La Nave de los Locos No. 37

La Nave de los Locos No. 37

LaNave37 Luego de cuatro años sabáticos regresa la mejor revista de ovnis de Latinoamérica: La Nave de los Locos.

El tema principal de este su número 37 es el del fin da la ufología. No hace mucho que Mario Méndez Acosta, el director de la Sociedad Mexicana para la Investigación Escéptica, mencionaba que los ovnis habían dejado de interesar al público mexicano y que cada vez eran menos los que creían en ovnis. Con ligeras variantes parece que esta es la misma opinión que tienen Sergio Sánchez, Diego Zúñiga, John Rimmer y Jenny Randles, que escriben sobre el final de la ufología en este número de La Nave.

En su artículo «¿Clásicos? Clásicos eran los de antes», Diego escribe:

«La creatividad en torno a los ovnis ha tocado techo. Ya no hay nada nuevo «“y medianamente cuerdo- que agregar al tema. Esto no significa que el mito vaya a morir. Significa simplemente que ya está viejo, obsoleto y carente de posibilidades de crecer. Se expandió demasiado y demasiado rápido, sin pensar en el futuro. Ya están hechas todas las mezclas posibles, ya metimos en el mismo saco a los círculos de los campos de trigo, a pie grande, a la cara de Marte y las luces de los terremotos. El mito ovni, el fenómeno, toda la panoplia que rodea a este asunto, su literatura y sus centros de investigación, se estancaron»¦

«Parece que la magia se acabó, señores»¦

«La ufología sufre un momento de profunda decadencia, tanto en el número de aficionados dispuestos a sostener el tema como en la calidad de los testimonios. Lo primero es consecuencia directa de lo segundo: no hay casos que llamen la atención»¦

«En realidad, la ufología tal y como la conocíamos murió cuando fue incapaz de ofrecer nada nuevo ni sorprendente. La misma ufología se encargó de hacernos inmunes. Se volvió loca demasiado rápido y no se inmutó a la hora de notificarnos de su demencia».

No estamos de acuerdo con esto último. La ufología no se volvió loca demasiado rápido, la ufología nació loca. O como Randles escribe en «La ufología en el 2020»:

«La naturaleza humana decreta que la locura y el drama sobre los ovnis siempre imperen y llame más la atención que el sentido común».

En otro lugar comentábamos que los ufólogos son los menos capacitados para investigar ovnis. A un detective se le paga por descubrir al ladrón, al asesino. Su trabajo es resolver los casos. Los ufólogos actúan de manera distinta, son más reconocidos mientras más casos dejen sin resolver. Y no sólo eso, parece que su labor consiste en no resolver los casos sino en enmarañarlos más, en ocultar la verdad o en hacer que sea difícil alcanzarla. A esta misma conclusión llegó Rimmer cuando escribe:

«Por simplificar admitamos que la ufología es simplemente lo que hacen los ufólogos. Muchas personas estudian ufología seriamente y otras muchas personas serias estudian ufología (lo que no es necesariamente la misma cosa), pero eso no significa que la ufología sea un asunto serio. Los ufólogos nos dirán que su trabajo consiste en «explicar» informes sobre ovnis. Sin embargo, en la práctica, el objetivo real es a menudo no explicarlos demasiado».

Algo no muy alejado de eso es lo que piensa Jenny Randles:

«Un asunto como la ufología busca respuestas pero sobrevive gracias a que falla en encontrarlas».

Cuando editábamos Perspectivas Ufológicas ya habíamos vislumbrado el fin de la ufología. Óscar García y el que escribe platicábamos sobre cómo, al paso de los años, los mitos se iban modificando. Ya en 1847 se vio el nacimiento del espiritismo, con las hermanas Fox. En 1947, justo cien años después, nacería la ufología, con los platillos voladores de Kenneth Arnold. En ese entonces tratábamos de adivinar qué nuevo mito aparecería en el futuro (no necesariamente en el 2047). De esta misma relación hablan el antropólogo social español Ignacio Cabria y John Rimmer, editor de Magonia. El primero dice:

«Mira, muchas veces comparo la ufología con el espiritismo como cosmovisiones de una época determinada. El espiritismo nació a mediados del siglo XIX y duró menos de cien años. A mediados del siglo XX surgieron con fuerza la parapsicología y la ufología para desbancar al espiritismo en el marco de creencias de la cultura occidental. Pues bien, creo que lo mismo vamos a ver con la ufología. Sus naves y sus extraterrestres nos parecerán dentro de veinte o cuarenta años, si vivimos para contarlo, como una cosa ingenua, igual que hoy vemos las mesas parlantes de los espiritistas. La ufología tal como la conocemos, no me cabe duda, es una afición en vías de extinción».

El segundo señala:

«Puede resultar muy reveladora una comparación con las investigaciones psíquicas. Los estudios psíquicos organizados, en la forma de instituciones como la Sociedad para las Investigaciones Psíquicas, tienen ya siglo y medio de vida, pero muy pocas cosas de valor que mostrar».

¿Este es el fin de la ufología? Lo dudamos, porque como dice Nacho Cabria, «Este «˜cáncer»™ no se abandona nunca de manera definitiva». A lo que Sergio Sánchez remata con «Mientras haya ufólogos, habrá ovnis».

ÍNDICE:

Editorial (D. Zúñiga)

De regreso en Ovnilandia (Sergio Sánchez)

¿Clásicos? Clásicos eran los de antes (D. Zúñiga)

Adiós a todo aquello (John Rimmer)

Notas editoriales al final (John Rimmer)

Círculos conocidos y triángulos por conocer (Manuel Borraz)

La ufología en el 2020 (Jenny Randles)

Ignacio Cabria: «La ufología es una afición en extinción» (Sergio Sánchez)

Una tarde con Luis Altamirano (Marcos González)

Cita atea en Argentina (Alejandro Borgo)

Una mirada a la «teoría reduccionista» de los OVNIS (Claude Maugé)

Auge y caída de una tarotista futbolera (Marcos González)

Willy Wolf: «Te digo que nunca he visto un ovni» (D. Zúñiga)

Argentina: Odisea del espacio psicoideo (Diego Viegas)

El terremoto de Chile y los OVNIS (Marcelo Moya)

Las profecías de «Primer Plano» (Crystian Sánchez)

Viaje a Venus en un plato volador – Parte 1 (Luis Ruiz Noguez)

¿Cómo piensan los ufólogos chilenos? (Rigoberto Muñoz)

Libros: Los ovnis. ¡Vaya timo! (Sergio Sánchez)

Libros: Un extraterrestre en La Moneda (D. Zúñiga)

Libros: Invasores (Sergio Sánchez)

Libros: Extraterrestres ante las cámaras (D. Zúñiga)

La Nave de los Locos, No. 37, Año 10, agosto de 2010. El valor de cada ejemplar es de 14 dólares. Si está interesado, puede visitar http://www.lanavedeloslocos.cl o el blog de La Nave, http://navelocos.blogspot.com Para adquirir su propio ejemplar y recibirlo en casa, por favor visite http://www.lulu.com/product/tapa-blanda/la-nave-de-los-locos-n%c2%b0-37/12107110

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