La idiotez, fabricaciones y mentiras de los antiguos astronautas
11 de mayo 2012
Brian Switek
A pesar de lo que pudieran decir los clásicos loquitos, el Tiranosaurio y el Triceratops no fueron llevados a la extinción por los extraterrestres.
Hasta ahora, he evitado cuidadosamente ver Ancient Aliens. Tenía la sensación de que si yo veía el programa -que populariza las pruebas inverosímiles, estaría libre de la idiotez acerca de cómo la historia humana ha sido moldeada por los visitantes extraterrestres-, mi cerebro empujaría tratando de salir de mi cráneo y caería a tierra en busca de un huésped amable. O, al menos, ver el show mataría tantas células de mi cerebro, como un fin de semana en Las Vegas. Pero entonces oí que la pseudociencia del History Channel había tomado a los dinosaurios. Me armé de valor para el dolor y vi el despliegue de locura fundidora de mentes.
Estoy realmente contento de que mis editores no me permitan maldecir en este blog. Si lo hicieran, mi reseña completa sería poco más que una sarta de improperios. Teniendo en cuenta mis limitaciones, no tengo más remedio que tratar de encapsular el brillante documental, en el formato de basura, de una manera más coherente para el lector sensible.
El episodio es lo que se obtendría si se metiera en una licuadora un poco de propaganda creacionista, Erich von Däniken en Recuerdos del futuro y la cantidad normal de Jurassic Fight Club. El resultado es una mezcla viscosa e incomprensible de especulación ociosa y mentiras absolutas, que enfrenta a los entusiastas «teóricos de los antiguos astronautas», como el narrador generosamente los llama, en contra de «la ciencia convencional». Yo diría que «No pueden inventar estas cosas», pero tengo la sensación de que eso es exactamente lo que estaban haciendo la mayoría de las personalidades del programa.
Había tantas cosas equivocadas con el episodio de Ancient Aliens que podría pasar toda la semana tratando de contrarrestar toda afirmación incorrecta. Esta es una técnica común entre los locos y los auto-designados desafiantes de la ciencia, se llama Gish Gallop por el creacionista Duane Gish. Cuando hacía presentaciones públicas sobre la evolución y el creacionismo, Gish rápidamente escupía una serie de interpretaciones erróneas y falsedades para enterrar a su oponente bajo una avalancha de ficciones y distorsiones. Si el oponente de Gish trataba de desenterrarse, nunca sería capaz de avanzar lo suficiente como para liberarse y enfrentar a Gish directamente. Ancient Aliens utiliza la misma táctica -las ficciones vienen rápido y furioso.
Mientras que el punto principal de este episodio es que los extraterrestres exterminaron a los dinosaurios para dar paso a nuestra especie -un escenario de ciencia-ficción acompañado de alguna hilaridad, mezclados en puré de imágenes de dinosaurios que huían de ametrallamiento de naves extraterrestres, tal vez una vista previa de la película Dinosaurs vs. Aliens– los diferentes expertos en antiguos astronautas no hacían más que afirmar que un evento así había ocurrido. Sorpresa, sorpresa, no proporcionaban ninguna evidencia real de sus afirmaciones. En vez de eso, pedían pruebas a los cristianos fundamentalistas, que en realidad nunca se identificaron como tales. El Creacionista Michael Cremo es identificado sólo como el autor de Forbidden Archeology, y Willie E. Dye es reconocido como un arqueólogo bíblico sin ninguna mención de sus puntos de vista creacionistas de la tierra joven. Los productores de Ancient Aliens claramente no se preocuparon por las credenciales o la experiencia de las cabezas parlantes que emplearon -con tal de que alguien dijera las cosas bien delante de la cámara.
Y los creacionistas no me decepcionaron. Hacia la mitad del programa, Cremo dice: «Algunos investigadores encontraron huellas humanas junto a huellas de dinosaurios». La cita es una línea fuera de contexto de la entrevista de Cremo, pero se pasó en una sección alegando que el paleontólogo Roland T. Bird, del Museo Americano de Historia Natural, encontró huellas humanas asociadas con huellas de dinosaurios en las proximidades de Glen Rose, Texas.
Bird no encontró ninguna de tales cosas. Él encontró muchas huellas de dinosaurios y pisadas -una de las cuales él y su equipo excavaron parcialmente y anacrónicamente colocaron detrás del «Brontosaurio» de AMNH-, pero no hay huellas humanas. Extrañamente, sin embargo, huellas humanas falsificadas desempeñaron un papel en la decisión de Bird para visitar inicialmente los sitios de huellas.
