“Medicina” Cuántica

«MEDICINA» CUÁNTICA

Los antecedentes de esta historia los encontramos a finales de los sesentas en los círculos ocultistas mexicanos. Hacia 1968 la hija de un rosacruz, llamada María del Socorro Pérez Farfán, mejor conocida como Marla, comenzó a relatar sus supuestos contactos con seres extraterrestres provenientes de Marte y de Venus. Fruto de esos contactos fue el desarrollo de lo que más tarde llamaría «Medicina Electrónica» y «Medicina Integral Cuántica» (una rara mezcla de pseudociencias como la homeopatía, la meditación, la cristaloterápia, el naturismo, la parapsicología y otras)

Marla se atrevió a asegurar que había curado la diabetes y el cáncer. Durante muchos años medró en la zona norte del Distrito Federal, luego huyó a España (dicen que acusada de intrusismo) y finalmente regresó a México para establecerse en Guadalajara.

AYER ERAN CONTACTADAS, HOY SON DRAG QUEENS

nelson En los ochenta cambiaron el escenario y los personajes. Ya no era México sino los Estados Unidos. Tampoco era una secretaria mexicana la que hablaba de curaciones portentosas. Ahora era una drag queen que había llegado a este mundo con el nombre de William Nelson.

«Bill» Nelson, que ahora utiliza el nom de drag de Desiré Dubounet, es un «inventor» prolífico, curandero especializado en «medicina espacial» y estrella de YouTube.

En su página web proclama que Dubounet/Nelson es:

El hombre que creó el término «Medicina Cuántica».

Quién creó la primer «Interface de Conciencia Cuántica», conocida como QXCI.

Quién descubrió el proceso de Xrroid, y los campos Subespacial y Trivector (Además de muchos otros términos que no sabe cómo explicar)

Quién tiene el registro FDA del primer dispositivo cuántico de la historia llamado EPFX.

Quién trajo el Apolo 13 con seguridad de vuelta de la Luna.

Pero la mayoría de estas afirmaciones no son ciertas. En primer lugar fue una mujer (no un hombre disfrazado de drag queen) quien inventó el término de medicina cuántica: fue Marla.

Eso de los campos Subespacial y Trivector son magufadas que él inventó (más no descubrió pues sólo existen en su mente).

El registro de la Food and Drug Administration, FDA, (1989) fue porque Nelson describió al EPFX como un dispositivo de retroalimentación biológica «biofeedback», lo que significa que lo podía vender sólo como herramientas para aliviar el estrés. Por ley, no podía afirmar que los dispositivos podían diagnosticar, tratar y curar enfermedades. Como Nelson los usaba justo para esto último, en 1992 la FDA le ordenó que dejara de hacer declaraciones falsas, y más tarde ordenó retirar el EPFX. Pero Nelson siguió vendiéndolos como una máquina de curación, y fue acusado de nueve cargos de delito mayor por fraude en 1996. Huyó de USA para no volver jamás. El expediente judicial de Nelson se puede consultar aquí.

Desire1 Nelson dice que en su adolescencia trabajó como contratista para la NASA, ayudando a salvar la atribulada misión Apolo 13. Pero la NASA no tiene ningún registro de su empleo.

Se jacta de que fue un miembro suplente del equipo olímpico de gimnasia de EU en 1968. Pero nunca fue atleta olímpico.

Dice que tiene ocho doctorados, incluyendo títulos de medicina y derecho. Sus «grados» vienen de escuelas no acreditadas y empresas de venta por correo. Ver un PDF de su Currículum Vitae aquí.

En realidad, es un charlatán que huyó de los EU en lugar de enfrentar cargos federales.

William Nelson nació en 1951. Trabajó como instructor de matemáticas a tiempo parcial en la Universidad Estatal de Youngstown en Ohio, de acuerdo con los registros escolares.

Como un ávido fanático de «Star Trek» y padre de un hijo autista, Nelson se obsesionó con la creación de un dispositivo de la era espacial, que fusionara la matemática moderna con terapias alternativas para curar el cuerpo.

En 1984, a los 33 años, se mudó con su familia a Colorado, donde construyó un dispositivo electrónico, hecho en casa, que según él era capaz de diagnosticar enfermedades y destruirlas – todo desde alergias hasta cáncer – con disparos de radiofrecuencias al cuerpo. Lo llamó Electro-Physio-Feedback-Xrroid System, o EPFX.

Nelson afirma que el EPFX cura el cáncer, reduce el colesterol, incluso erradica el SIDA. Sus operadores dicen que estos dispositivos de «medicina energética» funcionan mediante la transmisión de frecuencias de radio u ondas electromagnéticas a través del cuerpo, identificando el problema, y luego «borrándolo» (zapping).

