El Monstruo del Loch Ness. La tecnología a la caza de un mito (3)

EL MONSTRUO DEL LOCH NESS: LA TECNOLOGIA A LA CAZA DE UN MITO 3

EXPERIENCIAS CON EL SONAR

La primera expedición para estudiar el Loch Ness fue la de Sir John Murray en 1901. Murray utilizó termistores para medir la temperatura del lago desde un barco anclado en la Abadía de Fort Augustus.

Durante esta expedición uno de los monjes de la abadía usó un traje de buceo para observar el crannog sumergido en Inchnacardoch Bay, en la Isla Cherry.

Diez años después regresó Sir Murray para medir la profundidad del lago utilizando un cable de sondeo. Encontró el valor de 230 metros.

Pasaron las dos Guerras mundiales hasta que en 1960 el doctor Tucker, del Museo Británico, organizó una expedición en 1960, pero esta aventura por poco se cancela cuando Tucker fue despedido del Museo por su poco común interés en el «monstruo del Loch Ness».

Tucker haló con su amigo, el ingeniero graduado de Cambridge, Peter Baker, y éste corrió con los gastos.

La expedición utilizó una serie de cámaras y ecosondas, pero sus resultados fueron explicados como errores en el barrido del sonar.

En 1961 la Universidad de Birmingham verificó la salinidad, acidez, contenido de oxígeno y penetración de la luz en el lago. También se detectó la termoclina y se hizo un registro más exhaustivo de la fauna.

En el 62 le tocó a la Universidad de Cambridge. Durante tres semanas llevaron trabajos de dragado y medición de la biomasa. Sus resultados demostraban una biomasa insuficiente para alimentar una colonia e grandes depredadores.

Después de las expediciones de las universidades de Birmingham y Cambridge, el LNPIB decidió realizar una vigilancia de manera metódica con cámaras de cine de 35 mm con telefotos montadas en el campamento base en Achnahannet, así como en los vehículos que se ocuparon de otros lugares durante los largos días de los meses de verano. Además realizaron pruebas con sonar, atractores de peces, submarinos, experimentos acústicos subacuáticos y fotografía submarina.

A pesar de la organización y disciplina de los miembros del LNPIB, sus resultados fueron decepcionantes[1] luego de todos esos años de vigilancia. Sin embargo lograron organizar la mayor parte de la documentación referente al lago y su monstruo. Registraron las fotografías, películas y experiencias con el sonar; recogieron casi un millar de relatos y eliminaron muchas de las causas de error. Llegaron a la conclusión que ni las fotografías, películas y registros de sonar mostraban, más allá de toda duda razonable, que hubiera un animal desconocido en el Loch Ness.

EXPEDICIÓN TUCKER

Clem Skelton, director cinematográfico independiente y asesor del Loch Ness Phenomena Investigation Bureau (LNPIB)[2] sugirió utilizar un aparato de sonar, localizado en un extremo del lago por la forma casi longitudinal de este último, el aparato podría recorrer toda su superficie con cada barrido de su haz.

La idea fue recogida por el profesor Gordon D. Tucker, jefe del Depar­tamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la Universidad de Birmingham, Inglaterra.

A finales de 1967 y principios del 68, Tucker utilizó un «sonar digital», un prototipo, en donde las entradas acústicas son llevadas a un computador digital, donde se les procesa y selecciona antes de ser transmitidas a un osciloscopio para su observación. El alcance del transductor era de 800 metros. El dispositivo se fijó bajo el agua en Temple Pier en la bahía de Urquhart y se dirigió hacia la orilla opuesta, de tal forma que cualquier objeto que pasara frente a él sería registrado.

A este equipo se acopló una cámara cinematográfica de 16 mm que había sido sincronizada con la pulsación energética captada, de manera que el re­torno acústico en forma de eco de cada una de las emisiones era fotografiado tal como quedaba registrado en la pantalla del osciloscopio.

Se utilizaron 14 rollos de película, el equivalente a unas 150 horas de vigilancia. Se suponía que el aparato podía distinguir objetos con una separación de un metro. El equipo sólo proporcionaba información en profun­didad, con un error máximo de 2º, no se tenía acceso a la información iz­quierda-derecha (azimut). En otras palabras, el equipo captaba los objetos que se encontraran en una zona limitada por un cono de 12º, tal como se presentarían a vista de pájaro.

