Kelvin Rowe: Contacto con los extraterrestres sin nombre

KELVIN ROWE: CONTACTO CON LOS EXTRATERRESTRES SIN NOMBRE

KelvinRowe1Kelvin Rowe nació en Chicago, Illinois, el 14 de marzo de 1908, pero se mudaría con todas su familia hacia Los Ángeles, California, en donde su madre había conseguido un trabajo en el Hollywood Sanitarium, como enfermera y obstetra.

Cursó hasta la secundaria (Virgil Jr. High School) y de ahí salió para trabajar como chofer de camiones. «Mi madre quería que yo fuera doctor o electricista, pero como la mayoría de los niños yo era lo contrario de lo que mi madre quería que me convirtiera».

La familia se mudó nuevamente a Good Hope Acres, cerca del Lago Elsinore, en donde Kelvin consiguió un trabajo en una tienda de comestibles Safeway, y después nuevamente se contrató como chofer de trailers para viajar entre Los Ángeles y Texas.

En los tiempos de la gran depresión se empleó como Senior Clerk and Time-keeper. Luego regresó a su amor por los camiones, trabajando para su hermano mayor. En 1940 trabajó para International Union of Operating Engineers como operador de equipo pesado. Ahí, en 1948, conoció al contactado Truman Bethurum[1].

Finalmente, en 1954 entro a la División Forestal del Estado de California en donde terminó jubilándose.

Desconozco el nombre de sus padres y de la mayoría de sus hermanos, pero sabemos el nombre de una de sus hermanas, Dorothy Rowe, y de una de sus hijas, Aida Rowe.

Kelvin vivió la mayor parte de su vida en San Jacinto, California

No hay ninguna duda que Kelvin inventó su historia plagiándola a partir de Aboard a Flying Saucer de su amigo Bethurum[2]. Como ya hemos visto[3], en el relato de Rowe la capitana Aura Rhanes, del planeta Clarion, es sustituida por la «Dama de Plutón» (también capitana) Esta era una mujer hermosa (como Aura) de poco más de cinco pies, 1.5 metros de altura (muy similar a la capitana de Clarion), vestía una blusa, chaqueta y pantalones «en tonos contrastantes (exactamente como la Capitana Rhanes). Pero esas no eran las únicas coincidencias.

Kelvin Rowe (más bien su esposa) escribió en «A Call At Dawn»:

«En la primera parte de 1953 mientras trabajaba en Iron Mt., California, mi vida fue de nuevo salvada milagrosamente. Esta vez la diferencia comenzó con una Voz hablándome. Cerca de un año después realicé mi primer contacto mental telepático con los Hombres del Espacio. Siete meses y medio después de mi primera comunicación mental tuve mi primer contacto objetivo, persona a persona. Alrededor de cinco meses después de eso viajé por las grandes vías espaciales a velocidades que desafían toda imaginación».

KelvinRowe2Bethurum no sería su única influencia platillista. Kelvin Rowe conoció al mismísimo George Adamski:

«A finales de 1953, y a través del profundo interés de mi hija mayor en una persona muy notable que ella había visto y escuchado en Palomar Gardens Café en 1952 cuando mi hija paró ahí en un paseo de domingo, mi familia y yo fuimos a conocer al Sr. George Adamski, un pionero de la nueva frontera «“ el Espacio Exterior. Él ha abierto un camino de verdad para todos quienes quieran seguirlo. Escuchamos a este cruzado de la Nueva Era hablar de naves interplanetarias y gente de nuestros planetas hermanos, y curiosamente esta posibilidad no parecía del todo imposible. Aceptamos casi todo lo que él dijo con apenas alguna duda. Tal vez usted conceda que éramos tan crédulos, pero no hubo ni una pequeña cosa que hubiésemos dejado de lado. Esto era algo que parecía ser mucho una parte de nuestro ser más profundo que ningún argumento servía para moverlo. Era como si esto fuera algo que hubiéramos conocido hace mucho tiempo, como un recuerdo tan lejano que parecía encasillado en los oscuros recovecos del pasado, y que ahora se nos recordaba. Desde entonces fuimos visitantes frecuentes de los Gardens, frecuentemente nos acompañaban amigos. Fue un pensamiento de que un imán nos atraía ahí una y otra vez, y estábamos hambrientos intelectualmente por más conocimiento de este vasto asunto que el hombre de la Tierra apodó «˜platillos voladores»™».

El escenario estaba listo y sólo era cuestión de colocar los personajes e inventar la historia. Kelvin la fue construyendo, paso a paso, sin adelantar, iniciando con algunos supuestos intentos fallidos y «contactos telepáticos». Así es como nos cuenta Rowe la forma en que perdió el primer contacto:

«Durante 1953 y a través de una cinta grabada que el Sr. George Adamski había tocado para nosotros, me reencontré con el Sr. Truman Bethurum, entonces de Redondo Beach, California, quien había tenido varios contactos con una barcaza del planeta Clarion. Conocí por primera vez al Sr. Bethurum en 1948 cuando ambos éramos empleados en un trabajo de la construcción bajo la jurisdicción de International Union of Operating Engineers. Ahora, cuando él regresó a Overton, Nevada, en la anticipación a un prometido doceavo contacto, y debido a nuestro mutuo interés en los platillos voladores, él me invitó a unírmele. Fue a través de la interferencia de otros, detalles que debo omitir, que su esperado contacto no ocurrió esa vez. Sin embargo, después de meses de larga espera, su fe en un regreso prometido fue, ahora nos ha dicho, recompensado en 1955″.

