Contactados reticentes

Contactados reticentes

6 de abril de 2014

Publicado por Håkan Blomqvist

La imagen clásica del contactado ovni es la de un individuo bastante ingenuo que afirma tener contacto físico o telepático con extraterrestres y está absorto en difundir un mensaje espiritual de paz y amor, combinado con funestas advertencias de catástrofes venideras. Pero hay algunas raras excepciones a esta regla en la historia de los contactados. Una de ellas es el complicadísimo caso de contacto físico del rockero sueco Richard Höglund (1913-1977), que pasé muchos años investigando y documentando en Främlingar på vår jord. Ufokontakter i Sverige (Alienígenas en la Tierra. Contactos ovni en Suecia).Un resumen de este caso fue presentado por Timothy Good en su último libro Earth – An Alien Enterprise (capítulo once: The Overlords).

Blomqvist Främlingar på vår jord blGood Earth An Alien Enterprise blRichard Höglund era un contactado reacio. Durante su primera experiencia de contacto afirmó que sus riñones habían sido curados por un grupo de alienígenas y por ello, desde el principio, se sintió obligado a trabajar para ellos en varios planes internacionales. Richard viajó a sus bases en Bahamas y México durante su participación activa con el grupo alienígena entre 1965-1977. Pero difería del contactado ordinario en que dudaba mucho de sus verdaderos motivos y observó que su moral no era muy elevada. De hecho, Richard tenía miedo de estos alienígenas y no siempre creía lo que le decían. “No sé si son dioses o demonios”, le dijo una vez a su amigo Gösta Johansson. No se atrevía a dejar de trabajar para ellos y hacia el final de su vida le dijo a mi colega ufólogo Åke Franzén que tuviera cuidado con este grupo porque eran peligrosos. Independientemente de lo que le ocurriera a Richard Höglund, las pruebas circunstanciales indican claramente que estaba involucrado con algún grupo secreto, ya fuera una organización de espionaje, una mafia internacional o un grupo alienígena con base en la Tierra.

Richard Nassau blRichard Höglund en Nassau, Bahamas

Gösta1 blGösta Johansson con un dibujo del primer tipo de alienígenas encontrados por Richard Höglund

Bricka blSímbolos en una placa metálica entregada a Richard Höglund por los alienígenas

Otro contactado reacio es Enrique Castillo Rincón, de Costa Rica. Sus experiencias están documentadas en UFOs. A Great New Dawn for Humanity (1997). En el prefacio afirma: “No soy un místico ni un fanático religioso… Tampoco me he considerado un ‘elegido’ para salvar a la humanidad, y detesto a esos ‘contactados’ que pretenden haber sido designados por alguna divinidad para llevar algún mensaje a la sufrida y casi deshonrada raza humana… Han pasado más de veinte años y sigo sin saber por qué contactaron conmigo. ¿Fue simple casualidad? ¿Por qué a un individuo perteneciente a la ‘clase sandwich’ (clase media), como yo, se le asignó una tarea tan ‘ingrata’ como ésta, que ha significado burlas, calumnias, epítetos y apodos contra mi persona y mi dignidad?” (p.xiii-xiv)

Rincon  ufosblLas experiencias de Enrique Castillo Rincón difieren de las de Richard Höglund en que son básicamente de naturaleza positiva, pero Rincón sigue muy desconcertado sobre lo que significó todo aquello y quiénes eran realmente los extraterrestres. Uno de los capítulos de su libro se titula “Los venusinos, ¿son venusinos?” Como en el caso de Höglund, los contactos son muy físicos e incluyen el clásico tema de los extraterrestres entre nosotros. Enrique conoce a un hombre de negocios, Cyril Weiss, de nacionalidad suiza, y entablan amistad. Más tarde se encuentra con este hombre a bordo de un ovni, ya que en realidad pertenece a un grupo avanzado de extraterrestres que intenta ayudar a la Tierra. Enrique recibe esta información “Desde la antigüedad, hemos contactado con otros hombres, pertenecientes a diversas culturas. Hemos influido en su pensamiento a través de lo que ustedes llaman ‘Maestros’. Pero no sólo en este planeta, también en otros; hemos contribuido a su desarrollo científico, cultural y espiritual. Además, algunos de nosotros hemos ‘nacido’ aquí, o encarnado, si lo prefieren, desde tiempos remotos… No exploramos su planeta, porque tenemos bases aquí desde hace miles de años… Pertenecemos a una organización que presta asistencia al Planeta, y siempre hemos estado presentes”. (p. 59, 61, 63) Cualquiera que conozca la tradición esotérica representada por H. P. Blavatsky o Alice Bailey reconocerá de inmediato las ideas y la filosofía de los alienígenas. Enrique también es llevado a un retiro espiritual secreto en los Andes.

La organización mencionada por los extraterrestres trabaja como un grupo secreto de inteligencia en la Tierra. Enrique recibe claves secretas para identificar a los agentes de la organización, pero también como protección contra “la oposición”. Ya se trate de la “oposición” o de un verdadero grupo de inteligencia, en 1974 Enrique es contactado por tres individuos de aspecto extranjero que le ofrecen llevarlo a Washington D.C., con todos los gastos pagados, para una prueba de “hipnosis regresiva”. Acepta la invitación: “Fuera me esperaban dos hombres con un lujoso Cadillac de color oscuro. Empecé a sentirme como una estrella de una película de suspense”. (p. 113) Después de esta visita a Washington D.C. y del interrogatorio, Enrique tiene varias dudas: “¿Cuáles eran las verdaderas identidades de esos oscuros agentes que podían llevarme y devolverme a Bogotá, con arreglos hechos con una completa red de personas, todo tan bien coordinado? ¿Cuáles eran sus verdaderas motivaciones?” (p. 119) Compárese esta visita con el caso Olden Moore de 1957, documentado por el NICAP en The UFO Evidence o la afirmación más bien fantástica del psíquico Ingo Swann en su libro Penetration.

Swann Penetration blBasándome en mis experiencias en la investigación de contactados en Suecia, considero una posibilidad cierta que haya algún tipo de “extraterrestres” operando entre bastidores en este planeta. Considerar seriamente una “teoría de la conspiración” tan descabellada quizá no esté en consonancia con la corriente principal de la ufología científica, pero me preocupa más la verdad que mantener una fachada de respetabilidad. Si esta teoría es válida o no sólo puede ser respondida por una investigación más abierta de mente. Por último, Enrique Castillo Rincón dijo lo siguiente sobre sus experiencias de contacto: “Creo que soy el único contactado en el mundo que no tiene una misión que cumplir. Fui yo quien decidió en su momento contar al mundo lo que había sucedido… Me convertí en el investigador de mis propias experiencias y comparé las mías con las de otros contactados muy famosos y conocidos”. (p. 133)

https://ufoarchives.blogspot.com/2014/04/reluctant-contactees.html

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