Tucker escribió un artículo en donde describía los resultados de sus experimentos. Empero, esta nota no llenaba todos los requisitos que impone Nature (la revista científica más prestigiosa) a todo el material que se publica en sus páginas.

Tucker, ayudado por el doctor Hugh Braithwaite, reorganizó sus notas y envió una comunicación a la también excelente revista inglesa New Scientist[3] en donde informaba que había detectado ecos en el lago de lo que ellos «suponían debía ser el fabuloso monstruo del Loch Ness, ahora observado por vez primera en sus actividades submarinas».

Según Tucker se captaron varios registros animados de seis metros (20 pies) de longitud ascendiendo y en la parte inferior del loch.

El artículo del New Scientist despertó la polémica en el mundillo científico. Los directores de la revista Nature escribieron el siguiente editorial en su edición del 28 de diciembre[4]:

«El monstruo fue captado con un nuevo tipo dé equipo desarrollado en la Universidad de Birmingham y montado en el Loch durante las dos últimas semanas de agosto. Dos objetos, uno de cerca de 50 metros de longitud y otro mucho más pequeño que ascendían a una velocidad de 7.5 metros por segundo, fue lo que captó el sonar. Estos ingenieros excluyen la posibilidad de que se trate de peces.

«El equipo de sonar usado por los ingenieros de Birmingham fue probado por el Fisheries Laboratory de Lowestoft en donde se descubrió que era pro­penso a una intolerable tendencia a la ambigüedad. Por ejemplo, dos blancos del mismo rango pero diferente origen tienden a aparecer en la pantalla como un solo objeto mientras, bajo ciertas circunstancias, un banco de peces o un solo pez nadando horizontalmente a través del haz del sonar puede dar la impresión de un objeto con una alta velocidad de inmersión».

El doctor Peter F. Baker, del Emmanuel College, Cambridge, trató de defender la posición de Tucker en una carta al editor publicada por Nature el 11 de enero de 1969, pero sin lograrlo.

EXPEDICIÓN CARROLL

El investigador del Acuario de Nueva York, Andrew Carroll, propuso una operación de barrido móvil con un sonar en el Lago Ness. El proyecto fue financiado por la fundación Griffis (por Nixon Griffis, el entonces director del acuario).

El barrido por arrastre, se llevó a cabo en octubre usando el Ragintea. Uno de los barridos hizo contacto con un fuerte, eco animado durante casi tres minutos al norte de Foyers.

Se determinó que el objeto debería medir unos 20 metros ya que la intensidad del eco de retorno fue dos veces mayor a la esperada en una ballena piloto de 10 pies.

En ese mismo año se utilizó un submarino, el Viperfish, para sondear las profundidades del lago. El proyecto estuvo a cargo de Dan Taylor, bajo el patrocinio de la World Book Encyclopedia. El submarino se sumergió el 1 de junio, pero como tuvo muchos problemas técnicos y no produjo nuevos datos, se canceló la operación.

Se trató de pasar la estafeta a un submarino, sin nombre, construido por Westinhouse, que era transportado por The Deep Star III, construido por General Dynamics, pero también se canceló la operación.

El Piscie, propiedad de Vickers, Ltd., tuvo mejor suerte. Este submarino se utilizó para filmar la película La vida privada de Sherlock Holmes, con un maniquí del monstruo del Loch Ness. Cuando el monstruo ficción se soltó del Piscis durante la filmación y se hundió en el fondo del loch, los ejecutivos de Vickers aprovecharon la pérdida y la «˜fiebre del monstruo»™ para permitir que el submarino hiciera un poco de exploración.

Se supone que captaron un gran objeto con el sonar del submarino y cuando el piloto trató de acercarse, el eco desapareció rápidamente del sonar. Algunos dicen que en realidad fue sólo una declaración para promocionar la película.

LOVE

Durante el verano de 1969, llegó a Inverness la primera expedición norteamericana en busca de Nessie. Esta expedición fue organizada por la Field Enterprises of America y contaba con equipos de radar muy modernos y con un mini submarino. Al frente del equipo se encontraba el experto en sonar y electrónica Robert Love.

