Astrónomos mexicanos sugieren que el avistamiento de Bonilla podría haber sido una ruptura de un cometa muy cercano
19 de octubre de 2011
Por Bob Yirka
(PhysOrg.com) — Los astrónomos mexicanos Héctor Javier Durán Manterola, María de la Paz Ramos Lara, y Guadalupe Cordero, que trabajan en la Universidad Nacional Autónoma de México en Ciudad de México, han subido un documento al servidor de preimpresión arXiv, sugiriendo que los objetos mexicanos que el astrónomo José Bonilla grabó en 1883 pasando frente al sol y rodeados de una bruma nebulosa, eran de hecho fragmentos de un cometa cuando se separaba muy cerca de la tierra.
Binilla anotó sus observaciones en ese momento y tomó algunas fotografías de lo que vio, pero nunca intentó realmente explicar qué eran los objetos. Tres años más tarde, la revista francesa de astronomía L’Astronomie publicó las fotos, pero las consideró probablemente como aves voladoras o bichos en la lente de la cámara.
Ahora Manterola y sus colegas sugieren que hay suficiente evidencia para al menos considerar la posibilidad de que los objetos que Bonilla vio eran fragmentos de cometas. En primer lugar dicen, Bonilla escribió todo sobre el avistamiento; donde aparecieron los objetos en el cielo, cuántos fragmentos contó (447) durante los dos días que pudo ver, el tipo de cámara que usó y las técnicas fotográficas, etc. Y quizás lo más importante, el tiempo que tomó para que un unico fragmento cruzara el sol, porque es ese número que permitió a los investigadores modernos calcular su distancia a la Tierra, lo que sugieren que habrían estado en algún lugar cerca de ,8000 kilómetros. Además, debido a la precisión de Bonilla en la grabación de los eventos, parece dudoso que hubiera pasado por alto los errores en su lente, o la posibilidad de que los objetos fueran aves, etc.
Lo desafortunado en todo esto es que nadie más reportó haber visto los objetos que Bonilla vio, y no hubo lluvia de meteoros asociada como se esperaría si un cometa se desmoronara tan cerca de la Tierra. Manterola y su equipo dicen que esto podría ser debido al efecto de paralaje, que sucede cuando un objeto está tan cerca, sólo los más cercanos a él pueden verlo. También señalan que debido a la posición aparente de los objetos, sólo se habrían podido observar en zonas de aproximadamente la misma latitud, que habrían incluido partes de Ãfrica y el norte de la India y el sudeste de Asia; Lugares donde nadie miraba el sol a través de un telescopio.
Otros son claramente escépticos, por razones obvias. Pero eso puede o no importar porque si los objetos eran de hecho fragmentos de cometa, parece que llegamos bastante cerca de ser aniquilados. Los investigadores sugieren que muchos de los fragmentos habrían estado en el orden del tamaño de lo que golpeó Siberia en 1908, destruyendo todo por millas alrededor. Si hubiéramos sido golpeados por cientos o miles de fragmentos al mismo tiempo, podría haber golpeado la vida de nuestro planeta, literalmente.
Más información: Interpretation of the observations made in 1883 in Zacatecas (Mexico): A fragmented Comet that nearly hits the Earth, arXiv:1110.2798v1 [astro-ph.EP] arxiv.org/abs/1110.2798
Abstract
En 1883, el 12 y 13 de agosto, el astrónomo mexicano José A. y Bonilla observó varios objetos que pasaban delante del disco solar. En 1886 en la revista L’Astronomie, reportó sus observaciones sin aportar una hipótesis que explicara los fenómenos registrados. Nuestro objetivo en este trabajo es interpretar, con el conocimiento actual, lo que se observó en Zacatecas. Nuestra hipótesis de trabajo es que lo que Bonilla observó en 1883 fue un cometa altamente fragmentado, en un acercamiento casi a ras de la superficie de la Tierra. La fragmentación del núcleo del cometa es un fenómeno conocido desde el siglo XIX. Usando los resultados reportados por Bonilla, podemos estimar la distancia a la que los objetos se aproximaron a la superficie de la Tierra, su tamaño, su masa y masa total del cometa antes de la fragmentación. Según nuestros cálculos, la distancia a la que pasaron los objetos sobre la superficie de la Tierra fue entre 538 km y 8,062 km, la anchura de los objetos fue entre 46 m y 795 m y su longitud entre 68 m y 1,022 m, la masa del objeto estaba entre 5.58e8 kg y 2.5e12 kg. Finalmente, la masa del cometa original, antes de la fragmentación, estaba entre 1.83e12 y 8.19e15 kg, es decir, entre 2e-3 y 8.19 veces la masa del cometa Halley.
https://phys.org/news/2011-10-mexican-astronomers-bonilla-sighting-comet.html