El misterio de las centellas (27)
Fue alrededor de 1990 durante los meses de verano en Erin Mills-Mississauga. Se presentó una gran tormenta mientras yo montaba mi bicicleta.
Había muchos relámpagos y se comenzó a oscurecer muy rápido. Corrí a casa con un amigo tratando de llegar antes de que comenzara a llover. Ãbamos sobre la ciclopista lo que nos llevó por un pequeño barranco, justo después de iniciado el aguacero, cuando vi una gran bola blanca opaca que estaba flotando entre algunos árboles.
Nunca había visto nada parecido antes y llamó mi atención al instante. Estaba sobre la tierra a unos 5 pies y se desplazaba lentamente. La vi por no más de 3 o 4 segundos y luego, de repente, hubo un relámpago que pareció golpear a esta bola, inmediatamente seguido por un trueno terrible y ensordecedor que dejó zumbando mis oídos.
Déjenme decirles que yo estaba tan asustado por la fuerte explosión, que los últimos 500 metros hasta mi casa los hice como si mi bicicleta tuviera un turbo.
Alex
North York, Canada