Un misil ruso causa una alerta ovni en todo Oriente Medio
9-6-2012 | Hispanatolia
El lanzamiento con éxito de una prueba realizada por Rusia causó una ola de avistamientos ovni en varios países de Oriente Medio, generando en los últimos días especulaciones sobre el origen de las luces y espirales vistas sobre los cielos de la región.
El Ministerio de Defensa de Rusia confirmaba el viernes que había realizado una prueba de un misil balístico intercontinental con capacidad nuclear (ICBM) de clase Topol lanzado desde una base militar rusa y que había alcanzado con éxito el campo de pruebas de Saryshaghan, en Kazajistán.
El objetivo de la prueba balística que fue realizada el jueves por la noche, era comprobar el funcionamiento de este tipo de misiles como parte de los esfuerzos que Moscú está llevando a cabo para contrarrestar el llamado «escudo de defensa anti-misiles» que la OTAN ha comenzado a desplegar, y que Rusia considera una amenaza a su capacidad de disuasión nuclear.
El lanzamiento motivó sin embargo a lo largo del jueves y el viernes un intenso debate en internet y en ámbitos ufológicos después de que miles de personas observaran en los cielos una brillante espiral de luz cruzando el firmamento. El curioso fenómeno pudo verse con claridad en la noche del 7 de junio en el este de Turquía, así como en Armenia, Azerbaiyán, Siria, Líbano, Jordania e Israel.
Varios videos colgados por los usuarios en portales como YouTube, en los que podía observarse la extraña estela de luz, motivaron especulaciones sobre que pudiera tratarse de un fenómeno astronómico, un meteoro o incluso un ovni, hipótesis que parecieron quedar descartadas después de que las autoridades rusas confirmaran al día siguiente que habían realizado el lanzamiento de un misil de largo alcance esa misma noche. El misil alcanzó una altura de entre 200 y 300 kilómetros, lo que explicaría que el avistamiento hubiese sido visible desde varios países al mismo tiempo.
En 2009 un avistamiento similar pudo observarse en los cielos de Noruega, generando también una amplia repercusión en muchos medios y una alerta ovni después de que muchas personas pudieran observar y grabar el fenómeno. Posteriormente el Ministerio de Defensa ruso admitió que se había tratado de una prueba fallida de un misil de intercontinental «Bulava», aunque el debate sobre si esa había sido realmente la causa se prolongó incluso durante meses.