Construcciones ovni (764)

De hotel futurista a resort abandonado

20 de octubre de 2022

El arquitecto finlandés Matti Suuronen construyó a finales de 1960 y principios de 1970 una serie de casas futuristas enfocadas al turismo bajo el nombre de “Futuro Village”. Lejos de convertirse en todo un reclamo, las edificaciones han acabado en el olvido, totalmente abandonadas. Se encuentran en Wanli, en el noreste de Taiwán, y ahora mismo son toda una atracción para los curiosos. De hecho, en la actualidad se les conoce como “UFO Village”, debido a su curiosa forma.

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https://www.lasprovincias.es/planes/viajes/hotel-futurista-resort-20221020005305-ga.html

El misterio de las centellas (1389)

El misterio de las centellas (1389)

Centella… ¿en el microondas de tu madre?

En este sitio, descubrirá cómo no operar un horno de microondas. Consigue un microondas en una venta de garaje, depósito de chatarra. Ahora date cuenta de que hay dos tipos de hornos de microondas: los que funcionan y los que no. Los del depósito de chatarra no funcionarán, por lo que tendrás que repararlo, lo que no debería ser demasiado difícil si tienes suerte. Se sorprendería de cuántas personas tiran los electrodomésticos buenos, sin pensar en revisar el fusible. De todos modos, lo mejor que puedes hacer es reunir los materiales para este experimento y entrar en tu propia cocina. (¡preferiblemente alguien más!)

Enchufe un microondas y ponga algo de comida allí. Encenderlo. ¿Oyes el ruido típico? ¿La comida se calienta? Si es así, entonces tienes un buen microondas, digno de cualquier experimento que quieras realizar. Si tu microondas no funciona, revisa el fusible y busca cables sueltos. Si todo parece estar bien, ábrelo y retira las piezas. Por lo general, es la electrónica la que se fríe: el transformador, el diodo y el capacitor probablemente seguirán siendo buenos. Esas son cosas buenas para tener cerca, así que guárdalas.

Sigue estos pasos. En realidad, este experimento no dañará el microondas, pero no me culpes de todos modos. Dejará una fina película negra de carbón en las paredes y el techo. Una almohadilla brillante y jabón lo quitan bastante bien.

Ubica un microondas que funcione y conéctalo.

Obtén algunos fósforos pequeños y un globo de arcilla (masilla tonta, pegajosa, goma de mascar)

Saca todo del microondas

Clava un fósforo verticalmente en la arcilla con la cabeza del fósforo hacia arriba.

Coloca este “ensamblaje” en el centro del microondas.

Enciende el fósforo con otro, cierra la puerta, prende HIGH

¿Qué pasa después?

Subiendo

imageY arriba…

image¡Y arriba!

imageCosas bastante interesantes por decir lo menos. Todos tienen sus propias teorías sobre cómo funciona este fenómeno, pero aquí está la nuestra:

1.) El cerillo se quema, liberando una corriente ascendente de gas rico en carbono.

2.) Debido a la naturaleza conductiva del carbón, absorbe la energía de microondas y se quema.

3.) El aire caliente localizado alrededor del plasma hace que se eleve y esté sujeto a las corrientes de aire circundantes (ventilador de microondas).

https://web.archive.org/web/20040405033737/http://www.angelfire.com/tx4/ionwind/microwave.html

125 años de noticias sobre objetos voladores no identificados en la prensa mexicana

Texto de inauguración de la Exposición 125 años de noticias sobre objetos voladores no identificados en la prensa mexicana

cartel_125anos_prensa_ovnisMaestro Dalmacio Rodríguez Hernández, Coordinador de la Hemeroteca Nacional de México

Buenas tardes:

La Hemeroteca Nacional de México resguarda en su acervo publicaciones periódicas mexicanas que datan del período colonial hasta nuestros días. En sus millones de páginas, se ha registrado el diario acontecer de nuestra sociedad a lo largo de su historia, tanto los llamados grandes sucesos que cambiaron el destino del país como aquellos acontecimientos vinculados a necesidades y preocupaciones de la vida cotidiana. El público que nos acompaña se podrá imaginar el gran tesoro informativo que se ha acumulado en trescientos años de prensa mexicana y que hoy en día se encuentra alojado en este recinto.