 

«Añadiré que mientras estaba en Overton, y debido a la observación de las costumbres estrictas y las convenciones sociales de nuestra gente de la Tierra, yo, también, perdí el contacto. Nadie me dijo que lo había perdido, pero en lo profundo de mi ser sentí eso».

 

«Después de regresar a casa llamé al Sr. Adamski, y sin tener que haberle mencionado mucho este sentimiento, me hizo una declaración tan clara como el cielo, con un parpadeo de sus ojos, «˜Así que perdiste tu contacto mientras estabas en Nevada»™. Él nunca explicó cómo lo supo[4], pero se confirmó mi corazonada».

El 9 de marzo de 1954, según Rowe, iba por el camino a San Bernardino, rumbo a Redlands, California, para visitar a un amigo. Manejaba una pick-up Ford, cuando en su mente escuchó la palabra «Plutón» y fue repetida tres veces. Siguieron varias palabras que él no entendió.

KelvinRowe3Al llegar a casa le contó la experiencia que había tenido a su esposa y ella le aconsejó hablar con Adamski. Cinco días más tarde Rowe consultó con el contactado quien le dijo que, en efecto, había contactado con los Hombres del Espacio y que no había entendido el mensaje debido a la alta frecuencia de pensamientos de sus interlocutores, pero que con el tiempo lograría entenderlos.

El 4 de abril de 1954 durante la Convención de Nave Espacial en Giant Rock, cerca de Joshue Tree, California, conoció a tres personas, una joven y dos hombres, quienes se acercaron a Bethurum para preguntarle sobre sus contactos en Overton, Nevada. A Rowe le extrañó que supieran sobre este incidente (aunque no sería tan extraño si pensamos que Truman se lo contó a Adamski y éste, a su vez, a los tres jóvenes) y de inmediato pensó que eran extraterrestres del planeta Plutón

Más tarde los plutonianos le confirmarían ese encuentro en el desierto de California. También le informaron que tenían dos satélites en órbita sobre la Tierra, cuya misión consistía en evitar la desviación de los polos debida al «desbalanceo de la vibración planetaria».

Ese no fue el único peligro del que nos salvaron los Guardianes del Espacio. En enero de 1955 la «Dama de Júpiter» le informó: «Hay un pequeño planeta que se ha movido de su orbita normal y circunda cerca de la Tierra. Puede haber muchos sentimientos extraños. No se alarmen; se manejará diestramente. Las condiciones críticas están por llegar sobre la Tierra; habrá muchos cambios en muchas formas».

Una noche de diciembre de 1955, a las 9:15 p.m., mientras viajaba a Denver, Colorado, «un diluvio de luz suave descendió a través del cielo nocturno en una onda». Rowe detuvo su pick-up, y caminó por el campo hasta una nave en donde lo esperaba un Hermano de Júpiter quien lo condujo ante la presencia de la «Dama de Júpiter».

A diferencia de otros contactados que dieron el nombre del lugar y la fecha exacta (incluyendo hasta los minutos) en que fueron contactados, Kelvin Rowe es muy escueto en lo que tendría ser el momento culminante de su vida y no proporciona mucha información:

«Desde la primera vez que fui elevado a dos mil setecientas millas en el espacio a bordo de un gigantesco transportador en forma de cigarro, para regresar refrescado e infundido con vida a pesar de las largas horas sin dormir. Mi primer viaje en el espacio ocurrió en marzo de 1956. Dejé la Tierra con dos Hermanos en una pequeña nave exploradora de alrededor de cuarenta pies de diámetro. Viajamos una hora y quince minutos antes de llegar a la Nave Madre, cuyo gusto ni remotamente se acerca a este mundo prisión, de cuarentena».

Kelvin Rowe también fue uno de los oradores en las convenciones de Understanding Inc., de George Van Tassel. En el Pasadena Independent, de Pasadena, California, del 8 de octubre de 1959, podemos leer que dio una conferencia en la Unidad número 12 de Pasadena[5]:

PasadenaIndependent-Pasadena-California-8-10-1959Turista del Espacio Habla Hoy

 

Kelvin Rowe, autodenominado contactado de platillo volador, que afirma que ha viajado al espacio exterior 350 veces, hablará en la Unidad Pasadena Nº 12 de Understanding, hoy a las 8 p.m., en Odd Fellows Hall, 175 N Los Robles Ave. Residente de San Jacinto y un empleado del Departamento de Forestal del Estado, Rowe es el autor de un libro, «A Call at Dawn».

Kelvin haría muchos viajes en platillo volante, cada vez menos con la «Dama de Plutón» y cada vez más a menudo con la «Hermana de Júpiter». Entre las grandes revelaciones que le dieron los Hermanos del Espacio, de los que nunca dio sus nombres, se encuentra la siguiente: los planetas están en órbitas, cada planeta se mueve en su propia órbita.

