Archivo de la categoría: Extraterrestres

Los extraterrestres han muerto. Tomo 1

LOS EXTRATERRESTRES HAN MUERTO. TOMO I

LosExtraterrestresHanMuerto1El mito ovni-ET, contactismo y abducciones

Rodrigo Bravo Garrido

Editorial Digital, Chile, 2017

Un ensayo de 321 páginas donde se busca demostrar una arriesgada tesis: los extraterrestres («alientes», en la jerga del autor) como mito van en decadencia y, de hecho, ya murieron. Desde 7 dólares en Amazon.

Hay empresas difíciles de acometer. La de escribir un libro es una de ellas, especialmente cuando el germen de ese proyecto es el intento de comprobar una tesis arriesgada y ambiciosa. Estamos ante uno de esos casos. El piloto militar Rodrigo Bravo, uno de los personajes más destacados y sobresalientes de la fauna ufológica chilena, hace un esfuerzo destacable por demostrar que los extraterrestres han muerto. En su entusiasmo llega incluso a comparar su titánica labor con las famosas premisas de Michael Foucault y Friedrich Nietzsche, quienes (supuestamente) declararon muertos al hombre y a Dios. Pues Bravo llega a completar las sentencias con la declaración de deceso de los extraterrestres. Una tríada inesperada.

Lo interesante es el esfuerzo, por momentos bien encaminado y por otros fallido, de dar viabilidad al concepto. Bravo se esmera, y si bien a nivel general consigue su objetivo, en el camino van quedando desnudas deficiencias argumentativas y, muy especialmente, en la forma de presentar las ideas. A veces farragosa, otras difícil de seguir, el uso de palabras fuera de contexto o cuyo significado original se confunde, hace que el viaje por el libro sea un trabajo, por momentos, duro. Asimismo, la estructura, claramente definida sobre la base de la división «mito ovni-ET», «contactismo» y «abducciones», merece un ordenamiento más formal dentro de la obra, que en términos de presentación carece de una guía clara.

Hay otros aspectos que vale la pena reseñar, porque son importantes en la configuración de cualquier texto. Primero, extraña el uso que se da en «Los extraterrestres han muerto» a los pies de página, que son utilizados más como apéndice biográfico que como complemento o para añadir otras referencias bibliográficas. También hay desprolijidad en la edición, especialmente en los nombres de las personas (Robert Sheaffer acá es «Robert Scheaffer«, nunca queda claro si David Jacobs se apellida «Jacob» o «Jacobs»), con información sobre autores (se atribuye a Michel Monnerie un libro de Thierry Pinvidic).

Ese tipo de detalles, mucho más numerosos (¿por qué los nombres de los libros que se citan están todos en inglés, si muchos de ellos tienen traducción al español?, ¿por qué no se pusieron las obras más recientes en las biografías de los autores reseñados a pie de página?), se ven acompañados de frases donde cuesta discernir cuál es la idea de fondo. Esto, que es tanto responsabilidad del autor como del editor, habla de un trabajo que fue sacado crudo del horno. Parece evidente que un par de meses más de darle vueltas a las ideas, de revisar los textos con mayor acuciosidad y profundizar en propuestas que son muy interesantes y que merecen un planteamiento más ordenado, habrían hecho un enorme favor a un libro que no necesitaba salir en la fecha que salió, y que bien pudo esperar un poco más para estar en su justa cocción.

No quiero que quede la sensación de que estamos ante un bodrio, porque eso es falso y está completamente alejado de la realidad. Si hacemos estas precisiones es justamente porque el libro de Bravo es un aporte en el contexto de la ufología chilena, y entra de por sí en el listado de los 10 libros imprescindibles escritos en ese país de Sudamérica. Lo que citábamos arriba son los aspectos que, sin demora ni discusión, deberían mejorarse. Y lo bueno es que se trata de errores corregibles, a diferencia de los problemas de fondo que lucen otras obras. De seguro una segunda edición de «Los extraterrestres han muerto» lucirá más pulida y eso irá en directo beneficio del lector. Es incluso muy probable que al momento de que usted lea este comentario, muchos de los detalles arriba mencionados sean parte del pasado.

