Las fotografías von Poppen

En mayo de 1977 Gray Barker, colaborador del Saga UFO Report, publicó un reportaje afirmando que el barón Nicholas von Poppen, un refugiado báltico alemán, procedente de Estonia, había tomado una serie de fotografías del ovni accidentado en Roswell.

La historia se remontaba a principios de la década de los cuarenta, cuando von Poppen fue contactado por los miembros de Inteligencia Militar, quienes le ofrecieron trabajar para el gobierno como fotógrafo. Por una parte le ofrecían un sueldo muy alto, pero por lo otra le amenazaban con deportarlo en caso de que revelara algo de su trabajo secreto.

Von Poppen, quien era fotógrafo industrial especializado en la industria aeronáutica, aseguró que fue trasladado a la base aérea de Los Álamos, y lo llevaron frente a un platillo volador. Le ordenaron que tomara diversos planos de todo el aparato. Poppen estuvo trabajando durante casi una semana. Cada vez que terminaba un rollo, la película le era recogida.

El platillo volador tenía unos 10 metros de diámetro. Poseía una cabina, con techo curvo, de unos siete metros. En el interior había cuatro asientos frente a un tablero de mandos “cubierto de muchos botones y palancas”. Al lado de esos botones había símbolos no identificables.

Los asientos habían sido ocupados por cuatro seres de diferentes tamaños, que variaban desde los 60 cm hasta el 1.20 m.

“Las caras de los cuatro -dijo van Poppen- eran muy blancas (llevaban trajes negros de una pieza, en forma de monos, sin bolsillos y muy recogidos en los pies y en el cuello. Sus zapatos estaban fabricados del mismo material y mostraban una apariencia muy suave, nada rígida. Sus manos eran parecidas a la de los humanos, aunque también muy suaves, semejantes a las de los niños, terminando en cinco dedos, nudillos normales y uñas bien cortadas”.

Von Poppen trató de robar algunas piezas del aparato pero fue descubierto por un detector de metales. Tuvo más suerte escondiendo una foto del platillo estrellado. Guardó su “tesoro” en un lugar seguro y dejó instrucciones para que fuese abierto al momento de su muerte o “en caso de que algo llegase a sucederme”.

La historia fue otro de los inventos de Gray Barker (recordemos el asunto de los Hombres de Negro). Este ufólogo se dedicaba en cuerpo y alma al asunto los ovnis y tenía una editorial, la Saucerian Press, de Clarksburg, Virginia Occidental, que editaba libros y revistas sobre el particular. Llenar todo ese espacio era realmente abrumador y Barker tenía que inventar sus historias. No hay nada más que echarle un vistazo o su artículo en Saga UFO Report, plagado de cuentos y fantasías.

Desde un principio se supo que la historia era un fraude, ya que no existe ninguna base aérea en Los Álamos; la historia fue publicada dos años después de la muerte de von Poppen, quien murió en 1976, a la edad de 89 años, en Hollywood, California; y nunca se encontró la mencionada fotografía. De haber existido este documento, era seguro que Barker lo hubiera publicado en alguno de sus pasquines.

Barker continuó con su historia luego del éxito del libro de William Moore y Charles Berlitz. Para ese entonces ya había desaparecido Saga UFO Report, y editaba el Gray Barker’s Newsletter. Incluso el ufólogo Jerome Clark, en su The UFO Encyclopedia, afirma que la historia protagonizada por Nicholas Van Poppen fue otra invención de Barker:

Otra invención de Barker, una historia dramática protagonizada por Nicholas von Poppen, un personaje de la vida real (pero convenientemente fallecido), todavía circula en parte de la literatura sobre accidentes y recuperaciones de ovnis

Barker ya había publicado anteriormente material sobre el tema en el libro de su amigo James Moseley The Wright Field Story. En su artículo para Saga UFO Report, Barker relata los detalles de una “señorita Y” y del supuesto ovni que se mantiene en Wright-Patterson AFB, junto con la saga del inmigrante estonio, el barón Nicholas von Poppen, que según Barker recibió el encargo de tomar fotos del ovni en Los Álamos.

Barker supo de von Poppen tras leer un informe que había recibido del fundador de la Colorado Shale and Metal Corporation, George Tyler (o Thayer). Tyler había sido contactado por von Poppen para invertir en la extracción de petróleo de esquisto en Estonia. Tyler aceptó, pero sus planes se frustraron tras la invasión rusa de Estonia. Von Poppen emigró más tarde a Estados Unidos y se ganó la vida como fotógrafo industrial autónomo.

