from the upper stage or experiments associated with a U.S. Air Force Titan IIIC.

27. In July 1967 a titanium sphere (diameter 0.6 m), a flat metal piece with bolts, and a titanium sphere (circumference 0.98 m) were found in Mexico. Identified as parts from Agena target vehicle launched 11 November 1966, in connection with Gemini XII mission.

28. In September 1967 a spherical pressure vessel (diameter 0.6 m) was found in Saudi Arabia. Identified as part of Delta booster used to launch Explorer 35 on 19 July 1967.

29. In December 1967 a metal piece (1 x 1.8 m, mass 10 kg) was found in Finland. Believed to be part of a Soviet vehicle.

30. In February 1968 a metal fragment (1 x 3 m, mass 57.5 kg) and in June 1970 a metal sphere (diameter 0.9 m) were found in Colombia. Identified as parts of lunar module descent stage used in Apollo V test mission, launched 22 January 1968.

31. In March 1968 a triangular cone-shaped piece (0.3 x 1.2 m, mass 10-15 kg) a metal disc (10-12 cm in diameter), and a small oval-shaped metal piece fell in the Gandaki Zone of Nepal. Believed to be of Soviet origin.

32. In April 1968 a metal sphere (diameter 0.6 m, mass 29 kg) was found near Mudgee, Australia. Identified as pressure vessel from Delta booster used to launch Biosatellite-II on 7 September 1967.

33. In April 1968 several pieces of plastic material in panel sections (0.23 x 0.23 m) were found in Angola. Identified as pieces of insulation from 3rd stage of Apollo VI booster, launched 4 April 1968.

34. In August 1968 a metal sphere (diameter 0.71 m, mass 20 kg) was found in eastern Colombia. Believed to be of U.S. origin.

35. In September 1968 a spherical pressure vessel (diameter 0.37 m, mass 14.5 kg) was found near Nome, Alaska. Identified as Soviet in origin.

36. In June 1969 numerous fragments (about 10 kg each) fell on a Japanese freighter off De Kastri Fort U.S.S.R. Pieces believed to be of Soviet origin.

37. In July 1969 a small fragment (about 30 cm long) fell on the deck of a German ship in the Atlantic Ocean. Other pieces fell in the water near the ship. Identified as debris from the first stage of the Saturn booster used to launch Apollo 11 on 16 July 1969.

38. In September 1969 a metal pressure sphere (diameter 0.38 m, mass 13.8 kg) was found near Ostersound, Sweden. Believed to be of Soviet origin.

39. In December 1969 a cylindrical piece (about 1 m in diameter) washed ashore hear Marie Galante, Martinique. Believed to be from the shroud of an Atlas booster that had been jettisoned in the designated ocean impact area.

40. In April 1970 a metal fragment was found in the West Cape area of South Africa. Believed to be part of Soviet spacecraft.

41. In July 1970 a spherical pressure vessel was found near Lai, Chad. Probably part of a Soviet vehicle.

42. In August 1970 five oblong pieces of steel (0.6-0.8 m long, mass about 70 kg each) and one flat steel plate (1.2 x 1.2 m, mass 290 kg) fell in Kansas, Texas, and Oklahoma. Identified as parts from Soviet Cosmos 316, launched 23 December 1969, which reentered 28 August 1970.

43. In March and April 1971 three spherical pressure vessels were found in North Dakota. Determined to be of U.S. origin.

44. In April 1972 four titanium pressure spheres (diameter 0.38 m, mass 13.6 kg each) were found in an area near Ashburton, New Zealand. A fifth sphere was found six years later near Eiffelton, New Zealand. Probably from Soviet Cosmos 482, launched 31 March 1972, part of which reentered 2 April 1972.

45. In January 1978 numerous fragments fell in the Northwest Territories of Canada. The debris consisted largely of rods (2 x 10 cm, average mass 55 g), and cylinders (10 x 40 cm, mass 3.6 kg) constructed mostly from beryllium. Identified as debris from Soviet Cosmos 954, launched 18 September 1977, which reentered 24 January 1978.

46. In June 1988 a titanium pressure sphere (diameter 0.37 m) was found in region of Marble Bar, Australia. Probably from Soviet Foton 4, launched 14 April 1988, reentered 28 April 1988.

47. In February 1991 numerous fragments fell on and around the town of Capitan Bermudez, Argentina. Identified as debris from Soviet Salyut 7/Cosmos 1686, launched 19 April 1982, which reentered 7 February 1991.

48. In December 1994 a metal plate (2.4 x 2.4 m, mass 20 kg) was found in Cosala, Mexico. Probably from Russian Cosmos 2267, launched 5 November 1993, which reentered 10 December 1994.

