Por $69 puede conseguir trezas del mortal producto químico industrial
Es uno de los venenos más mortales, una sustancia radiactiva cerca de 100 mil millones veces más mortale que el cianuro -y un sitio Web manejado por un físico y entusiasta de los platillos voladores ofrece venderte trazas de él por $69 y enviartelo vía el servicio postal de los E.U. o UPS.
Contrario a los priemeros informes de noticias, el polonium-210 -el veneno que se sospecha está involucrado en la muerte de un exespía ruso en Inglaterra- no es un material exótico solamente disponible de laboratorios nucleares. El isótopo está disponible de firmas que lo venden para aplicaciones legales y legítimas en la industria, tal como eliminar la electricidad estática de las maquinas y películas fotográficas.
Nature444, 587-591 (30 November 2006) | doi:10.1038/nature05357; Received 10 August 2006; Accepted 17 October 2006
Decodificando el antiguo calculador astronómico griego conocido como el Mecanismo de Antikythera
T. Freeth1,2, Y. Bitsakis3,5, X. Moussas3, J. H. Seiradakis4, A. Tselikas5, H. Mangou6, M. Zafeiropoulou6, R. Hadland7, D. Bate7, A. Ramsey7, M. Allen7, A. Crawley7, P. Hockley7, T. Malzbender8, D. Gelb8, W. Ambrisco9 and M. G. Edmunds1
El mecanismo de Antikythera es un dispositivo de engranes griego, construido alrededor del final del segundo siglo a.C. Se sabe que calculaba y exhibía información celeste, particularmente ciclos tales como las fases de la luna y un calendario luni-solar. Los calendarios eran importantes para las sociedades antiguas, para sincronizar la actividad agrícola y fijar las festividades religiosas. Los eclipses y los movimientos planetarios a menudo eran interpretados como presagios, mientras que la regularidad de los ciclos astronómicos debe haber sido filosóficamente atractiva en un mundo incierto y violento. Bautizado después de su descubrimiento en 1901, en un naufragio romano, el mecanismo de Antikythera es técnicamente más complejo que cualquier dispositivo conocido por lo menos un milenio más tarde. Sus funciones específicas siguen siendo controversiales porque sus engranajes y las inscripciones sobre sus caras son solamente fragmentarios. Aquí divulgamos imágenes superficiales y tomografías de rayos X de alta resolución de los fragmentos que han sobrevivido, permitiéndonos reconstruir la función de los engranes y duplicar el número de inscripciones descifradas. El mecanismo predice los eclipses lunares y solares en base de ciclos de progresiones aritméticas babilónicas. Las inscripciones apoyan sugerencias de exhibición mecánica de las posiciones planetarias, ahora perdidas. En el segundo siglo a.C., Hipparchos desarrolló una teoría para explicar las irregularidades del movimiento de la luna, a través del cielo, causadas por su órbita elíptica. Encontramos una aplicación mecánica de esta teoría en los engranes del mecanismo, revelando un grado inesperado de sofisticación técnica para ese período.
1. Cardiff University, School of Physics and Astronomy, Queens Buildings, The Parade, Cardiff CF24 3AA, UK
2. Images First Ltd, 10 Hereford Road, South Ealing, London W5 4SE, UK
3. National and Kapodistrian University of Athens, Department of Astrophysics, Astronomy and Mechanics, Panepistimiopolis, GR-15783, Zographos, Greece
4. Aristotle University of Thessaloniki, Department of Physics, Section of Astrophysics, Astronomy and Mechanics, GR-54124 Thessaloniki, Greece
5. Centre for History and Palaeography, National Bank of Greece Cultural Foundation, P. Skouze 3, GR-10560 Athens, Greece
6. National Archaeological Museum of Athens, 1 Tositsa Str., GR-10682 Athens, Greece
7. X-Tek Systems Ltd, Tring Business Centre, Icknield Way, Tring, Hertfordshire HP23 4JX, UK
8. Hewlett-Packard Laboratories, 1501 Page Mill Road, Palo Alto, California 94304, USA
9. Foxhollow Technologies Inc., 740 Bay Road, Redwood City, California 94063, USA
Correspondence to: M. G. Edmunds1 Correspondence and requests for materials should be addressed to M.G.E. (Email: mge@astro.cf.ac.uk).
