Día mundial del escepticismo (20 de diciembre)

Finalmente dimos con Ezequiel Del Bianco (más bien, él dio con nosotros). Ezequiel es aquel «preguntón» ezeqbd, que sacó de quicio a las señoras Simondini, las «imbecilgadoras» de la vaca abducida en Puerto Gaboto.

Nos encontramos con la agradable sorpresa de que Ezequiel es un escéptico aguerrido que publica varios blogs, como el Proyecto Sandia o Alerta Pseudociencias. En éste último tiene una entrada dedicada al caso de Gaboto: Falsos análisis fotográficos de vaca abducida.

Nosotros teníamos interés en leer el comentario que hizo que las Simondini se enojaran y lo borraran, pero ya no fue posible. Ezequiel nos informa:

«No me guarde una copia del comentario que borraron, pero básicamente era lo mismo que el segundo comentario pero con menos argumentos y mas sarcasmo (fue imposible evitarlo de lo sorprendido que estaba)».

También nos enteramos de la propuesta de Ezequiel del Día mundial del escepticismo y contra el avance de las pseudociencias, que se celebrará mañana, 20 de diciembre, como un recuerdo del fallecimiento de Carl Sagan, el 20 de diciembre de 1996.

Marcianito que me abduces

Marcianito que me abduces

Marcianito que me abduces

amarga compañía.

Ya no me secuestres,

ni de noche ni de día.

Déjame ya solo,

Te lo pediría.

Marcianito que me abduces

amarga compañía.

Las horas que pasan,

las horas perdidas.

Con un hipnotista

las recordaría.

Marcianito que me abduces

amarga compañía.

No me pongas implantes,

de los que te guían.

Que aunque son chiquitos

sí me dolerían.

Marcianito que me abduces

amarga compañía.

Aléjate de mi lado.

Quita tu mano de la mía.

Y deja que descanse en los brazos

de Hopkins, Jacobs y Mack.

Marcianito que me abduces

amarga compañía.

Ya no me secuestres,

ni de noche ni de día.

déjame en paz y alegría,

con todos los ufólogos, Strieber y compañía.

Amen

Ángel de mi guarda

Ángel de mi guarda,

dulce compañía.

No me desampares,

ni de noche ni de día.

No me dejes solo,

que me perdería.

Ángel de mi guarda,

dulce compañía.

Las horas que pasan,

las horas del día.

Si tú estás conmigo

serán de alegría.

Ángel de mi guarda,

dulce compañía.

No me dejes solo,

Sé en todo mi guía.

sin ti soy chiquito

y me perdería

Ángel de mi guarda,

dulce compañía.

Ven siempre a mi lado.

Tu mano en la mía.

Hasta que descanse

en los brazos de Jesús, José y María.

Ángel de mi guarda,

dulce compañía.

No me desampares,

ni de noche ni de día,

hasta que me pongas, en paz y alegría,

con todos los santos, Jesús y María.

Virgen María

Madre de Dios

tuya es mi vida

reza por mí.

Santa Mónica bendita

bendice mi camita

que ya me voy a dormir.

Cuatro esquinitas, tiene mi cama,

cuatro angelitos, guardan mi alma.

Con Dios me acuesto

con Dios me levanto

con la gracia y favor

del Espíritu Santo.

Amen.