OVNI con forma de cigarrillo aparece en el cielo de Bahía de Caráquez
Así fue el extraño cumpleaños de Raúl Solórzano en Bahía de Caráquez Adrian Peñaherrera
Un joven de Bahía de Caráquez asegura haber visto un objeto volador no identificado que se desplazaba erráticamente por el cielo nocturno
1 de octubre, 2025
Por Ginno Zambrano
El cielo nocturno de Bahía de Caráquez, en la provincia de Manabí, fue escenario de un suceso tan desconcertante. Raúl Solórzano, de 29 años, aseguró haber presenciado un objeto volador no identificado (ovni) con forma de cigarrillo, que se desplazaba de manera errática y con un intenso brillo.
Un cumpleaños inolvidable marcado por luces en el cielo
El avistamiento ocurrió la noche del viernes 6 de junio de 2025, alrededor de las 22:30, mientras Solórzano observaba las estrellas desde el patio de su casa, ubicada cerca de la playa de la localidad. “Nunca voy a olvidar ese día porque fue mi cumpleaños veintinueve”, comentó.
“Esa cosa apareció entre las nubes, moviéndose muy rápido y de manera extraña, como si no supiera hacia dónde dirigirse… parecía que estaba perdida”, relató Solórzano emocionado a EXTRA.
El OVNI tenía luces que lo descubrían. Internet
Según su testimonio, el objeto volador, que tenía un tamaño similar al de un autobús, subía, bajaba, avanzaba y retrocedía constantemente, como si estuviera desorientado. “Brillaba tanto que destacaba en la oscuridad. No era un avión ni un dron, eso lo tengo claro”, afirmó con convicción.
La estela con forma de serpiente que dejó el objeto volador
Lo más curioso, añade, fue que el objeto dejó tras de sí una estela con forma de serpiente, un detalle que incrementó su asombro. A pesar de lo inusual del fenómeno, no sintió miedo. Por el contrario, subió a la terraza de su casa para obtener una mejor vista, justo antes de que la nave desapareciera por unos quince minutos.
Sin embargo, la experiencia no terminó ahí. El objeto reapareció poco después, esta vez emitiendo destellos de luz similares al flash de una cámara fotográfica.
¿Nave alienígena? El objeto regresó con destellos y fuego
En ese momento, cuenta Solórzano, la nave aumentaba y disminuía su tamaño a gran velocidad. “Era como un cigarrillo gigante, de color blanco plateado, que brillaba mucho. Alrededor parecía tener llamas de fuego; era como una especie de escudo”, describió.
Raúl Solórzano asegura que ha tenido varios avistamientos de ovnis. Adrian Peñaherrera
El objeto volador permaneció visible durante unos diez minutos más, hasta que apagó su luz y desapareció entre las nubes, dejando una estela luminosa. Para Solórzano, no hay dudas: “Era una nave alienígena. Un avión no se comporta de esa manera, ni tiene esas luces … eso era algo desconocido para nosotros”.
Otros avistamientos: luces extrañas desde su infancia
Este no es el primer encuentro que Solórzano asegura haber tenido con lo desconocido. Afirma que, desde pequeño, ha vivido varias experiencias similares. “Siempre he visto luces raras en el cielo”, recuerda.
Sin embargo, uno de los más impactantes que recuerda ocurrió en 2018, en Manta, cuando avistó una enorme nave sobrevolando la playa. “Era como un submarino gigante, pero que volaba. Era plateada y no tenía ninguna abertura ni ventanas; estaba completamente sellada”, detalló.
Alienígenas le borran la memoria
El ufólogo Alexander Medina explicó que Raúl Solórzano podría ser un contactado por seres de otros planetas, ya que se le han aparecido en varias ocasiones.
Según Medina, estos seres lo vigilan por una razón: podrían estar siguiéndolo para encomendarle una misión o para protegerlo. “Los seres extraterrestres vigilan a las personas con las que han tenido contacto por alguna razón”, dijo.
