¿La Teoría de la Conspiración es un engaño que salió bien?
Por Jesse Walker
17 de noviembre 2013
La Operación Mindfuck era una forma de arte libre de un proyecto-broma-político de protesta de los años sesenta y setenta, destinada a sembrar la cultura con paranoia. Las figuras claves detrás de ella eran Kerry Thornley, co-fundador de una religión satírica llamada Discordianismo, y Robert Anton Wilson, un Discordiano empleado en Playboy. A través de todos los medios disponibles, Wilson explicó en una nota el plan, los Mindfuckers intentaban «atribuir todos los desastres nacionales, asesinatos, o conspiraciones» a los Illuminati y otras manos ocultas.
Así que plantaron historias sobre los Illuminati en la prensa clandestina. Deslizaron anuncios misteriosos en la revista libertaria Innovator y en el periódico de la Nueva Izquierda rogerSPARK. Se preparó una carta sobre los Illuminati que Wilson luego sacó en «The Playboy Advisor». Cuando un jurado de Nueva Orleans se negó a condenar a uno de los hombres que el conspiracionista-cazador fiscal de distrito Jim Garrison culpó por el asesinato de JFK, el impulsor de Garrison Art Kunkin, de los Angeles Free Press, recibió una nota que revelaba que los miembros del jurado eran todos iniciados de los Illuminati. El signo revelador: Ninguno de ellos tenía un pezón izquierdo.
«¿Y si en realidad hay Illuminati?» Preguntó Wilson a Thornley una noche empañada por la mariguana en 1968. «Tal vez se enteren de nosotros y se enojen».
«Dudo de que existan», respondió Thornley. «Y si por casualidad sí, probablemente estarán muy felices de tener estúpidos como nosotros encubriéndolos mediante la difusión de teorías extrañas».
http://nymag.com/news/features/conspiracy-theories/operation-mindfuck/
Dossier Teorías de la conspiración New York magazine
Fantástico Robert, tú atrajiste a la diosa a los brazos de la gente