Y siguen los timos con células madre

QUE NO LE DIGAN, QUE NO LE CUENTEN

Y siguen los timos con células madre[1]

Juan José Morales

Una triquiñuela muy usada por los embaucadores vendedores de productos milagro y falsos procedimientos curativos, es echar mano de términos científicos que por alguna razón se han vuelto muy conocidos o se mencionan con frecuencia. Tal es el caso de las células madre, sobre las cuales en los últimos años se ha publicado mucho en relación con la posibilidad de usarlos para regenerar órganos o devolver al organismo ciertas funciones.

La «”llamémosle así»” popularidad de que gozan las células madre, aunada a lo poco que el público en general sabe realmente acerca de ellas, ha permitido que cualquier charlatán utilice su nombre para promover la venta de seudomedicamentos. Hay ahí, por ejemplo, cremas supuestamente rejuvenecedoras de las que se dice que por contener células madre, estimulan la formación de nueva piel para reemplazar a la que ha sido ajada por el paso de los años.

Pues bien, un amigo lector me pide opinar sobre el mensaje que recibió recientemente por correo electrónico ofreciéndole en venta cápsulas de «estimulador de células madre», que casi prometen hacer caminar de nuevo a los inválidos, recobrar la memoria aún en los peores casos de Alzheimer, transformar en jovenzuelos a los ancianos y «”como es de rigor en todo buen producto milagro»” acabar en un santiamén con cualquier tipo de cáncer.

imageHay en el mercado muchos productos que dicen estimular la producción de células madre para reparar cualquier órgano dañado y un sinfín de enfermedades. Pero en realidad no son medicamentos sino complementos alimenticios, y sus supuestas propiedades curativas no han sido comprobadas científicamente.

El mensaje, enviado desde Cancún por la vendedora del menjurje en cuestión, dice con una desordenada combinación de mayúsculas y minúsculas y un pésimo uso de los acentos y los signos ortográficos:

«TU MAMITA O TÙ YA NO PUEDEN CAMINAR?? Léelo y por favor compàrteselo a alguien enfermo, gracias! CON LAS CÁPSULAS DEL ESTIMULADOR DE TUS CÈLULAS MADRE Tus RODILLAS RECUPERARÁN EL CARTÍLAGO EN TIEMPO RÉCORD pueden dejar atrás así mismo ese horrible dolor e inflamación que no te permiten caminar, pueden volverte la vida y evitarte la cirugía para una prótesis, puedes dejar ya el bastón, en pocas palabras»

Basta leer lo anterior para percatarse de que se trata de charlatanería pura. Pero todavía hay más. Este misterioso estimulador «Orgullosamente hecho en Laboratorios Mexicanos» con una «Fórmula Herbolaria (que) no daña tu hígado, sin contra indicaciones», no sólo promete acabar con tan horrendos dolores de rodilla, sino también atacar los más disímbolos padecimientos, pues se anuncia «”producto milagro había de ser»” como «Especial para enfermos del Riñòn, Diabèticos, RODILLAS Y CADERAS DETERIORADAS, Esclerosis Mùltiple, Diverticulitis, Lupus, Chron (?), Fibromialgia, Alzheimer, Parkinson, Psoriasis, Sangrado de Pròstata, todo tipo de Cancer, Artitis Reumatoide».

Basta echarse entre pecho y espalda unas capsulitas del tal estimulador y, ¡voilá!, «Tus cèlulas madre van a atacar tu enfermedad multiplicándose a gran velocidad para rejuvenecer y hacer todo nuevo». Y por si todo ese ramillete de prodigios fuera poco, podrás «recuperar tu actividad sexual».

Agradezco su confianza a mi amigo lector, y desde luego sólo puedo responderle: Que no le digan, que no le cuenten. Ese mensaje no es más que palabrería hueca, sin una pizca de verdad. No tire su dinero a la basura comprando un falso medicamento.

Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx


[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Jueves 17 de noviembre de 2016

La fotografía Crossland (Segunda parte)

LA FOTOGRAFÍA CROSSLAND

Continuamos con los documentos que se encuentran en el libro Azul referentes a la fotografía tomada por Robert Crossland en Birmingham, Alabama, el 6 de julio de 1947. Tal es el caso del Documento MAXW-PBB2-1042:

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XXXXX

 

C O P I A

 

DESCLASIFICADO

 

CUARTELES

 

A/JCN/ale

 

BIRMINGHAM AIR RESERVE TRAINING DETACHMENT

 

BIRMINHAM ARMY AIR FIELD

 

Birmingham, Alabama

 

8 de julio de 1947

 

ASUNTO: Informe sobre «Disco Volador» local

 

PARA: Comandancia General

 

Fourteenth Air Force, ADC

 

Orlando, Florida

 

Attn: A-2

 

1. Se incluye aquí una fotografía del «disco volador publicitado», que fue supuestamente presenciado sobre Birmingham en la noche del domingo, 6 de julio de 1947.

 

2. Se invita a la atención sobre las dos manchas de luces en la impresión y la estela de luz que sigue a los dos discos. La flecha en la parte superior de la fotografía indica la dirección de vuelo. Esto ha sido examinado por fotógrafos profesionales en Birmingham y su opinión general es que las dos manchas mostradas en la estela de luz no eran dos defectos en el negativo, sino en lugar, una fotografía real del disco misterioso.

 

3. El oficial abajo firmante no presenció personalmente el vuelo de ningún disco, sin embargo, en vista de los numerosos informes recibidos de los ciudadanos de Birmingham, es la opinión general en Birmingham que «algo estaba en el aire». Adjunto a esta como anexo número dos está una declaración hecha por el único personal militar de esta organización que personalmente presenció el vuelo del disco misterioso. Para información adicional se adjunta el anexo número tres que son recortes de uno de los periódicos locales dando el relato de muchas personas que informaron ver los muchos objetos misteriosos.

 

4. El oficial de inteligencia del Alabama Military District ha reenviado un informe similar a través de los canales de la fuerza en tierra para el Comando General, Thirdy Army, Atlanta 3, Georgia.

 

3 Incls

 

1. Fotografía

 

2. Declaración

 

3. Recortes

 

JACK C. WHITE

 

Mayor, Air Corps

 

Comandante

 

DECGRADAR A LOS 12 AÑOS

 

EN INTERVALOS: NO AUTOMÁTICAMENTE

 

DESCLASIFICADO DOD DIR 5200.10

 

XXXXX

 

C O P I A

 

Hay un memorándum del Jefe del Departamento de Inteligencia, Documento MAXW-PBB2-1043, en el que solicita mayor información sobre los datos técnicos de la cámara, así como el negativo original.