Sobre el contenido por cierto puede discutirse, pero eso ya es parte de lo interesante de la propuesta de Bravo: que ofrece una mirada honesta y «revolucionaria», en el marco de lo que nos acostumbró la ufología mediática chilena, del fenómeno que rodea al mito ovni y está dispuesto a combatir en el campo de las ideas.

Podremos entrar a debatir si realmente se puede atribuir solamente a Donald Keyhoe el traspaso de los platillos volantes al campo de lo «extraterrestre» y si el rol de Charles Fort en la configuración del mito es tan relevante como el autor señala. También es asunto de discusión si fue el libro de Carl Sagan «El mundo y sus demonios» el que dio un golpe de K.O. a las abducciones y, por extensión, si podemos atribuir a una sola persona la autoría o destrucción de fenómenos sociales complejos. Por ejemplo, ¿era la ciencia ficción tan relevante como para darle un rol fundamental en el crecimiento de la creencia en extraterrestres? Pero esa es la idea del libro: abrir campo al debate. Y cumple con ese rol. También está por verse si realmente, como sentencia el autor, los extraterrestres han muerto. Hay bastante material, entonces, para sentarse a la mesa a conversar. Punto a favor de Bravo.

Si vamos a analizar este libro en el marco de la ufología chilena, una que es cuasi analfabeta y cuyos principales popes sienten repulsa por la lectura y mucho más por la escritura, entonces sin ninguna duda estamos ante un aporte al debate sobre un asunto que, seamos honestos, en general los ufólogos no debaten. Para muchos de ellos la existencia de los extraterrestres, ya no como lejana posibilidad de vida en planetas remotos, sino como conductores y diseñadores de naves que recorren el espacio sideral para aterrizar en páramos de nuestro planeta, es algo que no merece disquisición alguna: es un hecho.

Así visto, claro, el libro de Bravo es un golpe en la cara. Uno bien dado, además. De hecho, para qué vamos a darnos más vueltas en el asunto: los mejores momentos del texto se dan cuando el autor arremete con sorna contra un grupo del que él también forma parte, el de los ufólogos, pero del que es capaz de alejarse para mirar con perspectiva su comportamiento de manada con numerosos (y fallidos) intentos de «machos alfa». Bravo sale de allí para mirar con más objetividad de la usual qué sucede en ese rebaño de cazadores de marcianos y eso convierte sus observaciones en material didáctico, incluso. Si Bravo hubiera profundizado más en esos aspectos, que son de utilidad para la elaboración de un marco explicativo de por qué la ufología es como es, tal vez el resultado de su trabajo habría sido mucho mejor de lo que es. Finalmente los ufólogos son parte esencial del entramado en torno al así llamado «fenómeno ovni», como el autor bien señala en su libro.

Sin duda hacen falta más libros como éste y menos como los de Cristián Riffo, Jorge Anfruns y Claudio Pastén (a los otros ufólogos y contactados no los mencionamos»¦ ni siquiera han escrito algo). Porque, con sus fallas y tropezones incluidos, más vale un Rodrigo Bravo en mano que 100 ufólogos de la tele volando.

Diego Zúñiga C.

Contacto con Koldas 23

EPÍLOGO

«Â¡VEN A LA TIERRA, VEN!»

Una invitación de Koldas

Cuando llegó la ruptura en nuestra comunicación con la Confederación, en la Base «Q» nos sentimos muy decepcionados. Casi sin interrupción, se nos habían enviado transmisiones regulares, al menos desde mi llegada en 1974. Nos acostumbramos a estos encuentros semanales, más tarde quincenales, con los ocupantes de la nave espacial de la Confederación y Epicotian. Estos contactos regulares de radio, transmisión-pensamiento y grabación se convirtieron en parte de nuestras vidas. Luego, sin previo aviso, llegó la ruptura.

¿Qué estaba pasando ahí afuera? ¿Por qué se estaban alejando? Cuando la Confederación no pudo pasar de su Universo al nuestro, como ocurrió durante casi cinco años, Epicot se encargó de mantenerse en contacto con nosotros. Durante esos días nunca hubo una verdadera ruptura en la comunicación, como la que habíamos experimentado durante casi seis meses desde el comienzo de este año.

Pero ahora sabemos que fue el gigante Sola Kananda, aquel siniestro cuerpo cósmico, el que había exigido atención indivisa a estos viajeros del universo. Entonces de repente regresaron, y llegaron en gran manera, con un escuadrón de once enormes naves espaciales con Valdar a cargo.

