Reflejovni italiano

Otra reflexión, otro regalo. Bono: Curso para el reconocimiento de un Lens Flare.

imageImagen degradada de wikimedia.org del fenómeno de «lens flare» utilizada para fines educativos sin ánimo de lucro (Conv. Berna, artículo 10)

En un artículo anterior me había olvidado francamente (no sigo particularmente el sitio de CUFOM) de insertar una foto de la supuesta ovni «verdadero» (el «verdadero» no es el original). Un lector amablemente me lo indicó y luego la demanda popular…

Sin embargo, pensando un momento, la definición inestable de lo que es un ovni «verdadero» también es de risa.

Por definición un ovni es un objeto volador no identificado, o un ovi, es un objeto volador identificado.

No existen diversos grados de ovni, «verdadero», «regular» o «falso», se trata de un ovni o no.

El objeto en cuestión puede ser no «material» y no «volador» y ser el resultado de errores no deseados, a pesar que una capucha modesta (en la réflex SLR) minimizaría la aparición de estos pequeños enemigos de las fotografías: los lens flares.

Se manifiestan en las formas más extrañas, y por casualidad como la «medusa invertida» o como puntos o rayas, o hexagonos, u otras formas, como romboides.

La forma, la posición, el brillo y sus tamaños dependen de varios factores, tales como la exposición, la abertura, la longitud focal utilizada, el número de lentes al interior de la misma longitud focal y otros factores pequeños, tales como sensibilidad del CCD impuesta o el grado de incidencia de luz que los genera en la lente frontal de las lentes que haya instalado (o embebido) en la cámara, por ejemplo.

También puede utilizar los lens flares fácilmente de una manera creativa, domesticando estos demonios.

Y es normal encontrarlos todos los días (también en las fotografías que revelo en el laboratorio para los fotógrafos y/o clientes privados) muchos lens flares: básicamente donde hay alguna fuente de luz lo suficientemente fuerte como para generar el fenómeno… que en términos simples es un «rebote» de la luz al interno del focal que está utilizando.

Aquí hay una explicación excelente de la fenomenología.

(Y Google Translate puede ampliar sus horizontes linguisticos).

Así que seamos sinceros: el PhotoBuster no es realmente un tipo grande malo, que persigue a alguien. Pero cuando ese «alguien» sigue meneando el turrón sobre el argumento ovni, aumentando la dosis… y haciendo pasar como ovni un destello de lente «verdadero»… ¿qué tengo que hacer? Por supuesto señalar que no es cierto, y que los análisis del caso, fotográficamente hablando, son inexistentes. También porque los «verdaderos analistas» fotográficos… debería notarlo inmediatamente.

Desechar el caso.

Además de proteger su imagen.

Porque esto es de lo que hablamos.

Parece que debería arruinar y denigrar a la imagen de alguien cuando en realidad los fabricantes de estos casos son los que se burlan de sí mismos.

¿Es mi culpa si escriben artículos sobre esos casos falsos, los lectores me informan y yo los analizo?

No.

También nos reímos más, la sátira y la ironía, así como el derecho de réplica afortunadamente aún están protegidos por la Constitución italiana.

Deberían dejar de escribir sobre casos falsos.

En fin… aquí están las imágenes captadas de YouTube, porque como es habitual las pruebas (como las fotografías) no se muestran, excepto en un video, que todavía tiene una calidad para poder trazar los vectores (o para hablar simple: en este caso, las líneas), y luego encontrar la fuente del lens flare.

Y esto con el debido respeto a los que ocultan al público la evidencia de lo que dicen.

mare profumo di mare copiaCaptura de YouTube

La forma que vemos en la foto es particularmente fácil de rastrear: simplemente apuntando en la dirección opuesta a la «punta» del propio reflejo (y «punta» significa lo más afilado).

mare profumo di mare2Captura de YouTube

Dibujar una línea en PhotoShop requiere dos segundos, más que cualquier otra cosa para decidir qué tan grande la quieres hacer.

No necesita un «análisis»: sirve una verificación.

Línea de extensión clik, clik 4, hoy me siento bien, incluso invierto la imagen… 3 segundos clik clik y… verificación completada.

TOTAL: 9 segundos + 2 para reír. (2 no son punibles por ley, 3 sí) = 11 segundos (Sin embargo, los «expertos» habían «analizado» las imágenes un largo tiempo, equivocándose incluso trazando los vectores que incluyen el otro)

mare profumo di mare3Captura desde YouTube

El ovni «verdadero» es generado por una de las balizas del puerto. La forma, el tamaño y la cantidad de diferentes reflejos en la lente de la foto del artículo anterior se da por un detalle muy importante: el fotógrafo se ha movido, traslada la cámara (estaba tomando varias fotos, es absolutamente normal) y no notó el lens flare si no durante el control de la imagen en la pantalla. El movimiento ha modificado la incidencia de otras luces en el lente de la cámara, y se ha mantenido como uno. La «medusa».