Rowe no se diferenció de los otros contactados y en su libro contó la misma clase de disparates amateur de otros contactados: hay extraterrestres que se ven iguales que nosotros, que residen en todos los planetas del sistema solar, Dios es «limitado, pero El Creador no», etc.

Un poco después de la aparición del libro de Rowe, pero sin conocerlo, el ufólogo francés escribió lo siguiente[6]:

«Después del histórico encuentro de Kenneth Arnold cerca de Mount Rainier, se comenzó una vez más a hablar de otros mundos y, una vez más, la gente pensó que era prudente comenzar a describir sus habitantes: que eran hermosos, de tipo escandinavo, pelo rubio, altos, con ojos azules, y, además, «venusianos». Así mismo llegaron ofertas más altas. Ellos veían a estos extraterrestres guapos. Visitaron e incluso pilotearon sus naves. Y por otra parte, alguien terminó afirmando: «˜Ya ves, yo, te digo, de forma confidencial, ¡soy un venusiano! ¿Tal vez piensas que soy un terrestre? No, en absoluto. Vengo de Venus»™».

 

«Luego se multiplicaron, vendieron folletos, fueron recibidos «˜en secreto»™, recibieron dinero y terminaron como se podía haber previsto: en la prisión por estafa para algunos de ellos, fugados a México o en otro lugar para los otros».

 

«Esto es a la vez una historia triste y cómica, y sería conveniente poner fin de una vez por todas».

Varios ufólogos se ocuparon de este contactado, entre ellos podemos mencionar a Jerome Clark, Albert Rosales y Patrick Gross. Pero a mí me parece más interesante una entrevista que le hizo John F. Winston, conductor el programa de televisión «Science Faction», del Community Channel TV, y luego retransmitido en Heritage Cablevision canal comunitario 2B. Aunque hasta el momento no he visto este programa, supe de él a través de una lista de correos en la que John Winston escribió:

KelvinRowe4Asunto: Ovnis de Kelvin.

 

En el pasado tuve un maestro o gurú que me enseñó muchas cosas. En una de nuestras conversaciones, me contó acerca de un hombre con el nombre de Kelvin Rowe, que vive en el sur de California, en un pueblo llamado San Jacinto. Merle (mi maestro) mencionó bastantes cosas acerca de Kelvin y que había escrito un libro titulado «A Call At Dawn», explicando cómo había hecho paseos a bordo de naves espaciales de otros planetas. Kelvin es un operador de equipo pesado retirado (conducía tractores de oruga).

 

Después de la primera audiencia sobre Kelvin intercambié un par de cartas con él y unos 15 años más tarde por fin conseguí una entrevista con él. Por este tiempo él tenía 82 años, pero está en buen estado, pero es un poco más lento de lo que solía ser.

 

Luego me dijo que había contactado a algunas Personas del Espacio cerca de su casa y fue llevado a más de 200 paseos. Una de las muchas cosas inusuales sobre Kelvin es que nunca fue capaz de llevar a ninguna otra persona, junto con él en sus viajes en las naves espaciales. También dijo que en ningún momento fue alguna vez llevado a otro planeta y descendió en él. Fue llevado muy cerca, pero nunca a otro planeta.

 

KelvinRowe5Cuando estaba a punto de irme después de haberlo oído salió con una declaración que un montón de gente me dice. La declaración fue «Te podría decir algo que probablemente no se puede creer». Su declaración fue que durante sus muchos viajes a bordo de los platillos volantes finalmente le enseñaron a caminar a través de una pared de metal de aproximadamente 4 pulgadas de espesor, con la ropa puesta y salir por el otro lado de la pared. Entonces le dije que mi profesor Merle me había dicho sobre el hecho de que él (Kelvin) podría hacer esto, así que no me sorprendió demasiado.

 

En mi conversación con Kelvin me informó que su esposa había escrito el libro sobre las experiencias de Kelvin. Algunos de las Personas del Espacio, incluso trabajaron en la tienda de comestibles en el pasado y su mujer dijo que podía reconocerlos, ya que conducían por la carretera en frente de su casa.

 

Una forma en la que podrías decir si eran Gente del Espacio es que podían entrar en la habitación con las puertas cerradas. Así que parece que estas personas se parecen a nosotros. Estas Personas del Espacio son de aspecto muy atractivo y vienen de los planetas Plutón y Júpiter.

 

Los dejo con esta palabra; Un hombre o una mujer hace una mayoría.

 

ACallAtDawn1Eso es todo por ahora, John Winston.

Aquí está la transcripción de este programa de entrevistas:

Formato original

 

Fecha: 1993-01-16 09:29:33 PST

 

Community Channel TV

 

La siguiente es una transcripción de la serie que se transmitió originalmente en marzo de 1991, en San José, California. Heritage Cablevision canal comunitario 2B. El programa puede ser visto actualmente los martes a las 5:30 pm y los jueves a las 9:30 pm (repetición). Publicado aquí con permiso. Disfrute.

 

«Science Faction» con John Winston. Comienza la transcripción.

 

Hank Gray (locutor) se escucha sobre la canción del tema: Hola. Bienvenido a «Science Faction», un programa semanal de ciencia aquí en su canal comunitario. En el mundo de alta tecnología de efectos especiales en el que vivimos hoy en día, no siempre es fácil separar los hechos de la ficción. Este programa intenta mejorar nuestra comprensión de lo que es real y lo que no lo es en el mundo de la ciencia.