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XXXXX

 

DESCLASIFICADO

 

MCIAX-3/RWS/aw

 

ENE 28 1949

 

MCIAXO-3

 

ASUNTO: Informe sobre «Disco Volador» local

 

PARA: Oficial Comandante

 

2587th AF Reserve Training Center

 

Birmingham Municipal Airport

 

Birmingham, Alabama

 

1. Se hace referencia a su carta, asunto de arriba, fechada el 8 de julio de 1947 reenviada a este Comando, se incluye una copia de la misma.

 

2. Ha sido reasumido el interés en este incidente y se solicita que tanta información como sea posible obtener sea reenviada a este Comando, en la atención de MCIAXO-3:

 

a. Nombre y dirección del individuo que tomó la fotografía.

 

b. Lente de la cámara.

 

c. Distancia focal del lente.

 

d. Tipo de película.

 

e. Revelado así como la temperatura y el tiempo de revelado.

 

f. Apertura del lente y velocidad del disparo usados.

 

3. En el caso de que el negativo original sea (ilegible) y reenviado. Este puede ser regresado si se desea.

 

Incl

 

(Ilegible)

 

(Ilegible)

 

Coronel (Ilegible)

 

Jefe Departamento de Inteligencia

 

XXXXX

MCIAXO-3

Documento MAXW-PBB2-1044 es un nuevo memorándum del Departamento de Inteligencia. La copia que aparece en los archivos de la Fuerza Aérea es muy tenue y difícil de leer.

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DESCLASIFICADO

 

Solicitud (ilegible) objeto avistado en Birmingham, Ala., Incidente #56

 

MCIAXO (ilegible) 27 feb (ilegible)

 

1. Se hace referencia a la carta anexa fechada el 8 de julio de 1947, asunto «Informe sobre disco volador local» relativo a una fotografía de un objeto no identificado sobre Birminghman, Alabama.

 

2. Un estudio de ingenieros fotográficos del negativo y de la información listada abajo puede revelar (ilegible) del objeto:

 

a. Tipo de cámara.

 

b. Tipo de película usada.

 

c. Revelado así como la temperatura y el tiempo de revelado.

 

d. Apertura del lente y velocidad del disparo usados.

 

3. (Ilegible negativo original y los datos fotográficos listados.

 

1 Incl

 

(Ilegible)

 

Birmingham (ilegible)

 

(Ilegible)

 

(Ilegible) Asistente

 

Division de Análisis

 

Departamento de Inteligencia

 

SHI/ad

 

2-3266

 

(Ilegible) 252

 

(Ilegible)

 

DESCLASIFICADO

 

XXXXX

El Documento MAXW-PBB2-1045 es la Lista de Control para la versión del Sargento Ira L. Livingston.

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DESCLASIFICADO

 

XXXXX

 

LISTA DE CONTROL «“ OBJETOS VOLADORES NO IDENTIFICADOS

 

Incidente #56

 

1. Fecha: 6 Julio 47

 

2. Tiempo: 2045 horas

 

3. Lugar: Birmingham, Alabama

 

4. Nombre del observador: Sargento del personal Ira L. Livingston

 

5. Ocupación del observador: S7Sgt, w/250 horas como piloto y artillero armador

 

6. Dirección del observador: 1354 Meadow Lane, Green Acres, Birmingham, Ala.

 

7. Lugar de la observación: Como arriba 33° 33″™ N 86° 52″™ O

 

8. Número de objetos: 7 a 10

 

9. Distancia del objeto al observador: No determinada

 

10. Tiempo a la vista: N/S

 

11. Altura: 2000 pies arriba del horizonte a un ángulo de 45°

 

12. Velocidad: 500 a 600 MPH

 

13. Dirección del vuelo: Sureste

 

14. Tácticas: ascenso vertical «“ viajando en arco

 

15. Sonido: ninguno

 

16. Tamaño: 2 pies de diámetro

 

17. Color: N/S

 

18. Forma: redondo

 

19. Olor detectado: N/S

 

20. Construcción N/S

 

21. Estelas de escape: N/S

 

22. Condiciones climática: N/S

 

23. Efecto en las nubes: N/S

 

24. Dibujos o fotografías: xx una fotografía

 

25. Forma de desaparición: N/S

 

26. Observaciones: (arriba)

 

DESCLASIFICADO

 

XXXXX

 

El Documento MAXW-PBB2-1046 es un resumen del caso

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DESCLASIFICADO

 

A las 2045, 6 de julio 47, la atención del Sargento de Personal Livingston fue atraída por un vecino (un Sr. Herman M Sockwell) para presenciar algunos «discos voladores». Los objetos aparecieron en el Oeste de Birmingham y estaban viajando hacia el Sureste. Parecían estar a 2000 sobre el horizonte a un ángulo de 45° a una distancia no estimada. Tenían aproximadamente 2 pies de diámetro, y eran redondos. Producían un ligero resplandor de luz y estaban viajando a una velocidad estimada de 500 a 600 MPH. El objeto (u objetos) parecían estar viajando en un arco definido en lugar de en línea recta, y tan pronto como uno salía de la vista, otro aparecía detrás de él pero no siempre en la misma trayectoria. Uno pareció ir directamente hacia arriba. La vista de esta fuente fue obstruida por una casa cercana pero cuando alcanzó la altura de aproximadamente 2000 pies comenzó en la misma dirección que los otros. El Sargento Livingston dice que él el ningún momento vio más de un objeto al mismo tiempo, y aunque podría haber sido un objeto era su opinión personal que había siete a diez objetos. Los discos eran silencioso y parecían componerse de una sola luz.

 

XXXXX

El siguiente es el Documento USAF-SIGN1-579, que es la Lista de Control.

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LISTA DE CONTROL «“ OBJETOS VOLADORES NO IDENTIFICADOS

 

Incidente #56

 

1. Fecha: 6 Julio 47

 

2. Tiempo: 2045 horas

 

3. Lugar: Birmingham, Alabama

 

4. Nombre del observador: Sargento del personal Ira L. Livingston

 

5. Ocupación del observador: S7Sgt, w/250 horas como piloto y artillero armador

 

6. Dirección del observador: 1354 Meadow Lane, Green Acres, Birmingham, Ala.

 

7. Lugar de la observación: Como arriba 33° 33″™ N 86° 52″™ O

 

8. Número de objetos: 7 a 10

 

9. Distancia del objeto al observador: No determinada

 

10. Tiempo a la vista: N/S

 

11. Altura: 2000 pies arriba del horizonte a un ángulo de 45°

 

12. Velocidad: 500 a 600 MPH

 

13. Dirección del vuelo: Sureste

 

14. Tácticas: ascenso vertical «“ viajando en arco

 

15. Sonido: ninguno

 

16. Tamaño: 2 pies de diámetro

 

17. Color: N/S

 

18. Forma: redondo

 

19. Olor detectado: N/S

 

20. Construcción N/S

 

21. Estelas de escape: N/S

 

22. Condiciones climática: N/S

 

23. Efecto en las nubes: N/S

 

24. Dibujos o fotografías: xx una fotografía

 

25. Forma de desaparición: N/S

 

26. Observaciones: (arriba)

 

RESTRINGIDO

Sigue el Documento USAF-SIGN1-580, el resumen.