Según Love: «Los pases de búsqueda móvil con una embarcación de sonar produjeron en 1969 nuevas pruebas de que existe un animal, por lo menos, de grandes dimensiones en las profundidades del lago Ness en Escocia».

Esta claro que existe una gran variedad de dispositivos y máquinas ca­paces de ampliar los límites de los sentidos humanos. Sin embargo, y en úl­tima instancia, los resultados que nos dan estos aparatos son analizados y captados por los sentidos del hombre via una imagen producida por la panta­lla de un osciloscopio, via un registro en una banda de papel, o a través de la observación directa del propio fenómeno. Los resultados obtenidos en el lago Ness por las diversas expediciones están sujetos, por tanto, a estas mismas condiciones.

En otras palabras, el error humano siempre estará presente en todas las investigaciones de este tipo y nunca podremos eliminarlo.

Esto fue lo que ocurrió con los experimentos de Love. En 1983 los ingenieros americanos Rikki Razdan y Alan Kielar descubrieron errores matemáti­cos y de interpretación en los resultados de las expediciones anteriores. Los objetos que habían sido reportados con movimiento propio eran estacionarios y los equipos de sonar eran los que se movían ya sea llevados por la corriente o porque sim­plemente estaban acoplados a una embarcación en movimiento[5].

Los mismos Razdan y Kielar colocaron un arreglo de 144 aparatos de so­nar cubriendo un área de 900 metros cuadrados. Prácticamente nada viviente en el Loch podría escapar de ser detectado por este impresionante equipo. Después de seis semanas de rastreo continuo los ingenieros se dieron por vencidos: no habían podido detectar al famoso monstruo.

EXPEDICIÓN MACKAL

En 1970 el biólogo y profesor de la Universidad de Chicago, Roy Mackal, organizó la que llegaría a ser conocida como la «Big Expedition». Mackal llevó hidrófonos que desplegó a todo lo largo del Loch. Se registraron «chirridos parecidos a los de los pájaros».

En octubre se registraron «golpes» y «clics» con otro hidrófono en la bahía de Urquhart. Estos sonidos eran seguidos por una «turbulencia» que fu interpretada como la cola de un gran animal en movimiento.

Se pensó que eran animales utilizando la ecolocalización para atrapar a sus presas. La intensidad de las llamadas era mayor a profundidades de menos de 100 pies. Los miembros del LNPIB decidieron intentar la comunicación con los animales que producían los sonidos al reproducir las llamadas grabadas anteriormente en el agua y escuchar a través de hidrófonos. Los resultados fueron muy diversos. A veces los patrones o la intensidad del llamando cambiaba, pero a veces no había cambio en absoluto.

SATELITES ARTIFICIALES Y CEBOS SEXUALES

En 1980 Roger Parker, director de una empresa de investigación marina, contrató los servicios de un satélite artificial francés para dar con el paradero del monstruo del Loch Ness.

Parker colocó a todo lo largo del lago Ness tres boyas dotadas de un sistema electrónico para registrar cualquier movimiento, sonido o cambio de temperatura en las profundidades del lago. Toda la información era transmi­tida por los sensores flotantes al satélite francés Argos, y éste la envia­ba a Tolouse, en Francia, donde Parker la recibía por teléfono.

«El uso del satélite es mucho más barato que si colocáramos un recep­tor en tierra y sólo cuesta unas 5 libras (10 dó1ares) por hora» -dijo Par­ker[6].

Parker tenía una experiencia de tres años en la utilización de este tipo de boyas, pero de nada le sirvió pues nunca logró detectar al «monstruo».

Un año antes, Robert Rines (el mismo de las fotografías) pretendió usar dos delfines amaestrados para filmar a Nessie.

Había pedido asesoría del Instituto Oceanográfico de California y del Departamento de Marina de los Estados Unidos para entrenar dos delfines que recorrerían el fondo del lago, provistos con cámaras de televisión inalámbricas[7].

No se sabe cuales fueron sus resultados, pero al parecer fueron negativos lo mismo que los «engaños o cebos sexuales» que había utilizado con an­terioridad[8].

