Una extraña criatura de 4 metros con “aletas” y “pelo” aparece en una playa de Merseyside
– Una criatura inidentificable apareció el miércoles en una playa de Liverpool.
– El animal, de 4.5 metros de largo y sin cabeza, es peludo, tiene aletas y está muy descompuesto.
– Los lugareños especulan con la posibilidad de que se trate de un mamut lanudo, una morsa o incluso un alienígena.
1 de agosto de 2020
Clare McCarthy para MAILONLINE
Una bestia marina de 15 pies de largo que ha sido comparada con un mamut y un extraterrestre ha dejado a los lugareños perplejos después de aparecer en una playa británica.
La criatura fue vista el miércoles en la playa de Merseyside, en Liverpool, y ha sido bautizada como la Anomalía de Ainsdale.
La gente no ha podido identificar al animal, que no tiene cabeza identificable pero es peludo, tiene aletas y está muy descompuesto y cubierto de moscas.
“Es muy extraño”, dijo un hombre. “Es como una mezcla de cosas diferentes en una sola”.
Una criatura inidentificable apareció el miércoles en una playa de Merseyside, en Liverpool. Está muy descompuesta, cubierta de moscas y huele muy mal.
Tiene 15 pies de largo, tiene aletas, es peludo y parece tener otra criatura unida, posiblemente a través de un cordón umbilical, por lo que podría haber estado dando a luz.
“Era casi como una ballena que se hubiera comido a un caballo que se hubiera comido a un delfín”.
El hombre, que pidió permanecer en el anonimato, compartió fotos de la bestia marina con la página de Facebook de la comunidad de Ainsdale.
Y aunque mucha gente hizo sugerencias, nadie pudo identificarla con seguridad.
Una mujer de la zona, que filmó a la extraña criatura, dijo: “Se le ha llamado la anomalía de Ainsdale”.
“Mi primera suposición fue que era una ballena de algún tipo”.
La bestia marina de 15 pies de largo no tiene cabeza identificable, pero tiene aletas, es peluda y parece tener otra criatura adjunta, posiblemente por un cordón umbilical
“Algunos creen que es una vaca o un caballo. Sinceramente, no tengo ni idea. Mi teoría favorita es que era un mamut lanudo o un extraterrestre que se estrelló”.
“Casi parecía también un elefante”.
La mujer de 32 años, que desea permanecer en el anonimato, dice que los restos olían tan mal que casi la ponen enferma.
“No me acerqué demasiado porque había muchas moscas y apestaba”.
“Cometí el error de ir a favor del viento mientras lo rodeaba y estuve a punto de vomitar”.
“Estaba muy descompuesto. Parecía que había tres grandes montículos de zonas corporales, todas ligeramente diferentes y no identificables para mí”.
“Me pareció que el cuerpo estaba bastante retorcido, con piel aquí y allá”.
Los lugareños, desconcertados, han especulado con la posibilidad de que se trate de un mamut lanudo, una morsa, una ballena, una vaca, un caballo, un burro… ¡incluso un alienígena!
“No había cabeza identificable, lo cual era extraño, posiblemente estaba debajo”.
“Lo que creo que eran costillas sobresalía por la parte superior. Parecía que tenía una gran columna vertebral y me pareció que las vértebras asomaban a través de la piel”.
Añadió que un funcionario de Natural England había bajado a inspeccionar los restos, pero fue incapaz de moverlos solo.
Cuando se compartieron fotos de la criatura en Internet, la gente conjeturó que antes era una morsa, una vaca, un caballo y un burro, entre otras sugerencias más extrañas.
Se ha contactado con biólogos marinos de la Universidad de Liverpool para que hagan comentarios.
Encuentran una extraña criatura acuática parecida a una serpiente en una playa de Chicago
Un cadáver muy extraño arrastrado por las olas fue encontrado por un hombre en la orilla de un lago cercano a Chicago. La identificación se hizo a través de la app iNaturalist: según algunos usuarios, se trata de una lota.