USAF-SIGN1-580_screenRESTRINGIDO

 

A las 2045, 6 de julio 47, la atención del Sargento de Personal Livingston fue atraída por un vecino (un Sr. Herman M Sockwell) para presenciar algunos «discos voladores». Los objetos aparecieron en el Oeste de Birmingham y estaban viajando hacia el Sureste. Parecían estar a 2000 sobre el horizonte a un ángulo de 45° a una distancia no estimada. Tenían aproximadamente 2 pies de diámetro, y eran redondos. Producían un ligero resplandor de luz y estaban viajando a una velocidad estimada de 500 a 600 MPH. El objeto (u objetos) parecían estar viajando en un arco definido en lugar de en línea recta, y tan pronto como uno salía de la vista, otro aparecía detrás de él pero no siempre en la misma trayectoria. Uno pareció ir directamente hacia arriba. La vista de esta fuente fue obstruida por una casa cercana pero cuando alcanzó la altura de aproximadamente 2000 pies comenzó en la misma dirección que los otros. El Sargento Livingston dice que él el ningún momento vio más de un objeto al mismo tiempo, y aunque podría haber sido un objeto era su opinión personal que había siete a diez objetos. Los discos eran silencioso y parecían componerse de una sola luz.

 

RESTRINGIDO

El Documento USAF-SIGN1-581 es un memorándum de R. H. Smith, de Inteligencia Militar

USAF-SIGN1-581_screenRESTRINGIDO

 

Informe sobre «Disco Volador» Local

 

D333.5 ID (8 Jul 47) 2nd Inc

 

HQ., COMANDO DE DEFENSA AÉREA, Mitchel Field, New York, 25 de julio de 1947

 

PARA: Comando General, Fuerzas Aéreas del Ejército, Washington 25, D. C.

 

ATTN: AC/AS-2

 

Reenviado para su información.

 

POR EL COMANDO GENERAL

 

R. H. Smith /f/

 

R. H. SMITH

 

Coronel, GSC

 

Asistente del Jefe de Personal «“ Inteligencia

 

3 Incls:

 

n/c

 

RECIBIDO

 

(Ilegible)

 

RESTRINGIDO

 

(Ilegible)

El Documento USAF-SIGN1-582 es un memorándum de un tal Murphy en el que se desliga de la investigación diciendo que es un caso aislado.

USAF-SIGN1-582_screenRESTRINGIDO

 

BASICO: Carta Cuarteles BARTD, Birmingham AFF, Birmingham, Ala., fechada 8 de julio 47.

 

Asunto: Informe sobre «Disco Volador» Local

 

1st Ind.

 

CUARTELES DECIMO CUARTA FUERZA AÉREA, Orlando, Florida.

 

PARA: Comando General, Comando de Defensa Aérea, Mitchel Field, New York.

 

1. Se reenvía para información de sus cuarteles.

 

2. Estos cuarteles no han hecho investigación de informes de «Discos Voladores» porque este es un caso aislado.

 

POR EL COMANDO GENERAL

 

Murphy /f/

 

(Ilegible)

 

(Ilegible)

 

(Ilegible)

 

3 Incls: n/c

 

92715

 

RESTRINGIDO

 

2

 

24 JUL 1947

Continua la siguiente semana.

Erase una vez en ovnilandia. La gran invasión marciana

EraseUnaVezEnOvnilandiaERASE UNA VEZ EN OVNILANDIA

TOMO I: La gran invasión marciana

Sergio Sánchez Rodríguez

Ediciones del Mono Dorado, Chile, noviembre 2016

184 páginas, 14×21 cm, prólogo de Diego Zúñiga Contreras, con dos apéndices, muchas notas de pie de página, bibliografía, sumario y una gran belleza literaria. 10,000 pesos chilenos.

Sergio Sánchez Rodríguez es un abogado y profesor universitario chileno. Junto a Diego Zúñiga Contreras dirigió una de las mejores revistas de ufología que se hayan editado en Latinoamérica La Nave de los locos. Ambos también son los autores de dos de los mejores libros que se hayan escrito en español sobre este tema: Noticias de Marte: Como los ovnis invadieron la prensa chilena[1], de Diego; y Pasaporte a OVNIlandia: lecturas de ufología crítica[2], de Sergio.

Ahora Sergio regresa con EL libro de ufología escrito en Chile, como bien lo ha definido Diego.

Se trata de una obra, un libro, estructurada en varios tomos. El presente, La gran invasión marciana, es el primero de ellos. El segundo, de acuerdo con lo que nos dice Sergio «estará dedicado principalmente (aunque no en exclusiva) a las ideas paraufológicas y al folklore». Este aparecerá en el 2017. El tercero lo dedicará «a la hipótesis psico-social, a los escépticos y a los conspiranoicos pro- ET y roswellianos». Su aparición será en el 2018.

El nuevo impulso de Sergio no queda ahí. Me dice que luego de esto retomará el libro sobre los contactados que dejo inconcluso.

Entonces tendremos mucho por leer.

Confieso que La gran invasión marciana lo terminé de leer en un solo sábado y ya quería continuar con los tomos 2 y 3. Por cierto, el título me sonaba a cierta obra de la ufología francesa. Sergio nos aclara:

«El título de este primer volumen, La gran invasión marciana, alude a una etapa frenética de los esfuerzos por elucidar la naturaleza del problema OVNI en clave de «˜hipótesis extraterrestre»™».

Leer el libro de Sergio fue como volver a empezar mis primeras lecturas en ufología, solo que en un viaje relámpago y teniendo como guía a un erudito. Fue como volver a empezar, repito, no desde la forma cutre, demodé, sesgada, en que lo leí por primera vez con Keyhoe, Keel, Hynek, Vallée, o Ribera, sino desde el punto de vista ventajoso que da la experiencia y los años. Y Sergio lo sabía muy bien puesto que en el principio advierte al lector «»¦que tome esta crónica de hipótesis, especulaciones y teorías como una forma de mirar su propio reflejo en el fondo de esta ya antigua fuente de los deseos».

