La fotografía Hanson 1

Pocos días después del famoso caso de Roswell hubo otro «estrellamiento» de un plato volador. Esta vez fue el 10 de julio de 1947 en Black River Falls, Wisconsin y fue reportado por varios periódicos en todo Estados Unidos[1].

HansonSigurd Hanson, un electricista de la ciudad, se encontró con un objeto en forma de platillo en un campo del recinto ferial local, donde aparentemente se había estrellado. Yacía en lo profundo de las hierbas en el recinto ferial de la ciudad, en el condado de Jackson, Wisconsin. En ese lugar, una marca de aproximadamente cinco a seis pies (1.5″“1.8 metros) era visible en la hierba donde se estrelló el objeto[2] y el objeto en sí mismo era claramente un dispositivo tecnológico, aerodinámico para el vuelo y el cuerpo del platillo mostraba la forma abrasadora del escape del motor. Era como dos tazones de sopa de tamaño mediano colocados juntos y unidos entre sí, de color plateado y con una luz reflectante. Tenía una especie de motor, del tamaño del puño de un hombre, colocado en el centro, así como una hélice de dos pulgadas con dos hélices de metal. El dispositivo también tenía una celda fotoeléctrica con las letras «R.C.A.» y una aleta vertical de cuatro pulgadas. Al lado de esta última, había una sección chamuscada. El plato «volador» tenía aproximadamente 15.5 pulgadas (39.4 centímetros) de diámetro y pesaba aproximadamente 1.5 libras (680 gramos). El artefacto estaba hecho de madera cartón y plástico[3].

El teniente Frederick Frederickson, comandante del escuadrón de la Civil Air Patrol (CAP) en Black River Falls, pidió a las autoridades de la CAP que inspeccionaran el misterioso disco. Luego, el coronel Harry W. Schaefer, comandante de la CAP de Wisconsin, fue a Black River Falls para examinar el objeto y luego informó sus hallazgos a los oficiales del ejército. Pensó que era un engaño, pero no estaba seguro.

El Sr. Hanson entregó el disco a la Cámara de Comercio local: fue colocado en una caja de vidrio en el arsenal de su edificio, y dos hombres debían vigilarlo mientras estaban en exhibición. La Cámara de Comercio encerró el disco en la bóveda de un banco y se negó a dárselo a Schaefer para que lo llevara a Milwaukee[4]. La Cámara de Comercio hizo mucho más. Puso el disco en exhibición, a 20 centavos (más impuestos) por mirada, esperando «mil» personas el domingo 13 de julio. Las ganancias irían a Hanson, quien también esperaba «recolectar el dinero de la recompensa ofrecida por una explicación del misterio del platillo volador»[5], es decir, la recompensa de $ 1,000 ofrecida por el Congreso Mundial de Inventores en sesión esos días en Hollywood, California. Hanson ya estaba pensando en usar ese dinero para construir un garaje y un porche en su casa[6].

TheLaCrosseTribune-LaCrosse-11-7-1947dThe La Crosse Tribune, 11 de julio de 1947

Hubo mucha emoción debido a la evidencia física recuperada, y esto era de hecho un platillo, no trozos de papel de estaño. A medida que la historia se desarrollaba, surgieron más detalles.

La historia era tan grande, había historias sobre la cobertura de noticias de la historia misma. Los platillos vendían periódicos y los fotógrafos estaban ansiosos por obtener una fotografía de un verdadero platillo volador. Incluso el FBI se ocupó de este caso. Su conclusión: engaño.

La noticia se publicó originalmente en la primera plana de The La Crosse Tribune, de La Crosse, Wisconsin, del 11 de julio de 1947. En ese periódico apareció una impresionante fotografía de un plato volador sostenido por un ciudadano de Black River Falls.

A ocho columnas se podía leer: Aguardando la investigación del Ejercito del disco.

La fotografía acompañaba a un par de artículo que aparecieron en esa primera página. El primero dice:

TheLaCrosseTribune-LaCrosse-11-7-1947aEncuentran objeto en el campo en el Black River

Descubrimiento el jueves por electricista de la ciudad causa expectación en el Condado de Jackson

Por Jerry Moriarty

(Tribune State Editor)

Black River Falls, Wis.: Desde uno de esos dujiggers, un platillo volador, fue encontrado en el recinto ferial la tarde del jueves, toda la comunidad de Black River Falls ha estado emocionada como un joven en un incendio de la escuela.

Las autoridades militares fueron programadas para llegar en aeroplano en cualquier hora de hoy desde Milwaukee o Wright Field, O., para conducir una investigación del artilugio construido inusualmente encontrado a las 3:30 p. m. por Sigurd Hanson, electricista de la ciudad.

Esperan al Comandante de la CAP

El Teniente Arthur Frederickson, Comandante de la unidad de Civil Air Patrol de Black River Falls, informó tarde esta mañana que el Teniente Coronel Harry W. Schaefer, Comandante del ala para la CAP del estado, o algún oficial volarán aquí para revisar el disco.

Mientras tanto, a través de toda la emoción, probablemente la persona más solicitada en este pueblo de alrededor de 2,500 habitantes es Henson, quien encontró el disco en la hierba en los terrenos feriales, pero incluso él se está poniendo un poco incómodo cuando la atención de toda la nación se está dirigiendo hacia él.

Él mantiene el artilugio bajo chapa en su casa en el 121 North 11th Street hoy, pero anoche el cuarto de enfrente de su casa fue inundado por buscadores de curiosidades, reporteros y fotógrafos y gente de fuero espiaban a través de las ventanas para echar un vistazo al platillo, que ha mantenido a toda la nación nerviosa y escéptica.

Hanson y otros observadores creen que el disco es algo auténtico y Frederickson añade, «Parece muy legítimo».

Aguardan los hallazgos militares

Si el platillo es un engaño o solamente el producto de un constructor de modelos de aeroplanos excéntrico lo sabremos cuando las autoridades militares lo investiguen.

El disco está hecho de un material parecido al cartón, parecido a dos platos de tamaño medio colocados juntos. Es aerodinámico y pintado de aluminio. El «descubrimiento» de Hanson sin un piloto de un solo ojo y cuatro patas como algunos de los amigos más imaginativos podrían haber sospechado, es definitivamente una exigente pieza de mecanismo.

La estructura mide 15 ½ pulgadas de diámetro y pesa ligeramente más de una libra y media. Un agujero de cuatro pulgadas y media en la parte superior hace un cuarto para una hélice, aparentemente funciona con un motor o generador, conectado por una intrincada serie de alambres a una celda fotoeléctrica, hecha incidentalmente por una firma americana, RCA.

Sin tiempo para construirlo

Sig Hanson, un hombre acreditado, ha tenido que responder más de varias acusaciones de que él construyó el «platillo», pro su esposa fue bastante convincente cuando sonriendo interrumpió en una ocasión con «No se cuándo tuvo el tiempo para hacer uno; incluso no tiene tiempo para hacer una casa para nuestro perro».

Hanson estaba trabajando en los terrenos feriales ayer con George Dickie, instalador de líneas de la ciudad, y Aleck Gunderson, marinero, revisando los tamaños de los transformadores en la zona del parque de pelota cuando estaban añadiendo luces para el juego de baseball entre La Crosse AFL y Black River anoche.

Más tarde Gunderson dijo que notó un objeto fuera del campo, pero que no le puso atención le dijo Hanson a un periodista del Tribune. Mientras Dickie subió a un poste de luz, Hanson llevó el camión a través del campo para revisar los transformadores en el lado puesto. Pasó el «platillo» pero le dio poco más que una mirada superficial.

Da explicación

Sin embargo, a su regreso, paró el camión, recogió el objeto inusual y lo colocó en el vehículo. Más tarde, les preguntó a los otros si habían visto algunos de esos «discos voladores» y ellos respondieron, «Â¡Demonios, no! ¿Ese es uno de ellos?»

Durante todo el camino a su casa, Han son fue detenido por transeúntes quienes le daban una inspección al «platillo».

Jim Hanson, de 21 años, quien será un senior en la UCLA el siguiente otoño, estudiando ingeniería eléctrica, dio una explicación plausible de la operación. La celda fotoeléctrica en un alojamiento de celuloide transfiere energía luminosa a energía eléctrica, viajando a través del motor de corriente directa a la hélice.

Una aleta vertical de cuatro pulgadas da estabilidad direccional al «platillo», pero de inmediato no se pudo determinar la forma en que la pequeña hélice en la parte superior pueda dar movimiento direccional.

