La mente programada

LA MENTE PROGRAMADA[1]

Mario Méndez Acosta

La noción del cerebro como sólo una especie de computadora biológica que recibe datos, los procesa y emite una lista de salida en forma de comportamiento, y de la mente como equivalente al conjunto de programas o software de ese tan especial ordenador, impulsó a varios investigadores, durante las décadas setenta y ochenta, a afirmar que el ser humano puede programar esa computadora a voluntad.

RichardBandler Entre quienes afirman que ello puede lograrse con relativa facilidad están el matemático Richard Bandler y el lingüista John Grinder, los creadores de un programa de entrenamiento conocido como Programación Neurolingüistica que se imparte a gran escala mediante cursos de capacitación de personal que contratan empresas y gobiernos poco cautelosos.

Los practicantes de la Programación Neurolingüistica (PNL) afirman que ésta puede ayudar a la persona a cambiar a su voluntad o a la de su empleador, al enseñarle a programar su cerebro; asimismo, argumentan que la naturaleza nos proporciona nuestros cerebros, aunque no así el manual de instrucciones correspondiente, por lo que la PNL (que puede ser considerada como el software del cerebro humano) nos ofrece se manual.

Esta propuesta está basada sobre todo en el principio de que la mente inconsciente está siempre alerta, es casi omnisciente y constantemente influye en el pensamiento consciente, en todas nuestras actividades. Se apoya también en los métodos propuestos por Sigmund Freud «“en su libro La interpretación de los sueños-, en especial en conceptos como comportamiento y lenguaje metafóricos y, finalmente, aplica sus rutinas a través de un tipo de hipnoterapia desarrollado por Milton Erickson. Conviene destaca que ningún neurocientífico o especialista en el estudio clínico del cerebro humano ha sido mencionado por haber tenido alguna influencia en la PNL; de hecho, en esta programación se hacen afirmaciones sobre el pensamiento y la percepción que contradicen los hallazgos de la neurociencia.

Los ponentes de la PNL aseguran poder lograr que se desarrollen capacidades comunicativas y de grandes poderes de persuasión en las personas. Uno de sus lemas es: «Si alguien puede hacer algo, entonces cualquiera puede aprender a hacerlo»; una afirmación evidentemente falsa, ya que contradice lo investigado y determinado acerca del desarrollo cerebral de los individuos, en especial a partir de la infancia.

Señalan que el lenguaje corporal es determinante en la comunicación entre las personas, y que si alguien puede decodificar ese mensaje estará en posibilidad de conocer los deseos reales de seres humanos o bien de convencer conscientemente a cualquiera de hacer lo que este alguien desee; sin embargo, ni siquiera las personas muy bien entrenadas en esta técnica pueden determinar las verdaderas motivaciones de los sujetos con los que interactúan, o bien en el caso de un empleador, con sus candidatos a ocupar un puesto.

La programación neurolingüistica propone que las personas se mejoren a sí mismas, al propiciar un cambio de paradigma en la forma que ven las cosas. Supuestamente, esta idea se basa en el planteamiento de Thomas Kuhn, quien sostiene que al ser rebasada por los hechos una teoría científica, una nueva toma su lugar; pero no hay evidencia clínica o neuronal de que este fenómeno social pueda producirse en el cerebro humano.

JohnGrinder Quienes son practicantes de la PNL proponen una serie de técnicas basadas en la auto-hipnosis; por ejemplo, el uso recurrente de lemas o frases que induzcan la sugestión, con lo cual se pueden cambiar las conexiones neuronales en los cerebros, logrando modificar la forma en que se piensa, aunque esto sucede sólo después de que la persona realiza prolongados estudios. Sin embargo, no hay evidencia clínica de que exista la capacidad de influir sustancialmente en las personas a través de su mente subconsciente, aun cuando afirman que sus expertos han estudiado el pensamiento de las grandes mentes y los patrones de comportamiento de los individuos exitosos y han logrado configurar sus modelos de trabajo; modelos que no pasan de ser una serie de consejos poco congruentes o de sugerencias bastante ordinarias.

La manera de pensar de Einstein, muy dado a construir modelos y experimentos mentales en torno al fenómeno que trataba de entender, no ha podido ser esquematizada, y resultaría simplemente imposible inducir a un individuo sin su inteligencia, imaginación y conocimientos a enunciar teorías similares a las que él elaboró. Un ejemplo de la forma como Einstein tomó decisiones puede ser visto mediante la elección que realizó al elegir ponerse a estudiar matemáticas, cuando vio que su conocimiento en esta área no era suficiente para resolver el problema de la relatividad generalizada; ésta es una lección que no están dispuestos a seguir quienes desean iluminación o entendimiento instantáneo.

Es una pena que los creadores de la PNL hayan reñido entre sí y que su confrontación involucre demandas de varios millones de pesos; aparentemente, sus hallazgos no les han sido útiles para llevar una vida armoniosa y exitosa.

REFERENCIAS

Neuro-linguistic Programming: Robert Todd Carroll, The Skeptics Dictionary, J. Willey & Sons, 2003.

Richard Bandler, John Grinder Grinder, Patterns of the Hypnotic Techniques of Milton H. Erickson, M. D., Meta Publications, 1975


[1] Publicado originalmente en Ciencia y Desarrollo, No. 186, México, agosto de 2005. Págs. 44-45.

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