Sobre todo que Sergio nos presenta una historia de la ufología desde lo que él llama la «singularidad francesa», es decir, nos muestra la historia de la ufología francesa, esa desconocida (por lo menos para mí).

«Por supuesto, la «singularidad francesa» aparece asociada más bien a la ufología vanguardista de los setenta, propia de una atmósfera muy distinta del «etismo fuerte» que sobrevendría en décadas posteriores, éste más belicoso pero, también, intelectualmente mucho más anémico. En fin: a cada época sus ovnis (y su ufología)».

Y es que la ufología «ese conjunto de cosas que hacen y dicen los ufólogos», como bien la define Sergio, tuvo sus puntos más brillantes en esa «singularidad francesa». Me estoy refiriendo en particular a la llamada Hipótesis Psicosocial, en donde se aleja de toda la magufería y pseudociencia en el que está inmerso el tema de los ovnis.

Para el autor la ovnilogía francesa fue la más propositiva desde cualquier ángulo que se le quiera apreciar. Y para demostrarlo, como un experto guía de turistas, o como un curador de museos, nos lleva a través de los trabajos de Louis Pauwels y Jacques Bergier y su «Realismo fantástico», su «Retorno de los brujos» y su «Planète«. Vemos desfilar nombres como Aimé Michel, Michel Carrouges, René Fouéré, Jacques Vallée, Pierre Guérin, René Hardy y muchos otros ufólogos franceses. Están presentes los marcianos de la oleada francesa de 1954, las ortotenias de Michel, los «astronautas antiguos» de Robert Charroux (a quien años después plagiaría von Däniken), la paraufología de Vallée y la Hipótesis Psicosocial.

Sánchez nos dice que «de hecho, el libro es «˜pluralista»™, pues es una historia de las teorías en la ufología francesa. Está dedicado a todos los ufólogos, creyentes y escépticos, consecuentes y renegados, apocalípticos e «˜integrados»™… Todos encontrarán su lugar en ese libro».

Pero el libro de Sergio va más allá de ser un déjà vu, no es un refrito de esos libros que marcaron la historia de la ufología (y mi niñez y juventud). Es una crónica, una visión holística de las ideas ufológicas francesas. Por eso ese sentimiento de aventura, de maravilla, del descubrimiento de un nuevo mundo, de un mundo en donde todo es posible, de un mundo conocido por pocos iniciados, de un mundo que no entendíamos porque pasaba indiferente para el resto de la humanidad. Los ovnis lo eran todo, ahí estaban las respuestas a todas nuestras preguntas pasadas y futuras. Si el hombre de la calle no se quería dar por enterado, peor para él.

Pero los años pasaron (ese punto de vista ventajoso al que nos referíamos unos párrafos más atrás) y ahora toda esa parafernalia, toda esta mitología ovni es del dominio público. Si el hombre de la calle se dio por enterado, peor para él.

Sergio sabe que su obra despertará estas reacciones. Sabe tensar las cuerdas adecuadas. Nos recuerda que «»¦los ufólogos son como los jesuitas, los políticos y los mujeriegos, que nunca se retiran«. Aunque me apresuro a insertar una aclaración: yo no soy ufólogo, pero si un interesado en la ufología que nunca me he retirado.

«Y es que estas líneas buscan ser una especie de revulsivo, de estímulo para los desencantados, a fin de que vuelvan a mirar el camino al que otrora dedicaron tantos desvelos. No pretendo quitarles el desencanto; me doy por satisfecho si este libro (a lo largo de los volúmenes que lo conforman) los mueve a hacer «“ una vez más «“ una retrospectiva de lo que pensaron a lo largo de su participación en la saga ovnística. Por si ven cosas nuevas; nunca se sabe».

 

«No se me escapa que el «˜saber»™ marginal que es la ufología, tiene todos los visos de una ovnimancia, llena de ejercicios de prestidigitación para entusiastas e incautos. Basta mencionar la sensación de «˜eterno retorno»™ que se experimenta en los congresos ufológicos. Ya sabemos la jaculatoria esencial: «˜el Universo es inmenso; ergo, no estamos solos. Por eso, ¡¡ellos están aquí!!»™ Peticiones de principio y saltos lógicos injustificables como ése, son el alimento espiritual de la mayoría de los asistentes. Los extraterrestres como religión. Los escépticos como infieles. Fin del debate. Y ya sabemos quiénes conforman la casta sacerdotal».

El retorno a Ovnilandia

Sergio no toma partido. Este no es un libro del todo escéptico. No critica, no desbarata, no «debunkea» la ufología. Se limita a presentar las ideas, de una forma clara, de acuerdo a como fueron apareciendo. Todo dentro de su contexto social, político e histórico. Es el lector el que, de alguna forma, interpreta esta historia, estos hechos.

«Hago esta «declaración de principios» con el objeto de que el lector entienda cuál es mi talante al acometer este trabajo: volver a examinar determinados aspectos del mundo ufológico, confrontar la cuestión ardua de las «teorías», intentando determinar si ellas todavía siguen teniendo algo interesante que decirnos. Este libro asume como objetivo repensar a ese mundo particular que es Ovnilandia, con toda la perspectiva que supuestamente da el paso del tiempo».

Y aunque para los legos, los neófitos en ufología francesa, como un servidor, nos parece que toda ella está contenida en esta obra, Sergio nos aclara: «Este libro (que consta de más de un volumen) no pretende abarcar toda la ufología teórica francesa». ¿Pero es que hay más? Por lo menos a mí me gustaría conocerlo todo.

No hay duda que para Sergio Sánchez escribir este libro fue un ejercicio de nostalgia. También él recorrió aquel camino a los orígenes, a su infancia, a su juventud, en el que la ufología, el mundo de «ovnilandia», como dice él, le causaba un gran asombro: aquel mundo maravilloso, mágico, de alguna forma alejado de los cuentos de hadas de la niñez, pero inmerso en el mundo de magonia. Ya no creíamos en Cenicienta, en Blancanieves o en El mago de Oz. Ahora estábamos atrapados en cosas más burdas y cutres como Pascagoula, Los Hermanos del Espacio y Mothman.

«Ahora bien, ¿por qué este libro (y el anterior que escribí) aluden a algo llamado «˜Ovnilandia»™? ¿Me estoy burlando, acaso? ¿He asumido un tono peyorativo, que suma al desdén un poco de suficiencia? Por cierto, hablar de Ovnilandia implica un grado de sarcasmo escéptico; sería una hipocresía mayor negarlo. Pero, al momento de escribir estas líneas, lo que prima realmente para mí es un dejo de añoranza, una especie de llamado a las fuertes emociones de otra época»¦ Ovnilandia no es solamente el espacio caótico e intelectualmente anémico de hoy, con sus charlatanes y sus creyentes militantes (no se crea que el marbete de «˜militantes»™ sólo cabe con algunos escépticos): es también un conjunto de sueños, aspiraciones y posibilidades que se entrelazaron con lo mejor de nuestras vidas, con aquello que «“ ingenuidades aparte – merece ser reivindicado».