Los observadores estaban teorizando sobre el método de propulsión jet para lanzar el disco debido a la banda chamuscada que se extiende en circulo interno cerca de la hélice hasta el extremo externo a lo largo del estabilizador vertical.

El borde de ataque del disco estaba ligeramente dañado por el impacto al aterrizar y se hicieron varios arañazos en la parte inferior. En los terrenos feriales se hizo una marca de alrededor de cinco a seis pies en la hierba donde el platillo patinó.

El sobrino de Hanson, Jim, añadió

(Ver DISK, página 2)

TheLaCrosseTribune-LaCrosse-11-7-1947bDisks

(Continúa de la página 1)

Que la vida de una celda fotoeléctrica es alrededor de 2,000 horas y una se mantendrá en operación tanto como sea expuesta a la luz. Con la Luna brillando la semana pasada más o menos, es probable que el platillo pueda haber permanecido en lo alto día y noche. Si se notará una lluvia de discos ahora que el último trimestre ha pasado fue un punto de conjetura entre los «teóricos» anoche.

Ojos recompensa

Cualquiera que sea el caso, Hanson y muchos otros creen que él está en posesión de un platillo, que prometió mantener bajo custoadia anoche.

La Sra. Hanson ha disfrutado el bullicio sobre el lugar y le dijo a una amiga que le llamó por teléfono, «Esta ha sido una experiencia emocionante». Y Lester Curtis, un visitante risueño, comentó secamente, «Finalmente Black River Falls es famoso».

Varias personas en el distrito informaron ver uno de los platillos en vuelo. El Sr. y la Sra. John Burman, la Sra. Ansel Holter y Stanley Holter en la granja Holter, alrededor de seis millas al Sureste de Ettrick, afirman haber visto uno a las 11 a. m. del miércoles. El disco, dijeron, estaba muy alto y parecía ser alrededor del tamaño de la tapa de una caja de sombrero.

En Blair, Wallace Solberg, Richard Strand, Richard Beck y David Kensmoe también creen que vieron un disco. Los chicos, en compañía de George Hennings, instructor de campo de juegos, estaban en un viaje en bicicleta. Solberg dijo que el disco, alto en el aire, estaba yendo rápidamente en una dirección Sur. Pensó que era del tamaño de una lavadora.

Hanson espera que el platillo sea merecedor de una de esas recompensas de $ 1,000 de laa que ha estado leyendo en los periódicos últimamente, aunque no ha pensado mucho en ello.

¿Cómo se la gastará? Hanson ya tiene varias ideas, tal como construir un garage y un porch. Pero Sig, en una etapa de susurro, comentó jocosamente que podría ser una ocasión digna de «caerse de la carreta». Y Sig ha estado en eso por ocho años.

Tal vez, él puede encontrar algunos otros discos para añadir a su colección antes de que la excitación muera. Alguien le recordó que el pueblo de Disco está a sólo 10 millas de Black River Falls.

Todos sabemos que los discos son demasiado grandes para poder usarlos en las máquinas de pinball y demasiado pequeños para una nave del rio Mississippi. El Ejército le encontrará algún uso, esperamos.

El otro artículo continua con la historia desde el punto de vista de los periodistas del Tribune:

TheLaCrosseTribune-LaCrosse-11-7-1947eLas preguntas vuelan, las bombillas parpadean cuando los periodistas invaden Black River

Sigurd Hanson, electricista de la ciudad en Black River Falls, esperaba tomar el juego de pelota anoche entre el equipo de su pueblo y los nueve invasores de La Crosse AFL. Pero no tuvo chance de escapar.

Hanson, quien encontró uno de los ampliamente publicitados platillos en los terrenos feriales de Black River Falls ayer por la tarde, estaba plagado de periodistas y fotógrafos y ya sea que su artilugio fuera un engaño o no realmente no hacía diferencia. En el lenguaje periodístico era «buena copia».

Notificado por el corresponsal

Hanson recogió el objeto en forma de plato, completo con una celda fotoeléctrica, un motor pequeño o propela y un intrincado sistema de cables, y la corresponsal del La Crosse Tribune, la Sra. D. W. Holder, notificó a los representantes del Tribune alrededor de la mitad de la cena.

El hecho es que James E. Lienlokken, editor de noticias y fotos, estaba concentrado en una chuleta de cerdo cuando el fotógrafo Harry Larsson y el editor estatal Jerry Moriarty condujeron hasta su casa, listos para dirigirse al Norte. Alrededor del mismo tiempo un equipo de la estación de radio WKBH se estaba preparando para partir con el equipo de grabación del aeropuerto de La Crosse.

A partir de ahí fue una carrera hasta el final, con el avión aterrizando poco por delante y colocando los instrumentos de grabación de cable en la casa de Hanson en el 121 North 11th Street en Black River Falls.

Era lugar muy concurrido

El lugar estaba tan concurrido como una intersección de calle en un día de ofertas con entrevistadores tomando lugar a la derecha e izquierda y bombillas flasheando.

Casi todos concordaban que el platillo tenía una ligera apariencia casera, incluso Hanson admite eso, pero se encoge de hombros acusando comentarios. «Incluso he sido acusado de hacerlo yo mismo», explicó. Y como él es un electricista, los escépticos tienen alimento para el pensamiento.

El sobrino de Hanson, Jim, de 21 años, un estudiante de ingeniería eléctrica en la UCLA, vio el disco por primera vez anoche y describió cómo podría operar. Señaló que la celda fotoeléctrica fabricada por RCA, la cual puede transmitir energía luminosa a energía eléctrica, y trazó el sistema a través de un motor o generador en la base que estaba conectado con una pequeña hélice en la parte superior.

Evidencia de raspado

El platillo dejó evidencia de raspar a lo largo del terreno, tal vez al aterrizar, y el borde de ataque estaba desgarrado ligeramente.

Los observadores pasaron varias horas revisando el mecanismo, pero decidieron en contra de una inspección hasta que lleguen las autoridades militares.

Mientras tanto las líneas telefónicas estaban ocupadas. La oficina de la Associated Press en Milwaukee estaba en contacto con el editor gerente Roy Bangsberg y también en contacto con los representantes del Tribune en la casa de Hanson.

Después de cada frase descriptiva, la pregunta que usualmente se hacía era «Â¡Es esto un engaño o no?» Una moneda de dos caras, volteada tres de cada cinco veces, pudo haber proporcionado una respuesta igualmente esclarecedora como cualquier otra ofrecida. Pero para la mayoría de los observadores parecía «legítimo».

En el camino a casa, los reporteros todavía iban sobre los detalles, tratando de entender como pudo ser lanzado el artilugio y cómo pudo ser dirigido a través del espacio a velocidades «terroríficas». Si era una broma o un truco el platillo, sin embargo, fue una creación desconcertante y convincente.

Confusión sobre un extra

De regreso a La Crosse, Bangsberg y el editor W. T. Burgess estaban en una confusión, todavía en la oscuridad sobre lo que se había encontrado. ¿Valdría la pena un «extra» con la escasez de papel de periódico todavía tan crítica como siempre o solo sería digna de un pequeño titular en la parte inferior de la página?

Más tarde, Larsson salió de su cuarto oscuro con la evidencia fotográfica. Mientras los reporteros y otros se arremolinaban dirigiéndose a la oficina, Bangsberg dijo casi reverentemente, «Si esto es algo real, tenemos un millón de dólares en fotografías. Cada periódico en el país las querrá».

Las fotografías eran lo suficientemente buenas para garantizar una edición extra y se llamó a los operadores de linotipos, compositores y maquetistas para que estuvieran en servicio muy temprano. El gerente de circulación Ed Keefe no pudo esperar y se apresuró a las 3 a. m. para «ver de qué se trataba todo este negocio». Y parecía un poco decepcionado cuando ningún hombre de Marte fue fotografiado en el platillo.

Dan amplia circulación

La edición salió de las prensas temprano esta mañana y los periódicos circularon a través de la región y en el distrito de negocios de La Crosse. En muy poco tiempo miles de copias fueron leidas.

The Tribune todavía se pregunta si todo el asunto platillo volador es un engaño. Pero como dijimos, es «buena copia».

En la fotografía de portada aparece Hanson sonriendo mientras sostiene entre sus manos el platillo que encontró en los terrenos feriales. El pie de foto dice:

HansonSigurd Hanson, electricista de la ciudad de Black River Falls, sostiene lo que cree que es el primer platillo volador encontrado en los Estados Unidos. Mientras trabajaba en los terrenos feriales de Black River Falls el jueves a las 3: 30 p. m., Hanson encontró el disco en la hierba. La sección chamuscada cerca de la aleta vertical indica que se pudo haber usado una propulsión jet para lanzar el objeto inusualmente construido. Las autoridades militares arribarán hoy para conducir una investigación. Una celda fotoeléctrica está localizada cerca del frente de la sección interna y alambres conectados con un motor de corriente directa y un árbol de transmisión. (Fotos adicionales en la página 3).

