¿Qué es una casa encantada? ¿Fantasmas o Armadillos?

El equipo Peace River Ghost Tracker se ocupa de los sucesos en la casa de Fort Meade.

Por Anthony Anamelechi

Especial para The Ledger

Fort Meade – ¿Fantasmas o pisos chirriantes?

Depende a quién le preguntes.

Esta primavera Randy Wolpin, de 30 años, piensa que oyó pasos en su casa recientemente comprada, pero nadie estaba en casa.

Él y su novia pintaban la casa en Good Friday cuando la radio misteriosamente cambió a una estación evangelista.

«No estoy asustado, pero quiero estas cosas fuera de mi casa», dijo Wolpin.

Así que en una noche de un sábado de junio, el equipo Peace River Ghost Tracker investigó si la vieja casa de Reid en el 401 E. Broadway tenía residentes espectrales y vivos.

Después de un mes de estudiar horas de audio y vídeo registrados esa noche, los cazadores de fantasmas no han encontrado hasta ahora nada que sugiera la existencia de apariciones.

Pero todavía están buscando.

¿Búsqueda inútil?

Buscan inútilmente, dijo Joe Nickells, un escritor de ciencia para la revista Skeptical Inquirer.

«Son sólo tonterías», dijo Nickells, que es un escritor de ciencia que se especializa en investigaciones críticas de lo paranormal y las afirmaciones pseudocientíficas para la revista que dice que utiliza ciencia para dar información veraz sobre encuentros paranormales.

Nickells dice que hay miles de grupos como el Tracker team que engañan a la gente haciéndolos pensar que los fantasmas existen realmente. Él dijo que si los cazadores de fantasma sólo lo estuvieran haciendo por diversión estaría bien, pero están engañando al público americano.

Nickells dijo que él ha pasado 30 años investigando los eventos paranormales, viajando por el mundo para ver «si la ciencia ha perdido alguna cosa», por ejemplo un fantasma que pueda ser probado.

Otra persona que piensa que la búsqueda es ilusoria es Earlene Lash, un antiguo residente de tercera generación de Fort Meade. Su tía, Wilma McClellan Coulter, poseyó la casa por 10 años.

Lash dijo en una carta a The Ledger que anteriormente nunca hubo eventos paranormales «raros o extraños» en la casa.

Y si hubiera, dijo, «los adolescentes en una ciudad pequeña habrían ciertamente dispersado los rumores».

Jeanne Harpe, la hija de Coulter, dijo que la casa Reid fue construida a principios de los 1900s.

Reid, ministro de la North Alabama Conference of the Methodist Church South, dejó la casa a su hijo, Claude Reid, que vivió allí hasta su muerte en 1976.

El último Reid que poseyó la casa fue esposa de Claude Reid, Carrie B. Reid, que la vendió a McClellan a finales de los años 70 o principios de los 80, dijo Harpe.

Harpe y su marido compraron la casa de su madre en 1984 y la poseyeron por 20 años antes de venderla a una familia en Plant City.

En enero, esa familia vendió la casa a Wolpin, quien buscaba un hogar de vacaciones.

Wolpin, que dirigía un Smoothie King en Fort Lauderdale, compró la casa de Reid dos años después de verla.

Desde que compró la casa, dijo Wolpin, ha notado que suceden cosas extrañas después de que comenzó a quedarse en la casa: se oyen pasos en los cuartos vacíos de arriba, la radio cambia misteriosamente a una estación evangelista de Good Friday y las repisas para las tazas fueron derribadas.

Así que decidió encontrar información sobre lo paranormal. Mientras estába haciendo una investigación en Internet, tropezó con el Peace River Ghost Tracker team. Él los contactó por e-mail.

Caza fantasmas

El Peace River Ghost Tracker team está formado por cinco miembros, cada uno de ellos afirma haber tenido encuentros personales con lo paranormal: Scott Walker, Ellen «Sprout» Dvorak, Lori Chapman, Toni Ray y Tom Land.

Los caza fantasmas vinieron equipados de cuatro cámaras infrarrojas y dispositivos para medir la temperatura y lectores electromagnéticos.

Los cazadores dicen que generalmente hay caídas en la temperatura y cambios en las lecturas electromagnéticas cuando los espíritus están intentando manifestarse. Los cazadores registraron cuatro horas de audio y vídeo en cada uno de sus cuatro cámaras fotográficas, y Walker dijo que deben mirar cada cámara para ver la grabación completa – cerca de 16 horas.

En una entrevista telefónica esta semana, Dvorak dijo que no se ha encontrado hasta ahora nada después de mirar 13 horas de audio y vídeo.

«Lo que no significa nada», dijo Dvorak, «tú nunca sabes».

Dvorak dijo que el equipo debe examinar a fondo la grabación completa para determinar si fue documentada la actividad paranormal. Ella dijo que esto significa rebobinar y repasar la grabación una y otra vez hasta que encuentres un sonido, un susurro o aún alguien estornudando.

Ella dice que esto lo hacen para asegurar que no es un espíritu haciendo los sonidos.

Nickells dijo que los caza fantasmas en general no son científicos e intentan utilizar instrumentos científicos, tales como cámaras infrarrojas y medidores electromagnéticos, para decir que tienen evidencia de fantasmas.

«Estos instrumentos no están diseñados para detectar fantasmas», dijo Nickells riéndose. «Ningún fantasma ha sido probado por los científicos».

Nido de armadillos

Y Jeanne Harpe dijo que los únicos «sonidos extraños» que su familia oía siempre eran de armadillos.

Harpe dijo que la casa se asienta en pilares de ladrillo sobre la tierra y los armadillos se arrastran a menudo por debajo de la casa para hacer sus nidos allí.

Con excepción de eso, «nunca tuve ninguna experiencia con nada inusual», dijo Harpe.

El hijo de Harpe, Derek Harpe, tenía los mismos sentimientos.

«No hubo ninguna ocurrencia extraña en los 20 años que viví allí», dijo Derek Harpe, que es supervisor de reconstrucción para el condado de Polk.

Él se rió entre dientes de que su abuela Coulter dijo que quizás los Wolpins deberían checar el ático en busca de murciélagos, o por debajo de la casa por los armadillos si están oyendo cosas.

Jeanne Harpe dijo que es una casa vieja, así que cruje, y eso es quizá lo que oyeron.

Ella dijo que varios de sus parientes lejanos y residentes actuales la llamaron y dijeron que estaban trastornados por la investigación.

Harpe, que ahora vive en Bartow, dijo que se rió del incidente.

«Pienso que era histeria», Harpe se rió entre dientes.

Pero para los residentes como Lash, la investigación estaba lejos de ser divertida.

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http://www.theledger.com/article/20070805/NEWS/708050425/1004