Pocos ufólogos mexicanos saben que Adamski tuvo una vida social muy activa en la Ciudad de México. De hecho tenía el proyecto de establecer un Centro de Estudios Cósmicos en México, ya que Adamski consideraba estas tierras de suma importancia para las futuras relaciones interplanetarias.
Su relación con México se inicia en los tiempos de la Revolución Mexicana, cuando Adamski pertenecía al 13° Batallón de Caballería, que patrullaba la frontera con México durante esos días de violencia. Pero su primera visita al Distrito Federal ocurrió en 1954. Iba a dictar una conferencia en los salones de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, que su presidente, el licenciado Emilio Portes Gil ya había autorizado. Pero la conferencia fue cancelada.
La sede se cambió a un lugar ad-hoc: el Teatro de los Insurgentes (40 años después se daría un espectáculo similar en el teatro de Silvia Pinal, esta vez con otro charlatán: Jaime Maussán). El público abarrotó las localidades. Fue ahí en donde Adamski conseguiría sus primeros adeptos mexicanos: su amiga María Cristina V. de Rueda, el licenciado Héctor Enrique Espinosa y Cossio, el licenciado Ismael Diego Pérez, etc.
Luego, año tras año, Adamski regresaría a dictar conferencias en la casa de María Cristina, en la colonia Anzures, a la que llegaron a asistir los ya antes mencionados, así como el licenciado Pedro Ferriz Santacruz, el contactado Salvador Villanueva Medina y algunos miembros de lo que después sería el CIFEEEAC.
En su segunda visita a México, en diciembre de 1955, Adamski diría ante sus fanáticos seguidores:
«Deseo presentar algo que me interesa por encima de todo: Tengo 64 años, lo que es prácticamente ya toda una vida, y me precio de ser considerado en mi país, como un hombre honrado y de buena fe (sic) que ha merecido por eso, el respeto de sus vecinos y de quienes le conocen; por lo tanto creo tener el legítimo derecho a cuidar ese aspecto de mi vida que constituye mi única riqueza: mi crédito de hombre honrado y de buena fe. No he venido a México, como no he hecho viaje alguno con intención de proselitismo; respeto aquí, señores y señoras, lo que he dicho siempre. No intento convencer a nadie. Comprendo y respeto profundamente el que mis charlas desprendan sentimientos de escepticismo y de duda.
«No soy el único, ni soy el primero que ha visto platillos voladores, naves que surcan el espacio; ni soy el único, ni soy el primero que los ha visto aterrizar o posados en tierra, y principalmente, señoras y señores, ni soy el primero, ni mucho menos soy el único, que ha tenido oportunidad de ver, de conocer, de cambiar signos inteligibles con los seres semejantes a nosotros que ocupan estas naves del espacio.
«El señor Desmond Leslie, as y héroe de la aviación militar inglesa durante la guerra, ha escrito documentadamente las observaciones más interesantes. Quizá interese a esta distinguida audiencia saber que el señor Desmond Leslie, es sobrino cercano y persona que goza de toda confianza de su tío, el Primer Ministro Winston Churchill.
«Pues bien, el señor Desmond Leslie afirma algo que parece increíble e imposible: el haber observado fotografías oficiales, tomadas en ocasión de explosiones atómicas o nucleares, que en varias de ellas captadas por cámaras distintas, aparecía claramente, en dos ocasiones diferentes, la figura o forma de un platillo volador, observando los hongos atómicos, precisamente en medio de ellos, es decir, lo que consideramos físicamente imposible para ningún metal o producto conocido de la Tierra».
Como verá el lector que no asistió a esas conferencias dictadas por Adamski, no se perdió de nada interesante: la misma letanía de incongruencias que dicen nuestros ufólogos actuales.
Para terminar con la historia mexicana hay que apuntar que todos los libros y folletos de Adamski fueron traducidos al español por María Cristina V. de Rueda.
A MODO DE CONCLUSIÓN
Joseph Allen Hynek y Jacques Valle, en The Edge of Reality acusan a Adamski de ser un embaucador que se fabricaba todas las fotografías que podía.