Tribune Photo

En efecto, en la página tres encontramos otras cuatro fotografías del plato volador y de Hanson con su familia revisando el plato.

El pie de foto dice:

TheLaCrosseTribune-LaCrosse-11-7-1947cTribune Photos

Las características físicas del platillo volador encontrado por Sigurd Hanson en Black River Falls el jueves se muestran en las fotografías de arriba. El lado superior se muestra a la izquierda, ilustrando la posición del mecanismo eléctrico en el agujero en el centro de la aleta vertical. Una vista del lado inferior está a la derecha con la unidad de vivienda y la ventana de celuloide, detrás de la cual está una celda fotoeléctrica. La cinta a lo largo del fondo fue colocada ahí por Hanson para evitar que el mecanismo se caiga. En la foto de la extrema izquierda, un grupo se arremolina alrededor de Hanson para ver de qué se trata. De izquierda a derecha Jody Schofield, de 5 años, la Sra. Hanson, Sra. Schofield y Robert Hiff, gerente del aeropuerto de Black River Falls. A la derecha abajo, el sobrino de Sigurd Hanson, estudiante de ingeniería eléctrica en la UCLA, dio luz sobre la construcción del artilugio. Jim describe la celda fotoeléctrica, que cree que transfiere energía luminosa a energía eléctrica.

The Winona Republican Herald, de Minnesota, publicó una nota sobre el platillo volador encontrado en Black River Falls[7]:

TheWinonaRepublicanHerald-11-7-1947«PLATILLO VOLADOR» ATERRIZADO EN BLACK RIVER FALLS

Black River Falls, Wisconsin «“ (AP) «“ El Teniente Arthur Frederickson de la patrulla aérea de Wisconsin dijo anoche que un «objeto en forma de platillo, redondo» con un motor y un tubo de radio había sido encontrado en los terrenos de la feria de aquí.

Frederickson, comandante del escuadrón de la C.A.P. de aquí y primer teniente en los cuerpos aéreos de la zona del pacífico durante la guerra, dijo «se ve muy auténtico».

El objeto fue encontrado ayer por Sigurd Hanson, electricista de la ciudad de Black River Falls.

El teniente Frederickson describió el objeto como un «equipo en forma de platillo, redondo, como dos tazones de sopa de tamaño medio colocadas juntas. El motor, alrededor del tamaño de un puño de hombre, está en el centro. El eje principal del motor es de alrededor de cuatro pulgadas de largo. La hélice tiene dos pulgadas de diámetro y tiene dos hojas, hechas de metal. Hay un tubo de radio en él. Hay una cola pequeña. El tubo de escape está descolorido, y ha sido usado.

«Toda la cosa es aerodinámica. Es de color plata, y puede reflejar la luz con facilidad. Parece como si se hubiera utilizado plástico en su construcción».

James Hanson, de 21 años, un estudiante de ingeniería, dijo que el tubo era una celda fotoeléctrica. Declaró que tenía las letras R.C.A. (Radio Corporation of America) en él.

Otros observadores dijeron que el objeto era de 15 ½ pulgadas de diámetro y pesaba alrededor de una y media libras.

The Oregon Journal describe así el hallazgo del electricista Sig Hanson[8]:

«DISCO» DE WISCONSIN ARMADO CON MOTOR

BlackRiverFallsWisconsin_thumbBlack Falls, Wisconsin, 11 de julio (UP) «“ El electricista Sig Hanson dijo hoy que había encontrado un «platillo volante» de plástico en forma de dos platos de sopa unidos entre sí y que contenía un tubo de radio que él pensó podría haber proporcionado el artilugio con el poder para volar.

Hanson dijo que encontró el aparato, que tenía dos pequeñas palas de hélice, en el recinto ferial del condado de Jackson.

Él dijo que contenía un motor como del tamaño del puño de un hombre y un eje de cuatro pulgadas que va desde el motor.

Los oficiales de la patrulla aérea civil de Wisconsin y el mayor John Schindler, el Oficial de Enlace de las fuerzas aéreas del ejército de la CAP, dijeron que iban a investigar el «disco».

El Kenosha Evening News, de Kenosha, Wisconsin, del 11 de julio de 1947, informa del hallazgo de un objeto extraño con motor[9]:

KenoshaEveningNews-11-7-1947Encuentran en el estado un objeto extraño con motor

Milwaukee «“ (U.P.) «“ Los oficiales de la patrulla aérea civil de Wisconsin estaban planeando volar hoy a Black River Falls, para inspeccionar el último «platillo volador» reportado encontrado por un electricista en los terrenos feriales del condado ayer.

El Mayor Schindler oficial de enlace con la CAP de las fuerzas aéreas del ejército dijo que se investigará un artilugio encontrado por Sig Hanson, electricista de Black River Falls.

Hanson dijo que el objeto era un equipo en forma de platillo, similar a «un par de tazos soperos de 15 pulgadas colocados uno frente al otro».

Dijo que contenía un motor de alrededor del tamaño de un puño de un hombre en el centro. Se informó que un eje principal del motor era de alrededor de cuatro pulgadas de largo. Hanson dijo que el misil misterioso tenía una hélice de dos pulgadas de diámetro, con dos hojas de metal.

Cola pequeña encontrada

Hanson dijo que un tubo de radio descubierto le llevó a creer que el poder de conducción podría ser radiado a él. Dijo que encontró una pequeña cola en el platillo y un escape descolorido indicando que el escape había sido usado.

Hanson dijo que el objeto era «aerodinámico, de color plateado y aparentemente capaz de reflejar la luz fácilmente». Añadió que cree que se utilizó plástico en su construcción.

John Gruber, otro electricista de Black River Falls, dijo que las «quemaduras» en el platillo sugerían la posibilidad de una propulsión por jet o cohete a pequeña escala. Dijo que no cree que fuese construido por nadie en el vecindario.

El Teniente Arthur Frederickson, comandante del escuadrón de la CAP en Black River Falls, pidió a las autoridades de la CAP aquí que inspeccionaran el disco misterioso.

Frederickson, un piloto en combate en el Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial, dijo «se ve muy legítimo».

Contactar con la fuerza aérea

Schindler dijo que contactaría con las autoridades de la fuerza aérea en Washington si hubiera alguna razón para creer que el platillo era más que una broma.

Aunque Schindler admite que el platillo podría ser un loco modelo de aeroplano, dijo que cualquier modelo en el aire se ve como un avión a la distancia, y daría cuenta de la alta velocidad informada del platillo.

Dijo que era posible que los testigos podrían haber visto el disco mucho más de cerca de lo que realmente aparecía.

Frederickson dijo que varias personas informaron ver discos voladores en Black River Falls recientemente, pero nadie realmente vio el objeto encontrado por Hanson hasta que fue descubierto en el terreno.

ContinuarỦ


[1] La Crosse Tribune, 11 de julio de 1947; Green Bay Press Gazette, 11 de julio de 1947; Marshfield News Herald, 11 de julio de 1947; Monroe Evening Times, 11 de julio de 1947; Racine Journal Times, 11 de julio de 1947; Milwaukee State Journal 11 de julio de 1947; Eau Claire Leader, 12 de julio de 1947; The Daily Tribune, 12 de julio de 1947; también apareció en el Chicago Daily News del 11 de julio de 1947 (Plastic Disks Found in Two States), que es citado en A History of UFO Crashes, de Kevin D. Randle, Avon, 1995, p 183.

[2] La Crosse Tribune, July 11, 1947

[3] Anónimo, Plastic Disks Found in Two States, The Chicago Daily News, July 11, 1947, pg. 7.

[4] Milwaukee State Journal, July 12, 1947

[5] Eau Claire Leader, July 13, 1947; La Crosse Tribune July 13, 1947

[6] La Crosse Tribune, July 11, 1947

[7] Anonimo, «Flying Saucer» Grounded at Black River Falls, The Winona Republican Herald, Winona, Minnesota, 11 July 1947.

[8] Anonimo, Wisconsin «Disc» Rigged for Power, The Oregon Journal, Oregon, 11 July 1947.

[9] Anonimo, Strange Object with Motor is Found in State, Kenosha Evening News, 11 July 1947

¡Saludos terrícolas!

¡Saludos terrícolas!

15 de diciembre de 2018

Adam Gorightly

¡Saludos, terrícolas! ¡El explorador espacial Adam Gorightly aquí de la nave espacial psicopata!

