Hays cobra vida con rumores del Bigfoot
Por Kim Skornogoski
Tribune
Hay un misterio en marcha – err … un Bigfoot – y si alguien iba a solucionarlo, sería Ruben Horseman.
El jefe de bomberos voluntarios se describe a sí mismo como snoop. Su teléfono suena regularmente cuando sus vecinos de Hays están tratando de solucionar una historia.
«Al principio hubo un poco de rumores», dijo. «Esa es la razón por la que nos ocupamos en ir y caminar por ahí y ver qué podíamos averiguar».
Varias personas habían visto unas extrañas y muy grandes huellas en la nieve y el lodo – algunas manchadas con sangre y cabello «“ alrededor de los terrenos del powwow donde los miembros de la tribu de Fort Belknap celebran sus bailes cada verano.
El mes pasado, armados con sólo una cámara, Horseman y dos amigos encabezaron valientemente una búsqueda a Mission Canyon, una milla al sur de Hays.
Lo que encontraron sorprendió incluso a estos rudos investigadores. En el extremo sur del cañón, fueron vistas unas 25 huellas en un tramo de 75 yardas. Las huellas parecían manos gigantes, con los dedos unas 4 pulgadas más largos que los de Horseman.
Otras huellas estaban esparcidas a lo largo de la pared del cañón. Una huella estaba rodeada por un mechón de cabello y sangre.
Luego Horseman y su equipo encontraron la evidencia más importante de todas «“ un coyote medio comido.
«Parecía que la criatura lo agarró por las patas delanteras y traseras y le dio un mordisco por la mitad», dice Horseman.
El resto de la historia se puede leer en http://www.greatfallstribune.com/apps/pbcs.dll/article?AID=/20080417/NEWS01/804170308, pero lo más destacado es:
Presionado por los periodistas del Tribune, Anthony Shambo dijo que el tramposo había sido su hermano, Reno Shambo, y que la intención había sido simplemente jugarle una broma a su joven hijo.
No hubo Bigfoot, todo fue una broma.