Bird no era la primera persona en notar las huellas de dinosaurios, y vender las huellas de saurópodos y terópodos era una industria casera en las proximidades de Glen Rose. Y algunas personas locales tallaron huellas humanas falsas en la misma piedra. Bird en realidad vio un par de esas falsificaciones en un puesto de comercio en Gallup, Nuevo México, junto con huellas de dinosaurios extraídas de la zona de Glen Rose, poco antes de su partida para investigar el sitio mismo.
Bird no se dejó engañar por las falsificaciones. Él las vio por lo que eran, y estaba mucho más interesado en las huellas de dinosaurios reales impresas en la misma piedra. Sin embargo, algunos creacionistas, cegados por el dogma, han puesto su fe detrás de las falsificaciones e incluso en las huellas de dinosaurios que se han malinterpretado como huellas humanas. Cuando los dinosaurios terópodos se ponían en cuclillas, por ejemplo, la parte trasera de sus piernas, los metatarsos, dejaron depresiones ligeramente curvadas en los sedimentos del Cretácico, y los creacionistas han mal interpretado estas marcas como huellas de gente antigua.
Dye retoma la línea creacionista estándar de que humanos y dinosaurios coexistieron y reaparece un poco más tarde en el episodio para dar su apoyo a un icono diferente del sentido creacionista -las Piedras de Ica en Perú. Estas falsificaciones son unas famosas piedras grabadas con imágenes de dinosaurios y humanos interactuando entre sí. Fueron creadas por el agricultor Basilio Uchuva y su esposa, con representaciones de la cultura pop de dinosaurios en los libros, como sus guías. A pesar de ello, tanto Dye y el programa Ancient Aliens presentan las piedras como si fueran auténticos objetos antiguos que registran la supervivencia de los dinosaurios como los Triceratops hasta el día de hoy. Dye dice que los pueblos antiguos deben haber sabido mucho acerca de los dinosaurios porque las piedras se grabaron de forma tan precisa, aun cuando sabemos que la precisión provenía de la copia tan cuidadosa que Uchuva hizo de los dinosaurios artísticos del siglo veinte. El narrador dice que los científicos se muestran escépticos sobre el origen de las piedras, pero nada más.
El programa ofrece algunas otras joyas terribles. Nuestro narrador pasa largo y tendido sobre cómo la datación por carbono 14 no es confiable para saber la edad de los dinosaurios, pero los paleontólogos no utilizan el carbono-14 para estimar la edad de los dinosaurios no aviares. La datación por radiocarbono sólo funciona para los materiales que contienen carbono hasta unos 60,000 años. En cambio, los paleontólogos utilizan diferentes técnicas de datación radiométrica para limitar la historia de los dinosaurios no aviares. En el fechado con uranio-plomo, por ejemplo, los geólogos investigan la relativa abundancia del uranio y el plomo, el uranio se descompone en elementos, para determinar la edad de la roca se toman muestras de los materiales.
Se utilizan diferentes sistemas de datación para las rocas de diferentes edades, y estas técnicas han puesto las estimaciones de tiempo de cuando vivían los dinosaurios. La clave es encontrar capas tales como capas de ceniza que contienen materiales radiactivos y están por encima o por debajo de las capas que contienen los dinosaurios. Dado que los huesos de dinosaurios en sí no pueden ser fechados de manera fiable, los geocronólogos determinan la edad de la roca de abajo, o por encima, para limitar el plazo en que vivió el dinosaurio. Ancient Aliens, que depende de los puntos cansados de los creacionistas, lanza calumnias sobre un proceso que los creadores del programa no lo entienden claramente.
Pero mi parte favorita de ese balbuceo involucra el destino final de los dinosaurios. El programa no puede ni siquiera mantener su propia historia. La personalidad marginal de la televisión Franklin Ruehl presenta un caso de la existencia moderna o reciente de los dinosaurios no aviares a través del celacanto. Estos peces arcaicos de aletas lobuladas, que Ruehl señala con razón que estaban ahí mucho antes que los dinosaurios evolucionaran por primera vez, se creían extinguidos antes de que uno vivo fuera izado frente a Sudáfrica en 1938. Desde entonces, se ha hecho un puñado de hallazgos de celacantos fósiles, como puente entre sus representantes modernos y los que vivieron a finales del Cretácico, hace 66 millones de años. Su reaparición inesperada a menudo ha sido utilizada por los criptozoólogos y verdaderos creyentes de diversas tendencias para afirmar que algún linaje prehistórico puede realmente estar por ahí todavía, aunque no hay evidencia real para sugerir que esto es así.
