El sexo extraterrestre puede ser de «otro mundo»
Por Nick Redfern
Diciembre 7, 2007
Dallas (TNA) – En algún momento, la mayoría de nosotros probablemente nos hemos jactado, con una cerveza fría en un sábado por la noche, que la caliente chica que nos clavamos la noche anterior era «fuera de este mundo».
Pero, ¿y si esa misma chica era realmente fuera de este mundo?
Así es: estamos hablando de hacer cosas sucias con ET.
Un gran número de chicos ya no se contentan con las mujeres de la Tierra, afirman haber tenido salvajes encuentros sexuales con nenas calientes espaciales del otro lado de la galaxia. Y las chicas, también, cada vez tienen más acción con extraterrestres.
Uno de los casos más famosos registrados se produjo en octubre de 1957. Antonio Villas Boas, de veintitrés años de edad, quien dijo haber sido llevado a bordo de un ovni, cuando estaba en su granja familiar en Brasil, una noche, tras lo cual fue presentado con una pequeña chica espacial desnuda, que dejó muy claro al sorprendido agricultor, lo que ella quería.
Sin embargo, en este encuentro no hubo tonterías del tipo «llévame con tu líder». No, sólo fue puro sexo, eso fue todo, dijo Villas Boas en una entrevista de 1962, la chica «gruñía como un perro». Hey, no puede haber nada mucho mejor que eso.
Después que terminó su encuentro cercano, Villas Boas, dijo: «Ella se volteó a mí, señaló su vientre, y sonriendo señaló el cielo».
Villas Boas se convirtió en un abogado respetado, y mantuvo su historia hasta su muerte en 1992.
Truman Bethurum, autor del libro «Aboard a Flying Saucer» (DeVorss & Co, 1954), afirmó que había tenido ratos apasionantes con una mujer extraterrestre llamada Aura Rhanes, que él describió como «lo mejor en curvas y belleza».
Sin embargo, la esposa Bethurum no estaba muy divertida, y rápidamente se divorció de él, evidentemente incapaz de competir con una mujer de encantos intergalácticos.
Y luego está la salvaje historia de Mary, una secretaria de 36 años de edad de una compañía de seguros de San Diego. Mary dijo que tuvo calientes relaciones sexuales con un varón y una hembra extraterrestres de un sistema estelar llamado Pléyades.
Dice Mary que todo comenzó en octubre de 2003, cuando regresaba a su hogar en Las Vegas, después de una noche de fiesta con sus amigos en Laughlin, Nevada.
«Yo conducía de regreso a casa, esto fue alrededor de la una de la mañana, y vi luces azules en mi retrovisor, que me parecieron de un coche de la policía a la distancia tras de mí», dijo. «Me salí a un lado de la carretera y esperé a que me alcanzara».
Sin embargo, como Mary supo pronto, las luces que vio no eran las de un carro de la policía.
«Yo seguía mirando en el espejo y cuando estaba a unos 200 pies de mí, esto se fue hasta el cielo, vino encima del coche, y luego me desmayé», dijo.
Según Mary, se despertó más tarde para encontrarse tirada en «el tipo de cama que usted encontraría en un hospital».
Sin embargo, este no era un hospital. Cuando ella lentamente recuperó sus sentidos, Mary pudo ver que estaba en una habitación en forma circular, luminosa, que tenía un diámetro de alrededor de 60 pies.
Una gran ventana a su izquierda le permitía a Mary tener una vista panorámica del cielo nocturno y se dio cuenta que estaba volando muy por encima de Sin City en nada menos que un ovni.
Entonces sucedió algo extraño: Mary sintió que una sensación de calma la envolvía y cambió rápidamente a un estado de alta excitación sexual. En ese momento se abrió una puerta de metal y entró un hombre alto, musculoso, con cabello rubio largo, acompañado de una rubia igualmente escultural, de grandes pechos.
Ambos estaban vestidos con «trajes plateados» de una sola pieza.
Mary trató de levantarse, pero descubrió que sus manos y pies estaban atados fuertemente por «esposas de plástico». Nadie puede acusar a ET de no saber cómo darle sazón al asunto.
«Ellos se acercaron y me dijeron que venían en una misión desde las Pléyades para estudiar la Tierra y, a continuación, el hombre comenzó a besarme», dijo Mary.