2 de mayo de 2022
Marcello Bizzarro
Una extraña criatura acuática “parecida a una serpiente” ha sido depositada por las olas en la orilla de un lago de Estados Unidos, dejando desconcertados a los lugareños. Los restos del enigmático animal fueron encontrados por Robert Loerzel, de 55 años, mientras paseaba por Montrose Beach Dunes, en Chicago (Illinois). El hombre publicó inmediatamente en Internet estas “inquietantes” imágenes.
Loerzel, en vida periodista freelance especializado en el mundo natural, declaró posteriormente: “Estaba tumbado en el suelo, no muy lejos de un sendero en las dunas. Miré por casualidad hacia abajo en ese momento y lo vi: simplemente me fascinó, pero también pensé que había algo casi horrible o aterrador en el aspecto del cadáver”.
En ese momento, la actitud periodística del hombre, que visita regularmente las dunas y la playa cercana, hizo el resto: “Era demasiado extraño para guardármelo para mí. El cadáver medía unos sesenta centímetros y tenía una forma parecida a la letra U. En un extremo, el cráneo era del tamaño de un puño humano. El cuerpo en sí parecía muy tenso, casi como el de una serpiente o una anguila, mientras que la piel que quedaba sobre el esqueleto parecía arrugada y en algunos lugares casi peluda”.
Las reacciones en las redes sociales de los usuarios también fueron muy interesantes: algunos describieron el cadáver como “una señal del apocalipsis” y otro escribió: “¡Sabía que había monstruos marinos en el lago Michigan!” Montrose Beach Dunes es un ecosistema a orillas del lago Michigan, uno de los cinco Grandes Lagos de Norteamérica. Se encuentra a unos doce kilómetros del centro de Chicago.
Para la identificación del animal, Loerzel recurrió en cambio a una aplicación muy útil de Citizen Science, iNaturalist: a través de fotos subidas, el programa ayuda a identificar flora y fauna. Sin embargo, en este caso incluso la inteligencia artificial se mostró “desconcertada”, mientras que otros usuarios de iNaturalist sugirieron que el cadáver podría ser el de una lota (Lota lota), un pez de agua dulce que nunca se ha registrado en la zona: según la base de datos de la aplicación, el avistamiento más cercano de la especie se produjo en Milwaukee, Wisconsin, a unos 130 kilómetros de distancia.
Una lota varada
La lota es la única especie gadiforme de agua dulce, emparentada con el bacalao, la maruca común (Molva molva) y el brosme (Brosme brosme).
Representación de la maruca común
Con una apariencia similar a un cruce entre un siluro y una anguila, la lota tiene en realidad un cuerpo similar al de una serpiente, pero se distingue fácilmente por la presencia de un único barbo en la barbilla, del que toma su nombre. Tiene una distribución circumpolar por encima de los 40°N, con poblaciones continuas desde Francia a través de Europa y Asia hasta el estrecho de Bering, y también está muy extendido en partes de los Grandes Lagos. Se cree que se ha extinguido en Gran Bretaña, donde se registró por última vez en 1969.
Sea monster mystery!
I found this, um … THING at the Montrose Beach Dunes.
And I thought: Well, I guess that’s some kind of fish. But WTF is it? … pic.twitter.com/YOtXkGtxij
— Robert Loerzel (@robertloerzel) April 1, 2022
¿Qué es esta extraña y pesadillesca criatura misteriosa fotografiada en una playa egipcia?
1 de julio de 2022
David Pescovitz
imagen: Andrea Jud
Andrea Jud paseaba por una playa de Gabr el-Bint (Egipto) cuando vio a esta criatura de pesadilla a unos 12 metros del agua. Publicó la imagen en un grupo de animales marinos en Facebook, donde una persona comentó que parecía una cría del monstruo del lago Ness. Obviamente, eso no puede ser cierto, ya que Escocia está a miles de kilómetros de distancia. Basándose en la foto de arriba, el sitio sugiere que los aterradores dientes del monstruo pueden ser una pista. De News.com.au:
Las morenas tienen un segundo conjunto de mandíbulas dentro de su garganta – y cuando un pez es atrapado dentro de las mandíbulas principales – este segundo conjunto se lanza hacia adelante, arrastrando a la presa hacia atrás para ser tragada.
