ESCRUTINIO
Tan claro (o turbio) como el petróleo[1]
Juan José Morales
Tras el reciente derribamiento del bombardero ruso Su-24 por la fuerza aérea de Turquía, so pretexto de que el aparato violó el espacio aéreo de este país durante»¦ ¡17 segundos!, se esconde un sucio negocio de tráfico de petróleo en el cual están implicados, por un lado, el llamado Estado Islámico, y por el otro Bilal Erdogan, hijo del presidente turco Recep Tayyip Erdogan, con la complicidad del gobierno de Estados Unidos, pese a que este último dice combatir al EI.
La foto, tomada por un avión de reconocimiento y divulgada por el alto mando ruso, muestra una pequeña parte de la gigantesca flota de miles de camiones cisterna usados por los terroristas del llamado Estado Islámico para transportar hacia Turquía petróleo robado en los campos de Irak y siria que tienen bajo su control. El tráfico se estuvo realizando impunemente durante años sin que Estados Unidos «”que dice combatir al EI»” interfiriera con él. La razón es que el comprador de ese petróleo robado es, según datos de diversas fuentes, el hijo del presidente turco.
El turbio maridaje había sido revelado desde antes del incidente por diversos medios de comunicación y por el propio presidente ruso, Vladimir Putin. Este último, en la reciente cumbre del G-20 celebrada precisamente en Turquía, mostró fotografías de inmensas columnas de camiones cisterna que se extendían por decenas de kilómetros hasta perderse en el horizonte, con los cuales los extremistas del EI transportan hacia Turquía, a través de Siria, petróleo robado en la propia Siria y en el vecino Irak, donde controlan extensas zonas productoras de petróleo. Era un verdadero oleoducto sobre ruedas, como lo calificó el jefe del Estado Mayor del Ejército ruso, Andréi Kartapólov. Y en Turquía, según denunció Gursel Tekin, miembro del Partido Socialista de este país, el petróleo es controlado por Bilal Erdogan, el hijo del presidente.
Turquía, como se sabe, es miembro de la OTAN y estrecho aliado de Estados Unidos «”incluso hay una gran base aérea norteamericana en Incirlik»” y apoya a grupos que tratan de derrocar al presidente de Siria. Esto explica por qué los aviones norteamericanos nunca atacaron los camiones cisterna del EI y durante años el tráfico de petróleo. Pero cuando la aviación rusa intervino contra éste, a solicitud del gobierno sirio, la situación cambió radicalmente y los camiones comenzaron a ser atacados y destruidos por centenares.
De esta manera se pudo golpear realmente a los terroristas islámicos, pues al impedir que sigan saqueando y vendiendo el petróleo de Irak y Siria, se les priva de recursos económicos con los cuales pueden adquirir armas, municiones y abastecimientos y financiar ataques en otros países.
Y, naturalmente, surge la pregunta obligada: ¿por qué Estados Unidos, que dice combatir al Estado Islámico, no hizo tal cosa antes. Como señaló el periodista español Pepe Escobar, los norteamericanos cuentan con satélites artificiales y un moderno sistema de inteligencia altamente tecnificado. No puede creerse que no hubieran podido detectar esas inmensas columnas de vehículos que transportan el petróleo, y que resultan claramente visibles en fotografías aéreas y espaciales.
Fue sólo después de que los rusos iniciaran sus incursiones contra los convoyes de camiones cisterna cuando Estados Unidos hizo algo semejante, aunque en escala mucho menor y más bien sólo «”como se dice en el lenguaje popular»” para tapar el ojo al macho y tratar de disimular su tolerancia y complicidad.
Desde luego, ni al vástago del presidente turco ni a su progenitor les gustó que los rusos interfirieran en el productivo negocio del petróleo robado, y el derribamiento del avión tiene a todas luces el carácter de represalia y de intento por entorpecer los ataques al EI.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Martes 1 de diciembre de 2015