OPERACIÓN DEEPSCAN

Del 9 al 11 de octubre de 1987, se llevó a cabo la Operación Deepscan – la mayor exploración con sonar del Loch Ness. Veinte pequeñas embarcaciones equipadas con aparatos de sonar fueron desplegadas, barriendo de arriba abajo el Loch Ness en línea, formando una «cortina de sonar». El organizador era Adrian J. Shine, quien dijo que los objetivos científicos del proyecto eran estudiar la distribución de los recursos pesqueros, la temperatura del agua, y el contenido del loch.

Se detectaron muchos objetos estacionarios. Sólo hubo tres contactos de sonar en movimiento. Después de analizar las imágenes de sonar se pensó que podrían ser peces de gran tamaño o tal vez desechos. No se encontró ninguna colonia de monstruos a pesar de haber peinado por completo el lago.

DISCOVERY Y OTRAS TELEVISORAS

Discovery Communications lanzó su propia expedición en 1993. Se siguieron varias vías. Una de ellas fue una nueva investigación de la fauna del lago: se descubrió una nueva especie de nematodo. También se realizaron mejoras y análisis a la película de Tim Dinsdale, la foto del cirujano y las fotos e la aleta de Rines.

También encontraron, usando un equipo de sonar, que el lago presenta una rara especie de perturbación submarina debida a la energía almacenada generada por los vientos. Esto provoca un desequilibrio entre las capas más cálidas y más frías del loch. Todos los resultados fueron mostrados en un programa llamado Loch Ness Discovered.

Loch Ness Monster: Search for the Truth, fue el programa que mostraba los resultados de la expedición del Global Underwater Search Team (GUST) de 2001.

La BBC no pudo encontrar ningún rastro de un «monstruo marino» en el Loch. Durante su expedición de julio del 2003, en la que utilizaron 600 haces de sonar separados. El equipo de la BBC llegó a la conclusión de que Nessie simplemente no existe.

ContinuarỦ


[1] De hecho esta fue la razón de que cancelaran todas sus actividades hasta 1972.

[2] El LNPIB fue fundado en 1961 por Richard Fitter, Sir Peter Scott, James David MP y la autora de More Than A Legend, Constance Whyte. Su sede se encontraba en 23 Ashley Place, London SW1, Inglaterra

[3] Braithwaite Hugh, & D. Gordon Tucker, Sonar picks up stirrings in Loch Ness, New Scientist, 40, 664-666, 19 de diciembre de 1968.

[4] Editorial, Monsters by sonar, Nature, 220, (5174), 1272, 28 de di­ciembre de 1968.

[5] Anonimo, The (retouched) Loch Ness monster, Discover, 2, (9), 6, septiembre de 1968.

[6] Cable de la agencia EFE, Caza al monstruo del lago Ness, Londres, 5 de enero de 1980.

[7] Noticiero de lo insó1ito, Delfines en busca de Nessie, DUDA, (407), 1, 18 de abril de 1979.

Harris Chris, El hombre que más ha visto al monstruo de Loch Ness, DUDA, (413), 3-4, 30 de mayo de 1979.

[8] Cable de la agencia AFP, Trampa sexual para Nessi, Londres, 10 de febrero de 1976.

Conjunción planetaria

Júpiter y Venus en conjunción esta semana

Por Fred Schaaf. The Press

29 de enero de 2008

Los dos planetas más brillantes no estarán tan cerca, como los veremos esta semana, hasta el 2014. Esta conjunción será seguida por una esplendorosa reunión de los dos planetas con una delgada luna creciente, el lunes.

Un espectáculo que no se deben perder: Incluso esta mañana y el miércoles por la mañana, los dos planetas estarán lo suficientemente cerca en el cielo como para impactar a la gente. Cuando ocurre este tipo de conjunción, algunas personas llaman a las autoridades para informar ovnis. Incluso las personas que normalmente no prestan atención a los cielos son transfiguradas por este tipo de vista. Mañana por la mañana, los dos planetas estarán separados 2 grados, lo suficientemente cerca para que usted, extendiendo el brazo, pueda llenar el espacio entre Venus y Júpiter con su dedo meñique. Pero el viernes, la mañana del máximo acercamiento, estos planetas estarán cuatro veces más cerca.

Cada día, los dos planetas saldrán un poco antes de las 5:30 a.m. No mucho después, aparecerán al Este los primeros rayos de la madrugada. A las 6 o 6:30 de la mañana, cuando comience la mañana comenzará a verse mucha luz, Venus y Júpiter estarán todavía bastante bajo en el cielo – al sureste, arriba a la derecha de donde aparecerá el sol.