Si se trata de una morena, el duro sol egipcio podría haberla chamuscado hasta hacerla irreconocible.
En cualquier caso, sigue siendo un misterio cómo murió la criatura y cómo acabó tan lejos de las olas.
Whoa! https://t.co/0GoHf3gE9q
— Pen News (@pennewsagency) July 1, 2022
¿Una misteriosa criatura marina encontrada en EE.UU.? No, es un “globster” en el video
La misteriosa criatura varada en una playa de Oregón (EE.UU.) no es un monstruo, sino un cadáver de mamífero marino en descomposición. Estos fenómenos se denominan “globsters”.
18 de octubre de 2022
Jacopo De Luca
Lo que se ha encontrado en una playa de Estados Unidos no es el misterioso y terrorífico Cthulhu, la criatura imaginaria salida de la mente del escritor Lovecraft, sino un “globster”: una masa orgánica en descomposición, probablemente lo que queda de una ballena.
Así pues, no hay ritual de invocación a través del Necronomicón, el libro ficticio compilado por el “árabe loco” Abdul Alhazred, ni misteriosa progenie estelar que se ha liberado tras siglos de cautiverio. El universo lleno de terror creado por Lovecraft no tiene nada que ver con este descubrimiento, y el encontrado por una pareja estadounidense en una playa es científicamente explicable. En tales situaciones, sin embargo, es normal dejar volar la imaginación e incluso un poco de sugestión puede disparar en la mente de un hombre la idea de que ha encontrado un monstruo marino.
La pareja documentó el hallazgo con un video publicado en Facebook. En las imágenes se ve a la pareja acercarse a la “criatura” con circunspección. El agua lame el extraño cúmulo y poco a poco la cámara enfoca al sujeto: Lo que parece un gran cuerpo cubierto de cabellos blancos yace inmóvil en la orilla. Con valentía, la persona que filma la escena se acerca y con un zapato comprueba la consistencia del objeto, que se revela inmediatamente como blando. Un giro alrededor del “ser” lo muestra en toda su extensión y, probablemente, la parte restante esté oculta bajo la arena.
Era el 12 de octubre cuando la pareja estadounidense Merica Lynn y Adoni Tegner encontraron lo que parecía ser una enorme criatura varada en una playa de Florence, Oregón (Estados Unidos), mientras paseaban tranquilamente por un sendero entre las dunas, como suelen hacer habitualmente. Adoni Tegner dijo que desde lejos pensó que se trataba de un coche varado que, por alguna absurda razón, había sido arrastrado hasta la playa. Sólo cuando se acercaron a la “criatura” pudieron ver mejor la enorme masa blanca y maloliente. La pareja pensó que habían encontrado un monstruo marino, pero la realidad distaba mucho de serlo.
Una vez publicado el video en las redes sociales, no tardaron en llegar comentarios, sin duda muy imaginativos. Un usuario se preguntaba por las catástrofes naturales, escribiendo preocupado: “Cuando una gran criatura aparece en la playa significa que se acerca una calamidad, como un tsunami”. Otros adivinaron hasta el punto de escribir con gran seguridad: “¡Definitivamente es un globster!”
Quien explicó qué es un globster fue Jim Rice, responsable del “Programa Arenament” del Instituto de Mamíferos Marinos de la Universidad Estatal de Oregón, que dijo en un comunicado: “Es una masa de materia orgánica varada en la orilla. Se trata de un mamífero marino de gran tamaño, como una ballena o un cachalote, y lo que vemos es su cadáver. Lo que parecen pelos blancos son restos de tejidos orgánicos en descomposición que se deshilachan y adquieren ese aspecto: músculos, nervios, tendones y demás. En mi opinión, este individuo lleva muerto varios meses”.
