ESCRUTINIO
Los poco o nada conocidos paraísos fiscales[1]
Juan José Morales
Mucho polvo se ha levantado en torno a los Papeles de Panamá (o Panama Papers como se ha dado en llamarles) y las revelaciones de que a través de la firma panameña de abogados Mossack Fonseca, cierto número de políticos, empresarios, artistas y deportistas crearon empresas que les permitían burlar controles hacendarios y de otro tipo.
Pues bien, como dice el periodista francés Thierry Meyssan en un interesante artículo difundido por la Red Voltaire «”un colectivo de periodistas de muy diversos países del cual él fue fundador»”, ni Mossack Fonseca es la única compañía que se dedica a crear empresas de ese tipo, ni Panamá es el único paraíso fiscal que existe en este mundo, o sea un lugar donde las leyes garantizan a los extranjeros exenciones de impuestos y absoluto secreto fiscal y bancario.
El impacto causado por los llamados Papeles de Panamá hizo pensar inicialmente en una filtración semejante a las revelaciones de Edgar Snowden sobre el espionaje y la diplomacia de Estados Unidos, pero ahora se sospecha de que se trata de una maniobra más de la CIA.
En realidad, hay docenas de paraísos fiscales; en total 73 según algunas fuentes. Y no sólo en pequeños países como Liechtenstein, Luxemburgo «”donde, por cierto, manipula Wal Mart el dinero que obtiene en los países del Tercer Mundo»”, Andorra, Chipre o Belice sino en los propios Estados Unidos e Inglaterra. El pequeño estado norteamericano de Delaware es uno de ellos. Lo son también el de Wyoming, tradicionalmente considerado tierra de vaqueros, y el de Nevada, que no sólo vive del juego. En Inglaterra funciona como paraíso fiscal nada menos que el corazón financiero de Londres, llamado la City, que legalmente es un estado independiente miembro del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte pero con sus propias leyes en la materia. Paraíso fiscal es también la isla británica de Guernesey en el canal de La Mancha, que si bien está sometida a la autoridad de la reina de Inglaterra, no es miembro del Reino Unido ni de la Unión Europea. Lo es asimismo Gibraltar territorio español que Gran Bretaña ocupa ilegalmente, como lo son igualmente las colonias británicas de Anguila, Bermudas, islas Caimán, islas Turcas y Caicos, islas Vírgenes y Monserrat. De todos estos paraísos fiscales, sin embargo, nada se dice, aunque en ellos se realizan oscuras transacciones tanto o más importantes que en Panamá. De hecho, según datos del Fondo Monetario Internacional, la mitad de la riqueza del mundo se mueve a través de los paraísos fiscales.
No deja de llamar la atención, dice Meyssan, que las «revelaciones» sobre los Papeles de Panamá se concentren exclusivamente sobre este país y no mencionen en absoluto las cuantiosas operaciones que se realizan a través de los paraísos fiscales controlados por Estados Unidos y la Gran Bretaña. A juicio del autor, el objetivo es presentar a Panamá y otros países con leyes parecidas como sitios donde los inversionistas no están a salvo de filtraciones, y hacer que muevan sus capitales hacia los de aquellas naciones.
Igualmente, los Papeles de Panamá presentan como turbios manejos operaciones realizadas por gobernantes a los que Estados Unidos combate, cuando en realidad su propósito era eludir el estrangulamiento económico dictado por Washington. Tales son los casos de Bashar al-Assad, presidente de Siria, y Mahmud Ahmadinejad, de Irán. El primero promovió la creación de empresas para comprar alimentos y otros productos que su país no podía adquirir directamente por el bloqueo norteamericano, y el segundo formó compañías comercializadoras de petróleo para poder vender el que produce su país y contra el cual las potencias occidentales decretaron un «embargo», o sea la prohibición absoluta de que pudiera ser vendido en los mercados internacionales.
Subraya Meyssan por otro lado la curiosa circunstancia de que entre los 11.5 millones de documentos de los Papeles de Panamá no haya uno solo relativo a las grandes empresas de Estados Unidos o los potentados de ese país.
El espacio se ha agotado y el tema es muy amplio, de modo que «”contra nuestra costumbre»” no los concluiremos hoy sino que debemos dejar para mañana la segunda parte de estos comentarios sobre los sospechosos Papeles de Panamá.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Jueves 13 de abril de 2016