Sigue en:

http://www.pressofatlanticcity.com/science_nature/story/7531460p-7433459c.html

¿Por qué los astrónomos no creen en los ovnis extraterrestres?

¿Por qué los astrónomos no creen en los ovnis extraterrestres?

En el último par de semanas, ha habido muchas historias en los periódicos sobre avistamientos de ovnis, en el Oeste de Texas. Incluso Larry King tuvo un segmento acerca de los avistamientos.

¿Creo que el pueblo de Stephenville vio algo que no pudo identificar en la noche? Sí. ¿Me parece que vieron a una nave espacial extraterrestre? No, en absoluto. ¿Esto me hace parte de una gigantesca conspiración del gobierno, o un cerrado de mente, de los llamados «expertos» más inteligentes-que-tú? No.

En primer lugar, quisiera decir que sospecho que hay vida ahí fuera en algún lugar en el Universo. Y, al igual que el agente Mulder de los Expedientes X, quiero creer que hay inteligencia extraterrestre que quiere hacer contacto con nosotros los seres humanos. Pero nunca he visto ninguna prueba que me lleve a sospechar que hay extraterrestres del espacio entre nosotros.

Posiblemente no puedo presentar una lista de todas las razones por las cuales no creo que la gente haya visto naves espaciales extraterrestres. Hay muchas, y las razones varían dependiendo de las circunstancias. Permítanme destacar algunas (y note que estas son sólo unas pocas, y que mis explicaciones no son detalladas para cada razón – no tengo suficiente espacio).

Nuestros ojos nos juegan malas pasadas. Nuestros ojos y el cerebro son increíbles máquinas de procesamiento de imágenes. En unos segundos, se puede obtener más información de un breve vistazo a un escenario que la que podría dar un robot en horas. Hemos tenido que desarrollar esto, o nuestros antepasados hubieran sido comidos por leones, tigres y osos, cientos de miles de años atrás. Pero nuestro cerebro y los ojos están sintonizados para la exploración de nuestro entorno inmediato – la búsqueda de amigos y enemigos, la determinación de lo que podemos comer y lo que puede tratar de comernos, ese tipo de cosas. Nosotros no lo utilizamos para buscar y entender el cielo. Es sólo cuestión de tiempo, podemos interpretar y comprender lo que vemos, pero aún así, nosotros (y me incluyo a mí mismo) a menudo hacemos las cosas mal a primera impresión. Y cuando hay algo fuera de lo común (como una estrella muy brillante cerca del horizonte, o un planeta brillante, o un avión o satélite), la mayoría de la gente (de nuevo, yo mismo incluido) hacemos las cosas mal si no hacemos un esfuerzo concertado para comprender lo que estamos viendo.

El viaje espacial es increíblemente difícil. Desde que los seres humanos hemos viajado a la luna, y desde que hemos enviado sondas para llegar a los confines de nuestro Sistema Solar, tendemos a subestimar el tamaño y la forma hostil del Universo. Y, aunque puede haber física que aún no hemos descubierto que nos permita viajar con seguridad entre las estrellas, en este momento no vemos ninguna prueba de que exista ese tipo de física. Es cierto que es un pobre razonamiento decir que la ausencia de evidencia de física avanzada significa que no existe, pero es igualmente un razonamiento pobre decir que la ausencia de evidencia de física avanzada significa que es probable que exista.

El gobierno no puede mantener un secreto. El encubrimiento gubernamental es una excusa comúnmente citada de la falta de pruebas de extraterrestres del espacio. Pero nuestro gobierno, tan grande e impactante como pueda ser, no puede ocultarnos los secretos por mucho tiempo. Incluso los grandes secretos, como la falsificación de documentos utilizados para justificar una guerra, escuchas telefónicas, la tecnología de las aeronaves Stealth, se fugan al público mucho antes de lo que el gobierno quisiera.

De hecho, el gobierno puede tener una buena razón para alentar historias de naves espaciales extraterrestres. Si varios avistamientos de ovnis son realmente pruebas de aviones secretos, mantener a las personas ladrando al árbol de las naves espaciales extraterrestres, ayudará a preservar el secreto de los programas de aviones.

