ACERCA DE ALPHA CENTAURI
Nombres propios: Rigel Kentaurus, Rigil Kentaurus, Toliman
Designación de Bayer: Alpha Centauri
Número Flamsteed: Ninguno
BSC: 5459
HD: 128620
Constelación: Centauro
Ascensión recta: 14h 39m 36s
Declinación: -60° 50″™ 2″‘
Distancia: 4.4 años luz / 1.4 parsecs
Magnitud aparente: 0.0
Magnitud absoluta: +4.3
Clase espectral: G2 Yellow Dwarf
Visibilidad óptima: mayo
Alpha Centauri es la estrella más brillante de la constelación Centaurus
Elizabeth Klarer: viajera espacial 3
Suceso: Contacto
Fecha: 27 de Diciembre de 1954
Lugar: Drakensberg, Sudáfrica
¿No estás asustada ahora? Ésta, que potencialmente es una pregunta alarmante, lo es aún más cuando el que la fórmula es un extraterrestre, de pie ante su platillo volante, y usted y él son las únicas personas en lo alto de una colina desierta en medio de un paisaje desolador. Afortunadamente para Elizabeth Klarer, no sólo no estaba asustada sino que sentía un cálido sentimiento de confianza hacia el alienígena de quien habría de enamorarse y tener, posteriormente, un hijo.
Era muy joven cuando, en octubre de 1917, Elizabeth vio un extraterrestre por primera vez.
Estaba con su hermana mirando la puesta de Sol en una colina cerca de la granja de su familia en Drakenberg, Sudáfrica, cuando vieron un globo naranja-rojizo que se precipitaba hacia ellas. Aparentemente se trataba de un meteorito a punto de chocar con la Tierra, y Elizabeth observó cómo el ovni metálico desviaba su curso para evitar la colisión. En 1937, mientras volaba con su esposo de Durban a Baragwanath, ambos vieron un ovni blanco-azulado que se acercó al avión, siguió su curso por un momento y luego desapareció.
Su experiencia más extraordinaria comenzó el 27 de diciembre de 1954, cuando se encontraba nuevamente en la granja familiar y, al percibir la gran excitación que reinaba entre un grupo de niños zulúes que jugaban fuera, dedujo que algo estaba pasando. Corrió hacia la colina donde por primera vez vio un ovni y contempló una nave en forma de disco de unos 18.3 m de diámetro, que descendía y permanecía flotando sobre ella. Era plano y tenía una cúpula con escotillas. A través de una de ellas, vio una figura humanoide que la observaba. Poco después, la nave reanudaba velozmente el vuelo.
En abril de 1956, Elizabet Klarer sintió el impulso de volver a la granja de su familia, dominada por la sensación de que «algo la aguardaba allí». A primeras horas de la mañana subió a la colina, a la que había bautizado la Colina del Platillo Volante, y descubrió en la cima una inmensa nave metálica en el suelo. Esta vez el ente estaba de pie, fuera de la nave. Era alto, de unos 2 m de alto, tenía ojos rasgados de color gris claro y pómulos pronunciados. Vestía un traje de una pieza. Fue entonces cuando le preguntó: «¿No estás asustada ahora?»
Elizabeth subió a bordo de la nave; dentro había otro alienígena similar al primero, y la puerta se cerró. Comenzó a sentir pánico ante la idea de no poder volver más a la Tierra y cuando quiso mirar por las ventanillas, también las encontró cerradas.
Afortunadamente, se dio cuenta muy pronto de que se encontraba entre amigos y es posible que recibiera esta impresión por vía telepática.
La nave se unió a la nave nodriza, donde había gran cantidad de alienígenas que se mostraron sumamente amigables. Mientras permaneció a bordo, le mostraron imágenes del lugar de origen de los alienígenas, un planeta conocido como Metón.
Al entablar relaciones con los alienígenas, supo que su contacto principal se llamaba Akon, que pertenecían a una raza vegetariana y que se podían mover libremente a través de la galaxia, pero no podían en cambio ir a otras galaxias. Vivían en un mundo perfecto, no afectado por la contaminación y en su planeta no existían ni la política ni el dinero, ni las guerras ni la hostilidad y alcanzaban una edad muy avanzada sin sufrir enfermedades.
A fin de poder comunicarse con Akon, Elizabeth aprendió telepatía. Akon le explicó a Elizabeth que la necesitaba para su «banco de reproducción» y ella lo aceptó complacida. Quedó embarazada y durante cuatro meses, hasta dar a luz, vivió en Metón junto a Akon. El niño nació y ahora vive en ese planeta, al cuidado de su padre.