Además, señaló que muchas personas no recuerdan estos encuentros porque los alienígenas les borran la memoria, para evitar que cuenten lo ocurrido.
Ovnis en Ecuador: la extraña conexión de un cuencano con seres de otro planeta
El 11 de mayo de 2024, David vivió lo que llama su “primer contacto” con lo inexplicable. Teddy Cabrera
Una noche en las lagunas Pampeadas cambió para siempre la forma en que David Nivelo ve a los ovnis
13 de agosto, 2025
Por Ginno Zambrano
David Parra Nivelo sentía que su vida carecía de emoción, atrapado entre la rutina diaria y el bullicio de la ciudad. Pero todo cambió una noche fría de mayo, en lo alto del Parque Nacional Cajas, en la provincia del Azuay.
Ocurrió el sábado 11 de mayo de 2024. David, un cuencano escéptico que no creía en objetos voladores no identificados (ovnis), se unió a un grupo de quince personas para participar en un campamento ufológico en las lagunas Pampeadas, a 42 kilómetros de Cuenca.
Una vida sin emoción y la búsqueda de lo extraordinario
Buscaba comprobar si realmente existen seres de otros planetas, o al menos vivir una experiencia que rompiera con la monotonía de sus días. La encontró, asegura, mirando al cielo.
Un grupo de 15 personas avistó un objeto volador no identificado. Cortesía
David llegó al lugar alrededor de las 17:00. Todos montaron sus carpas y, cuando el sol se ocultó, comenzaron una meditación grupal. Fue entonces, cerca de las 20:00, cuando decidió entreabrir los ojos. El cielo, despejado y sin luna, se llenó de movimiento.
Un cielo lleno de objetos en movimiento: la primera señal
“Vi unos quince objetos que se desplazaban en diferentes direcciones y a gran velocidad… Parecía que estaban perdidos, que no sabían hacia dónde ir. Se quedaron por casi diez minutos y luego se dispersaron”, recuerda.
En ese momento no sintió miedo. Pero lo más impactante llegaría horas más tarde. A eso de las 02:00 del domingo 12 de mayo, cuando muchos dormían en sus carpas, un objeto volador cruzó lentamente justo sobre el campamento.
David asegura que ha tenido varios avistamientos de ovnis. Adrian Peñaherrera
“Yo vi cuando apareció. Era de forma redonda, un platillo con tres luces: una amarilla, una verde y una roja. Pasó despacio, como si estuviera inspeccionando el lugar, y luego se desvaneció entre las nubes”, relata.
La conexión invisible que cambió su percepción del mundo
Para David, aquel fin de semana en el Cajas fue el inicio de una conexión con lo inexplicable. Ahora afirma que puede sentir en qué momento aparecerá un ovni.
“Pareciera que me avisan cuando van a aparecer. Siento una presencia extraña, como si alguien me observara”, sostiene. Esa sensación lo ha acompañado en sus encuentros posteriores, todos registrados con la cámara de su celular.
Avistamientos en Chaucha: luces erráticas y presencias sentidas
El 24 de octubre de ese mismo año, durante una caminata por el cerro Taqui-Culebra, en la parroquia rural Chaucha, volvió a experimentar dicha sensación. Miró hacia el cielo y ahí estaba: un objeto redondo con luces que alternaban entre azul, rojo y verde, moviéndose de forma errática antes de desaparecer.
Al mes siguiente, el 4 de noviembre, otro avistamiento lo dejó perplejo. A eso de las 05:30, mientras guardaba algunas cosas en su carro, vio un objeto blanco y redondo que parecía desorientado, moviéndose sin rumbo fijo.
Las grabaciones en su celular son borrosas, pero para él no hacen falta más pruebas. Cada aparición reafirma su anhelo de un contacto directo. “No sé si estoy listo, pero quiero vivirlo”.