Un día, siempre según Barker, se puso en contacto con Tyler para concertar una cita. Le contó que había sido contratado por la inteligencia militar para fotografiar un ovni en la base militar de Los Álamos. Von Poppen le dijo: “Para mí gran parte de la superestructura parecía metálica pero en realidad era translúcida, lo que planteaba problemas fotográficos, y dudo que algunas de mis fotos salieran”.

En el ovni había ocupantes extraterrestres muertos, y von Poppen también tuvo que fotografiarlos.

Tras la muerte de Tyler, Barker dice que recordó una inusual carta de Tyler, que no debía abrirse hasta después de su muerte. En ella estaba la historia de von Poppen. Barker dice entonces que localizó a von Poppen, le visitó y “balbuceó unas palabras sobre el informe de Tyler”. Von Poppen no estaba interesado en hablar, exclamando: “¡Soy un hombre enfermo! Ya he tenido bastantes problemas”.

Jerome Clark, en un artículo para International UFO Reporter abunda sobre este caso:

Los Álamos, Nuevo México, 1949. Según la historia, un emigrante estonio y fotógrafo experto, Nicholas von Poppen, fue sacado en secreto de su casa en Los Ángeles y llevado a Los Álamos, donde le ordenaron fotografiar un “plato volador” y cuatro ufonautas muertos, humanoides parecidos a albinos de solo 4 pies de altura.

Aunque esta historia sigue vigente, es completamente ficticia. Un fanático de los ovnis de California llamado George Thayer escribió una historia de ciencia ficción inédita que presentaba a un conocido suyo, von Poppen. Después de la muerte de Thayer en 1954, el “showman de los platillos” Gray Barker se hizo cargo del archivo de Thayer. Este último, poseedor de una rica imaginación, embelleció la historia de Thayer y la hizo pasar por un incidente real. Incluso afirmó que viajó personalmente a Los Ángeles, tratando de entrevistar a un von Poppen muy asustado.

Von Poppen murió en 1976 de muerte natural, aunque Steinman y Stevens, en su sensacional libro, afirmaron que fue asesinado.

En los últimos años, las fotografías de un muñeco de cera (modelo “alienígena”) que han circulado por toda Europa se han hecho pasar por fotografías de von Poppen.

Clark se refiere al así llamado “Hombre de mis sueños”, por la artista Linda Corriveau, que apareció por primera vez en el libro de James Moseley como la foto del extraterrestre que se guardaba en la Base aérea de Wright Patterson. Las únicas fotografías de este caso, y que no fueron tomadas por von Poppen, son las del “Marcianito del zíper”.

Referencias:

Anonimo, “More About That ‘Roswell Alien Photo”, Focus, Nos. 1–3, March 31, 1991. p. 26–28.

Barker Gray, “Archives reveal more crashed UFOs”, Gray Barker’s Newsletter, no. 14, March 1982. p. 5-6.

Barker Gray, “Von Poppen Update”, Gray Barker’s Newsletter, no. 17, December 1982). p. 8.

Barker Gray, America’s Captured Flying Saucers – Cover-Up of the Century, Saga UFO Report, Gambi Publications, New York, Vol. 4, No. 1, May 1977.

Barker Gray, Chasing the Flying Saucers, Flying Saucers, November 1960. pp. 22–28.

Berlitz Charles y Moore L. William, El Incidente, Plaza Janés, Esplugues de Llobregat, Barcelona, 1981.

Blundell Nigel and Boar Roger, The World´s Greatest UFO Mysteries, Berkley Publishing, New York, 1990.

Clark Jerome, A catalog of early crash claims, International UFO Reporter, Vol. 18, No. 4, Jul-Aug, 1993.

Clark Jerome, The UFO Encyclopedia. The Phenomenon From The Beginning, 3^rd Edition, Omnigraphics, Detroit, 2018. p. 487.

Moseley James, UFO Crash Secrets at Wright Patterson Air Force Base, Inner Light Publications, New York, 1991.

Ruiz Noguez Luis, Extraterrestres ante las cámaras. Tomo 1, Ediciones Coliseo Sentosa, Chile, 2023. pp. 149-174. Se puede conseguir en https://www.amazon.com.mx/Extraterrestres-ante-c%C3%A1maras-Tomo-Spanish/dp/B0BZFP1W37

Ruiz Noguez Luis, Las fotografías von Poppen, Contacto ovni, Especial sobre la “Autopsia extraterrestre”, Editorial Mina, México, noviembre de 1995. pag. 12.