Recogí este dominio hace un tiempo como un medio para promocionar un par de libros relacionados con ovnis que he tenido en las obras, uno de los cuales se ha publicado ahora: «A» is for Adamski: The Golden Age of the UFO Contactees. escrito con mi compañero en el crimen interestelar, Greg Bishop, también conocido en algunos sectores de esta galaxia como Spacebrother.

A-is-for-Adamski_final_300¡Pero no te alarmes! ¡Habrá contenido real publicado en este blog más allá del simple chelín para los libros de otro mundo que estoy vendiendo!

Aquí hay un episodio reciente (bueno, no es tan reciente) de Radio Misterioso con Greg y yo parloteando sobre el libro.

¡Y también cavando en este maravilloso trailer retro para «A» is for Adamski!

https://chasingufosblog.com/2018/12/15/greetings-earthlings/

Suscribete a Pensar

La mítica revista en español del Center for Inquiry, Pensar, vuelve a publicarse.

La versión electrónica contiene 17 artículos y diversas notas.

Pensar, revista iberoamericana para la ciencia y la razón, es una invitación al librepensamiento y al pensamiento crítico. También, una vía para conocer todo acerca de las pseudociencias (falsas ciencias) y el mundo esotérico, analizando las evidencias disponibles mediante la razón y el método científico. Si usted piensa que éstos últimos son más eficaces que la creencia a ciegas, entonces ¡suscríbase!

Acá un ejemplo de los artículos que se pueden leer en este número 1:

Objetos Paranormales Permanentes

¿Cómo poder estudiar los fenómenos paranormales? ¿Existe una forma de verificar, de una vez por todas, la existencia de tales fenómenos?

Esas son preguntas que me he hecho durante muchos años, tantos como llevo en el mundo de los ovnis. Pero, por principio de cuentas ¿existen tales fenómenos? Hasta el momento la respuesta parece ser NO.

Si existiera la telepatía, por ejemplo, no tendríamos ese auge de los teléfonos celulares y todos esos medios de comunicación a los que hoy estamos acostumbrados, WhatsApp, correos electrónicos, Instagram, Facebook y los demás medios sociales. Simplemente «conectándose telepáticamente» se transmitiría toda la información y los chismes que saturan nuestros teléfonos.

Si existiera el Yeti o el Bigfoot sería una revolución en la biología que, de hecho, haría avanzar esa ciencia y plantearía varias preguntas en la teoría de la evolución.

Si hubiésemos sido visitados por extraterrestres en la antigüedad ni duda cabe que nuestros desarrollos tecnológico, social y religioso serían completamente distintos a los que tenemos.

No necesitaríamos de ningún tratamiento médico, equipo sofisticado, hospitales, sistemas de seguridad social, vacunas y cualesquiera otros avances que nos han dado las investigaciones de la medicina moderna. Tan sólo sería necesario tomar algunos chochitos, colocarnos unos cuarzos sobre el torso, dejarnos pinchar con agujas en diversas partes del cuerpo o cantar monótona e interminablemente algún mantra, para quedar completamente sano.

Como digo más arriba, parece que todo eso, hasta el momento, no ha funcionado. Pero ¿podría funcionar en el futuro? ¿Alguna vez se demostrará la existencia de los fenómenos PK? ¿Alguien encontrará a Nessie o al Chupacabras? ¿El siguiente caso ovni será, verdaderamente, el «caso perfecto»?

Como muchos otros que nos acercamos a las mal llamadas «paraciencias» (porque de ciencias no tienen nada) hemos ido tumbando y derribando casos que antaño se consideraban «perfectos». Pienso en particular el caso de las fotografías de la isla Trinidad[1], la autopsia extraterrestre[2], la oleada de avistamientos de Chupacabras en México[3], los anillos de ovnis en Hidalgo[4], las caras de Belmez[5], etc.

Muchos otros escépticos han explicado varios otros fenómenos e historias paranormales. Pero la historia nunca acaba. Por cada caso explicado aparecen muchos más. Realmente no es una forma eficiente de hacer una investigación en ningún campo. No obstante, son las únicas investigaciones que se han hecho en estos campos dado que los creyentes en los fenómenos paranormales no hacen ninguna investigación, sólo se dedican a coleccionar casos que, supuestamente, respaldan sus creencias en lo paranormal.

Y es que el mundo de lo paranormal está de cabeza. Los que creen en los ovnis, en los críptidos, en la psicoquinesis, en los fenómenos forteanos son quienes deberían demostrar su existencia pero, en lugar de eso, sólo aportan una serie interminable de relatos, casos, informes e historias que, para ellos, representan las pruebas de la existencia de sus fenómenos paranormales favoritos. Pero ni mil informes de avistamientos de objetos voladores no identificados sirven para demostrar su existencia, ni un millón.

Muy ufanos hablan de «evidencias», de «pruebas», pero no tienen idea de lo que están hablando. Un informe de la persona más veraz, honrada, preparada, aunque pertenezca a las fuerzas armadas, vaya todos los domingos a misa, su abuelo sea bombero y él tenga carnet o credencial del Club de Mickey, sea vegano (o carnívoro), haya nacido el 29 de febrero, haya pasado tres pruebas del polígrafo y haya jurado ante la Tora, el Corán y la versión del King James de la Biblia (todos en fila y hasta arriba el último comic de Stan Lee); un informe, repito, que no sirve de nada y sólo tiene un valor anecdótico, no es ninguna «prueba».

Tampoco es una «evidencia» si, además de su informe presenta una fotografía del objeto volador que dice haber observado. Poco aporta si en lugar de fotografías lo que nos muestra son videos. Simplemente porque tanto las fotografías como los videos pudieron haber sido trucados. Y aunque no lo fueran, sólo desvían la diana porque ahora la pregunta o la investigación se dirigiría a determinar la veracidad de esas fotos o videos. Tal vez no fueron trucados, pero ¿muestran una «nave» de otro mundo o algún fenómeno natural (o artificial hecho por el hombre) que no es fácil de identificar?

Bien, como los creyentes (¿o crédulos?) en los fenómenos paranormales no han podido demostrar sus dichos, y los escépticos no son tantos, ni tienen tiempo de tirar o explicar uno a uno cada informe que sale a la luz, claramente la estrategia para estudiar los fenómenos paranormales debe ser diferente.

BeloffEn el caso de la parapsicología el Dr. John Beloff[6] se dio cuenta de esto. Durante años la forma «académica» de acercarse al estudio de los supuestos fenómenos de psicognosis PG y psicoquinesis PK fue a través de los métodos estadísticos, pero las manipulaciones y fraudes que se dieron en el manejo de los datos en los laboratorios de Joseph Bank Rhine[7] despiertan muchas sospechas. Además de que por este medio nunca se llegaría a una conclusión irrefutable. Los fenómenos PG son muy subjetivos y muy difíciles de estudiar, pero la mente sobre la materia, en principio, debe dejar una evidencia tangible y medible. Fue por eso que el Dr. Beloff propuso el concepto del Objeto Paranormal Permanente (OPP).

En esencia el OPP es sólo para fenómenos PK, algo en la materia (un Objeto) que fue modificado por medios mentales y no físicos (Paranormal), que además pueda ser analizado hoy/aquí o mañana/allá (Permanente).

AnillosEn el siglo XIX algunos médiums producían «aportes» como cadenas con eslabones de diferentes materiales (madera, acero, cobre, hierro) que eran de una sola pieza (se supone que los eslabones de madera no estaban pegados y los eslabones de metales no estaban soldados). Estas cadenas eran verdaderos Objetos Paranormales porque no existía (y creo que no existirá) un proceso natural/artificial que las puedan fabricar; pero no eran Permanentes porque desaparecieron al entrar el siglo XX (con toda su tecnología de Rayos X etc. Que podría haber dado una pista a si, en efecto, no estaban pegados o soldados)

Para Beloff sólo había tres posibles OPPs: el sudario de Turín, la tilma de Juan Diego y las caras de Bélmez. Poco tiempo después Beloff retiró el sudario al conocerse los resultados de datación con Carbono 14[8]. La imagen de la Virgen de Guadalupe, por otra parte lo más probable es que haya sido pintada por el indio Marcos Cipac de Aquino[9]. Mientras que las caras de Bélmez es muy probable que también haya sido un fraude combinado con pareidolias[10].

En el caso de la parapsicología queda abierto el tema. Hasta el momento no se ha presentado un verdadero OPP.