«Ovnilandia es también, mal que me pese, una morada espiritual. Es mi país, mi comarca. Es la maravillosa etapa de una búsqueda desinteresada de conocimiento, de un auténtico deseo de enfrentarse a los misterios del mundo y de resolverlos. Es por ello que jamás renegaré de mi implicación profunda en esa gran aventura, así fuera sólo un espejismo. En el brevísimo tramo de tiempo que es una vida, la plausibilidad de una quimera no es una cuestión de primer orden. Lo que más importa es la belleza del viaje».

Las claves de La gran invasión marciana

Llegados a este punto me gustaría seleccionar algunos pasajes de La gran invasión marciana para que el lector tenga una mejor visión de esta obra y se apresure a comprarla.

Iniciemos por un caso de confusión ocurrido durante la oleada francesa de 1954. Hace algunos años comencé a escribir una nota sobre el caso de Sinceny, para publicarla en Marcianitos Verdes. Sin embargo nunca la terminé y quedó archivada. Lo que no sabía, y ahora Sergio me aclara, es que el psiquiatra francés Dr. George Heuyer se hubiera ocupado del mismo, advirtiendo sobre el inconveniente de los temores irracionales:

«»˜Un cazador dispara sobre su vecino tomándolo por un invasor interplanetario. Ahora, me he sorprendido admitiendo ante mis alumnos el no haber previsto la enfermedad mental envuelta en las nuevas apariciones. Dos días después, entraba en el servicio médico un joven de 15 años, que deliraba sobre los platillos voladores y los marcianos. Él les había visto, les dibujaba, los representaba con plastilina: el marciano destructor era un monstruo escalofriante que lanzaba rayos verdes desde los ojos y el pecho».

 

«El ejemplo que da Heuyer puede haber tenido una base real. En su enciclopedia ufológica, John Spencer (1992: 64) cita un caso al que llama «˜Equivocación en Sinceny»™, acontecido en octubre de 1954, en plena oleada francesa. Un vecino de Sinceny le disparó a otro, afortunadamente sin suerte. Como dice Spencer, «˜su puntería no era mejor que su sentido común»™. La explicación que da el casi homicida es desopilante: «˜Vi una extraña silueta moviéndose a la luz de dos linternas, y pensé que era un marciano que estaba arreglando su platillo volador. Fui a buscar mi pistola y disparé»™».

En Marcianitos Verdes me ocupé del caso del aterrizaje de cinco «platos voladores» en Inglaterra[3], en 1967, pero desconocía un caso similar que ocurrió en Francia, en 1981:

«Como sea, para no pocos investigadores, el libro de Rose C. había dejado la credibilidad de VERONICA en entredicho. Canuti (2011: 61) sostiene que la entidad recibió un duro golpe en 1981, cuando efectivos militares y estudiantes de la Escuela Aeronáutica de Provence, quisieron pasar un buen rato burlándose de Gouiran y los suyos. Al efecto, prepararon un platillo volante metálico, con todo cariño para los ufólogos. A ver qué pasaba. VERONICA picó lastimosamente el anzuelo y puso en alerta roja a sus corresponsales, a la prensa y al GEPAN (la entidad oficial dedicada a los ovnis), mientras los bromistas se desternillaban de risa. Después del incidente, VERONICA quedó tan desacreditada que podemos decir que este paso en falso marcó su triste ocaso. Vamos, que a usted también podría sucederle»¦»

En cuanto a la ortotenia de Aimé Michel, Sergio nos explica

«Pese a haber obtenido carta de ciudadanía en el registro mental de los ufólogos, como la prueba de que las apariciones OVNI obedecían a un patrón inteligente (y aparentemente extrahumano), la ortotenia no superó la crítica a que fue sometida durante los sesenta (Jacques Vallée las descarto, pero de un modo muy poco enfático)».

Y continúa más adelante en el libro

«Lo que diré a continuación no constituye ni un juicio laudatorio ni crítico, sino puramente descriptivo: el Vallée íntimo está muy lejos de responder a la idea del científico racionalista en faena de abordaje cartesiano de la realidad. Vallée es, en no despreciable medida, un hombre muy imaginativo y poético. De hecho, su autobiografía «“ Science interdite (Ciencia prohibida) – lo muestra con claridad en tales facetas»[4].

«Vallée no es un científico soñador; él es un soñador que se ha vuelto científico. Y esto no es trivial en el desarrollo de su larga singladura ufológica»¦»

«»¦Por ejemplo, las ortotenias de Aimé Michel son analizadas extensivamente y las conclusiones, aunque no sean presentadas de modo muy claro, son desalentadoras: el azar ha jugado un importante papel en las alineaciones. Tampoco cabe descartar las objeciones de Donald Menzel, quien afirma que algunos puntos ortoténicos se sustentan en observaciones de fenómenos totalmente explicables».

Ese «soñador que se ha vuelto científico» en muchos casos ha llegado al extremo de ser pseudocientífico. Recientemente tuve una discusión con un amigo ufólogo y le decía justamente eso, que desde mi punto de vista Vallée era un psudocientífico. Y por eso me queda claro porqué fue «poco enfático» en descartar las ortotenias. Vallée está enamorado de los ovnis, de lo oculto, de lo paranormal y si sólo señaló de pasada los errores de la ortotenia me parece que fue simplemente para quitarle un poco de sustento a la hipótesis extraterrestre y darle paso libre a su «hipótesis» del sistema de control y su Magonia magufa.

El Dr. Menzel, por otro lado, desbarató la ortotenia punto por punto, de manera matemática y desde el punto de vista de la estadística. Y lo más interesante es que lo hizo desde esa «Catedral de la ufología» que era la revista inglesa Flying Saucer Review. Y los ufólogos no se dieron por enterados, o no quisieron o no entendieron las matemáticas de Menzel.