Sola Kananda se ha desintegrado misteriosamente en tres cuerpos más pequeños. Nuestro planeta Tierra aparentemente todavía sentirá las repercusiones y después de los efectos de su paso en el espacio.

Esta vez tuvimos un contacto electromagnético y sus voces vinieron del altavoz de nuestro grabador en la Base «Q», ya que fue abrazado por un haz invisible de su nave que flotaba por encima. ¡Una vez más estábamos en contacto! Se registró la transmisión de media hora que siguió. Terminó abruptamente con la llegada de un satélite hecho en la Tierra. Pero antes que nada oímos a Kashendo que había jugado un papel prominente en la historia temprana de esta base «Q». Como de costumbre hablaba con fluidez en su manera libre de preocupaciones. Pero primero escuchamos a un operador de radio estableciendo contacto con nosotros.

«Star Division Green, llamando a Base «˜Q»™!» Esto se repitió varias veces, luego se detuvo. Una nueva voz familiar salió del equipo.

«Saludos a mis amigos, este es Kashendo, les saludo desde esta nave Astrael Koldasiana. Confirmen que nos están recibiendo fuerte y claro. Estamos flotando en este momento a una altitud de 350 millas (560 km) por encima de su planeta. En la actualidad hay once naves koldasianas de la División Verde de la Estrella en una formación de espera, esta División ha sido asignada ahora a su sector del espacio.

«Me han dicho que ustedes, Edwin y Carl, con sus amigos están presentes esta noche… por favor acepten saludos a todos mis amigos del planeta Tierra, a mí y a todo el personal de esta estrella nave Astrael. Estoy pensando en los días en que su base tenía más miembros… parece que ahora son los únicos que han permanecido con nosotros. Bueno, es agradable saber que todavía hay gente como ustedes que confían y creen en nosotros».

«Mientras esperaba aquí, antes de hacer esta transmisión esta noche, se me ocurrió que ha pasado mucho tiempo desde que yo y mi tripulación tomamos parte en algo de esta naturaleza. Pero, parece que esto va a ser más regular en el futuro. ¿Recuerdan cuando yo, como comandante del satélite artificial Melchor, hice esas transmisiones a su planeta… pero esto parece que fue hace mucho tiempo, y las cosas han cambiado mucho desde entonces. Ahora comando una División de naves que visitarán su sistema solar regularmente».

«Mi escuadrón está basado en Epicot, que está en su Universo, y desde allí viajaremos hacia y desde su Luna. Aquí se está construyendo una nueva base, por lo que existe una fuerte posibilidad de que oigan y quizás vean más de nosotros en el futuro. Esperemos que así sea».

«Y ahora más noticias de mi planeta natal, extiendo saludos de mi familia y también de los otros que usted conoce tan bien. Ahora parece que hace mucho tiempo, cuando podía mirar hacia abajo en su planeta y admirar su belleza. Todavía tengo sus fotografías y esto me lleva a recordar los viejos tiempos cuando estaba en Melchor».

«Las luces en el centro de comunicación principal de esta nave están oscurecidas y miramos hacia abajo y hacia fuera sobre su Tierra. Podemos ver las estrellas en la distancia… es una vista hermosa. Deseo que ustedes pudieran compartir esta opinión con nosotros. Mientras les estoy hablando ahora, puedo ver dos naves Astrael aproximándose. Son naves de mando, una Byonniana, la otra Koldasiana. Reconocemos sus luces de identificación. Esto significa que ahora debo terminar. En breve estarán conectados con estas dos naves. Mientras estoy hablando, ambas naves se nos acercan majestuosamente. Ahora voy a decir adiós… ¡Hasta luego!»

Entonces Kashendo se había ido. Su entrega lisa e impecable de su transmisión nos recordó su estancia de 5 años en Australia, y donde posteriormente se casó con una australiana que regresó con él a Koldas. Da la impresión de que todavía usa mucho el inglés en casa. Su habilidad en inglés probablemente jugó un papel en su selección como comandante de las once naves en la División Verde Estrella.

Después de las últimas palabras de Kashendo hubo una pausa, entonces oímos otra voz que no podríamos equivocarnos por ninguna otra. Una voz ronca madura ahora provenía de nuestro altavoz. ¡El buen viejo Taylanz! Todos tenemos un punto blando en nuestros corazones para con él.