 

Al mismo tiempo que miramos hacia el futuro. La ciencia es progresiva y siempre cambiante. Lo que no es real o no existe hoy en día, puede muy bien estar aquí mañana. Otros temas tratados en este programa son la naturaleza y la historias de interés humano. Mi nombre es Hank Gray, y ahora aquí está su anfitrión John Winston.

 

En la pantalla se nos muestra los efectos especiales que representan un ovni oblongo de color rosa luminoso intermitente por encima de una casa. Oímos sonidos similares a los acordes de sintetizador.

 

John Winston (en estudio): Saludos en la Luz del Infinito Uno. Bueno, soy John. Hoy voy a estar diciendo algo de información y tener una entrevista con una persona, que si no me sale otra cosa en la televisión, esto valdrá la pena todo mi trabajo que he hecho antes. Hace unos 27 años tuve un maestro, un gurú y un amigo con el nombre de Merle Fagot y me enseñó muchas cosas sobre Mt. Shasta, ESP, Bigfoot, ovnis y una de las cosas de las que él me habló fue de una persona que había conocido personalmente por el nombre de Kelvin Rowe. Kelvin Rowe vive en San Jacinto, Calif., cerca de Los Ángeles, Calif., Y que había escrito un libro titulado «A Call At Down» de Kelvin Rowe. Yo le había escrito un par de cartas en algún momento después de eso y él me envió de nuevo un par de cartas.

 

ACallAtDawn2Entonces esperé unos diez años más, y yo le escribí un par de cartas. Entonces, finalmente, el otro día tuve la idea de que tal vez sería mejor contactar con esta persona otra vez, ya que puede ser una especie de canto de cisne, ya sabes, cada vez que una persona hace algo hacia el final de su vida tiene un poco de información que desea que contar. Bueno, fui allí, yo le había llamado un día o dos antes de esa fecha y, finalmente, me dijo, «Voy a ir y voy a hablar con usted unos minutos». Así que me presenté temprano en la mañana, bastante temprano, 10 en punto, él me esperaba, pero una vez que llegué a la puerta una joven salió y me dijo: «¿Puedo ayudarle?» y yo dije que sí, estoy aquí para ver a Kelvin Rowe. Y ella dice: «Bueno, él es mi padre, pero todavía está dormido. Se quedó hasta muy tarde anoche». Y dije: Yo sé que él quiere hablar conmigo y, ah, si no le importa, me gustaría, ah, si le gustaría ir y despertarlo. Así que ella supo que era serio y entró y habló con su padre, me dejó entrar, después de un rato salió. Me sorprendió saber que esta persona tenía 82 años en ese momento. Y había pasado toda una vida de estar en contacto con la gente del espacio. Ahora sé que mucha gente va a decir, «Â¡Ja, ja! Cuéntanos otra gran broma, John!» Ahora se puede pensar en esta persona como el mentiroso más grande que alguna vez existió, pero él hizo algo durante unos 35 años y dio la vuelta y habló con mucha gente y trató de contarles de sus experiencias. Y sus experiencias eran que había tomado muchos paseos a bordo de naves espaciales de otros planetas. Y cuando lo hice esta entrevista, yo estaba en una especie de prisa y no podía configurarla correctamente, por lo que usted lo hará, si realmente desea la información, tal vez usted estará interesado en esto. Si no lo está va a decir bien, «Ese John Winston que ni siquiera sabe cómo manejar una cámara. Debería haber tenido mejores luces». Pero tenía esta persona que sólo iba a hablar conmigo unos minutos y aun así me habló durante más de una hora y veinte minutos. Y vamos a tomar algunos de los extractos de lo que dijo y los mostraremos a ustedes hoy. Tengo la esperanza de que estos sean de interés para usted. Si usted es un escéptico puede que usted seguirá siendo un escéptico. No me importa. Pero para mí creo que esta es una información muy importante. Y espero que se quede quieto y vea esto por un poco así que voy a estar de vuelta. (Comercial)

 

La escena cambia al interior de la casa de Kelvin Rowe con la cámara en Kelvin mientras John Winston lo entrevista.

 

John Winston: Ahora vamos a dar un poco de historia sobre ti mismo, si quieres, ¿dijiste que tenías alrededor de 80 años?

 

Kelvin Rowe: 82 años, voy a tener 83 el 14 de marzo.

 

John Winston: Y, ah, serías tan amable de dame un poco de sus antecedentes, ¿para quién trabajaste, en dónde, construcción de carreteras, en, ah, silvicultura?

 

Kelvin Rowe: Bueno, yo trabajé en la construcción de carreteras durante varios años antes de que comenzara la silvicultura. Trabajé, oh, alrededor de 22 o 23 años más o menos conduciendo camiones y manejando excavadoras y cosas por el estilo en las obras de construcción. Ayudé a construir una gran cantidad de las carreteras y presas y todo lo demás. Campos de aviación.

 

ACallAtDawn3John Winston: Bueno, ahora permíteme decir donde está San Jacinto. ¿Cómo expresas esto en relación con Los Ángeles?

 

Kelvin Rowe: Bueno, es al sureste de Los Ángeles. En realidad está a unos 98 o 99 millas de Los Ángeles.