Otro magufo, aunque también científico, fue el Dr. James McDonald, del que se han tejido muchos mitos debido a su muerte «extraña». Sergio se ocupa de este punto:

«La vida de McDonald tuvo un final triste y turbulento. En medio de graves problemas familiares, intentó suicidarse de un tiro, el 9 de abril de 1971. Empero, la bala no le dio muerte y le dejó parcialmente ciego. Poco después, desesperado, volvió a atentar contra su vida, esta vez con éxito. Y bien, ignorando lo obvio, muchos aficionados a las conspiraciones sugirieron que había sido eliminado por la CIA, el Servicio Secreto o los «˜hombres de negro»™. Lo que no se entiende, pues McDonald no sabía más sobre los OVNIs que los principales ufólogos de la escena estadounidense. Fue Jacques Vallée, en una carta dirigida al ufólogo español Vicente-Juan Ballester Olmos, quien tuvo que meter paños fríos sobre el tema y poner a raya a los paranoicos:

 

«Dos semanas después (del primer intento) tomó un taxi, se hizo llevar a su casa en busca de su pistola, luego pidió al chofer que lo llevase al desierto y allí se quitó la vida. Esto es terriblemente triste y sin duda desencadenará innúmeras especulaciones. Jim era un hombre muy enérgico pero de ideas relativamente estrechas en muchos aspectos. No le gustaba que le llevasen la contraria («¦) y nunca hizo gala de aquel sentido del humor y de aquella capacidad de colaborar con los demás que son indispensables cuando se aborda un problema como el fenómeno OVNI. Creo que todos estos problemas contribuyeron a su desesperación cuando sus problemas familiares se agravaron»™ (cit. por Ribera, 1974: 407-408)».

Y ya que hablamos de Don Antonio Ribera, uno de los pocos ufólogos a quienes les tengo un profundo aprecio, coincido con la apreciación de Sergio sobre la obra de Ribera:

«Eso sí, cabe aclarar que los míos son reproches afectuosos a Antonio Ribera, de quien soy un más que evidente deudor. En nuestros años juveniles, conocíamos lo que se publicaba en la Flying Saucer Review, por ejemplo, gracias a los libros de Ribera. Lo mismo ocurría con la traducción de textos importantes de la ufología clásica (como Pasaporte a Magonia, de Jacques Vallée). En gran medida, Ribera fue para nosotros un maestro, un mentor ufológico de la primera hora, aunque después abandonáramos totalmente su ideario. Y fuimos afortunados: la generación más joven debió iniciarse con los libros de J. J. Benítez, lo que ha demostrado ser una enorme desventaja a largo plazo. Es sabido que el autor de Caballo de Troya representó una verdadera involución intelectual y ética en la ufología española de los años ochenta y noventa. Así lo manifesté en el homenaje dedicado a Ribera en octubre de 2004, en el Centro Catalán de Santiago de Chile (organizado por Raúl Núñez y Roderick Bowen), destacando la gran distancia entre ambos ufólogos hispanos. Y también lo conversé en tales términos con el periodista español Josep Mª Ibáñez, biógrafo de Ribera (vid. El delfín y la estrella: vida de Antonio Ribera, Barcelona, 1995), presente en aquel memorable encuentro».

También está el tema del «testigo puro y no contaminado». Cliche que desde hace muchos años, incluso antes de Internet, no me lo he tragado. La ufología perdió su inocencia desde el momento de su nacimiento. Los platos voladores le deben mucho (¿todo?) a la ciencia ficción de los años que la antecedieron. Realmente hubo muy pocos «testigos puros».

«Hasta mediados de la década de los noventa, los investigadores aún podían hablar de testigos con escasos grados de «˜contaminación ufológica»™, lo que los volvía más fiables, menos propensos a fantasear según las autopistas de la información disponible. Si ya con el cincuentenario acervo de películas, historietas, libros, revistas, programas radiales y televisivos, la tesis de la contaminación mínima sólo resultaba convincente para los ufólogos, con la masificación de Internet ya nadie puede sostenerla sin ruborizarse. Desde hace quince años hemos estado asistiendo al fin total y absoluto de la inocencia. La Red ha sido decisiva en un grado que todavía estamos mensurando. Todos los elementos básicos de la creencia en los OVNIs, desde las «˜oleadas»™ a las abducciones, hogaño son del más extenso dominio público. La ufología y sus temas constituyen, en realidad, una parte importante de la cultura popular; siempre ha sido así, por cierto, pero es difícil que haya existido algo que se asemeje a la situación actual. Ahora bien, lo anterior trae una serie de consecuencias, que podemos resumir en una paradoja: es la disolución del mito «˜tradicional»™ de los OVNIs lo que asegura su supervivencia».

En este momento me parece que la supervivencia de los ovnis está en «»¦el ciberespacio (que es el lugar al que los OVNIs parecen especialmente condenados)»¦»

Una nota final con la que coincido completamente con Sergio: «Mientras haya ufólogos, habrá OVNIs».

SUMARIO

Prólogo

1.- INVITACIÓN AL VIAJE

¿Nada nuevo?

Cómo sobrevivir en tiempos de escasez

El mito de Sísifo, la ufología y el absurdo

Agnosticismo ufológico y objetivo del libro

2.- LOS «SOUCOUPES VOLANTES», ¿ARTEFACTOS DE OTROS MUNDOS?

Los comienzos de la ufología francesa

La ufología francesa en los cincuenta: entre la maravilla, la esperanza y la impaciencia

La recepción de las producciones extranjeras

Un alto en el camino: marcianos

Entran en escena los escépticos

Las repercusiones de la oleada de 1954: cómo digerir relatos cada vez más extraños

La fiebre de los platillos volantes: ¿un «contagio psicológico» en gran escala?

Tomándose a los platillos en serio: Plantier y el asunto de «la propulsión»

3.- EL «REALISMO FANTÁSTICO» Y LO «FORTEANO»

Pauwels, Bergier y los brujos (I): aldabonazos en plena madrugada

Pauwels, Bergier y los brujos (II): Planète y la edad de oro del realismo fantástico

Los brujos en el banquillo: la reacción racionalista

Los brujos no se dan por enterados: el redescubrimiento de «lo forteano» y sus efectos

4.- LA «SINGULARIDAD FRANCESA» (I): UNA UFOLOGÍA CLÁSICA MUY PARTICULAR

Introducción

PRIMERA SECCIÓN: SOBRE ALGUNAS ORGANIZACIONES UFOLÓGICAS (Y SOBRE SU POSTERIOR DERIVA).

Un hito clave en el crecimiento de la ufología francesa: Lumières dans la nuit

Nace el GEPA: las convicciones de René Fouéré

El general Chassin se incorpora a la ufología

Otras figuras importantes en la formación y desarrollo de la ufología francesa

«Verónica decide morir»

SEGUNDA SECCIÓN: BREVE ANTOLOGÍA DEL PENSAMIENTO UFOLÓGICO FRANCÉS EN LOS AÑOS SESENTA (O SURGIDO EN ESA DÉCADA).