Pero la idea de Beloff la podemos extender a las otras pseudociencias. De esta forma podemos tener un Objeto Criptozoológico Permanente (OCP) que sería cualquier críptido (desde el unicornio hasta Mokèle-Mbèmbé). El Objeto Astroarqueológico Permanente (OAP) en este caso una pieza de ingeniería de los Astronautas Antiguos. O el Objeto Ufológico Permanente (OUP)[11] que propuse hace algunos años. El OUP serían los extraterrestres (o su piel, cabello, uñas, lágrimas, saliva, sangre, semen, cerumen o cualquier otro objeto que pueda ser analizado y que se compruebe que su ADN es distinto a cualquier otro encontrado en la Tierra) o el propio plato volador.

Hay Objetos Paranormales Permanentes para cualquier otra pseudociencia de su preferencia.

Ya lo decían David Hume[12], Marzelo Truzzi[13] y Carl Sagan[14]: «afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias».

Si alguien me dice que puede convertir dos de los productos más corrosivos en sustancias comestibles le exigiría que lo demostrara con una prueba extraordinaria del mismo calibre que su afirmación. En este caso el Objeto Paranormal Permanente serían las sustancias químicas transformadas en sustancias inertes. El que propone eso tendría que demostrarlo hoy en Chicago, mañana en Ciudad del cabo y cualquier otro día en Moscú. Pero en este caso sí existe ese OPP y cualquiera lo puede demostrar en cualquier lugar y tiempo. Una representación de eso es:

HCl + NaOH ———-˃ H2O + NaCl

Ahora los creyentes la tienen más fácil, ya les hicimos la tarea: sólo muestren el OPP correspondiente y podrán demostrar su pseudociencia predilecta.

Luis Ruiz Noguez


[1] https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-ovni-de-la-isla-trinidad-primera-parte/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-ovni-de-la-isla-trinidad-y-2/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-ovni-de-la-isla-trinidad-y-3/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-ovni-de-la-isla-trinidad-final/

[2] http://www.lulu.com/shop/luis-ruiz-noguez/la-autopsia-extraterrestre-un-mito-dentro-del-mito/paperback/product-24143997.html?ppn=1

[3] https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-chupacabras-primera-parte/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-chupacabras-2/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-chupacabras-y-3/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/07/el-chupacabras-fin-del-capitulo-mexicano/

[4] https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/09/aterrizaje-en-tula-un-cuento-de-hadas/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/09/los-anillos-de-atitalaquia/

[5] Tort J. Cesar & Ruiz Noguez Luis, Are the Faces of Bélmez Permanent Paranormal Objects?, Journal of the Society for Psychical Research, Vol. 59, No. 832, July 1993, págs. 161-171.

[6] Beloff John, Research strategies for dealing with unstable phenomena, Parapsychology Review, Vol. 15, No. 1, Parapsychology Foundation Inc., New York, Jan-Feb 1984, págs. 1-7.

Beloff John, The Relentless Question: Reflections on the Paranormal, McFarland, Jefferson, N. C., 1990.

[7] Kurtz Paul (ed.), Skeptical Odysseys, Prometheus Books, 2001, Chapter 31: Confessions of a Skeptic por Martin Gardner.

[8] https://es.wikipedia.org/wiki/Sudario_de_Tur%C3%ADn

[9] https://es.wikipedia.org/wiki/Marcos_Cipac_de_Aquino

[10] Tort J. César, Ruiz Noguez Luis, Are the faces of Bélmez permanent paranormal objects?, Journal of the Society for Psychical Research, Vol. 59, No. 832, 1993, pags. 161-71.

[11] https://marcianitosverdes.haaan.com/2006/11/ufologia-%C2%BFuna-ciencia-final/

[12] https://es.wikipedia.org/wiki/David_Hume

[13] https://es.wikipedia.org/wiki/Marcello_Truzzi

[14] https://es.wikipedia.org/wiki/Carl_Sagan

Publicado originalmente en Pensar:

https://pensar.org/2020/03/objetos-paranormales-permanentes/

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¿Un viaje a través del tiempo en los archivos de la policía parisina? Una probable leyenda urbana

¿Un viaje a través del tiempo en los archivos de la policía parisina? Una probable leyenda urbana

Bruno Mancusi[1]

416FqKW1K9L._AC_En su libro Invitation au château de l’étrange (Maisonneuve et Larose, París, 1969, pp. 131-133), el escritor y folklorista francés Claude Seignolle (1917-2018) cuenta una curiosa historia sobre un viaje en el tiempo.

Al final del día (no se indica una fecha precisa), Fantastique-Invitation-Chateau-De-L-Etrange-Seignolleun estudiante parisino va a sentarse en un banco en la Avenue de Breteuil. Un anciano ya está allí, vestido con una levita de 1900 … Discuten, encuentran un interés común en la música y el anciano invita al estudiante a seguirlo a casa para un pequeño concierto. La cena y el concierto son excelentes, los invitados son cómodos y por lo tanto se separan muy tarde y con pesar. A la mañana siguiente, el estudiante se da cuenta de que ha dejado el encendedor en el alféizar de una ventana en la sala de estar. Entonces regresa a su anfitrión y toca el timbre, pero nadie responde. Toca y toca la puerta hasta que el conserje (una mujer) llega con dos policías. El estudiante es llevado a la estación de policía y se le dice que el apartamento, que ha estado encerrado, ha estado vacío durante dos años. El estudiante está asombrado de no haber visto ningún sello en la puerta. describe a su invitado y el interior del departamento al superintendente. Luego regresan: los sellos están intactos. Entran al departamento. El estudiante reconoce el lugar, pero no hay más muebles, alfombras y pinturas; solo hay polvo, excepto … excepto en la sala de estar, por supuesto, donde puede recuperar el encendedor.

6414e5_a0f1fee54aa84a0085ec88a498086b38_mv2El periodista y escritor Guy Breton (1919-2008) contó una historia similar en la estación de radio francesa France-Inter y luego la publicó en el libro escrito por Breton y Louis Pauwels Histoires magiques de l’histoire de France, vol. 1, (Albin Michel, París 1977, pp. 271-280), pero con una cantidad increíble de detalles: tenemos las fechas (junio de 1925), los lugares (la reunión esta vez tiene lugar en el Jardin du Luxembourg), el apartamento está en la Rue de Vaugirard, 3er piso a la izquierda, están los nombres (el estudiante: Jean Romier, el viejo: Alphonse Berruyer), y así sucesivamente.

En resumen:

Es la mañana del 2 de junio de 1925, y estamos en el Jardin du Luxembourg. Un estudiante de medicina de 24 años de edad, Jean Romier, está releyendo sus notas al sol cuando un anciano con un levita se sienta a su lado. Inmediatamente se involucra en la conversación y comienza a hablar sobre Mozart, una pasión compartida por el joven.

Ven a mi casa el viernes por la noche, estoy organizando un pequeño concierto de música de cámara para mi familia y amigos. Tocaremos los cuartetos de flauta de Mozart.

El estudiante acepta, feliz con esta oportunidad de escuchar a su compositor favorito de forma gratuita. El viejo se levanta, da su nombre y dirección: Alphonse Berruyer, Rue de Vaugirard, tercer piso, izquierda.

El viernes siguiente, a la hora acordada, Jean Romier toca el timbre del anciano amante de la música y pasa una velada agradable con familiares y amigos. Lo único que lo sorprende un poco es que estas personas, que obviamente tienen mucho dinero, todavía usan la luz de gas. Además, todas son prendas de moda del siglo anterior, tienen una tez pálida y sus características son un poco rígidas, como si estuvieran hechas de cera.

En el intervalo entre dos cuartetos, él y sus sobrinos Berruyer, que son de la misma edad, tienen una conversación: André se está preparando para ingresar a la Escuela de la Marina, Marcel estudia derecho … Encienden unos cigarrillos mientras beben Madeira. A la medianoche, Jean se despide de sus invitados expresando su gratitud por esa maravillosa noche.

Tan pronto como llegó a la acera, se da cuenta de que ha olvidado el encendedor. Vuelve arriba y toca el timbre. No hay respuesta. Muy perturbado, comienza a llamar a la puerta. El vecino sale al rellano, furioso por el ruido nocturno. Jean le explica la situación.

«¿Me tomas por un idiota? ¡Este departamento ha estado vacío por veinte años!» El estudiante de medicina cree que está tratando con un loco y le dice con voz tranquila que acaba de pasar la noche en la casa de Alphonse Berruyer. «Murió en 1905», responde el vecino. «Si entraste a su casa, significa que eres un ladrón. ¡Ladrón!»