Para la Hemeroteca Nacional, sin embargo, no basta con decir que cumple con la noble tarea de preservar este rico patrimonio documental; no tendría sentido la preservación si no tuviera usuarios que revivieran día a día lo que ha quedado documentado en miles y miles de periódicos y revistas; por esta razón, la misión de la Hemeroteca también consiste en poner a disposición del público este patrimonio. Y hay que precisar: a todo público, porque como una institución que sin distingos recopila el material hemerográfico en todas sus modalidades —periódicos de todos los estados de la república, publicaciones oficiales, periódicos deportivos y revistas de todo tipo; académicas, culturales, de entretenimiento, de análisis político, de divulgación científica, etc.— no puede limitar sus servicios a una sola clase de usuario; al contrario, debe atender la multiplicidad de intereses informativos de un público diverso, como en efecto sucede, pues a la salas de consulta de la Hemeroteca acuden lo mismo profesores y estudiantes que académicos y diletantes; nos visitan niños y jóvenes, pero también adultos y personas del tercera edad. De ahí que consideremos a la Hemeroteca como un repositorio de todos los mexicanos.

En consonancia con la riqueza histórica de nuestras colecciones y siguiendo las pautas de consulta de nuestros usuarios, la Hemeroteca tiene considerado entre sus políticas de servicios de información la elaboración y divulgación de contenidos temáticos. Es decir, desarrolla una línea de trabajo que se aboca a la revisión y organización de notas periodísticas que refieren hechos relevantes para nuestra sociedad en tres vertientes: noticias que han marcado hitos en la historia pasada y reciente del país, notas que por su recurrencia dan cuenta ciertos referentes culturales del mexicano y noticias que forman parte de un imaginario social. O para decirlo con menos palabras: la Hemeroteca organiza y difunde grupos temáticos que dan forma a lo que llamamos nuestra memoria histórica.

Bajo estas premisas, el día de hoy inauguramos una exposición que aborda un tema ampliamente conocido y transmitido por varias generaciones, por no decir, profundamente arraigado en nuestra memoria. Me refiero al fenómeno de los Objetos Voladores No Identificados (mejor conocido por el acrónimo OVNI). La peculiaridad de esta exposición radica en que es una aproximación histórica vista desde la prensa mexicana. Consiste en una pequeña, pero muy cuidada selección, de noticias de avistamientos y encuentros ocurridos en territorio nacional. El visitante podrá observar registros fotográficos de avistamientos, pero también crónicas de la presencia de OVNIS en diversas ciudades y regiones del país. Acapulco, Uxmal, la Ciudad de México, Puebla, Monterrey, entre otros lugares, son mencionados en los 23 documentos que forman parte de esta exposición. Otro aspecto que llamará la atención del espectador será la secuencia cronológica de las noticias, pues si bien es de esperar que a partir de la década de los cincuenta los reportes de la prensa comiencen a ser frecuentes y conocidos, pocos sabrán que los periódicos nacionales registraron la aparición de OVNIs desde finales del siglo XIX. Para beneplácito de nuestro público, se exhibe la que se considera la primera noticia sobre la presencia de ovnis en México, nota que fue dada a conocer en 1897. Precisamente en torno a esta fecha, se organizó la presente exposición: 125 años de noticias sobre objetos voladores no identificados en la prensa mexicana.

Quiero agradecer rápidamente a todo el equipo que hizo posible esta exposición. En primer lugar, al Técnico en aviación señor Alfonso Salazar Mendoza, a quien se debe la investigación histórica y la selección de textos; al Mtro. Daniel Ciprés, jefe del Departamento de Servicios de Información; a la Mtra. Ana Peniche, jefa del Departamento de Preservación y Reprografía, a la Mtra. Angélica Ángeles del mismo Departamento; a la Mtra. Ana María Romero Valle, Secretaria Técnica del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, y a Guillermo Gómez Zaleta, Gisel Cosío y Beatriz López del Departamento de Difusión Cultural. Asimismo, agradezco la enorme deferencia del Director y Conductor Jaime Maussán por acompañarnos en esta inauguración.