Michel Carrouges: cuando los extraterrestres eran, antes que cualquier otra cosa, «marcianos»

Aimé Michel, ufólogo clásico: en busca de la pauta invisible

Un santo del desierto

Un gnóstico de nuevo cuño

El pensamiento ufológico de Aimé Michel (I): de los humanoides a las ortotenias

El pensamiento ufológico de Aimé Michel (II): el desafío intelectual de un posible contacto con una inteligencia extraterrestre

Más allá de los platillos volantes

El último viaje

5.- LA CUESTIÓN DE LOS «ANTIGUOS ASTRONAUTAS» Y SU INFLUENCIA

Antes de Von Däniken: Robert Charroux y el ascenso de la astroarqueología en Francia

Para una genealogía de los «antiguos astronautas»: nuestra hipótesis trunca

Consolidación e hibridación

Los dioses parecen estar regresando en masa

Esos viejos tiempos en perspectiva

A modo de colofón: invirtiendo una imagen

6.- LA SINGULARIDAD FRANCESA (II): LA CRECIENTE COMPLEJIDAD DE LA HIPÓTESIS EXTRATERRESTRE (1965-1977)

PRIMERA SECCIÓN: EL VIRAJE HACIA «LO EXTRAÑO» EN LOS AÑOS SESENTA

Dos casos con «ovninautas», a ambos lados del Atlántico

El primer Jacques Vallée: un testigo de la gran invasión marciana

Aspectos generales

El caminante solitario

Los platillos volantes como encrucijada

Enfrentándose al misterio dentro del misterio: a vueltas con los humanoides y los aterrizajes

SEGUNDA SECCIÓN: SOBRE LA HIPÓTESIS EXTRATERRESTRE EN LOS AÑOS SETENTA

El irresistible ascenso de los platillos volantes

El «principio de banalidad»

René Hardy: una HET en dos tiempos

Pierre Guérin: el postulado de «extrañeza» y una paradójica defensa de la HET

Los aterrizajes: en el límite de la ufología ortodoxa

A propósito de la «nave aérea» de 1896-1897

La «hermenéutica ufológica» de Guérin y la HET tradicional. En torno al caso de Gary Wilcox

El «sueño inducido»: una paraufología que se ignora

Concluyendo

DOS APÉNDICES PARA UFÓLOGOS

Apéndice I: El enigma de la serpiente alada (La abducción de Herbert Schirmer)

Apéndice II: De regreso en Ovnilandia. Breves especulaciones sobre el presente y, ante todo, sobre el futuro de la ufología

BIBLIOGRAFÍA


[1] Zuñiga Contreras Diego, Noticias de Marte: Como los ovnis invadieron la prensa chilena, Lulu, 2013. 199 páginas.

[2] Sánchez Rodríguez Sergio, Pasaporte a OVNIlandia: lecturas de ufología crítica, Emegé Ediciones, Santiago de Chile, 1999.

[3] https://marcianitosverdes.haaan.com/2008/12/el-da-que-aterrizaron-platos-voladores-en-inglaterra/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2012/01/el-da-que-aterrizaron-los-platillos-voladores-en-inglaterra-1a-parte/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2012/02/el-da-que-aterrizaron-los-platillos-voladores-en-inglaterra-final/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2014/03/en-1967-cinco-platillos-voladores-aterrizaron-en-somerset-y-en-todo-el-sur-de-inglaterra/

[4] De lo contrario, los dos volúmenes de Science interdite serían mamotretos infumables y no los textos apasionantes (y brillantemente escritos) que efectivamente son. (Nota de Sergio Sánchez)

La tecnología defectuosa de la caza de fantasmas

La tecnología defectuosa de la caza de fantasmas

Las mejores herramientas para rastrear espíritus siempre han sido las que son lo suficientemente falibles para encontrar algo.

lead_960William H. Mumler / Wikimedia / The Atlantic

Colin Dickey

14 de noviembre de 2016

La pequeña compañía K-II Enterprises, con sede en Syracuse, Nueva York, fabrica una serie de dispositivos electrónicos de mano, como el Dog Dazer (un dispositivo supuestamente seguro y humano que disuade a los perros agresivos con señales de radio de alta frecuencia), pero es más conocido como Safe Range EMF. Del tamaño de un mando de televisión, el Safe Range EMF detecta campos electromagnéticos, o EMF, midiéndolos con una matriz LED brillante que se mueve de verde a rojo dependiendo de su fuerza. Diseñado para localizar radiaciones EMF potencialmente dañinas de líneas eléctricas cercanas o electrodomésticos, el Safe Range se ha vuelto popular para otro uso: detectar fantasmas.

Desde su aparición en el programa Ghost Hunters, donde el cazador de fantasmas Grant Wilson afirmó que ha sido «especialmente calibrado para los investigadores paranormales», el Safe Range (comúnmente conocido como K-II meter) se ha convertido en omnipresente entre los que buscan espíritus. Busque en Amazon, y muchos listados se referirán a él como un «medidor de fantasmas», una herramienta indispensable en el arsenal del cazador de fantasmas. No está solo entre los medidores EMF: De los EMF meters más vendidos en Amazon, dos de los tres primeros se comercializan explícitamente como medidores de fantasmas.

Sin embargo, al escanear las distintas descripciones y revisiones de los productos, lo que queda claro es que el K-II Safe Range es un medidor de campo electromagnético relativamente poco fiable. Funciona sólo en un eje (tiene que moverlo para obtener una lectura correcta), y no está protegido, lo que significa que puede ser activado por un teléfono celular, una radio de dos vías o prácticamente cualquier tipo de dispositivo electrónico que ocasionalmente emite ondas electromagnéticas. El revisor Kenny Biddle encontróó que podía ponerlo en marcha, entre otras cosas, un ratón de computadora y una batería de cámara.

Sin embargo, es precisamente porque no es particularmente bueno en su propósito principal que lo convierte en un dispositivo popular para los cazadores de fantasmas. Errático, propenso a falsos positivos, fácil de manipular, su pantalla LED de encendido iluminará cualquier habitación oscurecida de un hotel o castillo embrujado. Es decir, su popularidad como herramienta de caza de fantasmas se debe principalmente a su falibilidad.

El K-II no es el único elemento electrónico de consumidor utilizado por los cazadores de fantasmas. A menudo se vende en kits que contienen otros dispositivos, como un Couples Ghost Hunt Kit, con dos de todo, por lo que puede construir «Â¡confianza y recuerdos duraderos cuando los dos, solos en una cueva fantasmagórica, buscan la confirmación de sus resultados y tranquilidad!» Hay dispositivos que han sido diseñados específicamente para los cazadores de fantasmas, como una caja de fantasmas, que funciona al azar escaneando a través de frecuencias FM y AM para recoger las palabras de los espíritus en el ruido blanco. Pero sobre todo, los cazadores de fantasmas usan tecnología preexistente: no sólo los medidores EMF, sino también los grabadores digitales de última generación, usados para capturar fenómenos de voz electrónicos, o EVP. Un investigador registra a sí mismo haciendo preguntas en una habitación vacía, con la esperanza de que al escuchar aparecerán las voces fantasmales.