 

John Winston: Está bien. Has estado teniendo un poco de problemas de salud, pero todavía tienes buena mente ¿de acuerdo?

 

Kelvin Rowe: Bueno, sí, mi mente, se alentó un montón de veces, es difícil que diga las palabras y una cosa u otra. Por alguna razón u otra lo sé, puedo decirlo, pero simplemente no sale bien.

 

John Winston: Lo tengo. Bueno, ahora, lo que estamos tratando de hacer es cuando las personas tienen avistamientos y cosas por el estilo van a decir, «Oh, bueno, ese viejo, no era más que un vago por la calle». (Kelvin ríe) Pero has tenido un trabajo responsable. Te has retirado de eso.

 

Kelvin Rowe: Sí, me he retirado de la División Forestal de California. Trabajé para ellos durante unos 18 3/4 años. La edad me alcanzó y no te permiten estar en la línea de fuego después de los 65 (años).

 

John Winston: Ya veo. Bueno, ahora, vamos a tratar de sentar una base cuanto a qué tan borracho eres.

 

Kelvin Rowe: No, (se ríe) No soy un borracho. Nunca fui por eso, quiero decir, oh bebí una cerveza de vez en cuando, o un poco de vino o algo por el estilo. Muy rara vez se me ocurrió beber ningún verdadero licor fuerte, ya sabes. Puedo beber ginebra muy de vez en cuando, pero no he bebido ninguna en bastante tiempo. Tengo un armario por ahí cargado con cosas, pero no me lo como.

 

John Winston: Bueno eso es bueno. De acuerdo, ¿cuándo comienzan tus experiencias en realidad en relación con las naves espaciales y esas cosas?

 

Kelvin Rowe: Todavía trabajaba en la construcción cuando llegué por primera vez a mi primera pista. Bueno, yo no sabía realmente lo que estaba pasando, pero oí voces, ya sabes. Estaba conduciendo en mi camioneta, yendo hacia San Bernardino a la oficina del sindicato, y oí voces como si alguien estuviera sentado junto a mí. Y sabía que nadie estaba sentado allí, pero miré a la parte trasera de la camioneta y nadie estaba allí e incluso me detuve y bajé y miré alrededor, miré debajo y todo y no pude averiguar de qué lugar del mundo venían esas voces.

 

Y no era muy claro, lo que estaba haciendo, pero podía oír las voces y no había nadie alrededor. Esa fue la primera pista. Y no sólo eso, las tuve un par de veces a la semana, a veces. Y entonces se fueron. Y empezaron de nuevo y continuaron así durante casi un mes. Y yo tenía un amigo hacia Palomar, George Adamski.

 

ACallAtDawn5John Winston: Oh, sí, he leído sus libros.

 

Kelvin Rowe: Y fui a verlo y dijo: «No te preocupes por eso. Yo tuve contactos que se realizaron de la misma manera». Prácticamente en cuanto empezó a salir, sucedió lo mismo.

 

John Winston: ¿Estaban hablando contigo en inglés?

 

Kelvin Rowe: Sí, estaban hablando en inglés. Como ya he dicho a veces no podía entender lo que estaban hablando. Pero no fue hasta, ah, que duró, oh, no sé quizás 4 o 5 meses. Todo me molestó, ya sabes, pensé bueno será mejor que vaya a ver a un médico, ya sabes. Pero antes de que lo hiciera, fui y hablé con George Adamski y me sentí mejor, pero no sirvió de nada. (Se ríen)

 

Pero realmente no tuve ningún contacto, contactos personales con ellos hasta que, oh, supongo que fue casi un año más tarde. Tenía una mente muy fuerte en ese momento y yo estaba decidido a averiguar qué estaba pasando. Ellos muy rara vez contactaban con alguien mientras están en el trabajo o cualquier cosa, pero se pusieron en contacto conmigo de esa manera.

 

KelvinRowe6John Winston: Estabas ocupado en ese momento.

 

Kelvin Rowe: Bueno, yo no estaba muy ocupado, era de noche cuando entraron. Por supuesto, la oficina estaba cerrada, ya sabes. Estábamos ahí en servicio las 24 hrs. No hacía ninguna diferencia, ves.

 

John Winston: Ok. Cuando tuviste el primer encuentro con ellos para conocer a alguien.

 

Kelvin Rowe: Bueno, ah, fue, ah, no tuve el primer encuentro, no puedo decirlo exactamente, pero la primera vez que vi una de las naves estaba trabajando en el desierto, y había 4 o 5 de ellas, sobrevolando. Y yo no fui el primero que se fijó en ellas. Había un par de otros compañeros ahí que las vieron por primera vez. Y yo tenía un amigo que estaba cerca de la familia que me mencionó por primera vez sobre las naves volando por allí.

 

John Winston: ¿Qué aspecto tenían y qué tan rápido iban?

 

Kelvin Rowe: Oh iban bastante rápido.

 

Fin de la Parte 1.

 

Asunto: El Kelvin Rowe historia. Parte 2 de 2. 28 de de septiembre del 2004.

 

En esta parte Kelvin dice de dónde son estas personas del espacio.

 

John Winston: ¿Eran objetos discoidales plateados?