El hombre ha encontrado varias de estas masas putrefactas a lo largo de la historia, y el nombre de globster fue acuñado hacia mediados del siglo XX por Ivan Sanderson, que lo describió con precisión como un cadáver putrefacto. Sanderson era un naturalista y escritor escocés que alcanzó gran fama gracias a los relatos de sus aventuras en diversas zonas tropicales en la década de los 30. En 1962, el escritor se encontraba en Tasmania y avistó una masa en una costa, que describió así: “No tiene ojos visibles, ni cabeza definida, y aparentemente carece de estructura ósea”.
Un globster se distingue de los cadáveres normales varados por su difícil o imposible identificación, al menos a ojos de observadores inexpertos, y por el hecho de que a menudo surgen disputas en la comunidad científica sobre la propia identificación.
El tiburón peregrino muerto que generó un mito sobre los dinosaurios
8 de septiembre de 2023
Charlie Gates
Pescadores japoneses sacaron una extraña criatura de aguas neozelandesas en 1977. SUMINISTRADO / SUMINISTRADO
Salió a la superficie como los restos putrefactos de un tiburón peregrino muerto. Porque eso es casi seguro que era.
Pero a los pescadores japoneses que lo sacaron del océano frente a la costa de Christchurch no les pareció un tiburón peregrino. Parecía un dinosaurio. Más concretamente, un plesiosaurio, el gigante extinto de cuello largo que surcó los océanos hace más de 66 millones de años.
Pero, ¿qué hacía un dinosaurio en la cubierta de un pesquero japonés en abril de 1977?
Fue una pregunta que animaría titulares y noticias en Japón y Nueva Zelanda durante el resto del invierno. Las espeluznantes fotografías tomadas por el pescador antes de que la criatura fuera devuelta al mar alimentaron un frenesí mediático. En una serie de historias sin aliento, el tiburón sin culpa se convirtió en un “monstruo marino”, una plessie, un taniwha, y la respuesta de Nueva Zelanda al monstruo del Lago Ness.
Un hombre afirma haber encontrado un dinosaurio en descomposición en una playa de la Isla Sur
El taxidermista jubilado Peter Ritchie afirma que encontró una extraña criatura en la playa de Amberley en 1977.
El taxidermista jubilado Peter Ritchie afirma que encontró una extraña criatura en la playa de Amberley en 1977.VIDEO CREDIT: JOHN BISSET/STUFF
Entonces llegaron los científicos para estropear la diversión de todos, proporcionando pruebas claras de que los restos no eran un dinosaurio, sino en realidad un tiburón peregrino parcialmente descompuesto.
Pero eso no impidió que la gente siguiera creyendo que se trataba de un plesiosaurio. Tampoco impidió que la historia resurgiera décadas después en Internet, con las vívidas fotos utilizadas como reclamo por foros, sitios web paranormales e incluso grupos de noticias convencionales. La historia resurgió de nuevo en los websites de noticias de todo el mundo el mes pasado.
Pero la saga comenzó el 25 de abril de 1977, cuando el pesquero Zuiyo Maru se encontraba a unos 30 km de la costa de Christchurch. La tripulación sacó del mar una criatura de 10 m de largo y 2 toneladas de peso. El pescador la llamó Nessie.
El tripulante Michihiko Yano, de la Compañía Pesquera Taiyo, tomó cuatro fotografías en color de la criatura antes de arrojarla de nuevo por la borda porque temían que el hedor a podrido contaminara sus capturas.
Los pescadores arrojaron la criatura al mar por temor a que echara a perder sus capturas. SUMINISTRADO / SUMINISTRADO
Pero conservaron un trozo de tejido de nueve pulgadas de la criatura. Era de color marrón y tenía bigotes.
Yano presentó fotos de los restos a su jefe cuando regresó a Tokio dos meses después. La empresa ordenó inmediatamente al pesquero, que seguía faenando frente a la costa de Canterbury, que empezara a buscar los restos.