49. In January 1997 a steel propellant tank (1.7 x 2.7 m, mass 270 kg) landed near Georgetown, Texas. A titanium pressure sphere (diameter 0.58 m, mass 32 kg), and a composite combustion chamber (0.76 m long, average width 0.25 m) landed near Seguin, Texas. A lightweight fragment of charred woven material (10 x 13 cm) struck a woman in Turley, Oklahoma. She was not injured. Identified as debris from 2nd stage of Delta II booster, used to launch Midcourse Space Experiment on 24 April 1996. Stage reentered 22 January 1997.

50. In April 2000 a steel propellant tank (1.7 x 2.7 m, mass 270 kg), a titanium pressure sphere (diameter 0.58 m, mass 32 kg), and a composite combustion chamber (0.76 m long, average width 0.25 m) landed near Capetown, South Africa. Identified as debris from 2nd stage of Delta II booster, used to launch GPS IIA-25 on 28 March 1996. Stage reentered 27 April 2000.

51. In October 2000 a metal fragment (10 x 18 cm) was found near Wichita, Kansas. Probably part of 4th-stage casing from Russian Proton booster, used to launch three Glonass navigation satellites on 13 October 2000. The casing reentered on 14 October 2000.

52. In January 2001 a titanium rocket-motor casing (diameter 1.2 m, length 2 m, mass 70 kg) was found in Saudi Arabia, 240 km west of Riyadh. Identified as debris from 3rd stage of Delta II booster used to launch GPS IIA-20 on 13 May 1993. Stage reentered 14 January 2001.

53. In March 2002 a titanium pressure sphere struck a home in Kasambya, Uganda. No injuries were reported. Identified as debris from 3rd stage of Ariane 3 booster used to launch GStar 1 and Telecom 1B on 8 May 1985. Stage reentered 27 March 2002.

54. In August 2002 a large sphere (diameter ~0.5 m, mass ~10 kg) landed near the village of Manzau, Angola. Probably debris from 3rd stage of Ariane 4 booster used to launch Atlantic Bird 2 satellite on 25 Sep 2001. Stage reentered 11 August 2002.

Esfera en exhibición en el museo del Centro Espacial Johnson, en Texas.

Muchas naves espaciales soviéticas fueron diseñadas para que sus tripulantes pudieran regresar a la Tierra. La cápsula Vostok es un ejemplo. Esta se exhibe en un museo de Moscú.

Aviones espías de EU son confundidos con ovnis en Inglaterra

¿Es un pájaro? ¿Es una nave espacial? No, es un avión espía secreto de los EU

Los avistamientos de objetos voladores sobre Gran Bretaña preocupan al MoD

Las preguntas filtradas amenazan las relaciones con los EU

Por James Randerson

The Guardian

Es el sueño de los teóricos de la conspiración de Internet. Un avión secreto, hipersónico, espía de la guerra fría que supuestamente fue volado por los americanos en espacio aéreo británico sin el permiso del gobierno.

El gobierno británico derrumbó los artículos periodísticos sobre gente que reporta ver ovnis. Pero los documentos liberados bajo el Freedom of Information Act sugieren que el Ministerio de la Defensa tomó los rumores mucho más seriamente. Sus investigaciones incluso amenazaron filtrar la relación especial. «Muestran que estaban preocupados de que existieran estas cosas y los americanos estuvieran volándolas sobre el Reino Unido», dijo David Clarke, científico social de la universidad de Sheffield Hallam, quien obtuvo los documentos. «Ciertamente sugieren que el gobierno británico sospechaba que se les mantenía en la oscuridad».

Los Estados Unidos nunca han confirmado la existencia del avión misterioso, llamado Aurora, que supuestamente fue diseñado para volar furtivamente a muy alta velocidad sobre la Unión Soviética y para tomar fotos secretas para saber lo que estaba haciendo el enemigo. Se rumoreaba que era capaz de volar en hasta mach 8 y así podía alcanzar cualquier punto del planeta en menos de tres horas. Al principio de los años 90 hubo una cadena de supuestos avistamientos y extraños sonidos sobre Escocia los cuales fueron atribuidos a ovnis por los lugareños. Los rumores en la prensa de que el Aurora estaba operando secretamente fuera de la Royal Air Force Machrihanish en la punta de Kintyre incitaron a los MPs escoceses ha hacer preguntas en el parlamento.

Las pequeñas notas dadas al entonces Secretario de la defensa Tom King el 4 de marzo de 1992 muestran que los funcionarios daban crédito a la idea. «No hay conocimiento en el MoD de un programa «negro» de esta naturaleza, aunque no sorprendería a los principales oficiales en el personal del aire (Defence Intelligence Staff) si existió».

La respuesta sugerida por la pregunta de un P.M. era algo menos reveladora: «La existencia de cualquier proyecto (u operación) sería un asunto de las autoridades de los EU» Los americanos negaron todo, pero los informes siguieron llegando.