 

Kelvin Rowe: Sí se trataba de discos plateados. Había alrededor de cinco. Y allí estaba una (persona) que había llamado mi atención sobre ellos. Su nombre era Smokey Bullman. Solía ser un jinete de rodeo. Por supuesto, él también estaba trabajando en la construcción. Él fue el que me llamó la atención sobre ellas. Esa es la primera cosa que he visto de naves, ya sabes. No fue un encuentro o algo por el estilo. Era sólo que las vimos de esa manera. Fue después de eso, que contacté con ellos cuando empecé a trabajar con el sector forestal.

 

ACallAtDawn7John Winston: ¿Cómo hizo el contacto?

 

Kelvin Rowe: Bueno, ellos vinieron a mí.

 

John Winston: ¿Físicamente se acercaron a usted?

 

Kelvin Rowe: Sí, se acercaron a mí. Yo estaba en mi oficina allí en Silvicultura y ellos fueron los que entraron en la oficina. Por supuesto que no me dejaron saber quiénes eran o nada en ese momento, sólo llegaron como una visita, ya sabes.

 

John Winston: ¿Tenían ropa normal como de personas normales?

 

Kelvin Rowe: tenían el mismo tipo de ropa que usamos en un sentido, nuestro estilo de ropa y todo. Siempre venían de esa manera.

 

John Winston: ¿Se dieron a conocer en ese momento?

 

Kelvin Rowe: No. Ellos no lo hicieron en ese momento.

 

John Winston: Sólo hablaron contigo en términos generales.

 

Kelvin Rowe: Sí, pero yo sabía que había algo extraño en ello al principio, porque la forma en que estaban hablando y la forma en que estaban actuando, y, ah, en el sentido de que ellos estaban tratando de obtener una gran cantidad de información. Lo primero que pensé fue en un país extranjero o como rusos o algo vinieron aquí a investigar lo que estaba pasando. Pero eso fue mi primera impresión de eso. Pero yo estaba un poco escéptico de lo que eran realmente.

 

John Winston: Cuéntanos acerca de cómo se te dijo que fueras a un lugar para reunirte con ellos o ir a bordo de una nave o lo que hicieron.

 

Kelvin Rowe: Bueno, la única cosa sobre eso, nunca se sabía cuándo iban a venir. Ellos nunca hacían una cita ni nada. Sólo venían a ti, y tu podrías estar caminando por la calle. Podían ir caminando y no podías decir quiénes eran porque, quiero decir, se parecían demasiado a nosotros. La única cosa que he notado, que tienen, ah, sus ojos son algo diferentes, de alguna u otra manera. No puedo explicarlo. Pero, ah, su piel es horriblemente suave, como una piel de textura fina, no hay manchas ni nada de eso. Y ellos no tienen ninguna marca muy particular acerca de su ser físico que se pudiera escoger, me refiero en la medida de lo que pude ver.

 

ACallAtDawn6John Winston: ¿Se te permite decirnos de dónde venían, qué planeta?

 

Kelvin Rowe: Bueno, esto es una cosa extraña. Afirman que provienen de todos los planetas diferentes en nuestro sistema, Júpiter y Plutón y Urano y Mercurio y todos aquellos. Ellos no los llaman planetas, como dijeron, tienen diferentes nombres para sus órbitas. Ellos van por órbitas, en ciertas órbitas. Afirman que un planeta está en una órbita y el otro planeta está en otra órbita. Están todos en órbitas. Sería lo mismo, siguiendo el patrón de lo mismo, pero siguen estando en órbitas. Esa es la forma en que se expresan.

 

John Winston: Está bien, cuéntanos acerca de cuándo te invitan a un determinado lugar para reunirte con ellos, algo por el estilo.

 

Kelvin Rowe: Y, por supuesto, yo era el único personal de guardia en ese momento. Había de hecho, un gran campo horrible, un aeropuerto que hay por allí, llamado Ryan Field, y ahí es donde aparecieron por primera vez. Y vinieron un par de ellos, había dos hombres y una mujer. Hablamos un rato, querían saber cómo iban las cosas, y querían saber si me gustaría ver una de las naves. Y yo les dije que sí me gustaría ver una. Así que nos fuimos. Supongo que estaba, oh, probablemente a tres cuartas partes de una cuadra en un sentido fuera del campo. Estaba un poco atrás en el campo. Por supuesto que todo es diferente ahora. Todo ha sido cambiado. Tienen una gran cantidad de diferentes edificios y cosas por allí ahora. En el momento en que vi su nave en el suelo, ahora no estaba sentada exactamente en el suelo, simplemente se movía un poco.

 

John Winston: ¿En serio? ¿Has visto algún tren de aterrizaje triciclo o algo por el estilo?

 

Kelvin Rowe: Ah no, yo diría que era una nave grande horrible.

 

John Winston: ¿Qué tan grande?

 

Kelvin Rowe: Oh, yo diría que se trataba de algo de alrededor de 350 – 400 pies de diámetro.

 

ACallAtDawn8John Winston: ¿Parecía una especie de platillo?

 

Kelvin Rowe: Sí, era toda redonda. Era toda redonda.

 

John Winston: ¿Fue por la noche o durante el día?