Steinman S. William, and Stevens C. Wendelle, UFO Crash at Aztec: A Well-Kept Secret, UFO Photo Archives, Tucson, Arizona,1986.

El viejo triángulo

23 de marzo de 2023

Nigel Watson

Colin Saunders, Triangular UFOs of the United Kingdom, Flying Disk Press, 2023.

Cuando Colin Saunders y su familia se dirigían en coche a su casa en Hinckley, Leicestershire, la noche del 31 de marzo de 1999, vieron un ovni triangular que volaba muy bajo sobre ellos. Pudieron detenerse para verlo mejor durante unos instantes hasta que desapareció de su vista.

Utilizando su experiencia y conocimientos como delineante y diseñador gráfico, Colin se inspiró rápidamente para construir un modelo en 3D de lo que había visto. Su primer intento fue robado, junto con un reproductor de casetes, de su coche. Le dijeron que parecía un trabajo profesional, con la insinuación implícita de que las autoridades o el MIB estaban tras él. Afortunadamente, pudo construir un modelo mejor y más exacto para utilizarlo en conferencias sobre su experiencia.

Como conocedor de la tecnología aeronáutica, sabía que la nave que vio era demasiado increíble para ser algo conocido por la tecnología humana. Como él dice: “No se veían tuercas ni tornillos, remaches ni soldaduras. No había aberturas, ni antenas, ni protuberancias de ningún tipo. Inmediatamente me di cuenta de que no se trataba de un objeto terrestre”.

Tras una breve autobiografía y un relato del avistamiento, la mayor parte del libro está repleta de más de 100 declaraciones de testigos sobre sus propios avistamientos de ovnis triangulares. Como era de esperar, varían en calidad y detalle. Lo esencial es que muchas de estas naves llevan luces, son gigantescas (más grandes que un campo de fútbol), silenciosas y vuelan lentamente a baja altura. Si se tratara de un avión furtivo secreto de cualquier tipo, ¿por qué llevaría luces y volaría tan bajo sobre zonas muy pobladas del Reino Unido? Desde luego, no sería la mejor manera de probar una nave de este tipo.

Al descartar las pruebas de algo como el avión TR-3B, Colin descubrió que hay un aspecto paranormal en estos avistamientos y que algunos presentan avistamientos de entidades e incluso abducciones.

Una semana después del avistamiento, los electrodomésticos de Colin sufrieron varios problemas eléctricos y estuvo de acuerdo con el comentario de alguien de que tal vez “ellos” le siguieron a casa y lo escanearon para estudiar su reacción. Colin estuvo de acuerdo con esto y también con la opinión de Budd Hopkins de que tal vez los extraterrestres habían colocado imágenes en su mente. Además de otros avistamientos de ovnis, Colin ha oído pisadas fantasmales cuando salía a pescar y en dos ocasiones ha sentido “caca de pájaro” fantasma aterrizar en su cabeza. Incluso encontró una pequeña cicatriz en su cuerpo y un objeto inusual en su caca. Admite que puede haber explicaciones para estos dos últimos casos, pero está convencido de que los extraterrestres utilizan una ciencia que nosotros no comprendemos.

Lo que no entiendo es que Colin, que tiene una sólida formación técnica, no proporcione ningún contexto o análisis de los avistamientos triangulares del Reino Unido. La famosa oleada belga de ovnis triangulares observados entre 1989 y 1990, por ejemplo, incluía varios ejemplos de engaños e identificaciones erróneas, pero en lugar de analizar ese aspecto de los informes, Colin prefiere agruparlos como una forma del argumento “toda esta gente no puede estar equivocada”. ¿Podría ser que las imágenes de naves triangulares, como el Destructor Estelar Imperial en las películas de La Guerra de las Galaxias, o en Expediente X tuvieran alguna influencia? ¿O podrían ser factores importantes las imágenes de naves secretas Stealth mostradas a menudo en la prensa popular, o el creciente uso de drones? Esas cosas no se tienen en cuenta: son los extraterrestres, por supuesto, y su ciencia mágica.

Colin, como muchos otros, se sintió atraído por el mundo paranormal de los extraterrestres, ayudado e instigado por gente como Budd Hopkins y creyentes que aman acríticamente las historias de encuentros con ovnis. Como tal, este libro sirve como ejemplo de cómo un breve avistamiento ovni (ya sea una nave ET o algo mucho más mundano) cambió por completo la vida y la visión del mundo de una persona.

https://pelicanist.blogspot.com/2023/03/the-old-triangle.html