«Saludos a mis amigos… Soy Taylanz de la Flota Byronniana. Qué maravilloso es estar aquí una vez más sobrevolando el majestuoso planeta Tierra mientras que lentamente está volviendo debajo de nosotros mientras le seguimos en órbita. De mi personal y mi familia, también de la gente de Byronne y mis Superiores, les traigo los mejores deseos y les extiendo la mano de la amistad a todos ustedes – ¡nuestros amigos en la Tierra!»

«Es un gran placer hacer esta transmisión y estar en la compañía de tantas personas prominentes. Cuando miro a través de los puertos de visualización de esta nave Byronniana puedo ver las luces de identificación de los otras naves. Ellas son verdes para la Koldasiana, azules para la nave de mando de Valdar, y la nuestra es de color naranja. Es una vista impresionante, todos estos artefactos se ciernen en un cielo de azul profundo. Allá abajo están nuestros amigos muy queridos. Perdónenme si parezco un poco abrumado por esto. Siempre me pasa cuando vuelvo a hacer contacto con viejos amigos después de mucho tiempo. ¿Cómo están? Me pregunto… manteniéndose bien, espero».

«Cuando se presente la oportunidad, definitivamente haré el esfuerzo de contactarme de nuevo, pero desafortunadamente mi llegada no será anunciada, será pura oportunidad y espero que me perdonen si llega en las primeras horas de la mañana. Estoy seguro de que lo soportarán conmigo, ya que haremos viajes frecuentes a su planeta siguiendo la flota Koldasiana en sus viajes. Byronne también está participando en esta aventura ahora en su Universo. Haremos nuestra parte justa de patrullas en el sector que nos ha sido adjudicado, también participarán naves de Triaxula».

«La comandante Neola de Triaxula no podía estar con nosotros esta noche desgraciadamente. Es una mujer maravillosa, de verdad, la admiro mucho. Me han dicho que en breve ella se pondrá en contacto con ustedes. Pero no se sorprendan si ella aparece en persona… ella tiene el hábito de hacer esto… Como saben, ella es una maestra de la teleportación… ¡Ah, qué mujer espléndida que es!» Taylanz el Byronniano continuó. «Mi personal envía sus saludos a todos ustedes. Esta es una breve transmisión de esta noche, pero vamos a compensar esto en un futuro próximo, porque hay otros oradores previstos para el «˜haz»™ esta noche. De acuerdo a nuestro equipo esta transmisión es penetrante a través de su base y su grabadora está funcionando bien, así que adiós de nuevo, que el Divino vaya delante de ustedes hasta que podamos volver a encontrarnos en transmisión… Esto es Taylanz ahora terminando… por favor esperen al Comandante Valdar…»

Tuvimos tres transmisiones esa noche. Una de cada nave de comando. Valdar debe haber dejado a su escuadrón de once embarcaciones interplanetarias para encontrarse con la nave Byronniana en órbita alrededor de nuestra Luna, luego volviendo juntos a la posición de Kashendo. Encontramos calidad de primera clase en la recepción. Ninguna interferencia en absoluto. Deben haber perfeccionado su equipo o utilizado algún nuevo sistema, ya que todos sentimos que estaba a la par con la calidad FM local de reproducción de sonido. Cuando Taylanz terminó de hablar hubo una breve pausa, luego la voz de Valdar y su jovial personalidad detrás de ella entraron en nuestro salón a través del altavoz.

«Saludos, soy Valdar de la División Koldasiana Astrael. Saludos a todos… He estado escuchando las transmisiones de las otras dos naves que fueron transmitidas a su base. Me gusta añadir mis mejores deseos de esta nave. No es mucho lo que puedo añadir. Kashendo habló bien, expresó sus sentimientos muy elocuente y también nuestro querido Taylanz».

«Desde nuestro planeta Koldas, el planeta que nos has oído mencionar tan a menudo, el planeta que puede ser su planeta natal un día… les extendemos saludos. Les hemos llamado nuestros «˜amigos»™, y ustedes también, pero hay más… ¡Ustedes son realmente gente de la Confederación!… No puedo ser más explícito…»

Valdar continuó: «Mi personal me ha pedido que exprese sus sentimientos que son similares a los que acabo de expresar: están a mi alrededor en este momento, sentados en sus puestos y haciendo sus deberes, escudriñando los numerosos instrumentos que están iluminados, añadiendo a la iluminación tenue en el centro de control en esta nave.