El testigo más creíble fue Chris Gibson, que tenía una experiencia de 12 años en el Royal Observer Corps y era un experto en el reconocimiento de aviones. Él vio un avión triangular flanqueado por dos cazas de los EU que era reaprovisionado de combustible en vuelo por un avión cisterna, mientras él trabajaba en el Galveston Key oilrig en 1989. El avión era diferente a cualquier cosa que hubiera visto antes. «No había precedente para esto», dijo. «Estoy completamente seguro de que era algo que yo nunca había visto». Él reportó el avistamiento al Jane’s Defence Weekly en 1992.

El 22 de diciembre de 1992, el agregado del aire de la embajada británica en Washington escribió al jefe auxiliar del Air Staff en Londres explicando la reacción de los EU a las preguntas del MoD incitadas por el avistamiento del Sr. Gibson. El Secretario de la Fuerza Aérea, el honorable Donald B Rice, dijo al menos que se había renovado la speculación, y sugería implícitamente que él había mentido al congreso indicando que no existió el Aurora.

«Como habrás visto, todo el asunto está causando considerable irritación dentro del HQ (US Air Force), y cualquier comentario que podamos hacer para desactivar la situación sería apreciado».

«La reacción espinosa de la gente que no cree sus negativas es bastante inusual», dijo Bill Sweetman, un experto en proyectos negros de los EU de la Jane’s Defence Review. «Generalmente no niegan las cosas realmente porque por lo regular no les lastima demasiado si alguien piensa que tienen cierto secreto».

Otra oleada de avistamientos sobre Devon, Cornwall, South Wales y Shropshire, el 31 de marzo de 1993, incitó otra investigación del MoD. Más tarde esto resultó ser un cohete ruso que re-entraba a la atmósfera, pero en ese entonces los investigadores del MoD sospecharon del Aurora. «Parecería haber cierta evidencia en esta ocasión de que un objeto no identificado (u objetos) de origen desconocido volaba sobre Gran Bretaña»¦ si hubo cierta actividad de origen americano que era conocida por un círculo limitado en el MoD y no se está reconociendo es difícil ir más lejos». El Sr. Sweetman sospecha que al final de la década el MoD sabía sobre Aurora. Otro documento del 2000 sobre las investigaciones del MoD de los avistamientos ovni -o los Fenómenos Aéreos No Identificados como prefieren llamarlos- establece que «algunos FANI se pueden atribuir a programas de aviones secretos».

La sección, que discute otros aviones secretos de los EU como el SR-71 Blackbird, contiene dos párrafos y dos ilustraciones que fueron censuradas antes de que fueran liberados el mes pasado. Los códigos al lado del material removido indican que fue suprimido en interés de las relaciones internacionales. «Ciertos ángulos de visión de estos vehículos pueden ser descritos como de forma de platillo», dice el documento.

http://www.guardian.co.uk/science/story/0,,1804926,00.html

Ladre si se cree esta historia

Por Andrea Lavigne

Victoria News

Varios animales fueron contactados pero no quisieron hacer comentarios.

Si necesita pruebas de que Lynn McKenzie puede comunicarse telepáticamente con los animales, le tendrá que preguntar a su perro.

«Si (la gente) dice «˜convénceme»™ entonces les diré, «™no es realmente lo que hago»™», explicó. «Realmente nunca intento convencer a ninguna persona. De esa forma no tengo conflictos».

La autodescrita intuitiva y empática hace una comunicación en vivo con los animales y enseña a otros cómo conectarse con el espíritu de su mascota. Sus talentos se extienden más allá de la tumba. McKenzie es buscada a menudo por clientes que esperan conectactar con su mascota muerta.

Gatos, perros, conejos, iguanas, e incluso peces -hay pocos con cuatro piernas, peludos y/o criaturas aladas McKenzie asegura que ha tenido conversaciones con ellos. ¿No le cree? Intente preguntarles usted mismo.

No es sorprendente, los escépticos no solicitan su servicio.

«Encontramos esta clase de cosas algo dudosa, a menos que veamos cierta evidencia creíble bajo circunstancias muy controladas», dijo Theo Meijer, director de los escépticos de B.C., una asociación de científicos, psicólogos y escépticos natos que investigan críticamente las demandas paranormales.

El residente de Sidney se describe como escéptico nato. A él no le asusta la idea de la comunicación con los animales aquí y en la vida futura, pero él desea simplemente la prueba. Su postura no lo hace popular.

«A la gente le molesta la crítica y los escépticos porque ella es como una cubetada de agua fría», dijo, agregando que la razón principal de que «funcione» es porque la gente quiere que funcione.

