En septiembre del 2004, Paul Whitman estaba visitando la Gran Muralla China con su familia. Como todos los tristas, Whitman sacaba fotos de la muralla.
Como en todos estos casos, nuevamente, ni èl ni su familia vieron nada. Fue sólo cuando vaciaron las fotos en la computadora que se percataron de este objeto volador en una de las fotos en donde aparece el hijo de Whitman.