IMPACTO AMBIENTAL
Tropelías legionarias contra el medio ambiente[1]
Juan José Morales
Varias veces hemos señalado en esta columna, la paradoja de que, siendo Cancún una ciudad que surgió de la selva, tiene apenas la tercera parte de áreas verdes por habitante que recomienda la Organización Mundial de la Salud. Ante tal realidad, cualquier institución medianamente responsable trataría de mejorar la situación.
Pero la Iglesia Católica «”particularmente la congregación de los Legionarios de Cristo, que ejerce una especie de monopolio eclesiástico en Quintana Roo»” actúa en dirección opuesta. Es decir, despojando a los habitantes de parques y jardines para edificar oratorios, capillas y finalmente templos en toda forma. Y lo que es peor, ello lo hace «”como también hemos señalado»” con la tolerancia, anuencia, encubrimiento y franca complicidad de las autoridades municipales y estatales, que ponen oídos sordos a las protestas y demandas de los vecinos así privados de espacios que debían servir para esparcimiento y recreación.
Capilla de San Juan de Dios, una de las muchas que los legionarios de Cristo han estado erigiendo en los parques de Cancún, destruyendo así áreas verdes y despojando a niños, jóvenes, ancianos de sitios de recreación y esparcimiento. Ninguna otra agrupación religiosa comete tales fechorías. Los fieles y sacerdotes de las demás religiones compran de su peculio los terrenos o edificios necesarios para sus templos y respetan las áreas verdes de propiedad pública.
Pero, en lo que puede convertirse en un caso emblemático y sentar un precedente para poner un alto a tales arbitrariedades clericales, un grupo de habitantes de la región 200 de Cancún, con apoyo de la asociación civil Ombligo Verde «”tenaz defensora del medio ambiente»”, ha ganado un juicio para recuperar la porción del parque de esa zona, de la cual la (nada) cristiana legión se adueñó para erigir la llamada capilla de San Pablo Apóstol.
La lucha legal fue larga y difícil. Se inició en 2011, y todo el tiempo hubo que enfrentar no sólo a los curas sino a las autoridades cómplices de ellos, que recurrían a toda clase de triquiñuelas para no cumplir las sentencias judiciales que favorecían a los vecinos.
Ahora no podrán seguir usando esas tretas de leguleyo. En una resolución clara y definitiva del Segundo Tribunal Colegiado del Vigésimo Séptimo Circuito, se establece «”transcribimos textualmente»” que «El Síndico municipal del Ayuntamiento de Benito Juárez, debe, de manera inmediata, a través de la unidad administrativa municipal correspondiente, como es la Dirección General de Desarrollo Urbano, o de Patrimonio Municipal, en términos de los artículos 3, fracción II, inciso p), 17, 53, 54, 55, 312 a 319, 320, 322 y otros relativos del Reglamento de Construcción para el municipio de Benito Juárez, y demás legislación aplicable, promover o instar la iniciación de un procedimiento administrativo en contra de quien represente legalmente los intereses de la capilla «SAN PABLO APÓSTOL», presumiblemente «PRELATURA DE CHETUMAL, ASOCIACIÓN RELIGIOSA», para que al final del mismo (emplazamiento, pruebas, alegatos, resolución administrativa) y luego de que quede firme ante su eventual impugnación, recupere el inmueble ubicado en la supermanzana doscientos, manzana ciento diecisiete, lote uno, entre las calles Circuito Hacienda de la Llave y Circuito de la Luz, Cancún, Quintana Roo».
Ya no podrá el ayuntamiento «”como lo había venido haciendo durante años»” seguir dando largas al asunto con tretas y simulaciones. Desde luego, es de esperarse que los legionarios intenten provocar un falso conflicto religioso azuzando a los fieles para que se enfrenten a las autoridades, como ya lo han hecho en otras ocasiones. Por ejemplo, cuando acusaron al entonces presidente municipal, Julián Ricalde, de enemigo de la religión por tratar de hacer cumplir un fallo semejante respecto a otro templo ilegalmente construido: el de Nuestra Señora de La Piedad, en la región 229.
En fin, ya veremos si continúa este desafío clerical a la ley y si la autoridad que debe hacerla cumplir sigue siendo omisa y cómplice.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Viernes 2 de diciembre de 2016