Alarmado por los gritos, el cuidador (un hombre) sube las escaleras y confirma la versión del vecino. Alguien llama a la policía y el joven, sorprendido, termina en la estación. Una llamada telefónica a los padres del acusado deja en claro que él es una buena persona y que goza de buena salud mental.

Al amanecer, el comisionado lo trae de vuelta a la escena para revisar su historia. No hay signos de allanamiento. A ellos se les une el propietario, cierto señor Mauger, que abre el apartamento de mala gana, abandonado desde que lo heredó. Jean Romier casi se desmaya. El departamento es como se describe, mientras que el superintendente se vuelve cada vez más perplejo. Sin embargo, los muebles están cubiertos con una gruesa capa de polvo y las telarañas cubren los muebles, lo que desprende un intenso olor a humedad.

«Â¡Es él, es Alphonse!» – Jean exclama de repente señalando uno de los retratos. El Sr. Mauger confirma: es su tatarabuelo. En las fotos enmarcadas, el estudiante identifica instantáneamente al joven Marcel que está estudiando derecho, el joven André que se está preparando para la Escuela de la Armada … Aghast, el descendiente, solo puede asentir al recordar cómo el abuelo Marcel lo tuvo una vez. contó sobre los conciertos privados que organizó su abuelo: «¿Quién más podría recordarlo? Incluso yo lo había olvidado …»

El comisionado pregunta al «invitado del pasado» por qué quería regresar a este departamento, ya que aparentemente acababa de irse. Jean dice que olvidó el encendedor y los lleva a la sala de la biblioteca donde, unas horas antes, había fumado en compañía del futuro almirante fallecido que tenía la misma edad en ese momento. Y todos quedan atrapados frente a la mesa. El encendedor de Jean Romier está allá arriba …

Guy Breton agregó que incluso Albert Einstein se había interesado en el caso y habría dicho: Este joven ha tropezado con el tiempo … como otros pierden un paso …

Breton citó estas fuentes para su historia: los archivos de la Prefectura de Policía de París; el libro del espiritualista inglés Sir William Barrett Au seuil de l’Invisible (probablemente una traducción de On the threshold of the unseen, Londres, 1917, pero no pude encontrar los términos «Romier» y «Mozart» en el texto); el de otro metapsiquico británico, John W. Dunne, Le temps et le rêve (edición francesa de 1927 traducción de An experiment with time, publicado el mismo año en el original en inglés, pero ni esta vez encontré «Romier» o «Mozart» en el texto); un L’univers sériel no especificado (1934); nuevamente por John W. Dunne The new immortality (Londres. 1938), y finalmente, el astrónomo francés Charles Nordmann con su L’au-delà ( París, 1927).

Como se puede ver, Breton proporciona detalles de poco uso, como la mención del «tercer piso a la izquierda», pero sin el número de la casa, y los «Archivos de la Prefectura de Policía», pero no la ubicación del documento. Concluyo que Breton ha agraciado el texto de Seignolle para obtener una historia más presentable y más convincente. Otro detalle «exagerado» en la bella historia de Breton es la cita de Einstein. El problema es que sabemos que muchas de las llamadas citas de Einstein son falsas (un ejemplo en el campo ovni: existen platillos voladores, las personas que los poseen son seres humanos, que dejaron la Tierra hace 20,000 años).

arton139907-01799Recientemente, otro autor, y no menos importante, ha retomado esta historia. Este es Didier van Cauwelaert, un escritor francés que ganó el premio Goncourt en 1994. En su libro Il dizionario delle cose impossibili (Dictionnaire de l»™impossible, Plon, París, 2013, pp. 384-390; ha salido la traducción al italiano en Clichy, Florencia, 2015), van Cauwelaert agrega detalles ausentes en el texto de Breton: el encendedor del estudiante está hecho de oro, es un regalo de sus padres y cuando lo encuentra nuevamente, también está cubierto de polvo y telarañas. Además, en lo que respecta al informe policial, llega a argumentar que el periodista y escritor Guy Breton lo ha tenido en sus manos. Al hacerlo, no solo repite nuestra historia sin hacer ninguna verificación, sino que agrega detalles completamente inventados para hacerlo aún más creíble y extraño.

En la red, la historia se encuentra en casi todas partes, en francés e inglés. También existe en una versión de audio, leída por Tom Novembre (Les séries France Bleu, La France mystérieuse – Jean Romier et l’étrange concert).

En este punto, ¿qué pasa con el núcleo de la historia, es decir, la que contó Seignolle en 1969?

En primer lugar, la presencia del encendedor recuerda la leyenda del autoestopista fantasma, por ejemplo, en una versión ambientada en Castellammare di Stabia (Nápoles) en la primavera de 1959. Un día, bajo la lluvia, un joven al mando de una moto conocido una chica al borde del camino que le hace un gesto para que lo invite a detenerse. El chico amablemente le presta su chaqueta. Al llegar frente a su casa, la chica le agradece y regresa a casa. Al día siguiente, el chico toca el timbre para recuperar su chaqueta. Por supuesto, los padres de la chica le dicen que ella murió hace más de dos años. Incrédulo, el chico pide ver su tumba, ¿y qué encuentra en la tumba de la chica? ¡Su chaqueta, por supuesto! (La Nouvelle Revue de Lausanne, 2 de mayo de 1959 y Feuille d’Avis de Lausanne, 4 de mayo de 1959).

Muchas versiones francesas de la variante de autoestopista fantasma en las que hay un objeto «olvidado» son contadas por el folklorista Cesare Bermani en Il bambino è sirve (ediciones Dedalo, 1991), por ejemplo, aquí, pero, en general, pp. 114-121.

Otro argumento a favor del mero rumor de nuestra historia proviene del mismo Seignolle. Se encuentra en la segunda edición de la Invitation au château de l’étrange (Walter Beckers, Kalmthout, Bélgica, 1974, pp. 125-127). En esta otra versión, la cuenta un italiano al dr. Adolphe Auvray, de París, quien a su vez la había referido al poeta Roger Teneze, los detalles son ligeramente diferentes, el hecho ocurre en las afueras de Roma hace unos treinta años (es decir, en la década de 1940) y se reemplaza el encendedor por una billetera. Incluso allí, el apartamento está tapiado. La billetera en este caso se deja en el alféizar de una ventana …

En conclusión, creo que Breton inventó la historia de Romier y Berruyer sobre la base de una leyenda urbana transcrita por Seignolle y que circulaba al menos en Francia e Italia. Pero no tengo prueba de eso.

https://www.leggendemetropolitane.eu/post/un-viaggio-nel-tempo-negli-archivi-della-polizia-parigina-una-probabile-leggenda-urbana


[1] Químico, nacido en 1960 de un padre napolitano y una madre suiza, Bruno Mancusi ha estado interesado en cosas «extrañas» (ovnis, paranormales …) y «ocultas» (espionaje, conspiraciones …) desde que era joven. Así que era natural para él adquirir una pasión por las leyendas urbanas también …

Platillos voladores y los tres hombres (7)

VI

Libro10Durante enero y febrero de 1953, llegaron tantos avistamientos e informes a la sede de IFSB que convocamos a una reunión del personal ejecutivo para analizar los medios de manejar la información de manera más eficiente y para encontrar mejores formas de verificar su autenticidad. El personal decidió que se debería formar un Departamento de Investigación. Esto, pensamos, debería consistir en un presidente o jefe, con otras cuatro personas para trabajar con él. El personal ejecutivo podría enviar los avistamientos más importantes a este Departamento de Investigación y posibles conclusiones firmes.

Revisamos nuestra lista de miembros en busca de personal sugerido. August C. Roberts debería estar en el departamento, ya que necesitábamos un experto para analizar la evidencia fotográfica que se recibe con frecuencia. Para nosotros, algunas de las presuntas fotografías de platillos parecían lo suficientemente reales, pero ninguno de nosotros tenía los antecedentes técnicos para determinar si habían sido falsificadas o por otras razones no eran válidas.

Lonzo Dove podría proporcionar una consulta astronómica. Acordamos con la Fuerza Aérea que ciertos avistamientos podrían implicar una mala interpretación de los fenómenos astronómicos, y sabíamos que Dove nos daría un análisis justo cuando surgieran tales casos. Algunos otros astrónomos con los que había contactado ni siquiera querían dar una opinión sobre un tema tan controvertido.