Desire2 En la década de los ochenta logró vender 139 de estos dispositivos. Luego Nelson construyó su negocio mediante la contratación de una fuerza de ventas de médicos, quiroprácticos, enfermeras y miles de proveedores sin licencia, de amas de casa a jubilados, atraídos por la promesa de dinero fácil.

Hoy las empresas de Nelson son un imperio mundial, de varios millones de dólares. El fugitivo federal se estableció en Budapest, Hungría, desde donde controla su negocio y en donde vive con su quinta esposa y su hijo de 8 años de edad. Cuenta con una plantilla de doce empleados personales, incluyendo un cocinero, una peluquera, niñera, guardias de seguridad y choferes.

Sus oficinas se encuentran en un edificio centenario de cinco pisos en el centro de Budapest, protegido por puertas con barrotes, cámaras de vigilancia y guardias. El principal negocio de EPFX, Eclosión, ha amasado decenas de millones de dólares vendiendo una máquina utilizada para explotar a los más vulnerables y los enfermos desesperados.

Afirma haber vendido 17,000 dispositivos EPFX en todo el mundo (10,000 de ellos en los EU, principalmente en el noroeste). El costo de cada equipo es de 19,900 dólares

Hoy en día, el imperio de ventas de Nelson alcanza 32 países con decenas de distribuidores, corredores y entrenadores en los EU. Los mejores vendedores pueden tener abultadas comisiones, cruceros tropicales y sedanes de BMW. Ver Nelson’s global empire (PDF)

Emma Robinson, gerente regional para el Noroeste del Pacífico, ganó uno de los BMW. Ella dijo que gana unos 7,000 dólares a la semana a través de comisiones de ventas y por tratar a los pacientes en su clínica, Quantum Pacific Wellness Center, en Wilderville, Oregón

Desire4 Nelson y sus distribuidores saturan Internet con deslumbrantes sitios Web llenos de animación, música, vídeos, incluso operadores disponibles para contestar preguntas.

Las ventas de EPFX se han disparado, impulsadas por un marketing agresivo incluyendo pitchmen como el médico de la estrella del pop Britney Spears y el quiropráctico del ciclista Lance Armstrong.

Como Nelson le dice a su público: «Los médicos convencionales aceleran a los pacientes a través de citas con tratamientos que se centran solamente en los síntomas, no sobre las causas de las dolencias. El EPFX trata todo el cuerpo, y lo hace sin necesidad de cirugía o drogas».

Nelson también tiene un estudio de producción de cine, en donde ha creado películas que lo presentan como el cruzado de la medicina alternativa y a la FDA como el villano corrupto.

También ha producido un video musical en el que canta delante de una imagen gigante de la sede de la FDA. La canción de Nelson termina con una burla a los reguladores: «No has visto nada todavía».

En el 2006, en una conferencia internacional EPFX en Budapest, William Nelson subido a un escenario delante de una multitud de varios cientos de operadores – de la máquina o los que esperan para comprar una. Explicó cómo se había utilizado el EPFX para curar el cáncer y el SIDA. «Esto ayuda porque soy un genio», les dijo. Ellos se pusieron de pie y aplaudieron.

Pero nada es lo que aparece con Nelson, incluyendo su apariencia. En el escenario, llevaba un vestido blanco, tacones y mucho maquillaje. «Juzguen la enseñanza, no el maestro», dijo a la multitud. Más tarde, bajo su nombre artístico Desiré Dubounet, cantó canciones de rock en su salón, Club Bohemian Alibi. Este es el Nelson que pocos pacientes conocen.

UN FRAUDE MÉDICO

Desire5 Una investigación de The Seattle Times, en el 2006, descubrió que el excéntrico fugitivo multimillonario dirige un imperio que engaña a la gente adolorida, ofreciendo falsos tratamientos con dispositivos no probados – muchos de ellos ilegales o peligrosos. Las afirmaciones de Nelson constituye el fraude médico más audaz de los Estados Unidos.

La investigación descubrió una red mundial de fabricantes (en Hungría y Grecia) que venden productos no probados, y profesionales que se aprovechan de pacientes confiados.

«Se encontraron operadores – incluyendo un fugitivo federal travesti que canta en un cabaret – haciendo afirmaciones indignantes mientras vende sus mercancías. Descubrimos que el sistema regulador de EU les ha permitido inundar esta nación con un estimado de 40.000 dispositivos.

«Y nos enteramos de que muchos operadores consideran a nuestro estado un refugio seguro para estas máquinas «˜milagrosas»™.

«Aprovechando la débil supervisión del gobierno, han utilizado estos dispositivos para drenar las cuentas del banco de los pacientes, diagnosticar enfermedades erróneamente, y alejar a las personas en estado crítico de cuidados para salvar sus vidas.

