Brasileños presentan «Ovni» en la Quincena de los Realizadores en Cannes
20/05/2010 Folha Online
Los jóvenes cineastas brasileños Felipe Bragança y Marina Meliande presentaron el jueves (20), en Cannes, un exuberante cuento sobre la búsqueda de la juventud de hoy por nuevas referencias, sin recurrir a los símbolos que han guiado las generaciones anteriores.
«A Alegría», un «ovni», en palabras de los propios seleccionadores de la Quincena de los Realizadores, toma la forma de una alegoría de tono juvenil, un cuento sobre la rebeldía tranquila y decidida, sobre la responsabilidad de los jóvenes y es, en el fondo, un reinvención del espíritu de la década de 1970 en el siglo 21.
Braganza y Marina, ambos de 29 años, que dirigieron antes un musical titulado «A Fuga da Mulher Gorila», hacen un relato estructurado en varias capas.
Dos personajes atemporales en la selva, con largas vestimentas y máscaras, dan lugar a un grupo de jóvenes en Río de Janeiro, y, en particular, Luiza de 16 años, cansada de escuchar sobre el inminente fin del mundo.
Desde allí, este guión muy particular mezcla la vida cotidiana privada de personajes creíbles con otros no tanto.
La trama lleva a la joven Luiza hasta el mar, atraída por un ser cubierto de escamas y conchas, en un desenlace similar al cine fantástico.
«Queríamos hablar de una generación que es también la nuestra, la relación que podemos establecer con el mundo y la búsqueda de la utopía hoy por la gente que construyó su adolescencia o identidad
«Existe la posibilidad de construir nuevas utopías, nuevas formas de trabajo colectivo, creación colectiva de la identidad urbana, que ya no son nostálgicas, están en la imaginación de los jóvenes de hoy, pero no como una nostalgia, una nostalgia por el pasado y esto se puede transformar en algo nuevo», comenta, a su vez, Felipe Bragança.
«Nos gustaría haber vivido el pasado de nuestros padres, que ahora están desencantados con la posibilidad de participación política», añade Marina.
Los cineastas ofrecen una ruptura global, representada en un momento de la película cuando los jóvenes protagonistas salen a las calles con un signo elocuente: «Su mundo se acabó. ¡Jódanse! ¡A la gaber!».
«La euforia el país está viviendo no coincide con un momento de euforia cultural, el país está económicamente fuerte y culturalmente «˜yuppie»™», resume Braganza.
Marina ve una falta de toma de riesgos en la producción audiovisual, que está «relacionada con la televisión y el deseo de ser comercial, dejando poco espacio para mostrar las cosas que salen de este gran modelo económico y cultural».
La obra es de gran complejidad. «Nos imaginamos una forma narrativa muy fragmentada y porosa, que todo el tiempo va absorbiendo referencias», dice Braganza.
«Tiene que ver con la identidad de los adolescentes de hoy, con poder cambiar de imagen continuamente, con toda flexibilidad, y mezclamos la presencia física, y al mismo tiempo la presencia imaginaria», añade Marina.
«A Alegría», recientemente terminada, es parte de la trilogía de «Coração no Fogo», iniciada con su película musical anterior y se completará con la «Desassossego», película experimental colectiva de diez jóvenes directores brasileños, actualmente en postproducción.