Los medios de comunicación japoneses se hicieron eco de la noticia y Nueva Zelanda no tardó en hacerse eco de ella. El 21 de julio de 1977, The Press publicó un breve artículo sobre el incidente bajo el titular “¿Nessie local?” Dos días después se publicó una copia en blanco y negro de la fotografía más dramática tomada por la tripulación. El cadáver fue descrito como el “cuerpo descompuesto de un extraño animal de aspecto prehistórico”.
Esto provocó un aluvión de especulaciones.
Los científicos llegaron a la conclusión de que se trataba de un tiburón peregrino descompuesto. SUMINISTRADO / SUMINISTRADO
El profesor Tokio Shikama, especialista en animales antiguos de la Universidad Nacional de Yokohama, declaró a The Press que se trataba de un plesiosaurio.
“Estas criaturas deben seguir vagando por los mares de Nueva Zelanda, alimentándose de peces. No hay muchos y son muy cautelosos”.
Un autor de una carta a The Press afirmaba que el pescador japonés había capturado el taniwha de la mitología M?ori. El periódico también informaba de que seis años antes una tripulación de pescadores japoneses había avistado “un monstruo marino de’“ojos saltones’ saliendo del mar a 24 millas de Lyttelton”.
Poco después de la publicación de la foto en The Press, el taxidermista Peter Ritchie paseaba por la playa de Amberley cuando vio algo extraño.
“En cuanto lo vi, me acordé de la foto del periódico”, declaró a The Press este año.
Peter Ritchie asegura que la criatura que encontró en la playa era prehistórica. JOHN BISSET / TIMARU HERALD
Tomó siete fotografías de la criatura y extrajo el cráneo, junto con parte del cuello. Está seguro de que se trataba de un dinosaurio.
“Sin duda era prehistórico”.
Dice que le dio el cráneo a Geoff Tunnicliffe, que entonces era conservador de vertebrados en el Museo de Canterbury. Le llamó unos años más tarde y le dijeron que lo habían destruido.
El frenesí mediático por el hallazgo japonés continuó. Un reportero japonés, un fotógrafo neozelandés y un periodista de The Press pagaron 1900 dólares para que les llevaran en helicóptero hasta el pesquero Zuiyo Maru, frente a la costa de Christchurch. Entrevistaron a la tripulación, que estaba segura de que la criatura no era ni un tiburón ni una ballena.
Un equipo de la televisión japonesa fletó también otro pesquero para salir de Lyttelton y buscar los restos. Tuvo que regresar a puerto unos días más tarde debido al mal tiempo. El capitán, Dick Brown, de Opawa, dijo que no habían encontrado “ni una maldita brizna”.
Ritchie cree que la criatura podría llevar millones de años congelada en la Antártida. JOHN BISSET / TIMARU HERALD
Después llegó la ciencia. En agosto de 1978, un equipo de 15 científicos japoneses de la Universidad de Pesca de Tokio emitió su veredicto sobre la criatura. Probablemente se trataba de un gran tiburón peregrino. La pequeña muestra conservada por el pescador tenía una composición similar a la del cartílago de tiburón.
The Press informó sobre los hallazgos científicos. Fue la última noticia que publicó sobre el incidente. La saga habría pasado a la historia como un extraño episodio de histeria local, pero entonces apareció Internet.
La historia, con sus llamativas fotografías y su potencial para titulares escabrosos, estaba hecha a medida para la era del clickbait.
Si se busca “Zuiyo Maru” en Google aparecen unos 22,000 resultados. Una búsqueda en YouTube revela docenas de videos que utilizan la fotografía en color más vívida como imagen de previsualización. Los videos llevan títulos como “Cadáver de plesiosaurio atrapado en redes de pesca japonesas”.
El mes pasado, el monstruo reapareció en los principales medios de comunicación. El sitio británico de noticias The Mirror publicó un artículo con el siguiente titular: “Pescadores ‘desenterraron un dinosaurio de 9 metros’ del fondo del océano, pero lo devolvieron por el olor”. No se hace referencia al hecho de que esto ocurriera en 1977 y sólo en la última línea de la historia un científico argumenta que probablemente se trataba de un tiburón peregrino en descomposición.