«Estas víctimas son víctimas en el campo cada vez mayor llamado «˜medicina energética»™ – terapias alternativas basadas en la creencia de que el cuerpo tiene campos de energía que pueden ser manipulados para mejorar la salud. Los dispositivos de energía van desde máquinas manuales del tamaño del control remoto de la televisión a máquinas gigantes que pesan cientos de kilos, con costos que van desde $ 1.200 a $ 55.000.

Desire6 «Muchos fabricantes y operadores cumplen con las reglas de la FDA y revelan que los tratamientos no están probados.

«Pero una investigación de The Seattle Times, con base en los registros del gobierno y más de 200 entrevistas, encontró que miles de personas evaden la ley. Entre sus conclusiones:

«»¢ Los funcionarios de la FDA no saben cuántos dispositivos de medicina energética existen, donde se utilizan e incluso si son seguros. Hace diez años, el Congreso redujo la supervisión de dispositivos médicos. Desde entonces, la mayoría de los fabricantes de dispositivos de energía que se registren con la FDA presentan poco más que la información básica de contacto.

«»¢ Reguladores federales y estatales no advirtieron al público acerca de un dispositivo de energía peligroso, el PAP-IMI, que está relacionado con daños y muerte de pacientes. Tampoco confiscaron todos los dispositivos, que pulsan en el cuerpo con fuertes ondas electromagnéticas. Ellos habían sido introducidos de contrabando en el país como germinadores de semillas. El PAP-IMI sigue en uso hoy en día en al menos cinco estados, incluyendo Washington.

«»¢ Muchos operadores de medicina energética engañan al público haciéndose pasar por profesionales de la salud altamente capacitados a través del uso de credenciales y títulos no acreditados que pueden inducir a error. Algunas de las organizaciones de acreditación más grandes e independientes, al parecer son en realidad controladas por dos hombres que dirigen las operaciones por correo.

Desire8 «La portavoz de la FDA Karen Riley dijo que la agencia está investigando el EPFX, con base en los hallazgos de The Seattle Times.

«Los charlatanes médicos han usado dispositivos de energía en este país desde hace más de un siglo.

«En la última década, las máquinas explotaron en la corriente principal, alimentada por la Internet, que rápida y económicamente llegó a los posibles compradores y pacientes.

«Hoy, docenas de fabricantes de dispositivos de energía presentan llamativos sitios web con testimonios en video y ciencia falsa».

SIN VALIDACIÓN CIENTÍFICA

Los National Institutes of Health dicen que la investigación en el área de la medicina energética puede hacer promesas, pero hasta ahora ninguno de los dispositivos, o sus tratamientos, ha sido científicamente validados.

«El mensaje ha permanecido igual desde hace siglos: «˜Esta es la cura que he descubierto y es respaldada con testimonios de mucha gente arrancada de la tumba»™, dice James Whorton, profesor de historia clínica en la University of Washington’s School of Medicine.

«Sin duda, hay mucho de charlatanería», dijo Whorton. «Ellos le dirán lo que usted desea escuchar. La persona promedio no tiene educación o la formación adecuada para ser capaces de evaluar críticamente estos tratamientos».

Estos no son los dispositivos de uso generalizado en los médicos, como estimuladores eléctricos utilizados para las lesiones deportivas. Tampoco son dispositivos de biofeedback utilizados en los centros de medicina alternativa, como Bastyr University de Seattle. Más bien, estos son cajas con cables que pretenden hacer milagros. Sus fabricantes y operadores capitalizan la débil supervisión del gobierno y el hambre de la nación por terapias alternativas para obtener millones de dólares en ganancias, mientras explotan personas desesperadas:

Desire7 Los médicos animan a los pacientes a hablar con ellos sobre cualquier problema de salud. Los tratamientos EPFX típicamente duran una hora. Después, un número considerable de pacientes reportan que se sienten mejor.

Los estudios muestran que los operadores de los dispositivos energéticos se benefician del efecto placebo, un fenómeno psicológico en el que los pacientes experimentan mejoría que no se puede vincular a un tratamiento científico. La gente se siente mejor a través del poder de la sugestión o porque creen que se espera que sientan mejoría, según los expertos.

El EPFX se compone de placas de circuitos y otros componentes que ejecutan un software de gráficos del cuerpo en color. Durante un tratamiento típico de EPFX, un paciente puede ver como una pantalla de computadora muestra una animación del interior de una arteria bloqueada por manchas blancas, lo que representa el colesterol. Entonces las gotas se encogen y desaparecen.

Decenas de miles de personas han encontrado persuasivo el terreno de juego de Nelson.

