El misterio de las centellas (16)
Hace unos 50 años cuando estaba en nuestra casa con mi abuela, mis propios padres y hermanos, ocurrió una desagradable tormenta. No vimos los relámpagos, pero nuestra casa fue alcanzada por lo menos tres veces.
Cada vez que sucedía se rompían algunos focos y se estrellaban sobre nosotros. En uno de estas, mi abuela, que estaba apoyada contra una pared interior, recibido un golpe, que le dejó su brazo entumecido por varias horas.
Estábamos aterrados por el ruido y las lámparas destrozadas. Algunos aparatos que estaban conectados fueron destruidos y había marcas de quemaduras en los contactos eléctricos.
Después que terminó la tormenta, nuestro vecino nos dijo que vio bolas muy grandes saliendo de los rayos del cielo y que golpearon nuestra casa al menos tres veces.
Es posible que hayan sido cuatro golpes separados por un par de minutos. Fue una experiencia muy aterradora. Nunca he escuchado una historia similar, nunca han visto una centella, pero no me di cuenta de que las centellas son realmente un acontecimiento poco común.
Marilyn Venney
Detroit, MI, USA