 

Kelvin Rowe: Noche. Y cada vez que fuimos a subir a bordo, la nave, no tocaba el suelo, sino que la nave estaba inclinada. Y había un cierto lugar en esa pestaña en la que entrabas. Y las puertas se deslizaban atrás y adelante de esta manera (hace un gesto con las manos en posición horizontal). Esa fue la primera vez que estuve a bordo (se ríe). Yo estaba viendo y era muy extraño. Por supuesto no tuve la oportunidad de aclararlo en ese momento. Sólo hubo dos momentos en los que yo estuve en la misma nave. Ahora estas personas, te lo digo, tienen más conocimiento que tenemos de aprender, de lo que ya sabemos. Ellos saben tanto. Y tienen todo el registro casi prácticamente desde el momento en que nace este planeta, supongo.

 

John Winston: ¿Este planeta aquí?

 

Kelvin Rowe: Sí, y bastante cerca de la mayoría de todos los otros planetas.

 

ACallAtDawn11John Winston: ¿Alguna vez escribiste algo de esto en tus notas?

 

Kelvin Rowe: No, nunca lo hice, no. Oh, sólo ocasionalmente me gustaría escribir algo cuando me meto en conversación con ellos, un poco cuando yo no estoy a bordo o eso. Esa parece ser una de las principales razones para ir a bordo. Estudiar. Aprender acerca de nuestro propio planeta y otras cosas que han pasado y una cosa y otra. Debido a que nuestra historia de las cosas – por supuesto que hay una gran cantidad de ella correcta, pero hay mucho de lo que ni siquiera sabemos nada. Y ellos sí. E incluso tienen fotos y cosas de algunas de las cosas que pasaron.

 

John Winston: ¿Eran imágenes en movimiento?

 

Kelvin Rowe: Como una imagen en movimiento. Sí, era similar, la misma cosa.

 

John Winston: ¿Llegaste a ver algunas de esas?

 

Kelvin Rowe: Bueno, sí, vi algunas de las partes antiguas de la selva, y luego vi algunos de los otros planetas donde tenían ciudades, antiguas ciudades que se derribaron en nuestro planeta hace mucho tiempo aquí.

 

John Winston: Ahora vamos a entrar en algo que puede ser objeto de controversia ahora. La gente va a creer tal vez que has realizado viajes y cosas por el estilo, pero lo que te enseñaron en lo que se refiere a la religión y Jesucristo y Ezequiel y la Estrella y la Rueda y la estrella de Belén y la Nueva Jerusalén. ¿Qué me puedes decir sobre todo esto?

 

Kelvin Rowe: No ninguno de ellos con los que he hablado ni siquiera menciona acerca de una religión. Ellos no creen.

 

John Winston: ¿Â¡En serio!?

 

Kelvin Rowe: No, no lo hacen. Ellos dijeron que la religión causa problemas. Y no hay tal cosa como un Dios que no sea El Creador. Ahora una persona puede tener sus propios sentimientos y un Dios, pero cuando se pronuncia y predice un Dios, es limitante. Hay una limitación a un individuo o en un tema o algo por el estilo, que siempre hay fin al mismo. Donde haya Creación nunca hay un final.

 

John Winston: Sí, así que tiene sentido.

 

Kelvin Rowe: No entiendo la forma en que en realidad podrían entender ese Uno, pero personalmente creo que tienen razón en muchos aspectos, porque cada vez que sucede algo, es natural que una persona piense en un Dios, porque esa es la forma en que fueron educados. Pero sin importar lo que se desarrolle a partir de esa sensación, o cualquier cosa, nunca termina sin tener en cuenta, siempre hay ayuda en un momento posterior. Se trata siempre de ayudar de una u otra manera. O algo que sucede de una manera u otra.

 

ACallAtDawn12John Winston: ¿Por qué están aquí?

 

Kelvin Rowe: Bueno, la única razón que me dieron fue que estaban manteniendo un registro de la cuenta de nuestro planeta, ya que se deteriora hasta un cierto grado. No es por la naturaleza, es por las obras del hombre. El hombre está creando una condición de la que no puede salir. Y están teniendo problemas. Ahora, la única cosa – no van a intervenir sólo en el tiempo de una necesidad de que el planeta esté a punto de ser destruido o la destrucción de algunos de sus elementos. Ahora aparte de eso van a llevar un control sobre nosotros, y creo que es un buen lugar para venir de todos modos. (John se ríe) Así que es una visita para ellos. Es una especie de un cambio de forma.

 

John Winston: (en estudio) Bueno, eso es todo amigos. ¿Qué les pareció Kelvin? ¿Crees que el viejo era sólo una especie de loco? ¿Piensas que es sólo el trabajo de una mente retorcida, o crees que es real?