Necesitábamos una persona con conocimientos de aeronáutica, y para cumplir con este servicio, Dominick C. Lucchesi afortunadamente había caído en nuestras vueltas. Admiramos mucho el trabajo del Reverendo S. L. Daw, y dado que el personal ejecutivo había encontrado una connotación religiosa que ya se estaba infiltrando en la interpretación de los fenómenos ovni, también lo nombramos para el departamento

Finalmente, necesitábamos un jefe para coordinar los talentos y el trabajo de estas cuatro personas. Se presentaron dos o tres nombres, pero desde el principio sabíamos que Gray Barker era obviamente la única opción lógica. El personal consideró que debería contactar a Barker por teléfono o cinta y preguntarle si aceptaría, y también ponerme en contacto con las otras personas. Aplazamos, esperando que aceptaran. Felizmente todos lo hicieron.

Después de la reunión, vi a los oficiales en la puerta y me dirigí a mi habitación, pero me detuve en la cocina, directamente debajo del salón del club, para tomar un vaso de leche. Cuando entré a la cocina escuché pasos arriba, y esto me dejó perplejo, porque estaba seguro de que todos se habían ido. Quizás había dejado la puerta abierta y uno de ellos había olvidado un sombrero o algo y regresó. Rápidamente dejé la leche y cautelosamente subí las escaleras. Cuando llegué a la cima, noté que la puerta de mi habitación estaba abierta. Me congelé, ya que había otra vez esa extraña luz azulada, que emanaba brillantemente desde adentro. Un escalofrío recorrió mi cuerpo.

Para alentarme, me dije que alguien me estaba jugando una mala pasada, recogí una escoba del ático y me acerqué a la puerta abierta. Al mirar hacia adentro, vi un resplandor brillante en una esquina, con algún cuerpo u objeto apareciendo de forma peligrosa en el centro de la luz azul.

Con voz vacilante, grité: «Â¡Deja de bromear y sal de allí!»

Mientras hablaba, el brillo desapareció, pero cuando se desvaneció, la imagen de dos ojos brillantes permaneció por un momento. Encendí las luces y encontré la habitación normal, excepto que nuevamente contenía el olor a azufre, nuevamente tan fuerte que tuve que abrir las ventanas para ventilar el lugar. Busqué en la habitación, pero todo estaba en orden. Una vez más, sin embargo, la radio estaba encendida pero no tocaba. La apagué y me pregunté qué debería hacer con una situación que me resultaba incómodamente aterradora. En mi mente estaban los dos ojos brillantes y persistentes. Me recordó al gato de Cheshire en Alicia en el país de las maravillas, cuya sonrisa persistió después de que el gato había desaparecido, pero ciertamente no era un cuento de hadas.

Pero esa sería la reacción obvia de cualquiera con quien pueda relatar esto y los otros acontecimientos extraños. Mi familia probablemente lo atribuiría a alguna enfermedad mental provocada por mi trabajo en el campo del platillo. Los oficiales de IFSB podrían pensar que estaba loco o que lo había inventado. Decidí pensarlo y esperaba que no volviera a suceder. Quizás estaba loco; tal vez simplemente había imaginando cosas. Después de todo, los platillos voladores eran un tema dramático, y estaba trabajando duro. Pero me encantó cada momento del trabajo, estaba bien físicamente y no podía creer que estaba soñando lo que me estaba pasando. Seguramente había una explicación lógica en alguna parte y tal vez podría encontrarla.

Telefoneé a Barker poco después de que esto sucediera, pero por supuesto no mencioné el incidente. Le pedí que aceptara el puesto de investigador jefe, después de darle una buena charla de ventas y una acumulación honesta sobre la línea. Después de algunas protestas sobre sus habilidades (Barker es modesto en cuanto al grado de culpa), digamos que me lo haría saber.

Estaba bastante seguro de que él aceptaría. Pensé nuevamente en su cuidadosa investigación del incidente de Flatwoods y en cómo había incluido datos que funcionaban en contra de sus conclusiones finales y aún expresaba algunas dudas sobre dónde era lógico. No quería que alguien aceptara todos los informes como valido y estaba seguro de que muchos de los que recibíamos serían inútiles si se analizaban. Barker llegaría al fondo de ellos, estaba seguro.

Me alivió recibir su telegrama de aceptación. No perdió tiempo en poner en marcha el departamento, organizó de inmediato una fórmula de trabajo que implica el uso de formularios impresos especiales y un sistema de comunicación con los miembros que están debajo de él. Imprimimos una tarjeta de presentación para su uso, pensando que actuaría como una credencial cuando fuera necesario. Menciono la tarjeta al mencionar un misterio incidental que nunca se había resuelto satisfactoriamente.

Unos días después de recibir las tarjetas, un agente del FBI llamó a su oficina con una de las tarjetas en la mano. Barker me dijo que esto lo ponía nervioso porque inmediatamente sintió que podría haber algo mal con nuestra organización y que como resultado estaba en problemas. El agente preguntó qué sabía Barker sobre la organización, luego alivió sus temores al explicar el motivo de la visita. Obtuvo la tarjeta de un hombre que había sufrido un ataque epiléptico y era un paciente en un hospital local. En el reverso de la tarjeta estaba escrito un nombre y una dirección de Florida, pero Barker estaba demasiado nervioso como para escribirlo.

El agente se fue después de algunas preguntas más, y Barker se quedó con un misterio desconcertante. Acababa de recibir las tarjetas unos días antes, no había entregado ninguna, excepto a cuatro o cinco amigos cercanos y a un autoestopista. Ninguno de sus amigos eran epilépticos, y el autoestopista era un militar que se dirigía a algún lugar del Sur. Cuando recibí el informe de Barker sobre el interrogatorio, lo pateé mentalmente por no obtener más información del agente, pero de alguna manera pude entender su agitación en la primera visita de un agente del FBI.

Aunque no estaba seguro, relacioné el incidente con un miembro de Florida del que recibí varias cartas extrañas, siempre encabezadas por la declaración, «No para publicar sobre mi nombre a solicitud de su empleador». En una carta afirmó además: «Al estar en una posición que involucra a la seguridad nacional, mis preguntas deben limitarse a un interés pasajero y estar sujetas a censura». Considerando la enfermedad del hombre hospitalizado y las extrañas declaraciones de este miembro, puedo haber conectado, quizás ilógicamente, a los dos. Este sigue siendo otro de los aspectos secundarios inexplicables de lo que se conoce como «el misterio de Bender».

La primera investigación del Departamento se refería a una fotografía tomada por Mark Curilovic. El 3 de mayo de 1953, alrededor de las 6:30 p.m., el sobrino de Curilovic estaba tomando fotos de una puesta de Sol sobre el lago Erie. No se observaron fenómenos inusuales cuando se tomaron las imágenes, pero cuando se reveló la película, aparecieron objetos en forma de platillo en negativos e impresiones. Después de que los cinco miembros compararon opiniones, su veredicto final de su primera investigación fue negativo. Llegaron a la conclusión de que las imágenes no eran objetos que el IFSB definía como platillos voladores, sino simplemente reflejos de lentes. Esto se vio reforzado por el hecho de que Curilovic no vio ningún fenómeno anormal cuando hizo las fotografías.

Un incidente relacionado con este informe, y la visita anterior a Barker por parte del FBI, más tarde probablemente llevó a las personas involucradas a creer que esto tenía algo que ver con nuestro acercamiento. Lucchesi o perdió su copia del informe de su automóvil, o fue tomado de él. La policía de Jersey City lo llamó al recinto local para interrogarlo al respecto, pero después de un tiempo le devolvieron el informe y el asunto parecía estar resuelto. Sin embargo, había causado mucho entusiasmo y aprensión en las mentes de Lucchesi y Roberts. Mi conclusión sobre este asunto, a la que Barker dedicó una gran cantidad de espacio en su libro, fue relativamente simple. De alguna manera, la policía tomó posesión del informe, vio el impresionante formato y el encabezado del «Departamento de Investigación», y probablemente sintió que debería investigarse para ver qué estaba sucediendo. Un amigo también ha señalado que en la fotografía de Curilovic hay un objeto que se parece mucho al emplazamiento de un arma, en realidad un trozo de madera flotante.

Otra investigación involucró el Informe Platillo Greenway enviado por E. J. Greenway, de Verdun, Quebec, Canadá. Observó tres objetos voladores en forma de disco desde su automóvil. Desaparecieron detrás de algunos árboles, luego reaparecieron. Salió de su automóvil y observó que los objetos se movían en línea recta directamente lejos de su posición de observación. Luego cambiaron bruscamente de rumbo a la izquierda, girando unos 130 grados. Nuevamente desaparecieron detrás de los árboles, reaparecieron nuevamente, y luego se perdieron de vista detrás de árboles y edificios.