He archivado muchos ovnis «verdaderos» (yo los llamo ovis:Lens Flare, por supuesto) tendría que explicar cuál es la diferencia entre ellos y el reflejo en la lente en el puerto, y sobre todo porque es diferente… y cómo se han tomado estos resultados del ovni «verdadero».

Porque esa es la diferencia.

Aquí los lectores pueden encontrar la manera de resaltar y encontrar la fuente del lens flare en sus fotos.

Le comunico incluso el cómo y el por qué de mis declaraciones, ellos no.

Pregúntese por qué, francamente, yo no soy un psiquiatra.

Soy un fototécnico, y eso está más allá de mi competencia.

http://photobuster.blogspot.mx/2012/03/altro-riflesso-altro-regalo-bonus-corso.html#more

Antídoto para la compra y coacción del voto

ESCRUTINIO

Antídoto para la compra y coacción del voto[1]

Juan José Morales

Cuando se acusa al PRI o a algún otro partido de practicar la compra de votos o coaccionar a los electores «”especialmente empleados públicos o personas en situación vulnerable»” para obligarlos a sufragar en su favor, a menudo se intenta desmentir tal imputación con el argumento de que el ciudadano entra a la casilla de votación solo y no hay manera de comprobar si efectivamente votó en la forma que se le había indicado o ejerció libremente su decisión.

clip_image001Además de las tradicionales despensas y regalos de todo tipo como los que usualmente reparte el PRI, y ahora también el Verde, hay muchas otras formas de presionar, coaccionar, amedrentar y amenazar a los votantes. Pero todo ello puede ser neutralizado en la casilla de votación de una manera muy sencilla, como se indica en estos comentarios.

Suponer que las cosas ocurren así es pecar de ingenuidad. En realidad los compradores de votos tienen muchas y muy diversas maneras de lograr su propósito. De ellas hemos hablado en otras ocasiones en esta columna. Por ejemplo, las promesas de regalos o pagos en efectivo a posteriori. Esto es, condicionadas a que el partido triunfe. Fresco está aún el recuerdo de las elecciones presidenciales de 2012 y las famosas tarjetas de Soriana, repartidas antes de la votación con la promesa de que serían activadas si triunfaba Peña Nieto y sus poseedores podrían de esa manera disponer de su importe para hacer compras. Peña Nieto ganó»¦ pero las tarjetas nunca fueron activadas.

Otro procedimiento de compra o coacción del voto es el de la boleta reciclable: alguien se presenta a votar en cuanto se abre la casilla, recibe la papeleta que le corresponde pero no la deposita sino se la guarda en la bolsa. Luego le es entregada, previamente marcada, a un votante, que debe depositarla y entregar en blanco la boleta que recibe de los funcionarios de casilla para probar que depositó la que se le había dado. La operación se repite una y otra vez a lo largo de la jornada.

Actualmente, con el auge de los teléfonos celulares, es común que se indique a los votantes marcar su boleta, fotografiarla antes de depositarla en la urna, y mostrar la fotografía como prueba de haber cumplido la orden.

Pero hay una manera muy simple «”que también hemos mencionado en ocasiones anteriores»” de neutralizar la compra y la coacción del voto: una vez marcada la boleta conforme a las indicaciones recibidas, y después de haberla fotografiado para constancia, basta cruzar los símbolos de otros partidos o rayarla totalmente antes de doblarla e introducirla en la urna.

Lo mismo puede hacerse en el caso de recibir una papeleta previamente marcada. Es decir, también cruzar otros símbolos o rayonearla. Una boleta así marcada, contará automáticamente como voto nulo, y los mapaches electorales resultarán chasqueados. Así, aunque al votante se le impida ejercer el sufragio de manera libre y secreta y se le obligue a votar contra su voluntad, al menos su voto no contará en favor de quienes recurren a la compra y la coacción.

Más todavía: si el elector quiere no sólo evitar que su voto sea mal utilizado, sino además ejercer realmente su derecho, puede llevar en el bolsillo un pequeño pedazo de acetato transparente, trazar en él una cruz, poner el acetato sobre la boleta de modo que la marca quede sobre el símbolo del partido por el cual se le quiere obligar a votar, y fotografiarla. Podrá así «probar» que cumplió la orden, y luego, tras retirar el acetato, marcar en la boleta el símbolo del partido de su preferencia.

