Esta pequeña ciudad experimenta «Lluvia de peces» una o dos veces al año
Panchali Dey | Editora de viajes de Times
21 de mayo de 2019
¡Peces lloviendo del cielo! Por extraño que parezca, pero hay un lugar en la Tierra donde realmente existe este fenómeno. Los residentes de Yoro en Honduras experimentan esto al menos una o dos veces al año. Lo que es más interesante es el hecho de que Yoro está realmente a millas de distancia del océano.
Según se informa, este fenómeno de la Lluvia de Peces ha tenido lugar en este pequeño pueblo desde el siglo XIX durante los meses de mayo y junio. De hecho, todos los años, una gran tormenta arrasa la ciudad, seguida de fuertes lluvias. Y después de que la tormenta pasa, los caminos se dispersan con peces vivos y coleando.
Popularmente llamada «lluvia animal», esta característica climática típica ha sido reportada durante siglos, aunque ninguna definición científica ha podido explicarlo. Cientos de peces caen durante este tiempo en casi todas partes.
Si los registros van a pasar, también ha habido informes de lluvia animal en otras partes del mundo, que generalmente son ranas y peces. Sin embargo, hubo algunos informes perturbadores de otras partes del mundo donde las regiones experimentaron la lluvia de serpientes, ratones, caimanes, arañas, medusas y mucho más. Mientras que en la mayoría de los casos, los animales ya estaban muertos cuando se estrellaron contra el suelo, en algunos casos también cayeron animales vivos, que más tarde saltaron.
Sin embargo, este fenómeno en Yoro es tan popular que la gente puede medir cuándo las nubes van a dejar caer peces. Parece estar estrictamente asociado con la tormenta de lluvia más potente, y en el momento en que recorre la ciudad, produce un sonido típico, bastante turbulento pero oscuro. Quienes presencian que esto sucede en vivo, jurarán que los peces caen de las nubes.
Teorías detrás de la «Lluvia de peces»
La mayoría de los lugareños creen que hay una razón religiosa más que científica detrás de este incidente que tiene lugar en esta pequeña ciudad. Según una teoría, hubo un sacerdote católico que vivió en Yoro de 1856 a 1864. Cuando vio a personas que morían de hambre allí, ofreció oraciones a Dios para proporcionarles sustento, y al final de su sesión de oración, sucedió este milagro. Entonces, según esta historia, después de que el sacerdote terminó su oración, vino una tormenta y los peces comenzaron a caer del cielo. Y desde entonces, esta lluvia de animales ha estado ocurriendo todos los años en esta pequeña ciudad.
Otra teoría que trata de explicar este misterioso evento es que los peces no están localizados en el área y podrían estar llegando tan lejos como el Océano Atlántico, probablemente a 200 km de la ciudad.