«A medida que miro hacia fuera de esta nave, puedo ver once naves Koldasiana y la nave Byronniana invitada. Es una vista impresionante. Hicimos esta transmisión esta noche para renovar nuestra comunicación con ustedes después de un largo descanso. En nuestra próxima reunión voy a retransmitir un mensaje grabado de nuestro Superior de Koldas. Como esta es una transmisión bastante larga, voy a mantener esto para esa ocasión cuando tengamos más tiempo. Lamentablemente vamos a tener que cortar, ya que un satélite estadounidense que orbita esta región, pronto estará sobre nosotros y seguramente nos detectará a nosotros y a nuestro grupo de naves. Queremos evitar esto. No queremos llamar la atención sobre nuestra presencia por varias razones. Tendré que cambiar el tiempo de nuestra transmisión para la próxima ocasión para evitar este satélite. Tendré que marchar e instruir al escuadrón a dispersarse para evitar ser detectado. Se trata de un satélite de alta órbita que está programado para detectar cualquier cosa inusual. Todo lo que puedo decir ahora es adiós… 350 millas al oeste de nosotros este satélite se está acercando. Que el Divino les bendiga y les guíe hasta que nos volvamos a ver en dos semanas…»

Precisamente dos semanas después (el 22 de junio de 1983) la transmisión se produjo como se había prometido. (Esta era otra transmisión electromagnética) Fue Vax Noah quien se dirigió a nosotros. Esta fue la segunda vez que tuvimos el honor de estar en contacto directo con este distinguido Superior. La primera ocasión fue una transmisión de pensamiento con Edwin como el instrumento receptor. (Véase el capítulo 19). Esta vez su voz vino directamente desde nuestro altavoz. Reconocemos su cualidad vocal distintiva y sus connotaciones emocionales. Si usaba una «computadora de traducción», como lo hizo en la ocasión anterior, no pudimos detectar nada de sintético. Su voz sonaba como una voz humana normal con la habitual articulación y vocalización que uno esperaría.

Para transmitir estas cualidades adecuadamente al lector estamos buscando una forma de incluir los ejercicios de esta comunicación en algún tipo de forma registrada con este libro.

Vax Noah habló su camino en nuestros corazones. Con sinceridad se dirigió a todo nuestro planeta, así como a la Base «Q».

«Soy Vax Noah… Superior de Koldas Saludos Planeta Tierra. La razón de esta transmisión es para felicitarlos por la escritura de su libro, que he tenido el privilegio de leer muchos manuscritos (borradores) que han llegado a mano, a mí aquí en Koldas. Y muy recientemente también un libro que fue escrito por Cynthia Hind*. (*UFOS AFRICAN ENCOUNTERS, Cynthia Hind, Gemini Publ. Co. Zimbabwe)

Dentro de las páginas de este libro hay extractos y escritos que eventualmente asumo que entrarán en su libro. Suponiendo que los manuscritos que he leído entrarán en su libro, entonces sólo puedo dar mis bendiciones – no sólo de Koldas, sino de la gente de toda la Confederación…»

«Seguramente un libro de esta naturaleza promoverá la Confederación… nuestra propia existencia… ¡y nuestra presencia en su planeta!»

«Esta es la naturaleza de mi transmisión a ustedes, es de esto que me gustaría hablar, para asegurarles a todos ustedes en su base «˜Q»™, y a cualquiera con quien hablen, que estamos en existencia. Estamos todavía muy activos, no sólo en nuestro sector de espacio, sino también en el suyo y pretendemos serlo durante muchos eones de tiempo por venir, de esto pueden tranquilizar a sus amigos y sus familias».

«Hemos llegado al momento en que debemos decidir sobre lo que se debe hacer. Los Superiores de nuestros planetas han examinado cuidadosamente el planeta Tierra en muchas ocasiones. Se decidió que la Tierra debe decidir su propio futuro. No tenemos el derecho a intervenir de cualquier manera, hemos mantenido contacto con nuestros amigos en la Tierra, como son nuestros seguidores».

