ESCRUTINIO
Una mala alternativa para las gaseosas[1]
Juan José Morales
Ante los peligros para la salud «”particularmente para los niños»” que representa el consumo de refrescos carbonatados, muchas madres han optado por dar a sus hijos bebidas embotelladas sin gas que consideran más sanas y nutritivas. Por ejemplo, té.
Pues bien, resulta que, según reveló un estudio realizado por la asociación civil mexicana El Poder del Consumidor, la bebida Nestea «dista mucho de ser una opción saludable para el consumo de adultos, mucho menos para niños y niñas». Por lo contrario «”señala el documento»” puede resultar nociva para los pequeños y es «otro claro ejemplo de productos que exageran sus propiedades y mienten en su etiqueta para engañar al público consumidor».
La investigación en que se basa lo anterior fue realizada por la nutrióloga Xaviera Cabada, coordinadora de Salud Alimentaria de la citada organización.
Mucha gente considera los tés embotellados una buena alternativa al consumo de gaseosas, pero tienen un alto contenido de azúcar.
La bebida en cuestión, presentada en envases de 600 mililitros, contiene «”dice la nutrióloga»” 48 gramos de azúcar en cada botella. Para sorpresa de muchos, esa cantidad de azúcar es mayor que la contenida en una típica gaseosa de cola y equivale casi a diez cucharadas cafeteras «”9.6 para ser exactos»”, lo cual representa del 137% al 192% de la cantidad de azúcar que un adulto puede consumir en todo el día.
Evidentemente, tan exagerada cantidad de azúcar se le añade a la bebida para hacerla más atractiva al paladar infantil, e incluso de algunos adultos, sin que a los fabricantes importe el daño que puede causar a la salud de los consumidores.
Al respecto, señala el estudio que de acuerdo a la Asociación Norteamericana de Cardiología, el máximo de azúcar que debe incluirse en la dieta de una persona adulta para no causarle problemas de salud, es de cinco a siete cucharadas cafeteras al día. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud, que es más laxa al respecto, establece como límite máximo de consumo de azúcar, diez cucharadas diarias.
Aun considerando el más amplio límite fijado por la OMS, dice el estudio a que nos referimos, resulta que un adulto que tome una botella de Nestea de 600 mililitros, estará tomando el máximo diario de azúcar recomendado por los médicos. Todo lo demás que consuma con otros alimentos y bebidas será en exceso.
Y esto «”hay que recalcarlo»” se refiere a las personas adultas. Pero si un niño toma esa bebida, estará consumiendo azúcar en demasía, con todas las consecuencias que ello implica: sobrepeso, obesidad, caries dental, riesgo de diabetes y posibilidades de sufrir problemas cardiovasculares.
Hay que recordar que México ocupa un nada envidiable primer lugar mundial en sobrepeso y obesidad infantil. Y hay que recordar también que un elevado consumo de azúcar se traduce en mayor riesgo de sufrir graves problemas de salud ligados a la diabetes. Por ejemplo, retinopatía diabética, que puede ocasionar ceguera.
El estudio de la nutrióloga Cabada señala que esta bebida, que muchos consideran una buena alternativa a las gaseosas, no resulta apropiada para consumo habitual en adultos, mucho menos para niños y niñas. En todo caso, se puede usar de manera muy ocasional, pero en vez de ella sería mejor preparar en casa verdadero té, con una cantidad moderada de azúcar «”difícilmente una madre le pondrá diez cucharadas»” y dárselo al niño en un termo para llevar a la escuela. Será una bebida realmente sana y mucho más económica.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Jueves 30 de agosto de 2012. Reproducción autorizada por Juan José Morales