El escritor y ufólogo París Flammonde afirmó que, en 1946, Adamski publicó una novela llamada Fronteras del Espacio, que ya contenía lo que posteriormente narraría en Los platillos volantes han aterrizado. Raymond Palmer (el inventor del mito de los ovnis) aseguró que esa obra se la había presentado Adamski 10 años antes, ¡con Jesucristo en el papel del venusino Orthon!
Es importante señalar para destacar el carácter puramente humano de las «revelaciones» de Adamski, que desde los años 30 había enunciado la filosofía llamada cósmica, desarrollada en sus libros fuera del contexto ufológico. Este detalle poco conocido fue puesto en evidencia por Frank Boitte.
Su libro Cosmic Philosophy, que fuera editado por su amiga y seguidora Alice K. Wells es una recopilación de sus escritos de los años 30. Es decir, las enseñanzas de los seres del espacio son anteriores al encuentro de Adamski con ellos.
Incluso sus obras, Los platillos voladores han aterrizado y Dentro de los platillos voladores, son adaptaciones de sus novelas de ciencia ficción, en donde Orthon había aparecido como la figura de Cristo. La descripción que hace de las montañas lunares, con nieve en sus cúspides, sus bosques, lagos, animales y bases lunares es la misma que publicó en Pioneers of Space, otra de sus novelas de ficción.
Es probable que la imagen del venusino haya sido extraída de otro cuento de ciencia ficción publicado en el número de septiembre de 1940 de la revista Science Fiction Stories. El cuento pertenece a Oscar J. Friend y lleva por título Kid from Mars. La descripción del personaje es la de un joven rubio que viste ropa cerrada hasta el cuello; las muñecas y los tobillos terminaban de la misma forma que el cuello y tenía un gran cinturón de color marrón. Pero Orthon y su vestimenta también nos recuerdan a Klaatu, el tripulante del platillo volador de El día que paralizaron la Tierra (The day the Earth Stood Still), que curiosamente vino a la Tierra a prevenirnos del uso de las armas nucleares, lo mismo que Orthon.
Las ideas de Adamski continúan difundiéndose en nuestros días en diversos boletines de sociedades ufológicas auspiciadas por el IGAP (International Get Acquaited Program) una sociedad fundada en 1959 por el propio Adamski, y por la George Adamski Fundation.
El contacto más famoso de la historia falleció el 23 de abril de 1965, a los 75 años de edad, de un ataque al corazón en un sanatorio de Takoma Park, en Mariland, y fue enterrado, gracias a sus antecedentes como militar y a sus relaciones con políticos de Washington, en el Cementerio Nacional de Arlington, en Washington, D. C. Nada tuvieron que ver sus historias de platillos.
En 1992 Óscar García descubrió que su tumba había sido utilizada por Juan José Benítez en sus novelas de los caballos troyanos, como el lugar en donde Benítez ubicaba la tumba del mayor.
REFERENCIAS
Adamski George & Leslie Desmond, Flying Saucers Have Landed, Werner Laurie, Londres, 1953 (232 páginas).
Adamski George, A challenge to Spiritual Leaders, edición del autor, Palomar Terraces, sin fecha, (4 pags.)
Adamski George, ¡Adamski responde!, en Contactos Extraterrestres, No. 72, Págs. 38-41 y 49, México, 3 de octubre de 1979.
Adamski George, Behind the Flying Saucers Mystery, Paperback Library, New York, 1961.
Adamski George, Demanda a los líderes espirituales de todo el mundo, edición privada, México, 1955 (5 páginas).
Adamski George, Cosmic Philosophy, USA, 1961.
Adamski George, Flying Saucers Farewell, Abelard-Schuman, New York, 1961 (190 páginas).
Adamski George, How to Know a Spaceman, if you see one, en Probe, Vol. 3, págs. 5-6, marzo-abril de 1966.
Adamski George, Inside the Space Ships, Abelard-Schuman, New York, 1955 (256 páginas).
Boitte Frank, Adamski, une mise au point nécessaire, en Inforespace, No. 10, págs. 12-19, Bélgica, 1973.