«No queremos en modo alguno socavar a los gobiernos y superiores de su planeta, son vuestros superiores y ellos hacen reglas y regulaciones para gobernar su Tierra y su planeta, es su derecho hacerlo porque saben lo que es mejor».

«En el pasado hemos negociado con ellos y nos hemos puesto en contacto con ellos muchas veces, y tenemos un acuerdo para no interferir de ninguna manera con sus políticas en su planeta. Por eso, leyendo el manuscrito de su libro, me doy cuenta de que mucho malentendido será traído a muchas personas en su planeta. Si estos se presentan en la forma en que supongo que será – entonces se logrará una mejor comprensión de nosotros».

«Sí, entonces ya no seremos la gente misteriosa de los cielos… sino seremos personas reales como ustedes mismos. Esto es lo que queremos – no mitos en el tiempo, aunque somos viajeros en el tiempo, nos gusta pensar que somos como ustedes en su planeta».

«En un futuro próximo, con el paso de Sola Kananda, su planeta pasará por una determinada región en el espacio en su viaje alrededor de su Sol. Esta región es un cinturón que Sola Kananda ha producido a través del espacio. Esto traerá cambios en su Tierra. Yo soy el único que les informará de eso… Esta es la razón por la que estoy haciendo esta transmisión. Muchos cambios probablemente tendrán lugar. Movimientos ambientales en su planeta hará que sus superiores y los científicos mirar espacio en una luz diferente ahora.

«Ya han alcanzado el escenario en el que han avanzado al espacio, su tecnología crecerá y pronto estarán en una frontera común con nosotros, será en un pie de igualdad que nos encontraremos, no en su planeta, sino en el espacio… Hemos visto venir esto, no en un futuro próximo, pero en el futuro, sus astronautas nos encontrarán en una frontera común… en el espacio, no en un futuro muy lejano. En igual terreno y allí vamos a hacer nuestra amistad. Cuando la Tierra haya conquistado más espacio, espacio limitado alrededor de ustedes, entonces nosotros podremos discutir los cambios que se pueden hacer».

«Serán estos astronautas, volviendo a su planeta de un viaje no muy lejano, que tendrán cuentos para contar de maravillosas máquinas voladoras y otras grandes cosas. Esto es cuando el amanecer de un nuevo día se acercará a su planeta, especialmente con los cambios medioambientales que entonces habrían tenido lugar en la Tierra, así que hay un cambio en el futuro y posiblemente el libro que usted ha escrito preparará el terreno… o aligerará lo malo para ser más fácilmente aceptable, en lugar de convertirse en un golpe impresionante en el momento».

«Â¡Ah, sí… somos reales! A medida que sus ferrys espaciales se transporten hacia y desde su planeta, el tiempo se acerca para esa reunión en el espacio, en donde no habrá límites, el entendimiento entre nosotros estará seguro de esto».

«Pero ustedes, nuestros amigos, nuestros hermanos y hermanas Koldasianos en el Planeta Tierra, queremos disculparnos de que no hemos sido tan regulares como en el pasado en contacto con ustedes. Hay grandes lagunas en nuestras transmisiones y contactos, pero los tiempos han cambiado, no sólo en su planeta, sino también dentro de la Confederación Nuestros deberes se han extendido mucho más allá de los límites de nuestros propios planetas, lo que significa que nuestros pilotos no han podido hacer las transmisiones frecuentes y los contactos a través de la vía de pensamiento a sus bases. No es que les hemos abandonado. Por la presión del tiempo y los deberes que nos llamaron a otra parte».

«Todos ustedes han sido programados y entrenados de muchas maneras. Esta formación continuará, ya que esto es todo por muy buena razón. Esto, estoy seguro de que entenderán Un día estaremos permanentemente juntos».

«Ahora tengo un mensaje, que espero que vaya con las páginas de su libro. Este es mi mensaje:

«Esperamos que la gente del planeta Tierra se encuentre con nosotros en una base común, en el espacio, aquí compartiremos nuestros secretos, aquí mostraremos a sus astronautas un modo de vida verdaderamente magnífico. Practicado a lo largo de los muchos ekon en la Confederación de los Doce Planetas. No sólo esto nos gusta compartir, sino que hay una gran cantidad de información que elevará su planeta a un nivel mucho más alto. Esto es nuestro regalo. Todo lo que pedimos es comprensión».