Entonces, ¿qué me haría falta para creer que un ovni es una nave espacial probablemente extraterrestre? Tener datos. Duros, datos incontrovertibles. ¿Qué significa esto? Bueno, una persona que informa que un objeto estaba a «unos mil pies arriba en el cielo» está casi seguramente equivocada «“ las personas son malas para juzgar la distancia vertical. Pero, si hay múltiples informes detallados del mismo objeto (por ejemplo, uno que diga: «Vi el objeto mientras estaba sentado ocho pies al oeste del árbol de arce en mi patio, y estaba a 16 grados por encima del horizonte, 78 grados al Este dirigiéndose hacia el Norte, moviéndose a 162 grados a una velocidad de 1,6 grados por segundo, y la hora era 8:16:35 p.m.», y otra persona con un informe detallado de manera similar, al mismo tiempo, desde otra ubicación), es posible determinar la verdadera altura, dirección, y velocidad de un objeto. Sin embargo, estos informes tienen que ser al menos tan detallados como el informe anterior, o bien cualquiera de esos cálculos no tienen sentido.

Aquí es donde la cinta de vídeo puede ser útil, pero el video tiene que ser de excelente calidad, con sellos de tiempo preciso a una fracción de segundo, marcas visibles, y, de preferencia, estrellas visibles en el cielo. Usted debe decirse a si mismo, «Â¡pero nadie tiene ese tipo de detalles!» Y tiene usted razón – este es el motivo por el que los informes de los testigos, incluso de observadores muy sagaces, no están en condiciones de demostrar muchas de las «milagrosas» acciones de los supuestos ovnis extraterrestres – tremenda velocidad, aceleraciones extrañas, y así sucesivamente. Con múltiples observaciones simultáneas, se puede utilizar la trigonometría para determinar exactamente qué tan alto y veloz es un objeto en movimiento – ¡incluso es posible obtener las órbitas de los satélites de esta manera!

Pero estas observaciones no son imposibles. Una campaña de la NASA para la investigación de la lluvia de meteoros Aurigidas usó cámaras de vídeo exactas en dos aviones para mirar la lluvia de meteoros, lo que permitió determinar la posición, altitud, y velocidad exacta de los meteoros. Informes precisos y vídeos de una bola de fuego (meteoros muy brillantes), que golpeó un coche cerca de Peekskill, Nueva York, en 1992, permitió determinar la órbita de los meteoros alrededor del sol. Los astrónomos aficionados utilizan cámaras de vídeo sincronizada para filmar asteroides que pasan delante de estrellas débiles, lo que les permite determinar el tamaño y la forma de los asteroides. Pero el hecho es que casi todos los videos tomados de ovnis no son de calidad suficiente para hacer el análisis necesario.

Voy a terminar con una historia real de algunos vídeos de «ovnis» que tuve la oportunidad de ver. Fueron tomados por un equipo de noticias en Santa Cruz, California, que oyeron un informe de un ovni, y tomaron más de 15 minutos de vídeo que muestra la «nave espacial» que pasó lentamente sobre el océano. Las cámaras tenían marcas de tiempo precisas, y desde su punto de vista yo podría decirle exactamente dónde se había colocado la cámara y la dirección de lo que estaba viendo. Luego me fui a un programa de planetario, metí la fecha, hora y ubicación de las cámaras, y vi que tenían un muy bonito video del planeta Venus ocultándose en la zona oeste del cielo. La gente del noticiario se decepcionó, y hasta se molestó un poco que yo no estuviera de acuerdo que era una nave espacial extraterrestre aterrizando en el océano Pacífico. Pero deberían haber estado felices, porque hemos sido capaces de determinar exactamente lo que habían visto. Y ese es el tipo de pruebas que necesitaríamos de una nave espacial extraterrestre.