Boitte Frank, Adamski, une mise au point nécessaire, en Inforespace, No. 11, págs. 39-45, Bélgica, 1973.
Diego Pérez Ismael, ¿Son los platillos voladores una realidad?, Imprenta Didot, México, 1965.
Edwards Frank, Platillos volantes»¦ Aquí y ahora, Plaza & Janes, España, 1976.
Espinosa y Cossío Héctor Enrique, Enigma Interplanetario, Editora Ibero Mexicana, S. de R. L., México, 1956.
Good Timothy, Alien Base, Century Books, England, 1998.
Hallet Marc, Adamski and his believers, en UFO 1947-1997, editado por Hillary Evans y Dennis Stacy, J. Brown Publishers, Londres, 1997.
Un periódico italiano publicó esta fotografía en marzo de 1967, pero fue tomada sesenta años antes, en 1907, cerca de la ciudad noruega de Drobak. ¿Puede ver el objeto en forma de platillo en el cielo? La gente pensó que era un platillo volador. Pero ahora este objeto volador no identificado ha sido identificado. Los observadores de nubes opinan que es una nube, una altocumulus lenticularis. La pista es la montaña que se ve enfrente a lo lejos.
Las nubes se forman cuando el aire húmedo caliente se enfría y la humedad en el aire se condensa en agua. Cuando sopla el viento sobre una montaña el resultado puede ser una nube altocumulus lenticularis. La humedad en el viento se condensa cerca de la cumbre de la montaña porque ahí se enfría. Pero cuando el viento fluye hacia abajo del otro lado de la montaña, la humedad en la nube se calienta otra vez y se evapora. En medio, justo detrás de la cumbre, se forma una nube. Puede permanecer allí por horas, mientras dure el viento, personificando un ovni.
Ésa es la teoría. Y las nubes altocumulus lenticularis pueden parecer como ovnis «“ vea esta foto tomada desde un avión. ¡Por supuesto puede que sea un astuto platillo volador disfrazado de nube!
¿Cuántas de estas fotografías de altocumulus lenticularis en la red se ven como una fuerza de invasión de pequeños marcianitos verdes?
Si vives en alguna parte plana como los pantanos, podrías pasar la vida buscando lenticulares, pero no pierdas las esperanzas. Mira fuera de la ventana. Uno de estos días es probable que veas un POA – Plain Old Altocumulus. Las nubes Alto son nubes de nivel medio. No demasiado bajas, y no demasiado altas. Cuanto más alta es la nube, más pequeña parecerá. La brillante Cloudspotter Guide dice que puedes identificar un altocumulus estirando los brazos y midiendo la nube con tus dedos. Si es menor a tres dedos pero más grande que un dedo, probablemente es un altocumulus. El altocumulus en la fotografía de la derecha fue tomado en mi ventana ayer por la mañana. La próxima vez que salgas, ve cómo se miden las nubes. ¡La gente puede pensar que estas loco, pero por lo menos no crees que las nubes son ovnis!
Fractais não são feitos de pontos, retas ou planos. São feitos de objetos intermediários entre essas coisas e não possuem comprimento, área ou volume. Parece não ser intuitivo, mas os fractais são na verdade extraordinariamente comuns.
Em outras épocas, a presença destas marcas era atribuída a diversos agentes, tais como os relâmpagos, as formigas ou os caracóis. Para a mentalidade supersticiosa da Idade Média era obra do diabo, fadas ou «coisa de bruxas».
Fotografias de OVNIs sempre me fascinaram! Ficava imaginando os truques e artifícios que o fotógrafo usara. Dia destes, resolvi fabricar minhas próprias fotos.
Em meados dos anos 1970, um singelo camponês, José Carmen García Martínez, conseguiu colher acelgas, nabos, alfaces e outras verduras de enormes dimensões, em um tamanho realmente gigantesco.
O ceticismo mostra-se como uma espécie de retórica apaixonada pela própria retórica, isto é, pelo prazer de pensar: discute-se o mundo, suspeitando-se das concepções que o pretendam reger e, ao mesmo tempo, se discute a discussão em si.