SONIC O CHUPACABRAS
Kentaro Mori
El chupacabras del folklore se parece tanto en su aspecto a un personaje del videojuego contemporáneo, «Sonic, el puerco espín». Este texto no propone defender que el personaje electrónico sea el origen de la figura del chupacabras, sino estudiar algunas similitudes curiosas. Ya otros habían notado las semejanzas, no obstante en forma de broma. Sin embargo hay algo serio detrás de esto y su significado, si es que tiene alguno, será sugerido al final.
APARIENCIA
La representación más conocida del chupacabras está relacionada a la génesis de tal nombre en Puerto Rico. Si el lector leyó ya alguna referencia sobre el tema, es más que probable que haya visto una versión del bosquejo original de Jorge Martin. Fue creado en diciembre de 1995 a partir del «caso» de Madelyne Tolentino, tres meses antes, y algo que distingue este bosquejo de otros tantos diseños de monstruos y seres extraterrestres son las curiosas extensiones puntiagudas que salen de las costillas (espina dorsal) del ser.
Este es exactamente el aspecto más notable de la figura de Sonic, el personaje creado en 1991 por Naoto Oshima y adoptado como mascota de la compañía de juegos electrónicos Sega. Como puerco espín estilizado, las espinas son fácilmente comprensibles.
La serie de juegos Sonic, que continúa hasta el día de hoy, alcanzó su mayor éxito justamente a mediados de los años 90. Sitios on-line mencionan que por esa época los niños americanos reconocían más la figura del puerco espín azul que la de otros iconos como Mickey Mouse, Abraham Lincoln o Mario (la mascota electrónica del competidor Nintendo).
En la descripción original del chupacabras, los «apéndices similares a espinas» se mencionan como «de colores claros fosforescentes («¦) corriendo a lo largo del cuerpo, de la cabeza al final de las costillas». Los «colores de las espinas cambian constantemente de color de rojo a azul, amarillo, verde, naranja y violeta». Cuando Sonic adopta la forma de una bola, al rodar y usar sus espinas, también se envuelve en una esfera brillante de colores que cambian. Todo el juego está lleno de colores fosforescentes.
HISTORIA
«Al principio creí que estos animales eran el resultado de un experimento genético o biónico», dijo Jorge Martin. Esta fue una de las primeras especulaciones en torno al origen y naturaleza del chupacabras, que persiste hasta hoy, aún cuando han aparecido otras historias a lo largo del tiempo «“»hoy creo que no son de origen terrestre», del mismo Martín, por ejemplo.
Los responsables del experimento genético o biónico» serían los americanos, que poseen bases militares en Puerto Rico. Se especuló que una o más de estas aberraciones genéticas simplemente habían escapado. Esta versión en particular es un paralelo casi exacto de la trama de los juegos de Sonic.
«Había una vez un mundo pacífico llamado Mobius (o Tierra del futuro) que fue amenazado cuando el Dr. Kintobor (o Ivo Robotnik, o Eggman), un amable científico que estaba investigando las poderosas Esmeraldas Caos, fue transformado en un furibundo megalómano después de sufrir un accidente en el laboratorio». Todos los lindos animales del planeta son transformados en seres robóticas del mal (Badniks) «“excepto Sonic un puerco espín, amigo de Kintbor que era demasiado rápido para ser capturado. Ahora Sonic debe encontrar todas las Esmeraldas Caos, rescatar a sus amigos y derrotar a Kintbor antes que sea demasiado tarde».
El Dr. Kintbor, o Robotnik, transforma animales graciosos en robots biónicos esclavos, para contaminar y destruir la naturaleza. Todo el tema del juego está relacionado con el movimiento ecológico y el mal uso de la tecnología (tan evidentes en aquellos años, que llegaron a puntos tan bizarros con figuras infantiles como el «Capitán Planeta»).
DISCUSIÓN
La leyenda del chupacabras no apareció de la nada en 1995. Tampoco debe haber surgido a partir del personaje azul del videojuego. Tiene antecedentes más claros que van de la «mutilación» de animales en los Estados Unidos al «Vampiro de Moca», ambos de los años 70, décadas antes. Las coincidencias entre el aspecto y la historia de Sonic y la criatura vampiresca pueden ser también eso: coincidencias.
Para representar las espinas o «apéndices» en la columna de un animal en la forma en que Martin las representó no se necesita basarse en el diseño de Sonic. Cualquier niño, instado a dibujar un puerco espín, puede representar al animal de forma semejante. El chupacabras, por otra parte, a pesar de que sus espinas a veces eran descritas como fosforescentes, tenía el resto del cuerpo en tonos oscuros, grandes ojos rojos, garras, y piernas parecidas a las de un canguro. Algo bien diferente al personaje infantil.
Hechas estas excepciones «“y muchas otras más, incluyendo la enorme diversidad de descripciones del chupacabras- no se puede dejar de sugerir, sin embargo, que las coincidencias no sean «meras» coincidencias. Tanto Sonic como el chupacabras son productos culturales que se difundieron con éxito en una misma época. Ambos son referidos en singular, como si no existieran los chupacabras o los sonic. «Creo que es un fenómeno sociológico. Noten que siempre se habla «del» chupacabras, y no de «los» chupacabras», escribió el argentino Max Seifert.
Mientras que Sonic no debe ser el origen del chupacabras, detrás de ambos pueden estar influencias y referencias culturales semejantes. Y, después de todo, es posible que el ama de casa Madelyne Tolentino haya jugado mucho con el Sega MegaDrive de sus hijos. Quizás no, tal vez haya sido el mismo MasterSystem.
el chupacabras es feo y malo ..sonic es guapo y bueno!!
jajajaja y qe sonic jajajaja buena esa!!