Akon le explicó que provenía de un planeta a cuatro años luz de distancia, lo que lo situaría en las proximidades de Alfa Centauro, la estrella más cercana al Sol de la Tierra. Nos están vigilando para asegurarse de que nuestra contaminación y experiencias nucleares no resulten demasiado perjudiciales.
Cuando casi todos los contactados ovnis fueron espiados en secreto
Nick Redfern
23 de marzo de 2021
Habiendo echado un vistazo a los archivos del FBI sobre George Adamski y George Van Tassel, pensé en compartir con ustedes las razones por las cuales algunos de los otros «contactados» de las décadas de 1950 y 1960 fueron cuidadosamente vigilados por agencias gubernamentales. Comenzaremos con otro expediente del FBI sobre cierto amigo de los Space Brothers. El hombre: George Hunt Williamson. Es intrigante notar que la razón principal por la que el FBI tenía un archivo sobre él era porque se sospechaba que contrabandeaba artefactos antiguos a través de la frontera de México y hacia los Estados Unidos. Algo así está casi garantizado que se le abriera un archivo. Durante un tiempo, el FBI reflexionó profundamente sobre si debían involucrarse más en la persecución de un crimen potencial que había ocurrido fuera de su jurisdicción y en otro país, México, pero finalmente abandonó el asunto; más bien afortunadamente, hay que decirlo, para Williamson. Hay un aspecto particularmente curioso de este asunto en particular: varios de los documentos relevantes están fuertemente censurados de acuerdo con la categoría 1 de la Ley de Libertad de Información. En particular, 1 cubre nada menos que asuntos que pueden tener un efecto potencial en la seguridad nacional de Estados Unidos.
Luego, está el archivo del FBI sobre Truman Bethurum, el hombre que, a principios de la década de 1950, afirmó haberse encontrado (en más de unas pocas ocasiones) con una nena alienígena sexy conocida como «Aura Rhanes». En cuanto a por qué el FBI se interesó tanto en el Bethurum, la respuesta es muy simple. El gobierno ya estaba vigilando a Bethurum, por una razón particularmente interesante: había hecho ciertas declaraciones vinculando sus experiencias con Aura Rhanes a asuntos de naturaleza comunista. En palabras del propio Bethurum: «Dos o tres compañeros que tenían hijos en Corea y que leían mucho en los periódicos sobre la clandestinidad comunista en este país, estaban convencidos en sus propias mentes de que yo, si estaba haciendo contacto con alguien, estaba haciendo con los agentes enemigos. Incluso fueron tan lejos como para decirme beligerantemente que tenían la intención de conseguir armas y seguirme por las noches, y si me atrapaban teniendo relaciones sexuales con cualquier persona desde los aviones, aeronaves de cualquier tipo, me volarían a mí y a esa gente también». Y, como un aparte divertido, ¡también llevó al FBI a referirse a Aura Rhanes en sus archivos como una «comandante encantadora»! ¡Incluso la Oficina, al parecer, fue infectada por el calor intergaláctico de Aura!
¡Aura Rhanes, la alienígena que puso la presión arterial de Truman Bethurum en un estado peligrosamente alto!
La Sociedad Aetherius de George King, que también estuvo muy impulsada por contactados desde finales de la década de 1950 en adelante, fue objeto de un archivo secreto creado por un brazo de la fuerza policial del Reino Unido llamado Special Branch. Ese archivo ahora es de dominio público, gracias a los términos de la Ley de Libertad de Información del Reino Unido. El archivo no muestra que la Rama Especial estaba preocupada por los encuentros con extraterrestres. Más bien, los documentos demuestran que la Rama Especial estaba preocupada por el hecho de que la Sociedad Aetherius se aliaba con la Campaña por el Desarme Nuclear, que se creó en la década de 1950. La Special Branch ciertamente veía a King como, en sus palabras, un «chiflado». La Special Branch se dio cuenta rápidamente de que King estaba muy motivado cuando se trataba de hacer correr la voz sobre sus puntos de vista sobre las armas nucleares y los rusos. Sin duda, eso por sí solo es motivo de profunda preocupación para las autoridades. La vigilancia, como era de esperar, continuó a un ritmo constante y secreto. Un documento de la Brigada Especial de 1959 proporciona lo siguiente sobre la Sociedad Aetherius: «Hace una cruzada para la suspensión de las pruebas de la bomba H y apoya la Campaña por el Desarme Nuclear, la Marcha de Aldermaston de 1958 y celebra reuniones públicas de vez en cuando. Una se celebró el 23 de agosto de 1959, cuando 200 personas formaron una «tranquila, divertida» audiencia. Fue cubierta por la Special Branch». La Special Branch finalmente interrumpió su vigilancia de la Sociedad Aetherius. El extraño asunto finalmente terminó.
La mayor pesadilla de George King: una guerra nuclear