En fin, hay antídotos contra quienes compran, presionan, amenazan o coaccionan a los votantes.

Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx


[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Martes 26 de mayo de 2015

El (no tan) extraño caso de las finanzas verdes

ESCRUTINIO

El (no tan) extraño caso de las finanzas verdes[1]

Juan José Morales

El llamado Partido Verde Ecologista de México «”que como ya vimos ni es partido ni mucho menos ecologista»” ha acumulado en los últimos meses mayor cantidad de sanciones y multas por graves violaciones a la ley electoral que todos los otros (verdaderos) partidos juntos. La más reciente fue por más de 329 millones de pesos, cantidad superior «”sin contar las anteriores»” al presupuesto para gasto ordinario del PVEM en este año, que es de 323 millones.

Pero, misteriosamente, mientras más multas se le imponen a ese seudopartido «”y en consecuencia mientras menos recursos debía tener»”, más dinero gasta en su avasalladora publicidad. Y, lógicamente, salta la pregunta obligada: ¿De dónde provienen esos inagotables fondos económicos? O, para utilizar la letra de aquella pegajosa canción de Chico Ché, ¿quién pompó esas cositas»¦ quién pompó vestidito»¦ quién pompó ese cochecito?

clip_image001La caricatura ilustra muy bien la similitud de prácticas del PRI y sus satélites, el llamado Partido Verde «”el negocio familiar de la familia González»” y el Panal, el desprendimiento priísta encabezado por Elba Esther Gordillo. La compra de votos y las violaciones a la ley que los tres organismos cometen, son tratadas con gran lenidad y complacencia por las autoridades electorales.

Evidentemente, el negocio familiar de El Niño Verde está recibiendo un financiamiento que a primera vista parece de oscuro origen, aunque cualquier persona medianamente inteligente pronto percibe que no es tan oscuro sino que tiene un marcado tinte tricolor y un intenso resplandor de pantalla televisiva.

En efecto, como hemos mencionado en esta columna, el Verde se ha convertido en el mascarón de proa del PRI «”o más bien de los grandes grupos de poder económico y político»” para captar los votos de electores que no sufragarían por el PRI ni el PAN. Pero esta engañosa publicidad oculta el hecho de que un voto por el Verde es en realidad un voto por el PRI, ya que ambos formaron una coalición. Y, como se sabe desde hace muchos años, a través del Verde se manejan las candidaturas de personajes ligados a las dos empresas del duopolio televisivo, Televisión Azteca y Televisa, principalmente esta última.

Que las televisoras están detrás de la publicidad del PVEM, lo prueba entre otras cosas el hecho de que, como señaló el senador Javier Corral, las facturas por sus anuncios en televisión suman sólo 100 millones de pesos, aunque de acuerdo con las tarifas que manejan las empresas «”y que le cobrarían a cualquier otro anunciante»” su costo real es de 918 millones. En otras palabras: las televisoras financiaron con más de 800 millones de pesos al Niño Verde y su negocio.

Por su parte, Francisco Gárate, representante del PAN ante el Consejo General del Instituto Nacional Electoral señaló que un anuncio televisado de 20 segundos en horario triple A, tiene un costo de medio millón de pesos. Pero Televisa y Televisión Azteca supuestamente se los cobraron al Verde»¦ ¡a 400 pesos! Repito: 400, no 400 mil ni 4 000, sino 400. Todo esto es una descarada simulación, una evidente violación a la ley, ya que implica aportaciones en especie no declaradas.

En fin, el cúmulo de violaciones a la Constitución y a la ley electoral por parte del llamado Partido Verde justifica la demanda de que se le cancele el registro. Y a este respecto, discrepo de la opinión de quienes dicen que la autoridad, o sea el INE, no debe hacer tal cosa sino dejar que sean los propios electores quienes con su voto castiguen a ese seudopartido. El problema estriba en que con su aplastante campaña publicitaria violatoria de la ley y con esa verdadera compra de votos a través de tarjetas de descuento, regalos de todo tipo y otros actos prohibidos, el Verde puede cosechar suficientes votos para conservar su registro. Permitir que compita en tales condiciones equivale a dejar que en una carrera de bicicletas con un jugoso premio, se permita correr a un competidor que haya puesto motor a la suya, a cambio de que pague una multa muchísimo menor que el monto del premio. En este caso, el premio es el gobierno, con todos los productivos negocios que desde ahí pueden hacerse.

Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx


[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Martes 19 de mayo de 2015