«Nosotros no vamos a intervenir (en sus asuntos). No vamos a criticar… No vamos a poner el pie en su planeta. Lo que le ofrecemos es tomar nuestro regalo a ustedes. Lo han logrado a través de los muchos ekons será suyo, gratis. Puede ser llevado a su planeta y puesto en práctica y hacer su planeta un planeta mejor. Sobre sus propias leyes, guiado por sus propios gobernantes y gobiernos».

«Sólo nos alegraría mucho ver que esto suceda, no queremos intervenir de ninguna manera, excepto extender la mano de amistad… como lo estoy haciendo ahora a toda la gente del planeta Tierra. Para ver el progreso, la felicidad y una mejor manera de vivir en su planeta para todas las diversas razas y colores de las personas… Esta es mi oración, esto es lo que pido. Nada más, nada a cambio. Porque nosotros de la Confederación no tenemos razón para desear su planeta, tenemos abundancia de todo, vida, minerales, riqueza, felicidad, gente, hijos, comida y todo lo que el Gran Divino nos da a nosotros. Puede estar en su planeta también… si aceptan un pequeño consejo y entienden, ese es mi mensaje, mis amigos de la base «˜Q»™».

«Siento que he dicho lo suficiente, no hay mucho más que decir, para resumir, es el amor y la luz que irradiamos a su planeta, patrullamos los campos magnéticos cerca de su planeta, no somos guardianes, es una parte de nuestra herencia estar aquí. Porque, mucho antes de que su planeta estuviera habitado, nuestros antepasados visitaron este mismo lugar… y estos campos magnéticos… Nos hemos encargado de continuar con lo que han hecho y con lo que intentaron lograr. Por lo tanto, para concluir esta transmisión – de Koldas y de toda su gente, mis delegados, el mando de la flota Astrael… que viaja a su planeta y muchos otros, todos les deseamos sinceramente el bien en los próximos años. Espero tener el privilegio de hacer otra transmisión de esta naturaleza al planeta Tierra y a su gente. Llevar las bases «˜Q»™ por todas partes, tenernos con nosotros, no les hemos abandonado. Vendremos cuando llegue el momento».

«Adiós, que el Divino les guíe y vaya delante, para que puedan cumplir con su tarea cotidiana».

«Yo soy Vax Noah… Salu kata katsu, adiós». (ESO ES EL MENSAJE A LA TIERRA).

NOTA – Este mensaje fue recibido electromagnéticamente por la anulación directa de los circuitos en un magnetófono estándar, usando un haz de energía de 12 voltios proyectado de la nave espacial por los Koldasianos.

Contacto con Koldas 22

NOTA

carlEl ensamble y organización final del material para este libro se retrasó por una circunstancia u otra completamente más allá de nuestro control. Hemos aprendido a aceptar estas cosas como señales y tratar de fluir con ellas.

Cerca del final de agosto de 1983 el editor recibió la siguiente carta interesante de Carl van Vlierden:

(Este es un extracto abreviado)

4 de agosto de 1983

Estimado Sr. Stevens,

Como se mencionó en mi carta de 14 de junio de 1983, hemos mantenido contactos con la Confederación. Creo que estas transmisiones son de cierta importancia, y he preparado un epílogo, que está incluido… Lo envío directamente a usted. Confío en que todavía hay tiempo para incluir este material en un Diálogo Cósmico. Aquí hay una copia de la grabación.

La transmisión final fue hecha por Vax Noah, el Superior de Koldas. La calidad de esta grabación es buena, y me pregunto si sería posible proporcionar una copia de esto con el libro. Tendrá que haber algún tipo de edición, y nuestros nombres deben ser sacados de la copia suministrada al público… Es posible que desee abreviar la dirección de Vax Noah que se ejecuta durante unos treinta minutos.

La grabación se adjunta con este paquete y se envía por correo registrado.

Suyo sinceramente,

J.Carl van Vlierden

* * *

Este fue un regalo espectacular, completamente inesperado hasta ahora, pero ofrecía una nueva oportunidad para probar algo diferente. Veríamos si había alguna manera de proporcionar una copia de la grabación del mensaje extraterrestre a la Tierra para su distribución con este libro.

Pero veamos ahora el epílogo proporcionado para este libro.