El misterio de las centellas (169)
Sí, es un recuerdo para toda la vida. Fui testigo de una centella cuando tenía diez años en Fort Wayne, Indiana. Recientemente he escrito mis memorias en prosa y quintillas y el siguiente es mi capítulo sobre las centellas.
¿Centellas? ¿Quién ha oído hablar de eso?
Sí, esta es una historia sobre las centellas. ¿Quién ha oído hablar de las centellas? Yo nunca lo escuché hasta después de ver una, que casi nos engulló, cuando tenía 9 o 10, y nunca más volví a ver otra. Siempre hemos tenido muchas lluvias y relámpagos en verano. Nunca hemos tenido ningún tornado y algunas personas dicen que es porque hay tres ríos rodean Fort Wayne, que nos protegen. No sé si es verdad. Los tres ríos son el río St. Marys y el río San Joseph y que se unen y forman el río Maumee. No sé por qué a ese río no se le llama el río Niño Jesús, ya que se forma de los otros dos ríos, José y María, pero el asunto es que no se llama así. Lo llamaron el Maumee. De todas formas, me estoy desviando de nuevo… Así, durante esta tormenta hubo grandes relámpagos y se apagaron las luces en la casa y escuchamos un terrible zumbido de tono bajo y gente afuera gritando para que saliéramos a ver. Había una gran bola de fuego rodando muy lentamente a lo largo de las líneas de energía viniendo hacia el poste de los transformadores en frente de nuestra casa, y detrás de la bola todos los alambres crepitaban con fuego y humo negro. Ahora, si quieres asustarte, entonces no puedes pedir nada mejor para hacerlo. Esa cosa era increíble y estuvo como a unos quince metros delante de nuestras narices. He visto muchas de esas películas novedosas con sonido digital y todo eso, pero no hay nada como una cosa real para asustarte. Si hubiera viajes en el tiempo me gustaría volver a ese día y ver la bola haciendo sus cosas de nuevo. Fue absolutamente increíble.
Una centella «rodando» a lo largo del cable… Suponga que nos hubiera quemado. Una gran bola de fuego, lo juro por su nombre, nos iba a engullir… luego vimos que se desvanecía.
Pero no desapareció. Llegó hasta el transformador, que estalló en mil pedazos, y luego se convirtió en humo. Y ese fue el final. Nada quedó por debajo del humo en el viento. Y la lluvia cayó a cántaros. No recuerdo cuánto tiempo tuvimos que usar velas antes de que el pueblo tuviera luz, ya que todos los cables se quemaron. No sé cómo se mantenía. ¿De donde provenía su suministro de energía? ¿Creen que estaba aspirando la energía de esas líneas de alta tensión? Ahora que soy adulto he escuchado de otras personas que han visto la misma cosa pero no sé si los vieron también sólo en las líneas de energía. No las puedo imaginar solo rodando a lo largo del tejado del granero o rodando por el suelo. De todos modos, la bola fue como un relámpago, un eclipse total de Sol o alguna otra cosa, difícil de encontrar… si las ves una vez en tu vida son como un milagro. Vi un eclipse total de Sol hace unos años, pero se que nunca voy a volver a ver otro. Sucedió en Costa Rica, pero eso es otra historia que no voy a contar aquí.
Dick Burgoon
USA