Sin embargo, como ha señalado varias veces el paleontólogo Darren Naish, el celacanto es una pista falsa. En los estratos de los últimos 66 millones de años más o menos, por lo menos, los fósiles de celacanto son raros y difíciles de identificar. En realidad no es de extrañar que su registro fósil parezca haberse agotado. Los dinosaurios no aviares, sin embargo, tenían huesos que van mucho más allá del diagnóstico. De hecho, la resolución de las épocas prehistóricas se pone mejor a medida que investigamos porciones de tiempo que se acercan al presente. Si criaturas tan grandes y distintivas como el Triceratops, el Estegosaurio, el Apatosaurio y el Tiranosaurio realmente prosperaron durante millones de años después del impacto de un asteroide del final del Cretácico, ellos han aparecido en el registro fósil hasta ahora. La evidencia es clara, con la excepción de los dinosaurios aviares, todos los otros linajes de dinosaurios se extinguieron hace alrededor de 66 millones de años.
Sin embargo, poco después que Ruehl hizo su proclamación, el programa completo se olvida de lo que dijo. Cerca de la conclusión del programa, el narrador especula que los extraterrestres manipularon el ADN de los dinosaurios para convertirlos en criaturas más pequeñas y menos peligrosas como el celacanto. No importa que los celacantos estaban ya presentes en los océanos del mundo hace más de 360 millones de años -más de 130 millones de años antes que los dinosaurios evolucionaran. La sugerencia es una tontería sin adulterar (como todo el programa, en realidad). Y luego, el extraño fanático de pelo alocado, Giorgio Tsoukalos, lanza otra idea. Los celacantos realmente se extinguieron, sugiere, pero fueron revividos por «los extraterrestres» millones de años después. ¿Por qué? A Tsoukalos no parece importarle. Y sus compañeros cabezas parlantes por lo general murmuran acerca de que los extraterrestres despejaron el camino a nuestra especie de alguna forma.
El programa parece que no puede decidir si los extraterrestres exterminaron a los dinosaurios hace 66 millones de años o si los dinosaurios de alguna manera sobrevivieron a la era moderna. ¿Qué es esto? ¿Los extraterrestres despejaron a los dinosaurios para que pudiéramos vivir? ¿O es que algunos dinosaurios escaparon de la extinción de alguna manera? Ideas que compiten rebotando como pelotas de ping-pong durante todo el episodio. El abuelo Simpson cuenta historias más coherentes.
Había unos pocos científicos reales en el programa. Los paleontólogos Luis Chiappe y Mark Wilson, por ejemplo, aparecieron durante el show. No puedo dejar de sentirme mal por ellos, y me preguntó si los científicos simplemente deberían boicotear aparecer en este tipo de programas. Aunque creo que vale la pena y es esencial llamar a las falsas afirmaciones hechas en el nombre de la ciencia -tales como el diseño inteligente y los mitos los dinosaurios vivos- programas como Ancient Aliens sólo abusan de los científicos. Los investigadores responsables son típicamente tomados fuera de contexto para ayudar a crear ficciones sin soporte arrojadas por el club de fans de los extraterrestres. Programas como Ancient Aliens, MonsterQuest y Finding Bigfoot aparentemente tienen poco o ningún interés en la realidad, hablando de la ciencia. La especulación más amarillista siempre triunfará. En estos programas, los científicos simplemente no pueden ganar.
Ancient Aliens es uno de los lodos más nocivos en el fondo del bote de basura de la televisión. Los expertos reales son traídos a entregar documentos que son retorcidos y sacados fuera de contexto, mientras que los fanáticos se les dan rienda suelta. La ficción se presenta como un hecho, y la investigación científica real es tan groseramente tergiversada que sólo puedo concluir que el programa miente activamente a los espectadores. Presentar el programa como un documental, en una red de no-ficción, es una medida odiosa en el giro de History Channel. (Técnicamente, Ancient Aliens se transmite en una rama del History Channel llamada H2.) Si la red y los creadores del programa quieren presentar Ancient Aliens como un estudio de las ideas marginales y que quede claro que las ideas no están destinadas a ser serias, no puedo discutir con eso. Sin embargo, Ancient Aliens y programas como ese tiran la comprensión científica real mediante la promoción de locuras absolutas. Ancient Aliens es peor que la mala televisión. El programa muestra un desprecio total por la ciencia y lo que realmente sabemos acerca de la naturaleza.
http://blogs.smithsonianmag.com/dinosaur/2012/05/the-idiocy-fabrications-and-lies-of-ancient-aliens/