La historia también fue recogida por Newshub en Nueva Zelanda.
El científico marino del DOC Clinton Duffy en la disección de un tiburón en 2020. ANDY JACKSON / TARANAKI DAILY NEWS
Los expertos en vida marina saludaron la nueva ronda de historias con un gesto de sorpresa.
El científico marino Clinton Duffy tuvo un solo pensamiento.
“Ya estamos otra vez”.
Duffy, que es asesor técnico de pesquerías protegidas y reptiles marinos en el Departamento de Conservación, dijo que las fotos de los arrastreros aparecen cada pocos años.
“Han hecho la ronda”, dijo.
“Por mucho que me gustaría creer que todavía hay plesiosaurios en esa zona, llevan extinguidos entre 80 y 100 millones de años”.
Dijo que tanto la criatura encontrada por el pescador como la hallada en la playa eran tiburones peregrinos en descomposición. Los tiburones pueden medir hasta 12 m de largo y pesar 7 toneladas métricas.
Al descomponerse, la mandíbula y las branquias caen y dejan al descubierto la espina dorsal. Al descomponerse las fibras musculares y el esqueleto cartilaginoso, empiezan a emplumarse.
Los tiburones peregrinos pueden alcanzar los 12 metros de longitud y pesar entre 7 y 10 toneladas métricas. THE DOMINION POST
El proceso de putrefacción transforma el cadáver de algo que parece un tiburón a algo que parece un monstruo.
“Tardarían mucho tiempo en descomponerse por completo, sobre todo en las profundidades marinas, donde todo se mueve mucho más despacio”.
No había ninguna posibilidad de que un plesiosaurio pudiera seguir nadando en aguas neozelandesas.
“Un animal así tendría que vivir a poca profundidad para tener mucha comida que ingerir. No hay manera de que pudiera sobrevivir en aguas profundas”.
“Sería visto”.
El conservador jefe de historia natural del Museo de Canterbury, Paul Scofield, coincidió en que el ejemplar del arrastrero era un tiburón peregrino.
Una de las varias fotografías que Ritchie tomó en la playa de Amberley en 1977. SUMINISTRADA
Dijo que la historia del plesiosaurio había persistido a lo largo de las décadas
“Nada muere en Internet”.
“Hay un deseo real en la mente del público de cosas realmente sorprendentes y por descubrir”.
Pero algunos expertos mostraron su preocupación por las fotografías tomadas en la playa por Ritchie pocos meses después del incidente del pesquero.
El profesor de ciencias marinas de la Universidad de Nueva Gales del Sur, Iain Suthers, dijo que el espécimen de la playa parecía el cráneo de un mamífero colocado sobre el cuerpo en descomposición de un tiburón peregrino.
La criatura fotografiada por Ritchie en la playa de Amberley. SUMINISTRADO
“Parece un poco artificioso”, dijo.
“Lo que más lo delata es ese cráneo blanco que parece casi de plástico”.
“Definitivamente, parece una estafa”.
Ritchie, que ahora tiene 93 años, insiste en que las fotografías no son un engaño.
“Es ridículo”.
“Me gustaría hablar con el cabrón porque me está sacando de quicio”.
“Estos académicos viven en un sueño absoluto”.
Ritchie insiste en que la criatura que encontró era un dinosaurio. JOHN BISSET / TIMARU HERALD
Sigue insistiendo en que la criatura que encontró en una playa en 1977 era un dinosaurio, en lugar de un tiburón. Cree que podría haber estado congelado en el hielo antártico durante millones de años antes de descongelarse y ser capturado por el pesquero japonés.
Se basa en sus conocimientos de anatomía, adquiridos durante 56 años como taxidermista.
“No tiene branquias y tiene un cuello de tres metros como un lagarto”.
“Estoy convencido de que es un animal que respira aire. Tiene dientes caninos como un perro”.
“Es exactamente igual al monstruo del Lago Ness”.
“Estos supuestos profesionales son inútiles”.
https://www.thepress.co.nz/nz-news/350067413/dead-basking-shark-spawned-dinosaur-myth