El misterio de las centellas (602)
Recuerdo vívidamente lo que sólo puedo describir como centella.
Hace aproximadamente quince años, yo estaba ayudando a mi madre en el jardín. Era mediodía y el clima había cambiado rápidamente de soleado a nublado. Recuerdo el olor de ozono, cuando comenzó a llover. Mi madre y yo decidimos entrar. Cuando llegué a cerrar la ventana del salón, claramente vi una esfera de luz muy brillante, de color naranja intenso, que poco a poco se fue ampliando y brilló como una cámara antes de estallar como una burbuja. Pude sentir cómo se erizaban los pelos de la nuca.
Patrick Carr
Glenrothes, Scotland, UK