«Los médicos tradicionales no quieren que use el EPFX», dice. «Ellos le dirán que es un fraude. Eso es porque tienen miedo. He descubierto algo que los pone fuera del negocio. Y no quieren que lo tengas».

Su fervor es compartido por el marido de Emma Robinson, John, también un gerente de ventas regional de EPFX. Él dice que el dispositivo puede hacer casi cualquier cosa. «Es lo más parecido a Dios que conozco».

Las pulcras y sofisticadas gráficas de los EPFX podrían impresionar, pero no hay investigación científica que demuestre que las máquinas de energía pueden diagnosticar o curar problemas médicos.

En el 2004 los operadores EPFX dieron uno de sus mayores golpes: Consiguieron ingresar dos dispositivos dentro de un hospital de EU. – St. John’s Hospital, una instalación de 866-camas en Springfield, Mo.

Nelson señaló esto como prueba de que la medicina comienza a aceptar el EPFX.

Los administradores del hospital iniciaron una investigación sobre cómo fueron aprobadas máquinas EPFX. Se enteraron de su presencia por The Seattle Times. Los registros muestran que Faith Nelson, una enfermera registrada que trabaja en el departamento, donde se usan los dispositivos, también es una gerente de ventas regional para el EPFX. (Ella no tiene parentesco con William Nelson.)

Desire3 Los registros también muestran que Susan Blackard, vicepresidenta del hospital que supervisa ese departamento, lleva a cabo sesiones de capacitación para operadores EPFX en todo el mundo. Blackard, que también es una enfermera registrada, entrenó a varios cientos en una conferencia en el 2006 en Budapest.

La portavoz de St. John’s, Cora Scott, dijo que el hospital revisó la relación de los trabajadores con Nelson y la red de ventas EPFX.

El hospital es propiedad de Sisters of Mercy Health System. Sus funcionarios aseguran que los dos dispositivos EPFX sólo fueron utilizados para aliviar el estrés.

Los reguladores del estado de Washington se enteraron sobre el EPFX en abril de 2004 cuando un médico de Puyallup presentó una denuncia de que un médico sin licencia de Tacoma estaba usando uno.

El investigador estatal John Kozar comprobó la denuncia, entrevistando a Janet Zibell, que utilizaba el EPFX en su spa. Al mismo tiempo, Kozar se enteró de que otros operadores están utilizando EPFX en todo el estado. En mayo de 2004, Kozar escribió a sus superiores:

«Este dispositivo está siendo utilizado por personas sin licencia para tratar y diagnosticar a los pacientes con enfermedades».

Zibell dijo a los investigadores que ella utilizó el EPFX sólo como una máquina de biofeedback para ayudar a aliviar el estrés, según los registros estatales. En todo el estado de Washington no se requiere licencia para realizar el biofeedback.

Para mostrar a los investigadores cómo usa el dispositivo, Zibell llevó a cabo una sesión de EPFX en la sede en Olympia del Departamento de Salud. Zibell conectó el EPFX al investigador Neva Carol. Durante la manifestación, Zibell dijo que el dispositivo detectó un gusano parásito en el colon de Neva así que ella «zappeó el gusano», con las frecuencias eléctricas del dispositivo.

Eso fue suficiente para los investigadores. Dictaron una orden de cesar y desistir a Zibell. Ella accedió a no utilizar el EPFX para diagnosticar o tratar enfermedades. El Departamento de Salud se detuvo allí, cerró el caso. Kozar advirtió que no se buscaron otros operadores EPFX, según muestran los documentos.

En Oregon, los reguladores adoptaron un enfoque muy diferente. La Oregon Board of Chiropractic Examiners a principios de 2007 prohibió el uso quiropráctico del EPFX. «Este dispositivo es una completa magufería», dijo el director ejecutivo de la junta, Dave McTeague. «No hay una explicación racional de cómo funciona».

ContinuarỦ

Un pensamiento en ““Medicina” Cuántica”

  1. Interesante la informaciòn, voy a ver màs sobre el tema en la red.
    Aunque te dire que tambien los grandes laboratorios se las gastan, me gustaria proponer a anàlisis algunos tòpicos al respecto:
    El efecto post antibiòtico que tanto difundieron Bristol y Bayer. Donde afirmaban que dìas despues de haber suspendido el Tx con el farmaco, el efecto terapeutico continuaba, aùn cuando la biodisponibilidad era cero.
    La existencia de los receptores H2 y la bomba de protones, sobre los que se dice actuan algunos medicamentos antiulcerosos sin que nadie haya nunca visto esos receptores.
    La tan pregonada seguridad de Mobicox, Baycol y Lirica, y bueno… seguramente habra otros ejemplos mejores.
    En fin… gracias por el tiempo.

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