IMPACTO AMBIENTAL
El caso del nuncio pederasta fugitivo[1]
Juan José Morales
A una verdadera prueba de fuego se enfrenta el papa Francisco, quien desde el principio de su pontificado emitió duras declaraciones contra los abusos sexuales de los sacerdotes contra menores y anunció que lucharía contra esos actos de depravación, pero ahora se le acusa de encubrir y proteger a un prominente prelado acusado de pederastia en la República Dominicana y de quien se dice que huyó del país con documentos falsos, amparado por la Iglesia Católica, y se encuentra escondido en Roma o en El Vaticano.
Ante el escándalo, desatado a mediados de año, la Santa Sede guardó primero un discreto silencio, en tanto que la Conferencia Episcopal Dominicana negó las acusaciones, tildándolas «”como es habitual en estos casos»” de rumores propalados por «supuestos comunicadores profesionales de la intriga».
Ataviado con sus lujosos atuendos clericales y el báculo pastoral de obispo en la mano izquierda, monseñor Josef Wesolowski, entonces embajador del Vaticano en la República Dominicana y representante papal ante el clero dominicano, acaricia tiernamente a un niño. Aquello fue en sus días de gloria. Hoy es un fugitivo de la justicia, acusado de abuso sexual contra menores.
Las pruebas, empero, eran abrumadoras, y el propio rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra de la República Dominicana, monseñor Agripino Núñez Collado, reconoció que el ex nuncio «andaba en malos pasos». Por su parte, la procuraduría dijo tener abiertas cinco denuncias comprobadas por pederastia contra Wesolowski, entre ellas una relativa a un joven de 18 años que comenzó a tener relaciones sexuales con el nuncio desde los 14.
Entre otras cosas, se reveló que Wesolowski frecuentaba la zona colonial de Santo Domingo en busca de menores, a quienes pagaba cien pesos por hacerle sexo oral, y que fue identificado como cliente habitual de una casa de citas donde supuestamente tuvo relaciones sexuales con al menos siete menores de edad.
También, cierto individuo de nombre Francisco Javier Occis Reyes, actualmente en prisión por abuso sexual contra menores, declaró ser cómplice del nuncio, quien le pedía que le buscara muchachitos de entre 14 y 16 años, «si eran blanquitos mucho mejor». Occis, por cierto, fue entrevistado por un representante del Vaticano expresamente enviado por el papa para investigar el asunto.
Finalmente, ante la catarata de evidencias, el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, anunció que Wesolowski «ha sido apartado de sus funciones y la Santa Sede ha comenzado una investigación», aunque sin dar mayores datos. En su reemplazo, fue nombrado el arzobispo africano Jude Thaddeus Okolo, quien ocupaba la nunciatura del Vaticano en la República Centroafricana y Chad.
Mientras tanto, Wesolowski ya se había esfumado. Evidentemente salió del país, y evidentemente también, lo hizo con ayuda y protección de las máximas autoridades eclesiásticas. En México, en una entrevista radiofónica con la periodista Carmen Aristegui, el ex sacerdote Alberto Athié «”quien hace años colgó la sotana en protesta por la forma en que la Iglesia amparaba al jerarca legionario Marcial Maciel, otro famoso cura pederasta»” dijo que su fuga fue facilitada por El Vaticano, que le proporcionó documentos falsos y le brindó refugio al parecer en Roma.
Sea como sea, el hecho es que el ex nuncio no aparece, y por parte del Vaticano no se ha dicho una palabra en el sentido de que pudiere regresar a la República Dominicana para enfrentar los cargos en su contra. A este respecto, la procuradora Reynoso subrayó que «los hechos que se le atribuyen deben ser investigados y sancionados en el país y no en la Santa Sede», y el rector de la Universidad Pontificia, monseñor Agripino Núñez Collado, ha dicho que «no cabe duda que la Santa Sede le dará un castigo ejemplar».
Por eso decimos que para el papa Francisco esta es una verdadera prueba de fuego. Ya veremos en qué termina.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Martes 3 de diciembre de 2013