Carl Sagan dijo, «las afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias». Para estar seguros, los científicos siempre se aproximan a un fenómeno desde el lado negativo «“ asumen que algo no existe, y esperan a que se pruebe que existe. Una montaña de pruebas marginales (típico en los avistamientos de ovnis) no cumple con la carga de la prueba. La evidencia que será necesaria que consigan los científicos para aceptar las afirmaciones de naves espaciales extraterrestres deberá ser exquisita e incontrovertible. Yo no confiaría en mis propios ojos como evidencia.

http://www.professor-astronomy.com/blog/2008/01/why-astronomers-dont-believe-in-alien.html

Nuevo nombre de Área 51: Aeropuerto Homey

Área 51 designada con un nombre nuevo

Por Philip Swing

Miércoles Enero 23 2008

El área de pruebas clasificada de la Fuerza Aérea en Groom Lake, Nevada, nunca ha carecido de evocadores apodos – ésta y su espacio aéreo restringido han sido llamadas Dreamland, Rancho Paraíso, The Box y, más famosamente, Area 51. Ahora hay un nombre menos romántico para agregar a la pila: «Aeropuerto Homey», de acuerdo con unas pocas revistas de aviación civil.

«Aeropuerto Homey» aparece ahora como el nombre oficial de una cierta base aérea cerca de un cierto lago seco en Nevada, de acuerdo con informes en el sitio Web de Aircraft Owners and Pilots Association, así como el blog Daily Aviator y otros. Nuevas ediciones de software de planificadores de vuelos y aparatos GPS para aviadores civiles enlistan el nombre y la designación oficial como «KXTA» – que los wags en línea especulan que significa «aeropuerto extraterrestre». (La designación «K» sólo indica que el campo está en los EU, de acuerdo con la Administración Federal de Aviación.)

La capitana Jessica Martin, una portavoz de la base aérea de Nellis, que se encuentra a 85 millas al sur del aeropuerto de Homey y es responsable de todo el espacio aéreo y las instalaciones de tierra, dijo «ya sabemos acerca de la designación, pero no tiene ningún efecto sobre las operaciones en la base».

Martin dijo que ella no conoce el origen del nombre «Aeropuerto Homey».

Destacada en películas, programas de televisión y juegos de video, Área 51 es probablemente la instalación secreta más famosa del mundo y la favorita de las teorías de la conspiración militar ovni.

El Departamento de Defensa aún no reconoce que la base existió hasta 1994, cuando los antiguos empleados de la base demandaron al gobierno y denunciaron que habían sido envenenados por materiales peligrosos utilizados en la base para la investigación en la tecnología stealth.

Aunque la base y su trabajo han estado clasificados durante mucho tiempo, muchos de los aviones probados ahí a través de los años, son públicamente conocidos: el U2 y SR-71 los aviones espía Blackbird y el F-117 Nighthawk caza stealth, todos volaron primero en las largas pistas de aterrizaje y la cama seca del Groom Lake.

Algunos entusiastas creen que hoy en día se sigue trabajando en aeronaves avanzadas – incluidos vehículos aéreos no tripulados, aparatos de reconocimiento de alta velocidad e incluso dirigibles de gran altura – aunque los aficionados de la conspiración extraterrestre también especulan que el alto perfil de Área 51 ha obligado a los funcionarios a pasar gran parte de las cosas altamente secretas a la Dugway Proving Ground del Ejército, en Utah.

http://www.airforcetimes.com/news/2008/01/airforce_area51_newname_080122w/

Ovni sobre Philadelphia

Videos de hombre de lo que él cree es el ovni del 17/18 de enero

Esto tuvo lugar anoche al suroeste de PA. Esto es muy similar al avistamiento de San Diego, aunque este es mucho más extraño debido a que las luces parpadeaban.

Note, en la esquina superior izquierda un extraño y rápido efecto de estrella fugaz.

Yo estaba en shock y con miedo (sólo me quejaba del frío, ya que era de 20 grados y yo estaba en camiseta). Llamé a la policía y en ese momento nadie vio que ya se ha ido. Nadie que yo conozca lo vio, ¡pero tengo la prueba en video!

Vi por mi ventana y capté un leve atisbo de algo rojo-naranja y salí a mi porche para verlo. No escuche ningún sonido, lo que se espera para los aviones o helicópteros. Lo más extraño de todo esto es lo rápido que se movió el objeto a la izquierda, que incluso no puede ver su forma, sólo parecía un rayo de luz. La mejor manera de verlo es ampliar el vídeo a pantalla completa, y mirar alrededor de los 5-10 segundos.

http://www.liveleak.com/view?i=c60_1200691856