Calculó que viajaban alrededor de 250 millas por hora, observó que eran discos delgados, de aspecto metálico, de bordes afilados, con un diámetro estimado de cuarenta pies. Notó proyecciones verticales, como aletas, que sobresalían de ellas, pero no cabina u otros detalles. Pulsos de vapor surgieron de uno de ellos. Su esposa y su hija de siete años fueron testigos del avistamiento.

Nuevamente, el Departamento de Investigación se puso a trabajar, estudió el informe cuidadosamente y dio este veredicto:

«Después de sopesar las opiniones del personal, no se encontraron razones concretas para dudar de la autenticidad del informe de Greenway». Se consideró que las observaciones parecían confiables y el reportero honesto, aunque los miembros del personal comentaron sobre la prosa utilizada por Greenway para hacer el informe fue demasiado dramática. Por lo tanto, el departamento procedió de manera eficiente y objetiva, y el personal ejecutivo de Bridgeport estaba orgulloso de ello.

Mientras el Departamento de Investigación funcionaba así, ocurrieron dos eventos inexplicables en Bridgeport. Los días 7 y 8 de febrero de 1953, una explosión de naturaleza indeterminada sacudió la ciudad. Una de las explosiones fue acompañada por un destello de luz. Las autoridades atribuyeron el fenómeno a la caída de un meteorito, pero para nosotros fue una conclusión insatisfactoria.

El 23 de febrero, un residente de Southport, Connecticut, vio a un grupo de ocho objetos brillantes. En la primera observación, se encontraban en una formación de caja perfecta, permanecieron inmóviles durante dos minutos antes de desaparecer rápidamente. Mientras trabajábamos en la investigación de estos eventos, IFSB recibió el informe más sorprendente desde que se fundó. ¡Un residente de la costa oeste afirmó que había conocido y hablado con un hombre de otro planeta!

Meade Layne nos llamó la atención y publicamos el siguiente relato:

Parece que el 24 de noviembre de 1952, o alrededor, un grupo de cuatro personas estaba en un almuerzo campestre a diez millas al este de Desert Center, Arizona. A la 1:30 se vio un gran objeto con forma de cigarro, que se movía hacia el Este a gran velocidad o, a veces, inmóvil. Desapareció pero regresó en cinco o seis minutos. Un señor Adamski lo observó con su telescopio. Aproximadamente dos horas después, un platillo o disco aterrizó a aproximadamente 1/4 de milla de distancia y tomó varias exposiciones instantáneas. Tenía unos seis metros de diámetro, translúcido, con un acabado plateado, ojos de buey y tres dispositivos con cojinetes de bolas debajo. Colgaba a unos tres o cuatro pies del suelo.

Adamski entonces vio a alguien que se dirigía hacia él desde una elevación cercana, y caminó hacia la persona. El hombre hablaba algo de inglés y también algo que parecía chino. Parecía tener unos veintitrés años, cara redonda, tez morena y rojiza, ojos gris verdosos y cabello largo y arenoso. Llevaba zapatos de color rojo marrón como zapatillas, pantalones atados alrededor de los tobillos y una chaqueta marrón. El visitante habló y dijo que vino de otro planeta, vino a investigar nubes de hongos vistas por su gente. La nave con forma de cigarro era la nave madre, y los discos surgieron de eso. No permitiría que Adamski se acercara a la nave. Le estrechó la mano a Adamski, y antes de irse indicó que sus huellas tendrían algún significado. El Sr. George Williamson hizo moldes de yeso de estas huellas y están siendo estudiadas (Toda nuestra historia está siendo estudiada cuidadosamente por nuestro propio IFSB antes de que hagamos algún comentario sobre su autenticidad).

George Adamski leyó el informe en nuestra publicación y nos escribió:

Lamento que haya publicado esta publicación de abril como lo hizo, porque había poca verdad en ello …

En primer lugar, había siete de nosotros presentes, en segundo lugar, Desert Center no está en Arizona, está en California. Cuarto, no toqué la nave y, cuando salga mi libro, revelará todo esto palabra por palabra, paso a paso. Estoy más que sorprendido de que uno de los miembros de su Consejo le brinde información tan falsa. Porque Meade Layne estaba en mi casa en presencia de unas veinte personas, algunas de su propio grupo entre ese número, donde personalmente me entrevistó a mí, así como al Sr. Williamson y otros dos testigos. Se tomó una grabación de dos horas de la conversación, aclarando el tema para él. Tengo esta grabación en este momento en mi poder. Eso es algo que no puedo entender: cómo pudo haber cometido tales errores después de haber recibido la verdad en persona, y su secretaria también estaba con él para tomar las notas que ella quería. Estoy totalmente de acuerdo con usted en que la verdad debe salir, ya que por la verdad los hombres se vuelven libres. Algunos grupos en algún lugar deben entender ese tipo de servicio, ya que las cosas son como son. La gente tiene hambre y creo que su organización puede hacer mucho para llevar esta verdad a las personas que desean saber solo la verdad. Pero, como todos los demás, está igualmente discapacitado si aquellos de quienes depende la verdad no se lo transmiten de manera veraz. Es difícil para una persona borrar todos los canales y saber que son la verdad. A veces es igualmente difícil tener a los asociados con el mismo interés que uno mismo para que no den más que la verdad.

Aunque me preguntaba por qué Layne, el investigador más cuidadoso, podría habernos dado una versión incorrecta del asunto Adamski, realizamos una corrección en Space Review.

Siguieron otras cartas de Adamski, y algunas de ellas nos mantuvieron informados sobre el progreso de su libro, Los platillos voladores han aterrizado[1]. Este libro fue seguido por otro en el que afirmó haber sido llevado a pasear en un platillo[2].

Algunas otras comunicaciones recibidas de Adamski son muy interesantes.

Carta del 10 de septiembre de 1953: no solo creo, sino que sé que los platillos son interplanetarios, aunque admito que no solo nuestro gobierno sino otros están experimentando en esta línea. Hasta la fecha, todavía tienen mucho que lograr antes de que el éxito sea suyo en lo que respecta al viaje al espacio exterior. Mientras que la gente de otros mundos lo ha estado haciendo constantemente y lo ha estado haciendo desde hace miles de años.

23 de octubre de 1953: a través de los años de asociación con las personas, descubrí que en su mayoría recuerdan lo que les interesa. Algunas personas ven, reconocen y recuerdan mucho de lo que experimentan. Otros ven poco, entienden poco y recuerdan aún menos. Estaba intensamente interesado en cada parte del ser de este visitante, y a través de los muchos años me he entrenado para ver, tomar nota y recordar la mayor parte de lo que experimento. Según tengo entendido, el gobierno desea que esta verdad sea dada a la gente gradualmente para calmar los temores.

7 de abril de 1954: De una cosa estoy seguro. Estas personas vienen por dos razones: una, para observar los resultados de nuestras acciones aquí en la Tierra, y la segunda, como amigos. De ninguna manera forzarán su voluntad sobre nosotros. Si debemos aprender los resultados de nuestra ignorancia a través de la experiencia, nos dejarán solos para aprender nuestras lecciones. Como hermanos mayores, nos ayudarán si estamos dispuestos. Pero en ningún momento tenemos necesidad de temerles …

Por increíble que parezca, conocen los pensamientos de cada persona en esta Tierra … Saben en quién pueden confiar y quién desea tales reuniones para su satisfacción personal o simplemente por curiosidad … De vez en cuando nuevos contactos se hacen, pero, aunque es imposible para el jefe de una gran organización conocer personalmente a todos los trabajadores de la organización, es imposible que conozcan a todas las personas sinceras que desean servir para transmitir la palabra mundial de la realidad de los viajes interplanetarios y amigos en otros mundos a la humanidad en la Tierra. Hay muchos factores en su incapacidad para hacer contactos. Estoy seguro de que comprende muy bien cuáles son algunos de estos, por lo que no es necesario que entre en esa fase del tema.

Experiencias similares a las de Adamski fueron luego reportadas por otros. Los investigadores de platillos, para esa fecha posterior más sofisticados que nosotros de IFSB, desarrollaron una terminología, los denominaron «contactados». Recordando mis propias justas con lo fantástico, no podía atreverme intelectualmente a etiquetar incorrectamente las «afirmaciones de contacto». Tampoco puedo respaldarlas como verdaderas, porque sobre ellas tengo poca más información que la mayoría de los lectores de este libro.


[1] Publicado por el British Book Center, Nueva York, en 1953. El libro fue co-escrito por Desmond Leslie.

[2] Inside the Space Ships, publicado por Abelard-Schuman, Nueva York. Esto fue seguido en 1961 por Flying Saucers Farewell, también publicado por Abelard-Schuman. -GREY BARKER.