El misterio de las centellas (388)
Hace unos años, mi esposo y yo dormíamos arriba, en nuestra vieja casa de madera, cuando cayó una tormenta eléctrica muy desagradable, y teníamos las ventanas abiertas (era la mitad del verano, y hacía mucho calor). Nos despertamos por una esfera del tamaño de una pelota de baloncesto, color azul, que giraba.
La «cosa» eléctrica zumbaba en el aire al final de nuestra cama. Sólo duró unos segundos – 5 o 6. Entonces explotó fuerte y desapareció.
No recuerdo ningún olor en particular, pero cuando daba vueltas en el aire, era claro que tenía un sonido de tipo eléctrico estallando y chisporroteando. Muy, muy aterrador.
Doreen
Homewood, IL USA