«La mujer tocó mis pechos y mi vagina. Yo había fantaseado en tener un trío, pero no en un ovni», añade Mary, con sorprendente conocimiento del asunto.
«El muchacho se subió sobre de mí y comenzó a tener relaciones sexuales conmigo, y la chica me besó en los labios y comenzó a jugar con mis tetas».
En una forma muy apropiada, Mary dice que se «vino como un cohete», y «lo siguiente que supe es que estaba de vuelta en el coche, a un lado de la carretera, a pocos kilómetros de Las Vegas».
Sin embargo, los compañeros de cama de Mary no estaban por ninguna parte. «Ãmalos y déjalos» parece ser el lema de ET.
A pesar de que Mary anhela repetir la experiencia, desde que se mudó a San Diego ha sido cruelmente rechazada por sus exóticos amantes. Parece que «lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas» no sólo se aplica a los terrícolas.
Así que, ¿Qué está pasando en la Tierra, o fuera de ella? Los ET sólo buscan conseguir un poco de acción de otro mundo, de un tipo claramente caliente, o ¿es otro tipo de cosa?
Una persona que puede saber la respuesta es C. L. Turnage, un investigador de ovnis y autor del libro «Sexual Encounters with Extraterrestrials» (Timeless Voyager Press, 2001).
Turnage, cuyo trabajo ha sido destacado en las páginas del Fort Worth Star Telegram, y en «Coast to Coast with Art Bell», dice: «He investigado centenares de casos de personas que tienen relaciones sexuales con extraterrestres. Estas historias llevan mucho tiempo, desde los primeros escritos registrados hasta el día de hoy. En la Biblia, en Génesis, se habla de cómo los gigantes del cielo bajaron a la Tierra, se relacionaron con mujeres y tuvieron niños con ellas».
En lo que respecta a los encuentros de estos últimos días, Turnage revela: «Yo entrevisté a un hombre hispano, a finales de sus cuarenta que denunció que fue secuestrado en su dormitorio por los extraterrestres en febrero de 1982. Lo llevaron a su nave espacial, que era una nave triangular grande, negra. Sólo había mujeres en ese país. Ellas son muy atractivas, y de 8 o 9 pies de alto».
Turnage añade que una de las extraterrestres, «que se presume que era la comandante de la nave», llevó al hombre a un «cuarto privado y tuvo relaciones sexuales con él», antes de votarlo de nuevo a su departamento de Fort Worth, Texas.
Parece que los sueños se hacen realidad, después de todo: no sólo llegar a tener relaciones sexuales con extraterrestres parecidas a Amazonas, sino que usted no tiene que comprometerse con ellas, e ¡incluso lo dejan en casa cuando termina la diversión!
Sin embargo, Turnage no cree que un poco de acción nocturna de tipo sexual sea la principal motivación de los extraterrestres.
Ella llega a la conclusión de que esto es sólo una faceta de un complejo experimento genético controlado por los ET, en el que nosotros estamos siendo utilizados y explotados como el equivalente de las ratas de laboratorio.
«Muchas de las mujeres describen que sus ovarios fueron llevados a bordo de ovnis, y a los hombres les tomaron esperma los extraterrestres. Tengo que creer que se están tomando para fines de hibridación. Algunas personas que han sido secuestradas han informado haber visto bebés y niños en los ovnis que parecen ser medio humanos y medio extraterrestres».
Y, ¿qué consejo puede tener Turnage para alguien que ha sufrido, o puede en el futuro experimentar sexo extraterrestre?
«No creo que la gente deba tener miedo, porque de todos modos no hay mucho que pueda hacer al respecto. No se puede ir al gobierno para pedir ayuda».
Verdaderamente cierto. Pero por lo menos tendrás una historia que contar a tus amigos.
http://www.thenaughtyamerican.com/2007/News/Sex/12/07/ET-Sex-Can-Be-Out-Of-This-World-885.html
jejeje es extraño pensar en aquellas situaciones y algo incomodo por que no habra algo mas que tener relaciones francamente me gustaria platicar con uno de ellos @s ya que son como nuestros hermanos mayores pero en fin me ofende algo que nos usen como ratas de laboratorio ya que somos animales racionales en evolucion…
aunque francamente seria estupendo una experiencia de esas no….. XD
yo tambien tengo sexo con una extraterrestre ,la tierra esta poblada por mestizos (hibridos)resultado de milenios de convivencia interplanetaria.