ESCRUTINIO
Manuel: su solo nombre lo dice todo[1]
Juan José Morales
Su nombre completo es Manuel Arturo José Cuevas Martínez, pero se le conoce simplemente como Manuel. Así, a secas: Manuel. Incluso, si se quiere saber de él, basta poner esas cinco letras en cualquier buscador de Internet. Y es que su solo nombre conlleva el prestigio de una larga y brillante carrera como diseñador de vestuario para cantantes, músicos, actores y otros artistas.
Manuel en su establecimiento en el centro de Nashville, cerca de una zona muy frecuentada por los turistas. Sus creaciones «”que llegan a costar miles o decenas de miles de dólares»” pueden encontrarse no sólo en su tienda, sino en lugares como el Salón de la Fama de la Música Country, el Salón de la Fama del Rock»™n Roll y en museos de diversos lugares de Estados Unidos, incluso los afamados Smithsonian de Washington y Metropolitan de Nueva York.
Lo conocí hace poco en Nashville, en el estado norteamericano de Tennessee, y confieso que me sorprendieron su sencillez, afabilidad y bonhomía, poco comunes en un personaje de tanta fama y que, sin alardes, habla de sus relaciones con estrellas de cine y otros personajes prominentes. Y no dejaron tampoco de impresionarme la fluidez de su español, su gran conocimiento de la situación política, social y económica de México y el amor que todavía le guarda a su lugar natal pese a casi toda una vida de residir en Estados Unidos.
Nacido en Michoacán, Manuel es uno de esos millones de compatriotas que por una u otra razón debieron emigrar en busca de nuevos horizontes. Pero, aclara, no lo hizo impulsado por la necesidad ni para trabajar «”como tantos compatriotas»” en los campos agrícolas o en la industria de la construcción. Durante su infancia y su juventud gozó de una situación económica desahogada, cursó estudios profesionales en la Universidad de Guadalajara «”donde obtuvo su título de psicólogo»”, antes de emprender el viaje al norte tuvo varios negocios que le dejaron buen dinero, y cuando cruzó la frontera en la década de los 50, llevaba consigo un maletín con varias decenas de miles de dólares; una fortuna en aquel entonces.
Pero, aun pudiendo haberse dado buena vida sin trabajar, desde que llegó se dedicó con empeño a trabajar en algo que conocía muy bien desde niño: la sastrería. Mas no como cualquier sastre del montón, sino en el taller de un afamado diseñador de vestuarios para artistas de la época, donde se compenetró de los secretos de un oficio que es a la vez arte, y pudo encauzar su talento, ingenio y creatividad. Ahí trabajó exitosamente por cerca de tres lustros, hasta que finalmente se independizó y comenzó a producir sus propias creaciones, que incluyen ropa masculina y femenina, y lo mismo blusas, sacos, chalecos, camisas que botas y mascadas.
Elvis Presley, Mick Jagger, los Rolling Stones, Johnny Cash y James Dean, son algunos de los artistas para quienes Manuel ha diseñado vestuario. Pero quizá la más conocida y popular de sus creaciones sea el uniforme con que aparecen Los Beatles en la célebre portada de su disco El Sargento Pimienta y su Club de Corazones Solitarios.
Por largo tiempo residió en Los Ãngeles, cosa natural dado que ahí se encuentran los grandes estudios cinematográficos para cuyas cintas diseñaba vestuario. Pero a fines de los 80 decidió mudarse a Nashville, en el centro-sur de Estados Unidos. Había dos buenas razones para ello: en primer lugar, deseaba dar a su familia un ambiente más tranquilo, distinto al de la urbe californiana, que para entonces ya comenzaba a presentar serios problemas de inseguridad, drogadicción y delincuencia. Y en segundo término, Nashville es el corazón de la industria discográfica norteamericana, y por ende ahí podría tener muchos clientes.
Ahí ha vivido desde entonces, y esperemos que a Donald Trump no se le ocurra pedir que sea deportado.
Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx
[1] Publicado en los diarios Por Esto! de Yucatán y Quintana Roo. Miércoles 9 de diciembre de 2015