Toda esta tecnología – tanto la actual como la reutilizada – funciona a lo largo de más o menos el mismo principio: generar una gran cantidad de efectos estáticos y aleatorios, con la esperanza de captar el ruido aleatorio y otras cosas efímeras. El cazador fantasma, a su vez, busca patrones, convergencias momentáneos, serendipia, coincidencia significativa. Para el creyente, aquí es donde viven los fantasmas: en la estática, en fallas y en manchas.

La caza de fantasmas nació del amor al fracaso tecnológico. En 1861, William H. Mumler, un grabador de joyeros, estaba estudiando el nuevo comercio de la fotografía cuando la figura sombría de una niña apareció en una placa que estaba revelando. Como Crista Cloutier describe en The Perfect Medium: Photography and the Occult, Mumler sabía que era un error, una consecuencia de reutilizar accidentalmente una placa que no había sido suficientemente restregada de su exposición anterior. Pero luego mostró la curiosidad a un amigo espiritualista suyo. «En ese momento no estaba inclinado mucho a la creencia espiritual, y siendo de una disposición jovial, siempre listo para una broma», admitió más tarde, «terminé por divertirme un poco, como pensé, a su costa».

Le dijo al Espiritista que la imagen era auténtica, y que nadie más había estado alrededor cuando había tomado la fotografía. Su amigo tomó la broma demasiado en serio, y en breve, las publicaciones espiritualistas habían reimpreso el error de Mumler como prueba de vida después de la muerte. El mismo Mumler cambió pronto su tono, alegando que había descubierto un «maravilloso fenómeno que realmente necesitaba investigación», y comenzó a ofrecer fotografías de espíritu en serio. Por diez dólares (las sesiones normales costaban alrededor de un cuarto en ese momento), él tomaba su foto, con la condición de que no podía garantizar la materialización de un fantasma.

La invención inadvertida de Mumler de la fotografía de espíritus cementó una conexión entre los fantasmas y la tecnología que resiste hasta nuestros días – y específicamente, las maneras en que los errores y los accidentes de la tecnología aparecen como manifestaciones de lo paranormal. Las tecnologías de consumo de la fotografía a la telegrafía a la radio al Internet son casi siempre inmediatamente aprovechadas por los creyentes como una prueba más de lo paranormal. En 1953, tres niños estaban viendo la Ding Dong School una tarde en Long Island cuando la cara fantasmal de una mujer desconocida apareció en la pantalla. La cara no se disiparía, ni siquiera después de apagar la televisión, y su padre se vio obligado a voltear la televisión hacia la pared «por mal comportamiento en niños temerosos», según informóó The New York Times. La televisión murió completamente un día después, pero no antes de que su naturaleza paranormal la hubiera convertido en una celebridad menor.

Para Friedrich Jürgenson, fue una grabadora de casete. A finales de los años cincuenta, Jürgenson, un pintor y cineasta, estaba experimentando con la grabación de aves en su jardín; Cuando los tocaba, escuchaba voces en la cinta que decía pertenecieran a su padre y su esposa muertos, diciendo su nombre. Después de varios años refinando su técnica, publicó sus hallazgos en un libro de 1967 llamado Radio Contact with the Dead.. Unos años más tarde, un psicólogo letón llamado Konstantin Raudive desarrolló y elaboró las técnicas de Jürgenson, lanzando su propio libro sobre la ciencia de la grabación de las voces de los muertos en 1971.

Las transcripciones de Raudive incluían algunos mensajes inquietantes del más allá. Una voz le dijo: «Aquí están los hermanos de la noche, aquí los pájaros arden». Otro informó: «Informes secretos… es malo aquí». Pero Raudive confesó que los fantasmas no siempre hablaban tan claramente. Afirmaba que los espíritus hablaban en varios idiomas, a veces en la misma frase. Algunas veces hablaban hacia atrás. Descifrar EVP se convirtió en una cuestión de tamizar a través de cualquier anomalía acústica que aparece en una cinta, por menor o incoherente que sea, y luego torturar ese ruido en algún tipo de significado.

Los fenómenos de la voz electrónica han continuado clasificándose entre las «pruebas» más prominentes ofrecidas de la actividad paranormal, parece, precisamente porque los seres humanos están configurados para dragar el significado del caos. Desde el punto de vista evolutivo, hace tiempo que necesitamos discernir la visión o el sonido de un depredador a pesar de su camuflaje, lo cual nos ha llevado a buscar patrones en los que podrían no ser inmediatamente evidentes. Las peculiaridades y las deficiencias de la tecnología juegan directamente en esta necesidad biológica: tirar de la estática y el ruido de fondo que está preparado para ser transmutado en señales significativas. Los cazadores de fantasmas trabajan a través de un sesgo de confirmación. En busca de pruebas de lo paranormal, lo encontrarán en cualquier cosa, pero lo más fácilmente posible en el ruido estático, de jerigonza y de errata-tecnológica en el que estamos cableados para encontrar falsos positivos.

Lo único que ha cambiado recientemente es la proliferación de la electrónica de consumo asociada con la caza de fantasmas. En una era de iPhones y Fitbits, los cazadores de fantasmas son sólo un mercado de nicho más, añadiendo los últimos y mejores gadgets para la venta. Pero hay una diferencia crucial: la mayoría de los proveedores de electrónica de consumo mantienen felices a sus consumidores, refinándolos constantemente hasta que estén libres de errores. La tecnología Fantasma funciona de la otra manera, mediante ingeniería activa de fallas – cuanto más, mejor.

Tales buscadores pueden ser fácilmente anulados como locos y chiflados, pero hay algo paradigmático en su uso de dispositivos defectuosos. El surgimiento de Internet y de otras nuevas tecnologías prometió una nueva era de la información, en la que los datos, la verdad y el conocimiento eran la nueva moneda, donde el futuro se construiría sobre la información misma. Veinte años después, hay un laberinto interminable de teorías de la conspiración, falsos memes, estadísticas falsas y pruebas fabricadas. El conocimiento del mundo es sólo una búsqueda de Google a distancia, pero que viene a nosotros inextricablemente entrelazado con el mundo buu.

http://www.theatlantic.com/science/archive/2016/11/the-broken-technology-of-ghost-hunting/506627/