Las fotografías Rhodes (50)

Las fotografías Rhodes (50)

Popular Astronomy, 1949, 193-194

1949-Popular-Astronomy-193-194Comunicaciones y comentarios

Bajo este encabezado publicaremos de tiempo en tiempo material que propiamente no cae bajo ninguno de los títulos establecidos en esta revista. Aquí, también, se podrá encontrar, cuando surja la ocasión, artículos que el editor puede no estar dispuesto a dar una sanción pero que, sin embargo, puede provocar pensamientos a lo largo de nuevas líneas.

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Un telescopio fotomultiplicador

¿Ha escuchado hablar de un telescopio fotomultiplicador? Es la invención de William A. Rhodes de Phoenix, Arizona, quien ha estado trabajando en la idea por alrededor de tres años. Él hizo todo el trabajo de construcción, que es toda una hazaña considerando que el telescopio completo pesa 1500 libras; y almacena un reflector de 12 pulgadas f.8.

El telescopio es complicado, pero puede explicarse en términos simples. Trabaja llevando la luz de objetos distantes a un telescopio ordinario con un reflector de vidrio, pero en lugar de ir a un ocular donde una persona a un tiempo puede ver la escena es transportada a una celda especial, partida en impulsos eléctricos y enviada por cable a través de un amplificador.

En el amplificador su fuerza es aumentada en muchas veces la original. Entonces los impulsos son enviados a través de un tubo, similar a un tubo de rayos catódicos donde son convertidos de nuevo a una imagen. Esta imagen es tomada por otros lentes y arrojada a una pantalla de un fotomultiplicador especial inventado por el Sr. Rhodes. Cuando la imagen emerge en el otro lado de esta ventana, ha sido aumentada hasta un brillo cegador. Este fotomultiplicador, es la clave del éxito del instrumento, y es una desviación radical de cualquier unidad existente. Tan radical en efecto que puede adaptarse fácilmente a la televisión y otras aplicaciones incontables donde son esenciales las reproducciones económicas y verdaderas. Esta unidad es de alrededor de cuatro pulgadas de diámetro y alrededor de un octavo de pulgada de gruesa, necesita poco equipo para operarse, es muy estable y puede tomar una imagen muy débil y aumentar su brillo miles de veces si es necesario. La imagen resultante es del mismo tamaño que la imagen que golpea la parte trasera del fotomultiplicador. Entonces un lente proyector ordinario la toma y emite la imagen final en una pantalla de 8 pulgadas donde puede ser vista directamente por grupo de personas.

El paisaje lunar viene con tal claridad que parece como si estuviera realmente saliendo de una pantalla de vidrio como un mapa de relieve de yeso, y cualquier cosa sobre la Luna a millas de distancia es claramente visible. Naturalmente la definición de la imagen puede ser mejor mientras nuestra atmósfera lo permita.

La amplificación puede ser presentada de tal forma que una sección transversal de 280 millas de la Luna puede ser vista por mil personas simultáneamente, y con extrema claridad. El instrumento no debe ser comparado con ningún telescopio de vidrio existente. El inventor dice que mientras puede producir una imagen de la Luna muchas veces más grande y brillante que lo que puede el telescopio gigante de Monte Palomar de 200 pulgadas, y probablemente una imagen más nítida debido a al pequeño haz de entrada, su sensibilidad decrece tan rápidamente con la distancia que el planeta Saturno está alrededor del límite de su rango de aplicación. Las estrellas de primera y algunas de segunda magnitud llegan como manchas brillantes en la pantalla, pero la radiación interna de la celda colectora, llamada corriente negra, coloca una barrera definitiva a los objetos más débiles. El inventor espera que investigación adicional mejorará esta condición. Sin embargo, esto no es mucho de un retroceso, ya que este mismo sistema amplificador puede ser usado en objetos mucho más débiles mientras se incremente el tamaño de espejo primario. El telescopio fotomultiplicador es principalmente un instrumento diseñado para traer los cielos a la vista de muchas personas al mismo tiempo en lugar de un intento de mejorar los estándares de los telescopios existentes. El factor limitante no es el telescopio sino la turbulencia de nuestra atmósfera. Los mejores telescopios que existen en este país y en otras partes del mundo pueden incrementar tremendamente su uso si la atmósfera dejara de temblar de repente.

Se cree que este instrumento es el primero de su tipo para permitir a grupos observar un cuerpo celeste al mismo tiempo.

William A. Rhodes, inventor.

Phoenix, Arizona, 1227 ½ E. Van Buren St.

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