 

No sé. Creo que lo que decía era correcto. Y yo le dije cuando me fui, que iba a tratar de tomar el vídeo y mostrarlo a la gente, y luego me gustaría tener las preguntas que tuvieran las personas después de que vieron el video. Y me gustaría volver allí de nuevo y yo le preguntaría personalmente esas preguntas y, si pudiera, le pediría responderlas. Ahora muchas veces le pregunté y si estuviera tratando de impresionar él sólo me habría dado ciertas respuestas. Como por ejemplo, le pregunté a qué otros planetas había ido. Ahora bien, si estuviera tratando de impresionar a él sólo me hubiera dicho, «Oh, bueno, fui a este planeta, a ese planeta y el otro». Pero no lo hizo. Dijo que sólo pasó cerca de otros planetas, pasó cerca de la Luna. No se detuvo en ningún planeta. Así que creo que la persona estaba diciendo la verdad. Y hay que darse cuenta de que esta persona ha vivido durante el tiempo que George Adamski estuvo haciendo sus conferencias. Y Kelvin estaba familiarizado con el tratamiento que el Sr. Adamski consiguió. Su nombre fue arrastrado por el barro y todo. Así que yo estaba hablando con esta persona después de que todo había terminado y él dijo: «John, sabes que hay algo que me ha pasado que es probable que pienses que estoy loco si te digo». Ahora bien, esto era una cosa que me habían dicho mis maestros, y yo sabía que esto ocurrió antes. ¿He dicho bien lo que era?

 

ACallAtDawn13Él dijo: «Bueno en todos estos viajes que tomé finalmente me enseñaron a caminar a través de una puerta cerrada. Una puerta regular de casa. Fui entrenado por ellos hasta que pude caminar a través de ella. Y hasta me llevaron a bordo de una nave y pusieron una hoja de metal a través de un área, por ejemplo una puerta de metal, y ellos me enseñaron a caminar a través de ella en la forma física». Y (se ríe) dije que así mi maestra me lo había dicho que le habías dicho antes, así que no es demasiado impactante para mí. Me han enseñado cómo hacerlo en forma espiritual o astral y por medio de la proyección astral, pero nunca me han enseñado cómo hacerlo en la forma física. Así, que tal vez si vuelvo le preguntaré un poco más sobre una explicación de la forma en que lo hizo. Tal vez usted tiene algunas preguntas, también. Y voy a tratar de llevarle estas preguntas, y si él se siente bien, y si no muere, (se ríe), mientras tanto, tal vez sea capaz de responderlas. Pero no le dije esto a la persona, sino muchas veces cuando estoy inclinado a ir a hacer un video con la gente, muy poco después de que mueren. Y eso ha sucedido unas cuantas veces en el pasado.

 

Espero que no le suceda a él, pero él estaba muy enfermo antes de llegar allí. Y él había ido al médico, su mujer había ido al médico, y yo apenas pude hablar con él. Pero vive en una casa vieja regular con una cerca alrededor de ella protegida por pit bulls. (Se ríe) Y, ah, parece que tengo problemas por el estilo, pero da la casualidad de que los pit bulls que estaban alrededor de la casa eran particularmente amables. Así que ya veremos más sobre esto. Envíe sus tarjetas y cartas y preguntas y los veré más tarde.

 

ACallAtDawn14Hank Gray (locutor): Gracias por ver «Science Faction». Únase a nosotros de nuevo la próxima semana en este mismo canal y hora. Todos los derechos de este programa son reservados. Nuestra dirección postal es:

 

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imageFin de la transcripción

REFERENCIAS

Anonimo, Space Tourist Speaks Tonight, Pasadena Independent, Pasadena, California, 8 October 1959. Page 16.

Clark Jerome, Extraordinary Encounters, ABC-CLIO publishers, USA, 2000. pp 150-151,

Clark Jerome, Hidden Realms, Lost Civilizations, and Beings from Other Worlds, Visible Ink Press, Canton, Michigan, 2010. pp 188-189.

http://ufologie.patrickgross.org/ce3/1955-01-usa-giantrock.htm

Lueder Bret, A UFO Hunter»™s Guide: Sightings, Abductions, Hot Spots, Conspiracies, Weiser Books, San Francisco, California, 2012.

Rosales Albert, 1955 Humanoid Reports, 2001, en www.ufoinfo.com/humanoid/humanoid1955.shtml

Rowe Kelvin, A Call at Dawn: A Message From Our Brothers of the Planets Pluto and Jupiter, Understanding Publishing Co., El Monte, California, 1958. 200 pages.


[1] Ver:

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/08/un-incidente-de-truman-bethurum/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/08/llamado-de-truman-bethurum-a-clarion/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/08/garabato-clarin/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/08/historia-platillo-que-vol-durante-un-tiempo/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/07/truman-bethurum-y-los-extraterrestres-raperos/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/07/extractos-de-truman-bethurums-personal-scrapbook/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2015/07/una-fiesta-de-polka-en-el-espacio/

[2] Bethurum dijo haber tenido su contacto en julio de 1952 y su libro se publicó en 1954.

[3] https://marcianitosverdes.haaan.com/2016/02/una-llamada-en-la-madrugada-primera-parte/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2016/02/una-llamada-en-la-madrugada-segunda-parte/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2016/02/una-llamada-en-la-madrugada-parte-tres/

https://marcianitosverdes.haaan.com/2016/02/una-llamada-en-la-madrugada-parte-cuatro/

[4] Seguramente se lo había contado Truman Bethurum.

[5] Anonimo, Space Tourist Speaks Tonight, Pasadena Independent, Pasadena, California, 8 October 1959. Page 16.

[6] Michel Aimé, Flying Saucers and the Straight Line Mystery («Mysterieux Objets Célestes»), 1958, página 302 de la edición francesa Seghers.

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