«La gente es muy afín a tratar de comunicarse con un perro muerto que haya sido muy querido. Así que hay este deseo de tener éxito de la persona que quiere comunicarse, lo que a menudo hace que ella crea que hubo éxito».

McKenzie, también residente de Sidney, dijo que ha sido bendecida con los clientes adecuados, o la gente «se abre» a la idea de comunicarse con los animales aquí en la tierra y en la vida futura.

«Mis clientes vienen sobre todo por recomendaciones, de palabra, de boca a boca, y no siento que seguirían conmigo si no se sintieran beneficiados».

Juzgando el número de visitas a su Web site, ella debe tener muy buena relación con algunos amantes de los animales. McKenzie conduce la mayoría de sus comunicaciones telepáticas vía telefónica y por Internet. Combinando las maravillas de la tecnología con las maravillas de su mente, ella se conecta con los dueños de animales domésticos por todo el mundo. Ella dijo que su base más grande de clientes (cerca del 75 por ciento) viene de los Estados Unidos -la tierra de la mente abierta, por lo menos en lo que se refiere a la comunicación con los animales. Los EU tienen varios animales y comunicadores psíquicos de gran renombre, incluyendo la antigua modelo Sonya Fitzpatrick, estrella del show de TV The Pet Psychic. McKenzie mismo ha grabado una serie piloto llamada AnimaLinks, ahora en preproducción.

«Cuando trabajo con un animal me conecto con su alma no con su cuerpo físico», explica McKenzie.

Antes de una conversación telefónica, el cliente debe enviar por mail la información personal de la mascota, así como una breve historia que incluya lesiones, cirugías, movimientos y cambios de familia. Durante la consulta telefónica, los animales no necesitan realmente usar el teléfono, de hecho ellos incluso no tienen que estar presentes.

Por $125, McKenzie se conecta hasta una media-hora antes de la llamada, y pasa 50 a 60 minutos al teléfono con el dueño. El animal habla con McKenzie de diversas maneras. De vez en cuando, ella oye una voz. Otras veces, el mensaje viene a través de símbolos, olores, o sensaciones.

Según los escépticos, los psíquicos y los intuitivos son solamente gente que pone mucha atención. Las técnicas populares incluyen lectura en frío -o las predicciones sobre una persona basada en género, edad, vestido, peinado y lenguaje corporal.

Barry Beyerstein, profesor de sicología en el laboratorio del comportamiento del cerebro en la universidad Simon Fraser, conduce lecturas frías como una forma de desenmascarar a los médium alrededor del misticismo.

«He ido a programas de radio donde he hecho lecturas para la gente que llama por teléfono y me han dicho que soy el mejor psíquico del negocio. Es absolutamente poderoso cuando se hace bien», dijo.

McKenzie misma asegura que cualquiera puede comunicarse con los animales.

Ahora de 46, ella se hizo comunicador animal profesional hace aproximadamente ocho años. El antiguo Realtor entrenado como sicoterapeuta espiritual en la Transformational Arts College en Toronto, en donde gastó más de «$60.000-$70.000 en su entrenamiento».

Ella admitió haber tenido algunas dudas al principio, dijo que una vez que su alma se comenzó a desarrollar llegó a ser extremadamente intuitiva, con la gente y los animales.

McKenzie comenzó a trabajar con la gente, pero fue su perro perdiguero, Jiggs, el que la convenció a diversificarse.

Testimoniales en su Web site señalan la capacidad de McKenzie de establecer claramente una enfermedad no determinada previamente en el animal -que fue confirmada más adelante por un veterinario: «Nuestros veterinarios e incluso el hospital de enseñanza veterinario en la universidad de Guelph tenían problemas en diagnosticar qué es lo que estaba físicamente mal en nuestro precioso perro Ocean. Cuando fuimos con Lynn para una lectura, ella sabía exactamente dónde teníamos que buscar -el duodeno. ¡Imagínese la sorpresa de nuestro veterinario cuando las pruebas mostraron ser exactas! Lynn pudo haber salvado la vida del Ocean«.

El negocio de comunicarse con los animales se puede considerar una diversión inofensiva, pero los escépticos advierten que hay un peligro en potencia.

«Si los amos consiguen cierto confort con esto, entonces es su dinero y pueden hacer lo que desean. Pero diagnosticar cosas en los animales que no pueden hablar por sí mismos, entonces ellos pudiesen no tener los tratamientos que necesitan, o podrían tener los tratamientos que no necesitan -es potencialmente un abuso del animal» dijo Beyerstein.

McKenzie divide su tiempo entre las lecturas personales y los talleres que dirige para la gente que desea aprender las técnicas de comunicación animal.

http://www.saanichnews.com/portals-code/list.cgi?paper=28&cat=46&id=675395&more=